- Un hombre o una mujer... - Miró a las allí presentes. - Se convierte en asesino, como usted bien sabe señor fiscal, tras haber cometido un asesinato. Ese no es mi caso... - Enseñó las palmas de sus manos. - No tengo las manos manchadas de sangre, mis delitos son otros menos violentos, pero más rentables... normalmente. - Bajo las manos. - Lo que me hace pensar en usted como el asesino, no es otra cosa que los movimientos que lleva haciendo en las últimas fechas. Por lo que sabemos y por lo que se ha dicho aquí, su relación con Coppone no era del todo buena últimamente. - Chasqueó la lengua. - Eso evidentemente no le convierte en asesino, pero le acerca bastante más a serlo que a mi. Es mi humilde opinión, tampoco tengo pruebas fehacientes contra usted. Nadie las tiene contra nadie. - Hizo una breve pausa. - Aunque a su favor, diré que las últimas revelaciones acerca de Molly, Ernie y Socks y su relación con el contrabando, les acercan un poco más a la culpabilidad...
Estimado Billy, puede que todos mis negocios en su dia no fueran lo mas limpios posibles, pero de ahí a ser un asesino hay mucha distancia. Como tu bien has dicho tu también has cometido pequeños delitos, pero ello no te convierte en asesino, ¿o si?
-Señores, señores, no se alteren de nuevo, la testosterona ya nos llega al cuello.-Scoop soltó una sonora carcajada.- Son ustedes maravillosamente incendiarios. Con mucho gusto seguiría escuchando sus reproches que bien me valdrían para más de una exclusiva. -Malissa hizo gala de la libreta que siempre le acompañaba.- Sin embargo, -volvió a guardar la libreta en su bolso- creo que por la supervivencia de la mayoría, debemos ser resolutivos. Creo que la mayoría estamos de acuerdo en que hay dos personas presentes que parecen tener más razones para ser culpables que el resto. ¿Es hora de que hablemos de un mal menor por el bien común? Al fin y al cabo solo nos tenemos que poner todos de acuerdo en decir uno de los dos nombres.
Miré a Scoop de reojo, con el rostro serio. O más que serio, aburrido. Desidioso.
-Ya hemos dado todos nuestra opinión y votos al respecto. El asunto está más que decidido y con votos de diferencia. Acabemos de una vez. Tengo mejores cosas que hacer que perder el tiempo aquí.
-Brindo por quién sepa hacerte callar más de una hora preciosa.-replicó Scoop con una agria sonrisa.- Es posible que más de uno quizá quiera cambiar su voto sabiendo ahora la letalidad de esa pequeña mosquita. Demonios, hasta yo cambiaria mi voto por llevarte la contraria querida Silky. Además, creo que la vida de nuestro poco querido fiscal bien merece una segunda votación que decida entre él y Anna Maria. Ahora bien- Scoop se levantó del diván y cambió su rostro abandonando toda sonrisa- si todos consideráis culpable a Harrow, llamemos a Maloy y acabemos con esto.