Llegasteis al sótano, que en otro tiempo fue un parking y donde aun se guardaban montones de coches, la mayoría estropeados por el polvo y el desuso, con las baterías descargadas.
Vuestros pasos resonaban en el silencio.- Al fondo hay un agujero en la pared, medio tapado de mala manera. Los vampiros también son chapuceros cuando quieren.- gruño.- Da al cuarto de contadores, allí hay una tapa de alcantarilla por donde podemos bajar. A 100 metros dirección sur hay un acceso a la vieja estación, esa es la ruta. Te llevare a mi refugio y allí hablaremos sobre que haremos después.
-Dirige el camino, yo revisare que no haya curiosos. tengo buenos ojos-me fijo bien que no haya ningún curioso en el sótano que pueda llegar a saber mas de lo que le conviene.
John te guió sin ningún incidente, seguiste la ruta marcada hasta llegar a las cloacas.
El olor era asqueroso, Oveja empezó a arrugar la nariz y a llorar pero no había otro camino y te viste obligado a caminar por aquellos túneles estrechos que circulaban por debajo de la ciudad y donde caía toda su inmundicia.
Después de un largo camino al fin llegaron a una estación de metro desierta.
- Cerraron esta estación un año antes de la mierda del virus. Había filtraciones de agua y noseque mierdas, no era segura y había que rehabilitarla pero al final decidieron mandarla a la mierda para cambiar el trazado y hacer una nueva estación, mas moderna y esas pijadas.- gruño.
Al otro lado del anden había dos vagones aparcados. - Ven, aquí es donde vivo. Te presentare.- dijo John pero alguien se adelanto y salió a la puerta.
- Me alegra ver que has vuelto, John. ¿Quien son tus amigos?
mantengo el silencio esperando que john me presentara a mi y a oveja, me negaba a decir ese nombre ridículo otra vez.
- El grande se llama David, es quien a mantenido al pequeño con vida pero poniendo nombres es nefasto así que vamos a tener que buscarle uno que no de verguenza ajena.- dijo John dejando al niño en manos de la mujer.- ¿Novedades?.- pregunto.
La mujer sonrió y se presento.- Encantada David, puedes llamarme Susan y este pequeño umm... tiene cara de Tommy ¿Que te parece?.- pregunto al pequeño e interpreto su mueca infantil como que estaba conforme.
- Oh, si, novedades. Connor me a mandado una triangulacion de posibles localizaciones. He descartado algunas que ya revisamos y creo que hay un par de sitios interesantes donde buscar a tus hijas. Por otra parte parece que Owen necesita ayuda....
John gruño un "Que le jodan!" entre dientes, que descartaba toda motivación por dispensar ayuda a ese sujeto.
Susan se lo esperaba.- Es algo importante, John, deberías al menos saber de que se trata.
John repitio el "Que le jodan" y Susan resoplo.- En fin, tengo café en el fuego ¿que tal una taza?
Al escuchar el nombre de tommy asiento, era un nombre muy similar a mi valiosa pieza de colección y sin duda no habría uno mejor.
Gracias por el café pero estoy bien, nunca lo e tomado y prefiero no hacerlo, no quiero depender de nada para mantener mi estado mental... y sobre ese tipo owen deberíamos echar un vistazo ya sabes un par de manos extra serán útiles cuando llegue el gran día.
- De eso nada, tu no lo conoces. Owem es un puto grano en el culo. Se cree un Dios entre los hombres y hay que adorarle, lamerle las pelotas para que se digne a mover su culo por algo. Cuando le dije que venía a buscar a mi familia me dijo que era una tontería, que podía buscarme otra mujer y tener otros hijos sin tanta complicación, que no era necesario rescatar criaturas insignificantes.- argumento John cabreado.- Así que si ahora me necesita que le jodan.
"tienes razón no lo conozco, si crees que no necesitamos manos extra para esto supongo que tendrás razón, yo acabo de llegar" busco un sitio donde sentarme y empiezo a otra vez limpiar esa vieja arma