Partida Rol por web

El Celador Parker te conduce desde la biblioteca hasta el hall de entrada y más allá, hasta el pequeño patio circular donde tenéis aparcados los coches, que yacen cubiertos de nieve y no deja de nevar. Te hace un gesto con la mano invitándote a que cojas cuanto necesites.

Frank se dirigió presuroso a su carro, abrió la cajuela y miro fijamente el Baúl, no era demasiado grande pero llevarlo consigo seria problemático, sin embargo al final era probable que estuviéramos allí una temporada y tener que venir al carro por algo a cada rato seria molesto.
Bajando el baúl de la cajuela y dejándolo a un lado del carro procedió a abrir el asiento de copiloto. Allí en la guantera tenía cosas importantes, el último articulo de Einstein que causara tanta controversia, un cuchillo de caza que no estaría mal por si algún psicópata se le escapaba al Dr. Gauss, así como su linterna. Había algo más allí dentro, pero no debería de llevarlo siempre consigo, ya mucho había hecho con llevarlo hasta allí, así que solo lo miro un instante y enseguida se dio la vuelta buscando su impermeable que estaba tirado en el asiento trasero.
Ya con todo listo salio del carro y se dispuso a tomar el Baúl para seguir al celador Parker hasta su respectiva habitación, pero se arrepintió a ultima hora…, abrió rápidamente la guantera y tomo lo que aun estaba allí y lo escondió en el impermeable casi como si acabare de cometer un robo.
-Estoy listo- le dijo al celador, llevaba el baúl en las 2 manos y había guardado lo demás ya dentro de este.

- Sígame por favor- el Celador conduce a Frank nuevamente a través del hall por los intrincados pasillos del sanatorio, zig-zagueando y serpenteando tanto que pronto Frank se desorienta.

Finalmente, se detiene en uno de los pasillos (muy parecido a los anteriores y sin nada de particular) y abre una de las habitaciones, depositando una llave en la mano de Frank.

Deseándole buenas noches le deja solo en el dormitorio, que consta de un pequeño aseo(sin ducha) de un camastro un poco más grande de lo normal y de un escritorio de madera realmente bonito y con aspecto de antiguo. Sobre el escritorio hay una lámpara de aceite perfectamente cargada , junto a ella, un paquete de cerillas(fósforos) para su encendido.

Estaba el Señor Dirak deshaciendo el equipaje cuando un TOC TOC suena en la puerta y detiene su ritual acostumbradoa la hora de deshacer la maleta en cada viaje.

Frank escucho sorprendido el sonar de alguien a la puerta de la habitación; por un corto instante pensó en ir a abrirla de inmediato pensando que podía tratarse del doctor o de alguno de sus acompañantes, pero enseguida se rectifico, podría tratarse de cualquier otra persona. Si hacer mucho ruido Frank se dirigió a la puerta silenciosamente para luego hablar fuerte a quien estuviera a fuera. –Quien es?-

Del otro lado de la puerta escuchas como alguien respira y despué suspira antes de contestar - Siento molestarle Señor Dirak. ¿ Podría pasar y hablar con usted en privado si no es molestia ?

Frank algo sorprendido asiente con el cabeza algo apresurado a la par que se hace a un lado de la puerta para que el Dr. Gauss pase. –En que puedo servirle doctor?-

Sentándose -Si le soy sincero profesor, o doctor como usted prefiera, me ha sorprendido su sagacidad, ha sido usted muy insistente en las motivaciones por las cuales les he traído aquí precisamente a ustedes, si me escucha 5 minutos lo entenderá perfectamente.Resulta que he estado investigando a esos pacientes y sobre lo que dije de las notas que tomaban cada uno de ellos en código... ¡ El cógido es el mismo en todos los casos ! , lo cual quiere decir que de alguna manera, los pacientes están conectados. - Hace una pausa para observar la reacción de su interlocutor - he acudido a los escritos del anciano Doctor  Eltdown Shards y los escritos del profesor Wingate Peaslee de la Universidad de Miskatonic y aunque no lo crea, he llegado a la conclusión de que todos los pacientes, de alguna manera, están poseídos por inteligencias de otro mundo. Sus mentes son transferidas a algún lugar y a su vez ocupadas por seres de otro mundo con propósitos que desconozco. Quizás esos seres, sean exploradores , lo que explicaría esas ansias de conocimiento que antes les relaté. O puede que sean una avanzadilla de una inminente invasión de todas las mentes de la humanidad -dice misterioso.

- Sé que esas mentes extraterrestres están siendo ayudadas por un culto terrestre , por eso les he traído aquí, lejos de esas personas para estudiarlos a fondo y quizás, para salvar a la humanidad. ¿ Quiere saber más ?

Frank medito un largo momento, era claro en su expresión que esta confuso, en parte sorprendido, en parte interesado y en parte en desacuerdo. -Déjeme serle sincero Dr. Gauss; lo que me dice es en el fondo interesante, particularmente lo que respecta a los códigos. Sin embargo, no espera que uno se trague de buenas a primeras eso de los alienígenas, seamos congruentes, puedes haber una infinidad mas de explicaciones- Frank miraba fijamente al Dr. Gauss sabia que este era un hombre seguro de si mismo, se le vería en el rostro, convencerlo de algo seria imposible, pero eso no hacia que el fuera a dejarse convencer de buenas a primeras. –Necesitaría analizar todos esos estudios antes de emitir un juicio, y aun sin saber gran cosa me parece que puede haber una infinidad de posibilidades-

- ¿Sabe? esa es una de las cosas que me gustan de usted, que no da nada por sentado. Soy consciente de que es algo difícil de creer pero ya le digo que partí de un punto ya definido por la algunos Científicos , digamos... no muy aceptados o mejor dicho, no muy populares.- hábilmente conduce la conversación hacia el punto de referencia anterior -el caso es que lo crea o no, esa gente que yo pienso que han sido poséidos por entelequias supersónicas, son secuestrados por una extraña organización, o culto o como quiera llamarlo, de personas de carne y hueso que en cuanto le muestre sus escritos no podrá negar, poco sé sobre ese grupo, sólo su símbolo: un círculo con tres líneas curvas hacia fuera como simulando unos tentáculos - esto te da la impresión que es opinión del doctor y más que discutible -garabateado en pintura amarilla.

En absoluto sorprendido por tu falta de fe -De algunos artefactos capturados - que no se molesta en especificarte - he construido transmisor de mentes , que como se figurará, aún no he tenido ocasión de comprobar. Lo que pretendo con esto - no me mire así - es transferir mi propia mente al planeta de esos alienígenas utilizando dicho aparato, con el objeto de aprender de su cultura, de su mundo  y a la vez vigilar  y proteger la Tierra. - hace una pausa larga para que digieras su teoría o al menos le sigas en el razonamiento-

- Ahí es donde  entran ustedes cuatro, necesito voluntarios con mentes avezadas para iniciar la transferencia hasta que mi mente se encuentre en el éter, pues la máquina necesita de energía mental vinculada -no habías oído esto en la vida -para funcionar, al menos para arrancar. Es por eso que necesito la colaboración de ustedes, de al menos uno de ustedes pero si son los cuatro mejor claro.

Pero como esperaba el Dr Gauss que llegase siquiera a considerar que tantas patrañas fueran reales, entelequias supersónicas?, claro solo algo así me faltaba. Pero en el fondo el Dr me había atrapado, no creía en todo lo que el decía y eso me hacia no tener nada que perder con aquel aparato…, pero…, y si resultaba ser cierto?, mi cerebro era muy importante para mi.
-Mire Dr. Gauss, creo que es mas que claro que no me es posible creer en nada de lo que ahora me dice, que le parece si nos muestra alguna prueba intangible de ello y entonces podre decidir con mayor soltura que hacer al respecto-

Negando con la cabeza - No puedo darle una prueba real en este momento, pero ¿qué le parece si vengo a por usted en digamos... una hora y presencia el experimento? , es libre de no participar si no lo desea, pero quizás sí esté interesado en mirar. Si no son más que invenciones no ocurrirá nada... pero ¿ y si tengo razón ?- dijo dando un buen argumento.

Frank no tubo que meditarlo, su espíritu científico actuó por el mismo –Estaré encantado en asistir y si tiene razón ya lo conversaremos, aunque me gustaría saber en que consistirá dicho experimento y mas aun si necesito hacer algún preparativo previo antes de asistir- Concluyo esperando mas información al respecto y mostrando un claro aunque no amplio entusiasmo.

- Básicamente, consiste en que a través de las ondas electromagnéticas cerebrales que emite el cerebro humano como le digo se activa el poder de la máquina. Esto es posible porque dichas ondas son almacenadas en una serie de acumuladores a modo de baterías, que abastecen de energía a la máquina para que una persona, en este caso yo, puede hacer un viaje espacio-temporal a unas coordenadas previamente fijadas - la del planeta destino- valiéndome para ese viaje de una serie de artefactos encontrados alrededor del mundo. - parece algo cansado, quizás no se esperase que fuese tan complicado convencer al profesor de participar, o no esperase tanta pregunta -no es necesario ningún preparativo, todo está preparado desde hace semanas, a falta de voluntarios que inicien o desencadenen el poder de la máquina.

Mi cara de asombro era clara, y no porque me impresionara lo que el Dr. Gauss decía, sino porque lo encontraba completamente ilógico y sin sentido, incluso de haberme topado con algo así en otras circunstancias lo habría descartado de forma inmediata, pero ya estaba allí, y el doctor decía que los mostraría así que nada perdía viendo la supuesta puesta a prueba.
-Allí estaré entonces Dr. Gauss- Confirme.

Sin poder disimular su alegría de haber convencido a un hueso tan duro de roer - Fantástico entonces, vendré a buscarle en una hora aproximadamente.- Diciendo esto sale de la habitación.

Frank asintió con la cabeza en espera a que el Dr. Gauss se marchara. Posteriormente procedió a terminar de arreglar sus cosas en aquella habitación que había sido preparada para él. Había sido una jornada extenuante por lo el cansancio lo venció y Frank decidió acostarse a reposar un tiempo en lo que venían a buscarlo.