Partida Rol por web

Dragonlance - Reconquistando Silvanesti

La Reconquista de Silvanesti

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01/05/2020, 19:54
Gwyndrahir

A sus espaldas el combate continuaba, pero Gwyn estaba atento a otra cosa, apenas pensó en un virote, de su bolso asomó uno que no tardó en sumergir dentro del líquido apestoso, luego cargó la ballesta con presura y precisión y se asomó por la baranda de la escalera, apuntando hacia la espalda del dragón. La bestia estaba ocupada tratando de masticar a sus compañeros, así que Gwyn se dio el tiempo para buscar un punto entre las escamas del reptil para que su saeta se clavase y no rebotase inútilmente. Te picará la espalda un poco grandulón... va por haberme querido comer!.

Disparó y ni siquiera se detuvo a ver si había o no impactado, eso ya no estaba en sus manos. Se agachó inmediatamente dispuesto dispararle con los dos centenares de virotes que llevaba consigo si era necesario, no iba a parar hasta que esa lagartija o él muriesen.

- Tiradas (5)

Motivo: Disparo

Tirada: 1d20

Resultado: 9(+11)=20 [9]

Motivo: Daño (si pega)

Tirada: 1d8

Resultado: 2(+3)=5 [2]

Motivo: Furtivo

Tirada: 3d6

Resultado: 12 [3, 6, 3]

Motivo: Contagio (FUE)

Tirada: 1d4

Resultado: 3 [3]

Motivo: Esconderse

Tirada: 1d20

Resultado: 12(+13)=25 [12]

Notas de juego

Como Gwyn está oculto y ni lo ven ni ve al resto, y como estamos todos muy ansiosos de qué ocurre (que todos los pj e incluso el Dragón se están jugando la vida!), me sumo a la iniciativa de Ghilmeril y posteo antes, que es un momento difícil e irrepetible ;)

 Acción gratuita: cargar ballesta

 Acción movimiento: sumergir virote en el vial (aprobado ya por el máster)

 Acción Standard: disparo con ocultación, desprevenido y contagio.

 Acción Adicional: uso la maniobra de 5' para volver a ocultarse y ganar cobertura total. (también conversado con el máter) 

No aplico el flanco porque creo que sólo vale cuerpo a cuerpo, pero lo marco porque no estoy seguro (por eso de que se siente amenazado por quién está en el lado opuesto).

Condición Desprevenido (por ocultación: esconderse + cobertura), el dragón no usaría su Destreza para la CA, y habilita ataque furtivo

Contagio: Contagiar NL 5, Mal de la Ceguera, CD 16, 1d4 FUE (repite CD para no quedar ciego permanentemente si el daño es 2 o mas). Quedan 8 cargas.

 

Ataque Justicia Silenciosa: 7 ataque a distancia + 1 Ballesta Irda +1 Favor divino +1 Bendecir + 1 Bocajarro = +11 

El golpe es 20 (sin flanco), no si se alcanza a pegarle considerando que no suma su DES a la CA.

El daño (si es que le pega) sería: 1d8+1 arma +1 bocajarro +1 Favor divino = 1d8+3 = 5

Daño adicional por ataque furtivo con ballesta de francotirador: 3d6 = 12

Daño de Fuerza si no supera TS Fort: 3 

Daño total (si pega): 17 pv + 3 FUE + Ceguera permanente (dependiendo de los TS)

Si no pega... no le hace nada XD.

Esconderse nuevamente y ocultarse (para ganar cobertura total y bonos del turno siguiente)= 1d20+13 = 25

Pegue o no... al fin Gwyn puede hacer cosas de Gwyn y librarse del cuerpo a cuerpo!! XD

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01/05/2020, 21:45
Zeverúth

Aquello se tornaba cada vez más complicado. Su amante hacia lo que podía, y todos pensaban luchar hasta el último aliento. ¿Aquello tenía sentido? ¿serían capaces realmente de matarlo? ¿por qué no sabían si había cogido el colgante de Alhana? ¿merecía la pena morir esta vez? ¿conseguirían algo haciéndolo?

Y entonces recordó su conversación con Ashe, y todo cobró un sentido. Jugandosela a todo o nada, atacó.

 

 

- Tiradas (1)

Motivo: Ataque final matadragones

Tirada: 1d20

Resultado: 14(+8)=22 [14]

Notas de juego

Post rápido!! No os cuento lo que me ha costado... XD

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01/05/2020, 22:14
Tareth el Tuerto

Todos salvo Gwyn y los diplomáticos permanecieron luchando contra el dragón. Aquello le llenaba de orgullo. Morir al lado de aquellos elfos era todo un honor. Ojalá Nalvius, Elspeth y Gwyn hubieran colaborado en el combate de una forma más activa.

Era el momento de intentar atravesar una vez más a aquel reptil alado. Agarró la lanza matadragones y trató de clavarla con fuerza. Las escamas y la piel eran realmente duras. Pero tenía que intentarlo. Era la única forma de salvar a sus compañeros y a él mismo.

¡Muereeee! - Gritó mientras trataba de acabar con la sierpe verde.

- Tiradas (4)

Motivo: Ataque ( + toque electrizante)

Tirada: 1d20

Resultado: 6(+19)=25 [6]

Motivo: Daño

Tirada: 4d6

Resultado: 10(+15)=25 [1, 3, 3, 3]

Motivo: Electrico

Tirada: 5d6

Resultado: 15 [3, 3, 2, 1, 6]

Motivo: Resistencia conjuros

Tirada: 1d20

Resultado: 6(+5)=11 [6]

Notas de juego

Que mala suerte con las tiradas!!! Creo que me quedo corto!

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01/05/2020, 22:37
Director

Sabiendo que no le queda mucho de vida, Zeverúth intenta una vez más herir al dragón. Hasta el momento la bestia ha resultado inmune a sus golpes, pero el monje está decidido a ganar tanto tiempo como pueda para sus compañeros y especialemente para que su amante semihumana pueda abatir al wyrm Verde o escapar de allí con vida. Una y otra vez el soris encantado golpea el cuerpo escamoso del dragón, pero sin causarle daño alguno.

Haciendo caso omiso de las indicaciones del lancero tuerto, Nalvius decide hacer nuevamente uso de la magia que le confiere su dios pero no para sanar a Ghïlmeril, sino al propio Tareth. El sonido de su plegaria murmurada es silenciada por los rugidos fantasmales que la invisible Elspeth todavía sigue convocando desde donde quiera que esté, aunque cada vez suenan más lejanos.

—No pienses ni por un segundo que no sé que tratas de robarme mi tesoro, rata asustada —advierte el dragón Verde, a nadie en particular—. No importa con cuanto ahínco te escondas, te encontraré y te despellejaré, puedes estar seguro. Solo que a ti te dejaré para el final, cuanto haya acabado con todos tus molestos amigos.

El segundo hipogrifo convocado por la Túnica Blanca, se desvanece en el aire igual que lo hizo su predecesor unos segundos atrás.

Sobreponiéndose al miedo y al dolor y sacando fuerzas de flaqueza, el espadachín de la Protectoría busca un ángulo desde el que sacar el mayor provecho posible de la posición que ocupa Tareth y asesta una estocada a fondo al lomo del dragón. La bestia ruge colérica cuando la hoja de plata se hunde profundamente en su carne y la sangre mana a borbotones de la herida abierta.

Parapetado junto a la escalinata medio desmoronada, Gwyn amartilla su ballesta y dispara un virote al costado del dragón. El tirador se esconde nuevamente, acuclillándose, y no llega a ver cómo el proyectil rebota inofensivo contra las verdes escamas sin causar daño alguno.

La vida de Tareth y la de sus compañeros depende de él y el tuerto lo sabe. Una lanzada definitiva asestada por su poderoso brazo podría acabar con el agonizante dragón, pero un fallo... El tuerto kirath ataca y una vez más su único ojo sano le juega una mala pasada a la hora de calibrar las distancias. El arma legendaria acomete desviada y resbala una vez más contra las escamas que protegen al dragón, sin lograr atravesarlas.

Sabiendo que los suyos están a merced del enemigo, Ashe dispara la última flecha del agotado carcaj de Lormaen. El proyectil hace diana y se hunde hasta las plumas en el cuerpo del wyrm Verde, pero no es suficiente. Desesperada, la arquera comienza a buscar la aljaba repleta de saetas que ella misma fabricó para Tareth y que éste despreció en su momento regalándoselas a Lithiniel. Ninguno podéis ver su rostro, desfigurado por el miedo a que su fracaso y el vuestro vaya a costarle la vida a su Zeverúth. A todos vosotros.

—¡Escapa amor mío, escapa! —suplica la exploradora, con los ojos arrasados por las lágrimas.

El dragón presenta un aspecto tan lamentable como el vuestro, si no peor, pero es un monstruo de pesadilla. Intratable. Habéis hecho contra él lo que habéis podido. Mucho más de lo que la mayoría de héroes de Ansalon pueden decir.

La Muerte Verde se revuelve furiosa en su agonía. Despliega su ala izquierda, la que Ashe no ha inutilizado, para abofetear con ella violentamente al monje. Sus colmillos destrozan a Tareth, que queda tendido al pie de las escaleras con la vida escapándosele a través de las numerosas heridas recibidas; la Dragonlance, resbalando de su mano ensangrentada.

Pero la peor parte se la lleva el valiente espadachín de la Protectoría, aplastado contra el suelo por un terrible coletazo, con su abollada armadura completa convertida en el ataúd que aprisiona su cadáver.

Notas de juego

Ghïlmeril (25) → -25/40 [enfermo, -2 DES, -3 CON]
Gwyn (20) → 2/24 [invisibilidad 0/1 carga; conjuros gastados: "favor divino"; o se estabiliza o muere]
Tareth (19) → -5/43 [cinturón curativo 0/3 cargas; conjuros gastados: "fuerza de toro" x3, "resistir energía x3"; "espacios nivel 0" x6]
Ashe (17) → 26/26 [conjuros gastados: "a merced del cazador" x2]
Dragón (17) → moribundo
Zeverúth (11) → -2/26 [cinturón curativo 1/3 cargas; agrandar persona 0/1 carga; falsa vida 0/1 carga, estremecido1, estable2] «-- Tu turno
Nalvius (11) → 19/19 [conjuros gastados: "bendecir", "resistir energía", "protección vs mal", "auxilio divino", "orientación divina" x4, "curar heridas leves", "curar heridas moderadas"]
Elspeth (7) → 16/16 [resistir energía 0/1 carga; conjuros gastados: "armadura de mago", "agrandar persona" x2, "invisibilidad" x4; +1 NL y CD para resistir sus conjuros; estremecida1]

1: -2 a las tiradas de ataque, TS, pruebas de habilidad y de características durante 18 asaltos.
2: Puedes realizar un único movimiento o una acción estándar cada asalto, pero no ambas, y no puedes llevar a cabo una acción de asalto completo. Puedes realizar una acción de movimiento sin causarte más daño, pero si realizas cualquier tipo de acción estándar sufres 1 punto de daño después de completar la tarea.

Mapa aquí

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01/05/2020, 23:51
Zeverúth

El monje miró por última vez a Ashe en un fugaz segundo, y el tiempo se paró en sus ojos. Su primer beso, sus manos acariciantes y su sonrisa en las largas noches compartidas ocuparon su mente esos breves instantes. Todo lo que habían hablado y compartido pasó en milésimas de segundo por su retina para luego desvanecerse tal cual había llegado.

La suerte de Matheri debía haberlo acompañado ese día, pero su dios lo había abandonado. La única que no lo había hecho, aparte de Ashe, era la Muerte, que eficaz aguardaba su momento, manteniéndose hasta ahora reservada y tímida, para emerger en el último instante con su magnífico su poder y llevárselos a todos.

Con los ojos llenos de lágrimas, volvió la vista hacia la bestia, e intentando darle unos segundos más a Nalvius para coger el medallón, atacó de nuevo con un golpe que pretendía ser más una distracción que un verdadero ataque.

Y dejó que el destino siguiera su curso.

- Tiradas (1)

Motivo: ataque

Tirada: 1d20

Resultado: 5(+8)=13 [5]

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02/05/2020, 02:25
Gwyndrahir

Gritos y alaridos se escuchaban de todos lados, del dragón, de sus compañeros, las cosas no debían estar nada bien atrás suyo, pero Gwyn no se inmutó, poco era lo que podía hacer y estaba convencido de hacerlo. Hoy cenaré lagartija asada, pensó el rechoncho kirath con convicción mientras sumergía otro virote en el vial maldito. Cargó la ballesta con naturalidad y volvió a asomarse cuidadosamente para disparar. El dragón no estaba donde esperaba, ni Tareth, ni Ghilmeril, tan sólo veía a Zeveruth. Qué diablos paso? Disparó la saeta sin perder tiempo, pero todo había cambiado demasiado como para lograr impactar como esperaba. 

Sus ojos no siguieron el virote que se perdía sin dar en el blanco, ni sus pierna se volvieron a flexionar, tan sólo quedó paralizado al bajar la vista y contemplar el cuerpo aplastado del soldado de la protectoría y el de su amigo tuerto ensangrentado. - Oh no, estás muerto! El jefe tuerto ha muerto! Cada vez que encuentro un amigo se muere! Por qué?! - cada persona que apreciaba estaba condenada a perecer, no importaba qué hiciese para evitarlo, pero aún con lo endurecido que estaba su corazón, no terminaba de acostumbrarse.

- Tiradas (1)

Motivo: ataque

Tirada: 1d20

Resultado: 8(+10)=18 [8]

Notas de juego

 La misma maniobra que antes, pero cambio la enfermedad, en lugar de buscar cegarlo (para que no haga lo que ya hizo!), elijo Muerte viscosa:  CD14,  1d4 CON 

No estoy a distancia de bocajarro, pero sí a menos de 80' (rango del arma) y dentro de los 120' de daño furtivo del arma Irda.

El dragón se está alejando (supongo que en busca de Ashe) y pelea con Zeveruth, como está escondido asumo que aún cuenta el beneficio de ocultación para tomarlo desprevenido y bajar su CA (sin destreza) y permitir el ataque furtivo.

Ataque: 1d20+10 (idem anterior sin bocajarro)

 

 

No se para qué preparo tantas cosas, que salió un 8 del demonio XD.

Rompo la secuencia, el próximo post, si sobrevive alguien, haré algo distinto. Quedo sólo con cobertura parcial, sin ocultación.

Me parece que se lo queda Ashe al kill ;)

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02/05/2020, 03:01
Director

Haciendo caso omiso a los ruegos de su amante, el vapuleado monje persevera en atacar al temible dragón que acaba de destrozar a sus compañeros y que a punto ha estado de matarlo. Una vez más, su soris demuestra no ser rival para las impenetrables escamas de la bestia y Zeverúth se da cuenta demasiado tarde de su fatal error.

Aunque no podéis verlo, Nalvius mira alternativamente hacia arriba y hacia abajo. Sus ojos se vuelven hacia lo alto de la escalinata donde se encuentra el Medallón que ha venido a buscar y por el que tanto habéis sufrido; si no lo recupera, vuestras muertes serán en vano. Mira después hacia el pie de la escalera, donde yace la Dragonlance junto al cuerpo moribundo de Tareth; si pudiera devolverle a la vida para que el tuerto terminara lo que empezó... El dilema es insoportable para el clérigo.

—Astarin, hágase tú voluntad y no la mía —susurra, remontando la destrozada escalinata y sabiendo que decida lo que decida puede ser un error imperdonable.

Ninguno habéis oído la plegaria del clérigo, pero sí oís el angustioso grito de la invisible Elspeth al ver cómo todo se desmorona y ahora uno tras otro estáis cayendo frente a un enemigo invencible sin que ella pueda hacer nada más que observar impotente la dramática escena.

Parapetado junto a la escalinara, Gwyn amartilla de nuevo su ballesta y dispara contra el dragón. Pero todo apunta a que su dios le ha abandonado o tal vez no desea que ninguno de sus compañeros sobreviva a este encuentro.

Notas de juego

Gwyn (20) → 2/24 [invisibilidad 0/1 carga; conjuros gastados: "favor divino"]
Tareth (19) → -5/43 [cinturón curativo 0/3 cargas; conjuros gastados: "fuerza de toro" x3, "resistir energía x3"; "espacios nivel 0" x6] «-- Tu turno
Ashe (17) → 26/26 [conjuros gastados: "a merced del cazador" x2]
Dragón (17) → moribundo
Zeverúth (11) → -2/26 [cinturón curativo 1/3 cargas; agrandar persona 0/1 carga; falsa vida 0/1 carga, estremecido1, estable2]
Nalvius (11) → 19/19 [conjuros gastados: "bendecir", "resistir energía", "protección vs mal", "auxilio divino", "orientación divina" x4, "curar heridas leves", "curar heridas moderadas"]
Elspeth (7) → 16/16 [resistir energía 0/1 carga; conjuros gastados: "armadura de mago", "agrandar persona" x2, "invisibilidad" x4; +1 NL y CD para resistir sus conjuros; estremecida1]

1: -2 a las tiradas de ataque, TS, pruebas de habilidad y de características durante 18 asaltos.
2: Puedes realizar un único movimiento o una acción estándar cada asalto, pero no ambas, y no puedes llevar a cabo una acción de asalto completo. Puedes realizar una acción de movimiento sin causarte más daño, pero si realizas cualquier tipo de acción estándar sufres 1 punto de daño después de completar la tarea.

Mapa aquí

Turno de Tareth para tratar de estabilizarse. He dejado la acción de Nalvius en manos de los dioses del azar:

Motivo: 1-50: baja, 51-100: sube
Tirada: 1d100
Resultado: 100 [100]

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02/05/2020, 06:09
Tareth el Tuerto

El terrible dolor por los punzantes y lacerantes dientes del dragón fue terrible, pero duró poco. Tareth cayó inconsciente y presa desde una inmensa oscuridad. Desagrangrandose en el frío suelo de aquella torre, Tareth no vio pasar su vida por delante, como se solía decir que sucedía antes de morir. Quizás es que todavía nos había llegado su hora aunque lo pareciera.

- Tiradas (1)

Motivo: Estabilizarse

Tirada: 1d100

Dificultad: 10-

Resultado: 28 (Fracaso) [28]

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02/05/2020, 11:35
Director

Desesperada, sabiendo que va a ver morir a su enamorado del mismo modo que ha visto a tanto otros morir antes que él, Ashe dispara una flecha tras otra contra el dragón. Su corazón tiembla anticipándose a lo que va a ocurrir, pero sus manos se niegan a aceptarlo. Dos flechas más se entierran en el cuerpo de la bestia, mientras la tercera sale rebotada tras impactar contra él.

El dragón ruge y se retuerce en su agonía, mientras la escarcha cubre su cuerpo color esmeralda, pero no cae. Se niega a hacerlo. Existe desde los tiempos de Huma, desde hace miles de años, y un puñado de elfos con pretensiones no van a acabar con su dilatada existencia. De poder escapar, lo habría hecho ya pero con el ala destrozada no puede alzar el vuelo. Con los ojos inyectados en sangre, se gira entonces hacia la arquera semihumana, pero el monje se interpone en su camino.

Una dentellada atroz y la cabeza de Zeverúth desaparece de encima de sus hombros, reemplazada por un surtidor escarlata. El seguidor de Matheri cae de rodillas al suelo, como a cámara lenta, mientras su agigantado cuerpo comienza a encogerse hasta regresar a su tamaño real.

El desgarrador alarido de Ashe hiela la sangre a todos aquellos que todavía podéis oírlo, mientras el sanguinario dragón avanza hacia ella, aplastando bajo su peso descomunal los cadáveres destrozados de Ghïlmeril y Zeverúth.

 

Notas de juego

Ghïlmeril (25) → -25/40 [enfermo, -2 DES, -3 CON]
Gwyn (20) → 2/24 [invisibilidad 0/1 carga; conjuros gastados: "favor divino"]
Tareth (19) → -6/43 [cinturón curativo 0/3 cargas; conjuros gastados: "fuerza de toro" x3, "resistir energía x3"; "espacios nivel 0" x6]
Ashe (17) → 26/26 [conjuros gastados: "a merced del cazador" x2]
Dragón (17) → moribundo
Zeverúth (11) → -14/26 [cinturón curativo 1/3 cargas; agrandar persona 0/1 carga; falsa vida 0/1 carga]
Nalvius (11) → 19/19 [conjuros gastados: "bendecir", "resistir energía", "protección vs mal", "auxilio divino", "orientación divina" x4, "curar heridas leves", "curar heridas moderadas"]
Elspeth (7) → 16/16 [resistir energía 0/1 carga; conjuros gastados: "armadura de mago", "agrandar persona" x2, "invisibilidad" x4; +1 NL y CD para resistir sus conjuros; estremecida1] «-- Tu turno

Mapa aquí

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02/05/2020, 11:51
Tareth el Tuerto

Tareth no era consciente de nada de lo que sucedía a su alrededor. Mientras se iba desangrando poco a poco. Moriría en cuestión de segundos si un milagro no detenía la hemorragia o uno de sus compañeros le ayudaba de in extremis. Sin embargo, si lograba abrir los ojos y ser consciente del horror que le rodeaba, podía suceder que prefiriese haber muerto. 

Zeverúth era un buen elfo, al igual que Ghïlmeril aunque le conociera menos. No merecía morir de una dentellada de aquella bestia. Ninguno lo merecía. Ellos eran el estandarte del bien que debía devolver el equilibrio al bosque, pero estaban a punto de fallar. Estaban a punto de morir en el intento, lo que era honroso, pues la mayoría había luchado con valor, pero al final era del todo inútil también.

- Tiradas (1)

Motivo: Estabilizarme

Tirada: 1d100

Dificultad: 10-

Resultado: 52 (Fracaso) [52]

Notas de juego

Estoy a -7!

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02/05/2020, 15:53
Gwyndrahir

El rechoncho elfo acababa de expresar su indignación por la muerte del tuerto, pero la carnicería no se detenía. La bestia verde se come como un bocado la cabeza gigante del monje estúpido, que no sólo no había dañado al dragón, tan sólo al valiente soldado de la protectoría, sino que se había quedado ahí parado como un tonto frente al dragón. Ghilmeril lo había agarrado de los pelos y lo había abofeteado, tenía el final que se merecía, Zeveruth le caía mejor, habían dejado el pasado atrás y lo había perdonado por matar a su amada, pero no por el puñetazo que le había dado en Rocío Matinal, así que también era justa estar decapitado. Ahora el Dragón iba por la orgullosa mestiza, ladrona y altiva, que no dejaba de humillarlo con sus extraordinarios disparos dejándolo como un tonto, sentía algo de pena por ella, mucho tiempo habían estado juntos y hacía unos bonitos mapas, pero quería robarle el cofre de plata que él con esfuerzo cargó todo ese tiempo, así que también se merecía terminar en las fauces del reptil. Al ver el espectáculo sangriento, Gwyn dudó si todo aquello no era una intervención divina para hacer justicia. Gracias... pero se te ha ido un poco la mano con el tuerto, no te parece?

Tareth lo había llevado al juicio engañado, lo había obligado a combatir cuerpo a cuerpo, lo había esposado como a un criminal, le había sacado sus armas y hasta quería llevarlo a juicio en Rocío Matinal. Pero también había sido amable con él como ningún otro, los dos compartían el ser despreciados por los elfos, porque a los gordos y a los tuertos no los quieren los orgullosos elfos de sangre pura, y además, Gwyn lo consideraba su amigo. Se volteo hacia él, la sangre brotaba de su cuerpo como también brotaba del suyo propio, Codo a codo amigo, pensó.

Entonces se dirigió hacia el cuerpo inerte de su compañero, al verlo de cerca notó algo que no esperaba hallar, un sutil movimiento en su pecho. Aún respira? Gwyn entendía de esas cosas, había aprendido a usar hierbas y ungüentos así que se puso manos a la obra, con destreza tomó las vendas que por fortuna llevaba en un contenedor cerrado, que de lo contrario los gusanos de las raciones las habrían contaminado. Ten amigo, esto te hará bien.

- Tiradas (1)

Motivo: Sanar

Tirada: 1d20

Resultado: 2(+4)=6 [2]

Notas de juego

Ese mapa es un deja vu XD

 Acción de movimiento: 30' (hay que verlo con el ojo sano del tuerto para que llegue XD)

 Acción gratuita: tomar del bolso el equipo de curandero

 Acción standard: sanar (para estabilizar)

 

 

Nota: No se cual es tu dios, Tareth, pero no está ayudando nada, te aviso! XD

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02/05/2020, 16:38
Director

El dragón avanza hacia Ashe, mientras sus pulmones se llenan para arrojar una vaharada de su aliento mortal. La exploradora semielfa sabe que debe huir si quiere sobrevivir a semejante ataque, pero ha perdido la pasión por la vida. Solo quiere venganza y su resolución no tiembla aun teniendo al wyrm a una docena de pasos.

—¡Muere, bicho inmundo, muere! —grita Elspeth, lanzándose contra el dragón en una desesperada carga, armada con la espada de Lormaen.

Por desgracia, el inesperado ataque causa más sorpresa que daño al dragón y sorprende también a la semihumana. La Túnica Blanca se materializa frente a su enemigo justo cuando Ashe dispara la primera de sus flechas y atraviesa la espalda de Elspeth. Los dos proyectiles siguientes yerran su blanco al verse la arquera obligada a rectificar apresuradamente la trayectoria de sus disparos.

Entretanto, aprovechando que el dragón le da la espalda distraído con un nuevo objetivo, Gwyn abandona su escondite para acudir en auxilio del agonizante Tareth. Con suerte, el lancero tuerto todavía seguirá vivo y si no, el rechoncho kirath tendrá un arma nueva con la que combatir.

Es entonces cuando el dragón Verde vomita una vez más su mortífero aliento sobre la pareja que tiene delante. Elspeth, directamente frente al chorro ácido es totalmente consumida por la corrosión que devora sus ropas y su carne, no dejando de ella más que algunas pertenencias y un charco sanguinolento sobre el que flota su tiara de oro blanco.

Decir que Ashe tiene más suerte quizá sea exagerar. El aire viciado llena sus pulmones, abrasándolos desde el interior. Consigue girarse a tiempo y encontrar cierta protección pegándose de cara a la pared, salvándose así de una muerte segura, pero no antes de que su cuerpo se cubra de ampollas y cada respiración se convierta en una agonía.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Nalvius. Buscar

Tirada: 1d20

Dificultad: 20+

Resultado: 12(+4)=16 (Fracaso) [12]

Notas de juego

Ghïlmeril (25) → -25/40 [enfermo, -2 DES, -3 CON]
Gwyn (20) → 2/24 [invisibilidad 0/1 carga; conjuros gastados: "favor divino"] «-- Tu turno
Tareth (19) → -7/43 [cinturón curativo 0/3 cargas; conjuros gastados: "fuerza de toro" x3, "resistir energía x3"; "espacios nivel 0" x6; o se estabiliza o muere]
Ashe (17) → 3/26 [conjuros gastados: "a merced del cazador" x2]
Dragón (17) → moribundo
Zeverúth (11) → -14/26 [cinturón curativo 1/3 cargas; agrandar persona 0/1 carga; falsa vida 0/1 carga]
Nalvius (11) → 19/19 [conjuros gastados: "bendecir", "resistir energía", "protección vs mal", "auxilio divino", "orientación divina" x4, "curar heridas leves", "curar heridas moderadas"]
Elspeth (7) → -33/16 [resistir energía 0/1 carga; conjuros gastados: "armadura de mago", "agrandar persona" x2, "invisibilidad" x4; +1 NL y CD para resistir sus conjuros]

Mapa aquí

Gwyn ha llegado hasta Tareth y ha sacado su material de curandero, pero no ha hecho su prueba de sanar todavía. Tranquilo que le guardo su tirada fallida para este nuevo asalto.

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02/05/2020, 17:28
Tareth el Tuerto

Tareth seguía en su oscuridad. Era cada vez más profunda y cada vez olía peor. ¿Olía a podredumbre, cieno? Olía como a... ¿Gwyndahir? La muerte era peor de lo que Tareth había imaginado. 

- Tiradas (1)

Motivo: Estabilizarse

Tirada: 1d100

Dificultad: 10-

Resultado: 22 (Fracaso) [22]

Notas de juego

- 8

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02/05/2020, 18:03
Gwyndrahir

Gwyn contemplaba cómo la sangre seguía brotando de las profundas heridas de su compañero, el tuerto estaba pálido como las vestiduras de la maga y no le quedaba mucho tiempo entre los vivos. Tampoco a la Túnica Blanca, que tuvo un arranque de valentía pero tan acostumbrada debía estar a la cobardía que su ataque fue tan inútil como sus ilusiones. Traicionada por la espalda por la mestiza, fue atravesada por una flecha antes de derretirse completamente frente al dragón. Qué asco! Más suerte tuvo la cazadora, que sobrevivió a costa de una agonía dolorosa, con su corazón destrozado y su piel arruinada de por vida. Adiós Ashe, has sido una bastarda ingrata pero igual te enterraré con el monje.

Delante suyo estaba su amigo, más muerto que vivo, y la única arma capaz de matar a la muerte verde, su dios había querido que fuese él quien la portase y quien acabase con el dragón, Gwyn no tenía duda de eso, aunque sus métodos resultaron bastante duros - Si me hubiesen tratado mejor él no se hubiese ensañado con ustedes, pero no, tenían que humillarme una y otra vez, y ahora pagan las consecuencias - susurró muy bajo mientras estiraba su mano y recogía la Dragonlance - El dragón también me trató mal, así que no te preocupes Jefe, que correrá la misma suerte-

De nada parecían servir las vendas, había una sola salida para su amigo, el rechoncho kirath la conocía muy bien, y se la susurró al oído. - Oye tuerto, sé que me escuchas por alguno de los mil orificios que te hizo el dragón como a mi. Vas a morirte, lo sabes verdad? He intentado salvarte pero no puedo, tus heridas son muy graves amigo. Pero hay alguien que sí puede salvarte, así que hazte un favor a ti y a mi también... jura en tu interior que seguirás al protector de Silvanesti como yo lo hago, abraza la mano que ahora se te extiende, y ayúdame a liberar a nuestra tierra de dragones y draconianos... hazlo y él te protegerá como lo hace conmigo- Y tú, Señor de Silvanesti, dale por favor otra oportunidad a este elfo desgraciado y moribundo.

Notas de juego

Bueno, le doy un buen uso a la acción de movimiento... recojo la dragonlance XD (si hay algo del arma que se me revele por tocarla, soy todo oídos XD)

Susurro bajo (como Astarín), la idea de Gwyn es que se la coma a Ashe, no a él XD

Por último, Tareth, si no cambias de dios, esos dados van a seguir malditos! 

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02/05/2020, 19:06
Director

Gwyn puede ver con claridad que el dragón está ya muy cerca de Ashe y sabe que cuando acabe con la arquera mestiza, él será el siguiente. No queda nadie más, a menos que consiga espabilar a Tareth y el éste termine el trabajo que empezó. Trata de detener la hemorragia, pero el tuerto sangra por tanto sitios que Gwyn no sabe ni por dónde empezar.

Si alguno de los disparos de su ballesta tuviera éxito, quizá acabaría con el dragón y podría quedarse para sí todos sus tesoros. Tal vez por eso no le ponga demasiadas ganas a intentar salvar a su agonizante compañera. Ese disparo certero puede esperar unos segundos más, hasta que la semihumana haya muerto.

Abandonando la Tareth a su suerte, Gwyn se adueña de la Dragonlance caída esperando una señal de su dios. Y en efecto recibe una señal divina, pero de una naturaleza muy diferente de la que esperaba. El arma se defiende a sí misma del perniciso contacto y el rechoncho kirath cae al suelo fulminado.

La abrasada arquera se ha quedado sola pero no está dispuesta a claudicar. No después de haber perdido a Zeverúth. En ningún momento ha soltado su Catarsis y ahora lo tiende una vez más contra el asesino Verde. El dragón avanza con las fauces abiertas, decidido a devorarla. Los ojos le lloran a causa del cloro irrespirable que flota en el ambiente. Cada inhalación es un sufrimiento para ella pero ya llega la muerte para devolverla junto a su amado.

Dispara la primera flecha, que rebota inofensiva al impactar contra el hocico del wyrm. Dispara la segunda, que se cuela a través de la boca abierta de la bestia; la alimaña se estremece pero no detiene su avance. La tercera y última le atraviesa el ojo izquierdo, helándole el cerebro.

El dragón se derrumba, haciendo que cascotes sueltos del techo se desprendan desde las alturas y caigan en el gran salón de audiencias. El Verde se agita presa de terribles convulsiones mientras la vida se le escapa. Intenta incorporarse de nuevo pero no puede, le faltan las fuerzas.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Daño a Gwyn

Tirada: 2d6

Resultado: 10 [4, 6]

Notas de juego

Ghïlmeril (25) → -25/40 [enfermo, -2 DES, -3 CON]
Gwyn (20) → -8/24 [invisibilidad 0/1 carga; conjuros gastados: "favor divino"; o se estabiliza o muere]]
Tareth (19) → -8/43 [cinturón curativo 0/3 cargas; conjuros gastados: "fuerza de toro" x3, "resistir energía x3"; "espacios nivel 0" x6; o se estabiliza o muere] «-- Tu turno
Ashe (17) → 3/26 [conjuros gastados: "a merced del cazador" x2]
Dragón (17) → agonizante
Zeverúth (11) → -14/26 [cinturón curativo 1/3 cargas; agrandar persona 0/1 carga; falsa vida 0/1 carga]
Nalvius (11) → 19/19 [conjuros gastados: "bendecir", "resistir energía", "protección vs mal", "auxilio divino", "orientación divina" x4, "curar heridas leves", "curar heridas moderadas"]
Elspeth (7) → -33/16 [resistir energía 0/1 carga; conjuros gastados: "armadura de mago", "agrandar persona" x2, "invisibilidad" x4; +1 NL y CD para resistir sus conjuros]

Mapa aquí

Gwyn sufre 2 niveles negativos por empuñar la Dragonlance, lo que le causa automáticamente 2d6 puntos de daño.

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02/05/2020, 19:30
Tareth el Tuerto

Tareth notó en su inmensa oscuridad una perturbación en el llamado eje del bien y del mal. Sin duda algo había sucedido a su alrededor. Un gran mal había dejado de ser consciente de lo que le rodeaba. Eso sólo podía indicar dos cosas. O bien que el dragón había muerto o bien que quien había caído era su buen amigo Gwyndahir. 

Fuera como fuera, él seguía desangrándose y aunque no era consciente de ello, ni de nada en realidad. Tan solo le quedaban ya unos pocos segundos de vida. Si nadie lo remediaba, se reuniría al otro lado con Lithiniel,  Zeverúth Ghïlmeril y quizás también con Elspeth.

Hermosa, si... - Dijo en un último aliento al recordar a la druida que no pudo salvar. Era hora de morir.

- Tiradas (1)

Motivo: Estabilizarse

Tirada: 1d100

Dificultad: 10-

Resultado: 68 (Fracaso) [68]

Notas de juego

-9!!!

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02/05/2020, 20:08
Gwyndrahir

Su amigo no le respondió, así que ignoraba si había aceptado o no el camino que le había propuesto. La que sí habló fue la lanza, no abrió su boca pero sí se encargó de hacerse oir, su mano le ardió terriblemente, como si los cientos de agujeros que tenía en el cuerpo no hubiesen sido ya suficientes, el objeto maldito lo hería sin piedad. Qué te ocurre lanza estúpida, naciste para matar dragones, no kirath! pensó mientras se desvanecía sobre el cuerpo del tuerto.

Codo a codo... sus ojos se cerraron con la grotesca imagen del tuerto agonizando. No importaba ya el dragón, que seguramente almorzaría a la semihumana para recuperar sus fuerzas, ni el tesoro que seguramente valdría mucho pero no tanto como la vida que se le escurría. Drielae, estás ahí? Me dijiste que mi muerte iba a ser Lord Erithalas, no una lanza miserable... pero no importa, al fin podremos estar juntos de una vez como nos prometimos.

No era la primera vez que Gwyn caminaba por el filo de la muerte, aunque esta vez estaba más cerca que las anteriores. Al menos moriría con su amigo tuerto y los valientes que habían perecido inútilmente contra el dragón, Para qué fue todo esto? Para ayudar a Nalvius? Y dónde se ha metido ese clérigo ladino? El venerable ya no le importaba, sentía que estaba a punto de cruzar una puerta que antes no se había atrevido... ya voy, querida. Se vio estirando la mano, pero de repente se detuvo.

No puedo!. La primera vez que había estado a punto de morir se había visto en medio de Silvanesti alzando el cetro de platino, liberando el bosque como siempre había querido. Ahora estaba exactamente en ese lugar y portaba la joya, aunque no la de él, sino la de Drielae, y tenía la bendición de un dios fiel e implacable, no podía rendirse, no ahora que estaba tan cerca. Así que se esforzó en regresar... no todavía mi amor, se paciente!

- Tiradas (1)

Motivo: 10 % de estabilizarse... a cruzar los dedos (1 es éxito)

Tirada: 1d10

Resultado: 5 [5]

Notas de juego

Ouch... -9

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02/05/2020, 21:26
Tareth el Tuerto

Tareth tuvo suerte de permanecer inconsciente ante la traición de Nalvius. Nalvius, un ser que sin duda moriría tarde o temprano por su codicia, pero eso era algo que a Tareth ya no le importaba. Ya no le importaba nada.

Su maltrecho cuerpo respiró de forma penosa una última vez antes de que su corazón dejara de latir. Tareth había caído junto al grupo de guerreros con el que pasó sus últimos días. Podría considerarlos amigos. Lo más seguro era que no, salgo quizás al gordo y rechoncho kiriath que yacía a su lado.

Gwyn no estaba mucho mejor que él. Su codicia le había condenado al igual que a el mismo. Morirían juntos salvo milagro y sus cuerpos yacerían y se corromperían durante meses en aquella Torre hasta que fueran encontrados o sirvieran de alimento para las alimañas.

Tareth dejaba aquel mundo triste que siempre le había dado la espalda. Murió peleando, como siempre había hecho. Murió tratando de defender unos ideales que pocos compartieron. Murió y traicionado por Nalvius a quien durante un breve tiempo también consideró si amigo. 

Y nadie contaría su historia a no ser que fuera el propio Nalvius de forma cínica y mentirosa, o quizás Ashe, si no enloquecía tras tanta muerte y sufrimiento sufrido, quien podría narrar las desventuras de aquel extraño grupo de enemigos que se unió para dar muerte a la grana sierpe conocida como "La Muerte Verde".

- Tiradas (1)

Motivo: Estabilizarme ahora sí!!

Tirada: 1d100

Dificultad: 10+

Resultado: 31 (Exito) [31]

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02/05/2020, 21:55
Director

Con los ojos arrasados por las lágrimas, Ashe apunta al dragón con su arco y por primera vez desde que comenzara todo este horror, le tiemblan las manos. La semihumana siente un irrefrenable deseo de ejecutar a la bestia, pero finalmente escoge verla agonizar, mientras la vida se le escapa poco a poco al wyrm.

Para cuando las convulsiones finalmente cesan, los esclavos elfos que le servían se desmoronan como títeres a los que le han cortado los hilos. Todos muertos alrededor de Nalvius, que finalmente encuentra lo que vinisteis a buscar y mucho más.

Miles de piezas de acero, joyas, piedras preciosas, objetos de arte de incalculable valor... Pero nada de eso os devolverá a la vida, ni ayudará a los supervivientes a olvidaros. ¿O sí?

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02/05/2020, 22:22
Gwyndrahir

Gwyn se giró para regresar, pero todo se veía oscuro y lejano. Sintió pálida mano de su amada posarse sobre su hombro, Déjame ir, que sino voy quién salvará Silvanesti? 

El frío lo invadía, los latidos de su corazón eran cada vez más espaciados, seguramente pesaría mucho menos con toda la sangre que había perdido. Su mente estaba más confundida que de costumbre, el dolor empezaba a sentirse lejano.

Entonces entendió que no podía volver, la batalla entre los dioses había acabado con su vida y la de todos, Chemosh había vencido, el dios de la muerte era el único que podía jactarse de su victoria en esa isla maldita. Fallé por tan poco, pensó, y se arrodilló en el piso mientras sus lágrimas comenzaban a caer.

Sintió el abrazo silencioso de Drielae que se apoyaba a sus espaldas. Su pequeña hermana jugaba a su alrededor, sonriente. Terevan y Erindel lo saludaban desde lejos. Detrás de ellos dos estaba la druida, aunque ahora vestía un vestido blanco y bonito, el monje también llevaba ropas blancas cubriendo su pecho, al igual que Elspeth. Al lado de la Túnica Blanca estaban los dos soldados de la Protectoría con armaduras relucientes. Entre lágrimas, Gwyn sonrió.

A su derecha una sombra se movió, un elfo muerto mil años antes se acercaba, un nigromante antaño poderoso - Kiyal! Tanto tiempo! - casi se levanta para abrazarlo pero su cuerpo estaba duro, no le obedecía ya. A su izquierda apareció otro elfo, sus ropas estaban manchadas de sangre al igual que las suyas, le faltaba un ojo y pero llevaba otro de porcelana en la palma de su mano - Hey, tú también

El llanto de Gwyndrahir ya no era de pena, no había temor en él, ni dolor, ni padecimiento, ni infelicidad. Todos los que había querido estaban allí. Un olor putrefacto invadió la imagen, era intenso y lo impregnaba todo. Una estirge picoteaba el lomo de una mula ensangrentada, de sus heridas brotaban ratas que se desparramaban por el piso - Amigas, gracias por venir - dijo mientras corrían azarosamente por el piso y trepaban por las piernas de los presentes devorando todo a su paso. También a él. 

Gracias a ti también por estar a mi lado siempre, lamento no haber podido terminar mi tarea a último momento, faltaba tan poco... pero has de saber que ha sido un placer servirte desde que nos conocimos en Tirintaal. He sido fiel a nuestro pacto hasta el final, gran Señor de la Podredumbre. Por favor, Morgión, protege Silvanesti por mi, que tu Pesadilla nos siga cuidando de estos malditos dragones y sus pequeñas crías... sólo así los elfos tendrán posibilidad de vivir nuevamente en el bosque... y nuestros hijos jugar felices al atardecer... no lo crees así Drielae?

- Tiradas (1)

Motivo: Destino

Tirada: 1d10

Dificultad: 1=

Resultado: 3 (Fracaso) [3]

Notas de juego

Bye ;)