El bueno de Wolfgang le había sacado algo por adelantado al noble. Al menos no se irían con las manos vacías. Con una sonrisa Johannes ojeó al resto de sus compañeros sin ver indicios de desagrado por la propuesta.
—Herr Drachensturm, creo que tenemos un trato —dijo aun sonriendo—. Pero si quiere que encontremos a su hombre no estaría mal que nos diese algunas indicaciones más. Por lo pronto, sería útil saber dónde se alojaba y su descripción, para reconocerle si le vemos.
No añadió en qué estado, pues el tal Isidro tenía todas las papeletas de estar tirado en un camino de mala muerto con cuatro puñaladas.
En ese momento una idea poco halagüeña tomó forma en la mente del ladrón: si el noble podía hacer desaparecer sus recompensas tan fácilmente, ¿acaso no podría hacer lo contrario? Si tal era su poder ese hombre sería un peligroso enemigo.
—Por supuesto que tenemos un trato. Y, procuraremos ser discretos en esos dos días, no tenga la menos duda. De hecho, siempre podemos comprar unos disfraces para estar ocultos. Así nadie sabrá quienes somos... Puede ser una buena idea — contesto al noble a la vez que me empiezo a ir por las ramas, como siempre.
En otra ocasión habría enlazado con la historia de aquella vez que estuve en una fiesta de disfraces y acabé bajo las faltas de una marquesa entrada en años como consecuencia del vino, pero no creo que este hombre sepa apreciar mis historia, y sólo Sigmar sabe si es familiar suyo y se mosquea conmigo.
De momento, con esperar a ver que contesta a Johannes tengo de sobra.
¡Vaya! -exclamó Hugo, pero enseguida cerró la boca.
¡Doscientos karls!
Haciendo uan cuenta rápida tocaban a 40 cada uno, mucho más de lo que ganaba recorriendo los peligrosos caminos.
PNJ
Isidro -empezó diciendo el noble- es un hombre de pelo castaño ondulado, cortado a esta altura -la mano del noble se colocó ligeramente por debajo de la barbilla- de ojos negros. Bastante guapo según dicen mis criadas. Tileano, con una de esas espadas largas y delgadas que tan de moda se han puesto en Altdorf.
Tengo aquí la primera carta que me envió, se la mostraré.
El hombre extendió un papel.
Llegué a Ashendorf hace dos noches y me aseguré alojamiento en la posada El vidente sórdido. He descubierto evidencias de cultistas. Además, he contacto con los cazarratas locales y con su ayuda espero encontrar evidencias de las cosas que intentamos desenmascarar.
IA
Johannes tomó la nota y la leyó para sus compañeros. Procuró no alzar mucho la voz por temor a la paranoia del noble. No le extrañaría nada que ni siquiera confiara en sus guardias. Realizó una significativa pausa antes de "cultistas" y otra aun mayor antes de "cazarratas". Ya sabía él que el trabajo sonaba demasiado fácil.
—Voy a ser sincero, Herr Drachesturm —contestó Johannes—. La propuesta que nos hizo su criado me pareció muy buena. De hecho, demasiado buena para ser verdad. Ahora, tras leer esta carta, tiendo a pensar lo contrario. Su hombre estaba jugando con fuego, el tipo de gente a la que investiga no se anda con tonterías. Por no hablar de... esas cosas.
El ladrón lanzó una mirada al cuadro donde aparecían las monstruorratas. No hacía falta ser muy brillante para descubrir que tenían algo que ver: la mención a los cazarratas, la cercanía a la torre donde les atacaron, incluso el propio cuadro. Estaba claro que el noble sabía algo sobre ellas.
—La paga es buena; para lidiar con hombres, no con monstruos. Ya nos las vimos una vez con ellas y no fue agradable —normalmente se habría callado para no ser tomado por loco, pero estaba seguro que el noble les creería— Nos está enviando a la boca del lobo. Arriesgar nuestro pellejo costará algo más, Herr. Considérelo un extra por nuestra experiencia en la caza de ratas.
En realidad Johannes estaba contento con la paga ofrecida, pero no iba a desaprovechar la oportunidad de sacar algo más. Además, el hombre pensaba mandarles a ciegas contra cultistas y esos bichos. ¡Que se estirara un poco!
Motivo: Regatear
Tirada: 1d100
Dificultad: 23-
Resultado: 44 (Fracaso)
Motivo: Regatear (suerte)
Tirada: 1d100
Dificultad: 23-
Resultado: 66 (Fracaso)
Nada, ni gastando suerte. Una duda, como no tengo la habilidad de regatear debo dividir la puntuación entre dos pero ¿se redondea hacia arriba o hacia abajo?
El noble escuchó las palabras mientras daba golpecitos con la mano sobre la mesa. Sonrió, y se negó en redondo.
Creo que doscientas monedas de oro y librarles de su deuda con la justicia me parece más que suficiente pago por los servicios. ¿Tienen alguna otra pregunta relevante?
La suelo redondear hacia abajo, aunque si habéis fallado por 1 no sería extraño que lo cambiara hacia arriba.
Johannes devolvió la sonrisa mientras encogía los hombros.
—Bueno, no se puede culpar a un hombre por tratar de sacar algo de dinero extra.
Pero no esperes que me juegue el cuello.
Después miró a sus compañeros, dando a entender que él no tenía nada que preguntar.
—Creo que poco más se puede decir, señor, excepto que trato hecho —digo al noble extendiendo la mano para cerrar el trato, y de paso quitar un poco de hierro al fallido intento de Johannes de sacar provecho de la situación.
—No dude que tendrá noticias nuestras, todas buenas sin duda. Averiguaremos qué ha pasado, donde está Isidro, y quién está detrás de todo este asunto como que nos llamamos igual.
Desde luego, el trabajo pintaba peligroso, pero poco más podíamos hacer. Además, la recompensa (sobretodo, la inmediata) era demasiado suculenta como para dejarla pasar. Así era la vida del aventurero.
¿Alguno sabemos leer y escribir?
El clérigo de Ulric intervino.
Sectarios...cazarratas.
¡No dude de que conocerán la furia de Ulric!
PNJ
¿Pasamos a la aventura?
Creo que sí, no hay más que decir.
Por mi parte también seguimos adelante.
Chicos estoy de vuelta por mi tambien ;D