Los compañeros intentaban intimidar al populacho, pero no surtía mucho efecto, ya que parecía que nadie se quería perder el juicio, Gruk intentaba en vano levantarse y se llevaba patadas, pisotones, e incluso, había quien lo utilizaba de taburete para montarse y ver mejor. Finalmente, con ayuda de Lollenda consiguió ponerse en pie.
Algo bueno había tenido el grito de Gruk, había llamado la atención del Alto Capitular que mando a unos guardias a que os escoltaran hacia donde estaba él.
El juicio comienza.
Una trompeta resuena en la plaza y la multitud se calma mientras un heraldo habla desde el estrado.
-¡Que todos los ciudadanos y nobles de Middenheim tomen nota! -grita el heraldo-. ¡Aquí comienza el juicio de Jakob Bauer de Altdorf, acusado de la herejía más atroz, convivencia con las fuerzas del Caos, y traición contra nuestro Señor, el Altísimo, Graf Boris Todbringer –al que Ulric proteja! ¡Todos los citados crímenes, han sido cometidos en la ciudad de Middenheim, hace entorno a uno o dos días!
El heraldo se vuelve hacia los guardias que custodian a Bauer.
-¿Está el acusado ante el tribunal? -pregunta retóricamente.
-¡Sí! -responden los Guardias al unísono. Bauer no dice nada, haciendo caso omiso del repentino bombardeo de proyectiles.
Alzando la voz por encima de los gritos de "¡Quemadlo!", El heraldo continúa:
-El acusado será juzgado por un jurado de sabios y eruditos encabezado por el noble Ulrich Schutzmann, Comandante de la Guardia de la Ciudad de Middenheim, ejerciendo por designación especial la autoridad del Graf Boris Todbringer en su ausencia de la ciudad. También forma el jurado la Serena Gracia Evina Klug, la Alta Sacerdotisa del Templo de Verena en Middenheim, Su Excelencia Eberhardt Richter, Primer Magistrado de Middenheim, Su Excelencia Erich Kalzbad Segundo Magistrado de Middenheim, y Su Excelencia Hannes Brucker, Tercer Magistrado de Middenheim.
El heraldo se vuelve hacia el jurado
-¿Está el Jurado en el tribunal? -pregunta.
-¡Sí! -responden ellos. El público aplaude lealmente.
-¡Entonces, se inicia la sesión!
El Sumo Sacerdote Adjunto Claus Liebnitz encabezará la acusación y el Alto Capitular Werner Stolz la defensa.
Liebnitz comienza presentando las pruebas contra Bauer. Remarcando que, se encontraba en posesión de un tomo prohibido del Caos, cosa que los guardias que le encontraron pueden verificar. La naturaleza de la obra pueda ser verificada por los expertos del Colegio Teológico. Werner Stolz habla por Bauer, señalando sus años de fiel servicio a la iglesia de Sigmar, su condición de cazador de brujas y su membresía a la Ordo Fidelis.
En esta etapa Liebnitz y Stolz interrogan varios testigos. Bauer contará su versión de lo sucedido y los que le arrestaron contarán la suya. Gruk es llamado por Stolz a declarar a favor de Bauer, para que les cuente a la multitud cómo les ayudó a salvarlos de un ataque de Hombres Bestia.
Tirada oculta
Motivo: daño
Tirada: 1d10
Resultado: 8(+1)=9 [8]
Tirada oculta
Motivo: daño
Tirada: 1d10
Resultado: 7(+1)=8 [7]
La armadura no cuenta y sólo el Bonificador de Resistencia reducirá el daño.
Gruk a testificar que eres el único que conoció a Bauer (aunque no te acuerdes de él xD) Vaya testigo se ha buscado...
De no haber sido porque sus compañeros fueron rápidos en apartar a la gente y ayudarle a ponerse en pie (cosa difícil con aquella pesada armadura), seguramente habría sacado el pico y se habría puesto a abrir hueco a base de piernas rotas. No fue necesario, todo acabó bien para aquellos humanos inconscientes, y al final llegaron hasta el lugar dónde tenían retenido a Bauer, a tiempo de hacer algo por evitar que le quemaran. No solo eso, al verle, algo se le encendió en la cabeza.
—¡HO, HO, HO! Gruk ya recordar. Pequeño Cazabrujas luchar en camino contra Hombres-Bestia, de vuelta de matar poderoso guerrero del Caos. —Se señaló su armadura, que viéndola de cerca, debía de tener algunos símbolos de Khorne—. Ser botín de guerra al matar campeón enemigo, ¡HA! Eh cualquier caso, Gruk poder con ellos —aseguró orgulloso—, pero ayuda ser bien recibida, salvar amigos, aunque ahora amigos estar muertos —dijo, ahora triste—. Hombrecillos del Caos y mutantes matar mientras buscar pruebas de enemigos en la ciudad. Amigo Bauer ayudar también en eso, él y sus hombres registrar la ciudad y evitar que seguidores de Tzeentch envenenar pozos. Bueno, nosotros evitar, pero ellos acorralar malos. Bauer ser buen hombre, amigo.
Llegado a este punto, Gruk empujó ligeramente al prisionero que habían liberado en la taberna, y le impelió a hablar también sobre lo que sabía—. Nosotros rescatar a este de garras del culto. También querer decir cosas.
La armadura no cuenta y sólo el Bonificador de Resistencia reducirá el daño.
¿En serio? ¡¿Cómo me van a hacer daño así estando embutido en una armadura de metal?! Que imagino que está así puesto en el módulo o lo que sea, pero no lo entiendo jajaja.
Gruk a testificar que eres el único que conoció a Bauer (aunque no te acuerdes de él xD) Vaya testigo se ha buscado...
Tengo algo de memoria pez, pero era parte del grupo que nos ayudó en el camino y, luego, a controlar la ciudad de noche por lo del tema de los pozos de agua, ¿no? Si se me ha ido mucho, lo siento. :S
Todos escuchan a Gruk hablar, después Opfer, el hombre que habéis salvado respalda la historia de Bauer hasta el mínimo detalle.
Liebnitz a continuación, llamará al mismísimo Alto Capitular Stolz al estrado y le pedirá que confirme que recientemente un icono de Sigmar fue robado en el templo. Presentará entonces el icono, aquel que tanto había buscado Gruk y sus compañeros sin encontrarlo, lo gira para mostrar a la multitud el símbolo de Khorne en su reverso, y afirma que toda la Iglesia de Sigmar está infectada por el Caos.
La consecuencia de que la iglesia de Sigmar pueda ser un culto del Caos provoca la histeria colectiva. La multitud se enloquece y el juicio termina abruptamente. El Comandante Schutzmann dará orden a las tropas de restablecer el orden, mientras que los dignatarios se retirarán del lugar. Durante la confusión, Johann Opfer desaparece.
Te has acordado bien, es justo ese
Sigo en otra escena