Soltó una pequeña carcajada por la reacción de Roger.
-Estoy tan acostumbrada aa estas cosas que ya no tienen ningún efecto sobre mí. Parece usted un poco exhaltado, señor Moore; relájese-comenzó-Esto es posible por el simple echo de que la mente lo controla todo. Imagínese por un momento que usted piensa con mucha intensidad que alguien le corta el brazo... Si aprende a controlar sus poderes innatos, podría hacer que eso ocurriera. Pero, sea quién sea el que causa esto, tiene que tener un don muy desarrollado, sin duda; normalmente sólo afecta al sujeto que formula el ''deseo'', digamos.
Se dirigió hacia la puerta, acompañando a Roger, el cual aún estaba algo asustado.
-Ahora mismo iba a realizar unos informes...-dijo, ante la cara de angustia del botones-Pero pueden esperar. Muchas gracias por facilitarme las cosas, por cierto. Estaré en la cafetería en cuanto resuelva un pequeño asunto: mis maletas.
Le abrió la puerta a Roger, y le dijo:
-No se preocupe, en realidad, nadie está loco en realidad, es sólo que nadie entiende el punto de vista de aquellos considerados dementes.
Chupito se llevó un tremendo susto al ver aparecer, así, de repente, la chica oriental que andaban buscando, tambaleándose y dejando tras de sí un reguero de sangre. Miró a Karen, que estaba a su lado, buscando una respuesta a '¿qué hacemos ahora que ya la hemos encontrado?' tragó saliva, y avanzó un paso en dirección a aquél espíritu, cadáver andante o lo que fuese.
- ¿Se ... Se ... Señorita Kooooo ... to ko? -dijo armándose de valor- ¿qué debería hacer o decir uno en tales circunstancias?
Chupito pensó por un instante en socorrerla, pero algo le decía que no había cura para aquella extraña mujer. En vez de eso, le preguntó:
- Hay ... ¿hay algo que desee contarnos?
¿Kotoko ha salido de la habitación o ha aparecido por el pasillo?
La mujer oriental que tan repentinamente había aparecido, se desplomó en el mismo instante en el que Roger abandonó la habitación de Zóura
-A... Arr...iba-pronunció, desde el suelo, intentando arrastrarse hacia Chupito-ayu...da
Apareció por el pasillo
Pues en un momento nos vemos en la cafetería señorita, hasta luego.... Salí de aquella habitación y cerré la puerta tras de mi. Con semblante serio, pensando en las ultimas palabras de Zóura.
Fui hacia el final del pasillo donde supongo que todavía estaban mis compañeros.
Tenemos que estar todos juntos y esta vez no perdere de vista a esta mujer
Roger ven aqui!. Hemos encontrado a Kotoko y sigue estando malherida.
Y me inclino ante ella ¿quien te ha hecho esto, quien ha sido el malnacido?
Atendiendo las palabras de francois hice caso a lo que me dijo y me dirigi rapidamente hacie ellos. Cuando llegue vi a Kotoko tendida en el suelo y francois a su lado inclinado hacia ella. El aspecto de aquella mujer era horrible, casi nauseabundo.
Dirigiendo la mirada hacia el resto del grupo dije.... La huesped de la habitacion 53, Zóura... es investigadora de sucesos paranormales.... esta aqui porque alguien la ha mandado para estudiar los fenomenos paranormales que suceden en el hotel. He quedado con ella en media hora en la cafetería para hablar con ella a razón de lo que estamos viviendo en este hotel.
-A...Riba-alcanzó a balbucear-Ayud...a...Arriba
Sólo decía esas dos palabras, una y otra vez.
- ¿Dónde arriba? ¿Se refiere a alguna habitación? -le preguntó Chupito- ayuda ¿para qué? ¿para quién?
Chupito trataba de pensar qué había de particular en el piso de arriba mientras se agachaba junto al cuerpo de Kotoko y ponía su mano sobre su hombro tratando de averiguar si aquella mujer era de carne y hueso.
- ¿Qué está ocurriendo Sta. Kotoko? ¿Qué tiene que ver el Sr. Jonás con todo esto?
Chupito se quedó mirando a los ojos de aquella mujer, esperando sus respuestas.
Espero impaciente a que vuelva Roger, ya que he oído el ruido de la puerta al abrirse. Mi atención se desvía al momento, cuando una herida Kotoko se abre paso por el pasillo. Me acerco a ella, mientras le miro intentando permanecer impasible la horrorosa herida de la cabeza.
-¿Estás bien? No pareces tener muy buen aspecto.. - Ante la insistencia de sus palabras repetidas, decido averiguar qué es lo que nos quiere enseñar. Aunque no haya nada... A menos que hagamos esto, no querrá contarnos lo que de verdad nos interesa. Subo las escaleras, mirando con atención alrededor, buscando lo que Kotoko ha visto.
-Arr...iba-balbucea nuevamente-Desvá...n. Ayu...dadme, yo...
Cuando Chupito posa su mano en Kotoko, esta desaparece, dejando la frase a medias.
Doy un salto hacia atras realmente atemorizado
- ¡Ha desaparecido!. Estaba aqui mismo delante de nuestros ojos y ya no esta.
Realmente es un fantasma, aun no me lo podia creer pero esto confirma todo lo anterior
Chupito miró a todos los demás cuando la chica se desvaneció con el contacto de su mano. Por fin una pista clara y concisa: el desván. Se incorporó y miró las escaleras que subían al piso superior; Maira ya se había adelantado y el barman se dirigió tras ella.
Se paró un momento, se giró, y les dijo a los demás:
- Parece que la historia continúa en el desván.
Iba a continuar su camino pero, de repente, cayó en la cuenta de algo y se dirigió al botones:
- Tal vez a la señorita de esa habitación no le importaría adelantar la cita y acompañarnos arriba ...
Dejando a criterio de Rogers el avisar o no a la experta en sucesos paranormales, Chupito encaminó sus pasos a la escalera que llevaba al trastero.
La desaparicion de kotoko delante de nuestras narices nos dejo a todos de piedra, en unos segundos apenas pude reaccionar. Con un gesto con la cabeza le dije a rafa...Enseguida la aviso.
Me dirigi de nuevo a la habitacion 53 y pegando golpes en la puerta enérgicamente invite a Zoura a que nos compañase....
¡¡¡ POM !!! ¡¡¡ POM !!! ¡¡¡ POM !!!
No pude esperar a que abriera la puerta y empeze a decirle en voz alta para que me escuchara...¡¡¡Señorita Zóura, Señorita Zóura!!!, abra es urgente.
Dentro de la habitación sonaron pasos, dirigéndose hacia la puerta, que se abrió.
-¿Qué ocurre?-preguntó Zóura
A la pregunta de Zóura conteste...Coga lo que necesite para su trabajo y acompañenos por favor, por el camino se lo cuento.
Karen ahbía estado todo el tiempo callada, atónita cuando vió a Kotoko aparecer por el pasillo, e incapaz de acercarse a ella. Sencillamente, no sabía cómo reaccionar. Vió cómo sus compañeros le hablaban, mientras que ella no cesaba de repetir las palabras "arriba" y "ayuda", y cuando Chupito fue a tocarla...¡se desvaneció en el aire!
Ahora sí que podían estar realmente seguros de que todo lo que habían estad viendo no era simple sugestión, y por fin tenían una pista que seguir! Espoleada por la curiosidad y por la urgencia de averiguar qué estaba pasando, siguió sin dudar al resto de sus compañeros al desván, mientras Roger avisaba a la clienta de la habitación 53. Ojalá pudiera echarles una mano...estaba claro que les hacía falta, mucha falta...
La escalera al trastero se hacía interminable y Chupito se moría de curiosidad por saber qué era para lo que había reclamado ayuda la mujer oriental.
Algo impaciente Roger apremio a Zóura para que se diera prisa en salir de la habitacion ya que veia como sus compañeros empezaron a subir las escaleras hacia el desvan.
Señorita Zóura, no me gustaria ser grosero pero..... dese prisa porfavor.
Cerró la puerta sin previo aviso, con un sonoro portazo. Todos miraron hacia allí, y suspiraron, creyéndo que Zóura les había dado una negativa. Roger se retiró de la puerta y comenzó a subir las escaleras. Pero, pasados unos segundos, la puerta de la habitación 53 se abrió.
-¿A dónde váis?-preguntó-¡No os marchéis sin mí!
Debajo del brazo llevaba un bolso de tamaño imponente.
Pasad a la escena ''El desván''