Este es el prólogo de Ilhuicatzin
Vivias en una comunidad de gigantes de piedra de ocho individuos. Tú eras y sigues siendo el aprendiz del chamán. Todavía inexperto en el camino de los misterios de los espíritus de la tierra.
Llegó a los oídos de tu tribu que en Cima de la Tramontana, un rey de los gigantes del fuego, Einar Meadhorn, está intentado liberar a los Colosos de Atlas. Los Colosos de Atlas son tan antiguos que ya existían cuando los dragones pusieron sus pies en el mundo. Los Colosos trajeron ruina y destrucción al mundo y nadie los podía detener. Solo la alianza de las dos razas más poderosas en aquel entonces, titanes y dragones pudo sumir a los Colosos en un profundo letargo al gran coste del declive de ambas razas. Si el Rey Einar es consciente de lo que hace y sabe cómo controlarlos o si simplemente es un inconsciente es indiferente. La tribu sabía que cualquiera de ambas suponía el fin del mundo, el Rey Einar conquistaría el mundo o lo llevaría a su destrucción pues ahora ninguna raza es lo suficientemente fuerte para detenerlos.
Detener semejante locura requería no solo un gran guerrero sino alguien que tuviera los conocimientos necesarios para tratar con los hechizos de la prisión de los Colosos. El chamán actual era demasiado viejo como para realizar el viaje así que tú, en tu inexperiencia, fuiste elegido.
En Cima de la Tramontana llegaste a un campamento de elfos donde te brindaron su hospitalidad y ayudaste a atender a sus heridos.
Al atardecer llegó al campamento un semidragón de plata con un troll acorazado, herido e inconsciente. Entre ambos le quitasteis la armadura para daros cuenta de que no era un troll sino UNA troll. Era una mujer, y tenía quemaduras graves por todo el cuerpo, pudiste leer en su espalda unas runas en la lengua de los gigantes que tradujiste al semidragón como “Propiedad del Rey Einar”.
Vi llegar a un semidragón con un Troll envuelto en una fuerte armadura metálica, se veía malherido. El semidragón me solicitó que le de una mano. Accedí a ayudarlo ya que respeto a todo ser viviente, aunque algunos de éstos se destruyan unos a los otros. No sabía que había ocurrido con este guerrero Troll, me dispuse a quitarle de a poco su armadura y me sorprendí al ver que se trataba de un ejemplar femenino de su especie, aunque lo más extraño eran las graves quemaduras que le cruzaban el cuerpo, lo malo del fuego es que si se utiliza irresponsablemente puede dañar... y mucho.
A pesar de las quemaduras pude divisar unas runas en mi idioma, me dolió mucho cuando leí su significado.
- Propiedad del Rey Einar - lo dije más para mi mismo que para el semidragón, pero hablé en lengua común - es intolerable ver que alguien de mi propia especie esté reclamando como propiedades a seres vivientes. Este mundo no tiene dueño alguno y a nosotros sólo se nos permite vivir en él.
Agrego el Prólogo como la Historia de mi personaje, para no olvidarla.
Esto no es un hilo para interpretar, la partida no ha empezado todavía.
Este hilo es para hablar de temas que solo afecten a tu personaje (Y me preguntes dudas, ya que dominas poco el sistema). Mirate bien la ficha y respondere a todas las dudas que pueda.
Has recibido mi correo ¿no?
Ah, pense que aquí ya comenzaba el juego. Igual dejo lo que escribí, me sirvió como práctica para interpretar a mi personaje.
Tu correo acaba de llegar, ahora lo estoy chequeando.
Que buena ficha. ¿No sabes si esa misma hoja de personaje se puede aplicar para D&D 4? Porque podría usarla para mis personajes de esa versión.
Si tengo alguna otra duda te pregunto. Gracias.
Alguna de ese tipo para 4ta habra por internet imagino.
PD: Me alegra saber que te tomas en serio el rolero de tu personaje. Tomo buena nota de ello ;)
Me lo tomo en serio por dos cosas, primero porque me gusta interpretar personajes, por eso me gustan tanto los juegos de rol. Segundo por compromiso, al comprometerme a jugar en tu partida pienso que debo estar atento a los detalles.