Partida Rol por web

Me parece que Dios poco o nada va a tener que ver en esta empresa que vamos a llevar a cabo, ademas no todas las fuerzas poderosas son benigna, hay fuerzas oscuras cuyo poder escapa a la conmprension de lod mortales.

No creo quye pueda aguntar mucho mas qye hablen de Dios, se me revuelv eel estomaqgo solo con su nombre, eso implica debilidad.

Señores Llamoa la calma Nos estamos alterando sobremanera. Deberiamos relajarnos y el tema del joven deberia ser investigado por miembros de la iglesia nosotros solo podemos discutir y teorizar sobre lo que acaece a este hombre. Pero sea por "El", por el oscuro, por una enfermedad o un truco de salon no podemos desentrañarlo nosotros. Esta controversia solo nos lleva a auna meta: El enfrentamiento. Asi que si es posible dejemos este tema a aun lado aunque sea muy sorprendente y guardemos las formas mientras estemos en hogar ajeno. Digo mientras miro a los alli presentes

- Suficiente

El golpe seco de la puerta se cierra detrás del mayordomo quien se saca de un tirón un largo pañuelo bordado de la manga y lo tira sobre Giani observando sus heridas con repulsión.

- Venid conmigo. Os presentaré a vuestros anfitriones

Dice ahora elevando la voz para todos los presentes

El mayordomo guía os guía a través de la casa. Podéis oír música a medida que atravesáis las diversas estancias cada vez más elegantemente amuebladas, y custodiadas por soldados.

Lothar abre dos adornadas puertas que conducen a una gran sala de banquetes, también tenuemente iluminada por unas cuantas velas protegidas. En el interior, trece personas se sientan en torno a una gran mesa. Son un extraño conjunto de hombres y mujeres: bien vestidos unos y desaliñados otros, unos muy atractivos y otros estremecedoramente feos, algunos con aspecto local y otros obviamente extranjeros. Un hombre de estatura media, bien peinado y ricamente vestido se sienta en la cabecera de la mesa.

Hay cinco sirvientes, dos despenseros y tres doncellas, que permanecen inmóviles junto a la pared más alejada.

Lothar se descubre y hace una reverencia a los anfitriones

- Señor Giovanni, señores, damas, os presento con profundo orgullo el fruto de mi larga búsqueda. ¡He aquí a trece de los más puros ejemplares de estas tierras!

A lo que el hombre de la cabecera de la mesa responde levantándose para hablar

- Queridos amigos, soy Claudius Giovanni. ¡Bienvenidos a la bella casa Giovanni! Sois mis invitados, y mientras estéis aquí, mi casa es la vuestra. ¡Venid, venid y uníos a nosotros!

Cuando os acercáis, los sirvientes os ofrecen vino

- Brindemos por el más memorable festín de vuestras vidas.-Alza su copa hacia vosotros y añade.- Por las mejores cosas de la vida

Después de que hayáis bebido, Giovanni os presenta los otros doce anfitriones que se levantan de sus sillas al ser sus nombres pronunciados

Bajazet Al-Nasir

Lady Dimitra

Gabrin

Lady Theophana

Leopold Valdemar

Lord Casmir

Lord Mieczyslav

Lady Jadviga

Lady Amisa

Marchettus el Bravo

Matrona Violetta

Sire Wenceslas

Después de presentaros a todos los comensales, y una vez todos en pié, el amo de la mansión hace un ademán con la mano para dirigir sus palabras tanto a anfitriones como invitados

- Deberíamos conocernos mejor. La conversación es como el buen vino: abre el apetito. Charlemos mientras esperamos el momento de la cena

Levanto la copa y bebo con mi anfitrión.

cuando las copas bajan de nuevo a la mesa alzo mi voz sobre el resto

Mi nombre es Fernando Vilarte, hidalgo en tierras de castilla, recibí vuestra misiva invitandome a asistir a este evento y aquí me hallo. Poseeis una magnifica mansión y estoy seguro de que nuestra charla será agradable y espero que tranquila - digo mirando a mis belicosos compañeros - Mas aún desconocemos las razones por la que tan dispar, a mi entender, grupo ha sido invitado a la cena. Dicho esto vuelvo vuelvo a levantar mi copa - brindo por nuestros anfitriones - recorro con la mirada y la copa abarcandolos a todos - y por todos nosotros, por que cada uno consiga lo que se propone.

Javier Lara se muestra prudente y luego dice:

-Brindo por nuestro anfitrion y su excelente comitiva, y por los comenzales que acompañamos esta noche al señor Giovanni en esta magnifica cena, mi nombre es Javier Lara y soy hijo de uno de los mas famosos heroes de España,soy hijo de uno de los famosos Infantes de Lara que sirvieron fielmente a Don Rodrigo Diaz de Vivar,y tuve que escapar de las tierras de mi progenitor dado que su tio le tendio una trampa mortal,actualmente vivo en Madrid y soy asiduo de la corte de sus majestades,fui invitado en calidad de Representante de los Reyes.

Luego de beber un sorbo nuevamente de la copa de vino continuo diciendo:

-Que esta noche sea fructifera para todos y que nuestros deseos se cumplan,salud!!!

Levanta la copa y toma de nuevo otro sorbo.

Mira a los demas comenzales que no conocia y fija su mirada en Lady Jadviga por unos instantes para luego volverla a cambiar a sus compañeros de viaje para luego no concentrarla en ningun lado.

Alzo mi copa, con sentimiento de violencia al ser arrastrada prácticamente a la nueva estancia, y brindo junto al anfitrión, tomando un leve sorbo de la copa.

El famoso Señor de Stavlaquia... dista mucho de parecer el demonio del que hablaba el cura. Parece un poco extravagante, tanto por su morada como por la selecta lista de invitados.

Me detengo en mirar a cada mujer, todas bella sin lugar a dudas, descartando obviamente a Violetta por el desconocimiento y a Lady Dimitra no por fealdad, sino por no seguir los mismos cánones de belleza de sus compañeras. Me sentí a gusto, pues no era la única mujer, aparte de la silenciosa Marianna. Quizás podría relajarme más y todas las miradas hormonadas no se centrarían en mis curvas esa noche.

Entre los hombres, ya no me extrañó ver a nobles y guerreros mezclados con estudiosos, pues en la posada se había visto el mismo panorama.

Es un increíble honor conocerlos a todos y compartir mesa con vuestras mercedes esta noche - dije, realizando reverencias a las personas que habían sido presentadas con título nobiliario. - Soy Lady Aricia de Mytros, de las no tan lejanas tierras griegas.... - hice una breve pausa, tan corta que no podía ser cortada - Ansío el disfrutar de esta velada... gracias, señor Giovanni, por vuestra invitación.

Y, tras el resto de presentaciones, me aparté un poco. Era una foránea y tenía miedo de meter la pata. Primero era mejor estudiar el terreno. Además, aún seguía dándole vueltas a lo de Gianni, a quien no paraba de echarle miradas furtivas... ¿Por qué Diablos eran todos tan escépticos a la obra del Señor? Aquella imagen no le cabía en la cabeza, cuando la mayoría de las gentes veía cualquier chorrada y gritaba ¡Milagro!, independientemente de su condición.

Se apartó la duda de su cabeza y volvió al estudio de la situación... las cosas debían salir bien, y ya contaba con alguien que probablemente le apoyaría...

Guillerme se recrea en su presentación, es como si despues de tantos años volivese a hacer tearto, se mantiene de pie ante la mesa, con los brazos tras su cuerpo.

-Excelencias y majestades, reyes y vasallos, ante ustedes me presento, Guillerme du Paris, me llaman, e hice fama en Francia como actor de danzas macabras y divinas comedias, pero que por ahora y por desgracia vaga por Europa equivocadamente denominado soldado... de fortuna- Esto ultimo lo dice con una sonrisa esperando que alguien pille la gracia.

.-¡Yo soy Diego! Por mis venas corre la furia de justicia. Del glorioso reino de Aragon soy; pero mi tierra es el camino-. Hace una forzada reverencia más para su recreo que por complacer a los asistentes al banquete antes de sentarse a beber el vino

Vuestras, mercedes, dijo inclinandose levemente, mi nombre es Francesco de Madico, procedo de la bella Firenze, aunque por avatares funestos del destino tuve que abandonar mi tierra y buscando una vida mejor, termine en estas tierras como oficial de gran experiencia y prestigio forjado en numerosas batallas contra el otomano, ya sea en tierra o en mar.

- ¡Almas guerreras! Ahh... estoy seguro que vuestras historias bélicas sin duda elevaran el nivel de esta velada

Su voz ruda se llena de solemnidad con dichas palabras

- No solo eso querido, sus nombres son reconocidos entre los grandes de sus países.

La mujer pasea su mirada por encima de Francesco, Javier y Fernando

- Y además son bellos

Dice al tiempo que se dibuja en su rostro una sonrisa pícara pero con seguridad

Javier Lara siente la mirada de Lady Jadviga y al sentirla tan profunda por reacción refleja el tambien la mira un instante,donde sus miradas se encuentran,la pregunta era inconsciente,pero¿por que la miraba a ella?,de entre todas las personas el sentia la poderosa mirada de ella sobre el.

Luego cuando ella cambia la mirada Javier tambien vuelve a cambiarla al vacio sin posarla en ningun lado.

El cambio de ambiente, de algo terrorifico a una placentera y bien decorada sala con musica y otros invitados relajo a la mujer; despues de que todos se presentaran, lo empezaron a hacer los de su grupo de recien llegados. A pesar de que le daba la impresion que los anfitriones ya sabian de nosotros. La chica se vio obligada a presentarse tambien

- Mi nombre es Marianna. Siento que mi historia no sea tan relevante como la de mis acompañantes. Yo... solo soy la hija mayor de una familia de campesinos venecianos

Estaba envarada y tenia miedo de no saber como responder o comportarse ante una gente que parecia tan distinguida y acostumbrada a aquel tipo de eventos

Alzo mi copa y bebo de ella Un placer haber sido invitado a una cena tan lujosa y especial. Mi nombre es User Kuk y vengo del otro extremo del Mare Nostrum, de la bella tierra de egipto. Una casa verdaderamente bella y de un refinado justo. A mi tambien me intriga por que un hombre de su posicion se fijo en un hombre como yo. Pero no es momento de discutir estos asuntos sino de brindar y conocernos mejor. Salud! Por nuestro anfitrion. Digo mientras levanto la copa

entrar en ese lugar me hizo sentir como si fuera a dar de boca en el mismo averno. cada uno de los invitados me parecio cubierto de impiedad. con cuidado cubri mis manos y me subi la capucha de mi tunica gris, cubriendo con cuidado mi frente.

al escuchar las frases del anfitrion solo me senti mas intranquilo, como si fueramos una mera atraccion para aquellos diabolicos convidados. al aceptar la copa recorde las palabras que habia dirigido a lothar fuera de la posada y sonrei con amargura; a veces es mejor estar equivocado.

-señores-dije a todos cuando me llego mi turno-, mi nombre es giani vitello, soy solo un pobre hombre a quien el santisimo ha dado un castigo singular y aunque ignoro el motivo de mi prescencia confio en que el señor giovanni sabra hacer uso de mi- me recline en una reverencia forzada- el santo padre me llamo el justiciero de dios, pueden llamarme asi si lo desean...

La hermosa mujer se pasea hasta un rincón de la sala dónde se encuentra uno de estos armarios bajos de exquisita manufactura veneciana. La mujer se queda mirándote fijamente a ti durante largos segundos, cuando te percatas de que solo te puede estar mirando a ti, te hace un gesto para que te acerques a ella

- Así que un noble español

Escuchas una voz femenina debajo de las ropas oscuras. Puedes ver costras de lepra alrededor de los ojos que se clavan en ti

- Habrás conocido a mucha gente horriblemente superficial en tus estancias por la corte, hablame de ellos

- ¿Qué hace que salga el sol?

Más aún que la misteriosa pregunta, te sorprende no haberte dado cuenta antes de la presencia de aquel hombre justo a tu lado repentinamente.

El anfitrión en cuestión se posiciona en frente tuyo, erguido extremadamente cerca de ti, de modo que tu cara queda a unos pocos centimetros de su pecho.

El hombre rie de tu gracia

- Veo que aún conserváis las dotes de cómico, ¡excelente!

El anfitrión pasa la mano por detrás de tu hombro y camina a tu lado como si fuerais antiguos conocidos mientras prosigue

- ¡Siempre me ha gustado la divina comedia! pero nada como las danzas macabras... ¿qué personajes interpretabas concretamente?