La templaria parece algo decepcionada. Quizás esperaba que aceptarais su oferta con alegría y le besarais las manos, o simplemente no comprenda el porqué de vuestra decisión de visitar antes uno de esos miserables templos del rio, pero en cualquier caso os dice que os esperará si decidís seguirla algún día. Después se marcha con sus hombres dirección al Este.
No tardáis en encontraros con vuestro barquero particular que os sube al bote asombrado por vuestra hazaña. Durante el rápido y tranquilo viaje hacia el sur, os pide una y otra vez que le expliquéis los detalles de vuestra aventura acuática y lo mismo os veis obligados a hacer en cada pueblo en el que paráis.
Convertidos en los héroes del lugar y agasajados por los humildes habitantes de la ribera, humanos, tritónidos o de cualquier especie que vive por y para el rio, llegáis hasta el templo donde dejasteis a la niña.
Ella se encuentra en perfecto estado, agradecida y feliz de veros regresar sanos y salvos. Dice que se quedará en el santuario de Kinope un tiempo más, hasta terminar su aprendizaje y que será la siguiente generación de sacerdotes del Purificado.
Vosotros, por el momento, sois libres de moveros por el Zola fel, siempre bajo el abrigo de sus aguas y de sus gentes, pero vuestra zona de seguridad es limitada y más tarde o más temprano tendréis que moveros. ¿Hacia donde? Eso el tiempo lo dirá.
FIN
Lo dicho en el off topic: De momento esto ha terminado, pero Prax es muy grande y las aventuras abundantes. El día que decida seguir con esto os lo haré saber.
De momento dejo esto abierto por si queréis postear a modo de epílogo de vuestros personajes, daros los teléfonos, quedar para cenar o lo que sea.
¡Muchas gracias por jugar!