Avanzan un par de horas por el camino rural, hasta que se unen a un camino principal, empedrado y robusto como para soportar carros.
De hecho, un carro tirado por dos caballos pasa en dirección contraria.
Luego de caminar un rato, el camino empieza a ascender una pequeña cuesta y en la parte mas alta, se adentra al medio de una colinas.
Al avanzar y llegar a las colinas el camino entra en un gran valle.
Un aire un poco más tibio suavemente golpea los que van en la parte delantera del grupo y al ver el calle, se ven varios ríos que lo cruzan, incluso uno, el mas grande pareciera que pasa por el medio de una formación redondeada de estructuras bien densas como casas, sobre las que sobresalen:
Una torre redondeada en el sector sur, una especie de basilica en el sector este, una sección amurallada dentro de la ciudad, en el sector que ustedes se dirigen.
Se ven 4 caminos que llegan a la ciudad amurallada que concurren desde los 4 puntos cardinales.
A pesar de que no se ven muchos detalles, se puede apreciar una cantidad grande y colorida de casas o negocios desde esta lejanía.
Un letrero a su derecha les indica que un par de kilómetros mas allá, lo que ven, es la ciudad de Purixta.
Ven a 3 individuos, un humano masculino vestido como guerrero, una mujer humana vestida con armadura, y una pequeña gnoma de pelo verde con ropajes salvajes.
Panacea se había decidido por un pony. Si, uno que fuera pequeño.
Le pondría... Malta. Si, el pony Malta, era un nombre que, le latía, tendría futuro.
La mediana tornó el gesto y entrecerró los ojos con gesto de desaprobación cuando el fortachón se tomó la ligereza de palparle la cabeza.
—Ya... bueno... si no conocen al señor CervezaNegra no podrán ayudarme. Pero estaré... encantada de compartir el camino con ustedes —respondió al tiempo que daba un paso atrás y miraba de reojo al bárbaro.
Durante el camino Shem preguntó a la curiosa pareja sobre sus orígenes, su profesión o forma de ganarse la vida, etc. Por su parte no había mucho que decir. Shem no sabe cómo ni dónde ha llegado al mundo, ni si tiene algún familiar vivo. Tiene muy pocos retazos del pasado antes de que su maestro la rescatara. Y prácticamente ha dedicado su vida al estudio y entrenamiento en un monasterio oculto.
Una vez llegaron a lo alto del camino pudieron observar el valle y la ciudad en su interior.
—¡Uala! ¿Eso es Purixta? No parece una aldea pequeña, señor Noma —dijo la muchacha con los ojos bien abiertos, tratando de grabar el paisaje en su mente.
Le lanzo una sonrisilla inocente a Shem.
- No te preocupes, que te ayudamos a encontrarle, entre varios peinaremos la ciudad en menos tiempo.
Continuo charlando con Shem por el camino de forma amena.
- Púes nosotros dejamos hace poco nuestro trabajo para intentar hacerlo por nuestra cuenta, se podría decir que aparecemos cuando las autoridades no están por la labor de trabajar contra la corrupción de los adinerados. Por diferencias con el resto del grupo estos dos elfos decidieron marcharse.
Si se fija cualquiera en Noma no verá grandes rasgos de elfo en él, aparte de la cara suave y delicada, ni orejas puntiagudas, ni alta estatura.
Me toco la máscara y miro la de Laver.
- Como ya imaginarás estas máscaras son indispensables para nosotros. - Cambio la voz a algo más amable e infatil - Si seguimos juntos tal vez nos las quitemos en tu presencia - Y hago una risilla.
Al ver Purixta de lejos me sonrojo y me disculpo con Shem, no era normal en él equivocarse en algo así.
- Lo siento Shem, he debido de equivocarme, o me han dado mal la información, es la primera vez que estoy aquí la verdad. Siendo así necesitarás aún más nuestra ayuda.
Tenemos que conseguir información del enano ese que vive aquí sea como sea.
En resumen, que si eres corrupto eres presa del Capitán Kiddo - agito el mazo brevemente con una sonrisa traviesa -. ¡Ah! Mira Shem, ¡viajeros! - señalo al grupo de 3 individuos - Fijo que alguno de ellos conoce al enano ese.
Sin esperar confirmación alguna, me acerco a los viajeros.
¡Ey! ¿Qué tal? ¿Vais a Purixta no? Nosotros también - señalo con el pulgar a mis compañeros - Oye, que he pensao que igual conocíais a un enano que está buscando la pequeñaja esta... Cómo era... - levanto un dedo para pedir tiempo -Brendan Birranegra... No... - musito para mí mismo, concentrado - Birrete Ciervanegra... No, tampoco... ¡Bretan Cervezanegra! ¡Eso! - me giro para mirar a Shem
Pues eso, que si conocéis al jambo ese. Bretan Cervezanegra. Es un enano. Tal que así - la mano a la altura de mi cadera - Creo. Porque no le he visto nunca, pero como es un enano pues será bajito, ¿no?
Aparecemos cuando las autoridades no están por la labor de trabajar contra la corrupción de los adinerados.
–Hmm ¡justicieros! Me gusta –pensó la muchacha al escuchar la explicación del supuesto elfo.
–Oh, no os preocupéis. Mi maestro siempre dice que todos tenemos nuestras fobias y aspectos que queremos esconder. Cada uno tiene su tiempo de maduración y una vez florecemos dejamos esos miedos atrás y...
De repente se toparon con otros viajeros y al forzudo le faltó tiempo para soltar el objetivo por el que la mediana se encontraba aquí.
Shem trató de escrutar a los desconocidos con la mirada. Sintió especial curiosidad por la otra ¿mediana? de pelo verde, pero no dijo nada.
Cuando el parlanchín bárbaro se esforzaba en encontrar el nombre del enano y la miró para confirmar que la última había sido la correcta, ella asintió con una sonrisa nerviosa y gesticuló las sílabas en silencio –Bre-tan-Cer-ve-za-Ne-gra.
¡Ey! ¿Qué tal? ¿Vais a Purixta no? Nosotros también -
Sipirilip, vamos pa'lla. Parece que hay un misterio de gente que entra en sueño y no sale. Nos han traído los rumores. Venimos de Villafé. ¿Ustedes han oído algo?
Bretan Cervezanegra! ¡Eso!
No, no he oído del. ¿No será del clan de los Guiness? -Vivían cerca.
Me encojo de hombros ante la pregunta de la enana del pelo verde. Yo que puñetas se si es un Guinness o un Volldamm...
¿Gente que no despierta? En plan, ¿nunca? Porque de primeras suena a como cuando me paso con el grog, ¿eh Noma? - digo a mi compañero guiñándole un ojo
El caballero marchaba algo cansado por la exposición al sol dentro de su cota de mallas, necesitaba ir bien protegido en todo momento por lo que no se planteaba aligerar su carga.
- Prueba si quieres la diadema, Panacea, y la perla.
Iba comentando a la compañera de pelo verde en relación a los objetos que guardaban. En cuanto llegaran a Purixta podrían descubrir algo más sobre ellos aunque su deseo era adquirir mejor armadura, todo lo que fuera mejorar era necesario para él.
El camino les llevó junto a dos personas más, una conversación no tardó en iniciarse compartiéndose las primeras impresiones.
- Saludos, yo soy Sir Gael Taulo, parece que van en nuestra misma dirección, a la ciudad. Mas como indica Panacea lo que nos atraen son esas noticias de la enfermedad del sueño. Ya deshicimos una calamidad en Villafé y pensamos tener la misma suerte con la que acongoja a estas gentes.
El caballero no conocía a enanos salvo el prestamista de caballos de Villafé, que no era un Cervezanegra.
- Debe ser fácil de encontrar a un enano y con ese apellido, ¿saben algo más de él?
Indagó siendo cortés.
Las mejillas de la mediana se pusieron coloradas cuando la miraron en busca de más información. Se sentía incómoda, y estúpida por no tener otros datos que no fueran los que ya había proporcionado. Pero entendía que tal vez su maestro no le había dado información más concreta para que se viera obligada a abrirse e interactuar con la gente.
La muchacha se armó nuevamente de valor y tras pensar unos segundos lo que quería decir, habló.
–N-no, lo siento. Sólo sé que se llama Bretan CervezaNegra y que habita en Purixta. Como bien dice el señor Sir Gael Taulo, espero que no sea difícil encontrarlo. Tampoco tengo conocimiento de ese misterioso efecto que mencionan acerca del sueño, pero estaría encantada de ayudar, si es que puedo hacerlo de algún modo, para desentrañar el misterio y hacer que esas personas despierten. Y creo que puedo asegurar que mis agradables compañeros de viaje también estarán dispuestos a ello.
Shem terminó de hablar esbozando una cálida sonrisa, mirando a Noma y a Laver en busca de su aprobación.
–Me gustaría saber qué tiene el señor enano preparado para mí, pero este asunto parece delicado. ¿Es posible que estuviera relacionado con este misterio? Espero que me perdone si me demoro en llegar –pensó luego, y mientras miraba de reojo al caballero comentó mentalmente –Curioso nombre largo tiene este señor, pero me gusta su planta.
Cuando Panacea sacó una perla y comenzó a juguetear con ella Ylian se fijó en ella para tratar de saber si esa perla tendría la calidad suficiente para poder usarla en la identificación de aquella diadema que habían conseguido.
Se había quedado tan obnubilada que Gael se le adelantó y no pudo compartir con ellos lo que había descubierto. - Esperad, creo que podría ser capaz de saber, con la guía de Mystra, de las capacidades mágicas de la diadema. No sé si la perla será de la calidad suficiente pero he visto realizar este ritual muchas veces en la torre de hechicería. Si me lo permitís podríamos detenernos un momento y podría tratar de descubrir las propiedades de la diadema. Espero a que Gael y Panacea confiaran en ella para probar si podía llevar a cabo el ritual con aquella perla.*
Continuaron avanzando por el camino cuando se encontraron con tres personas que se acercaron a ellos y les saludaron. Por el aspecto también se dirigían hacia Purixta con motivos similares a ellos, aunque al parecer buscaban a un enano que no le sonaba de nada. Negó con la cabeza y dejó que la simpática Panacea respondiera por ellos. Y se presentó tras Gael.
- Bienhallados, mi nombre es Ylian, seguidora de Mystra a vuestro servicio. Trató de ajustar un poco la armadura, estaba un tanto cansada de llevarla puesta durante tanto tiempo. Tardaría en habituarse a esa nueva situación pero sabía que así sería más fácil resistir los golpes y no caer de buenas a primeras. Debía dar la talla por ellos. - Si, como afirma Gael, venimos a estudiar que es lo que está haciendo que la gente caiga en ese sueño del que no consiguen volver y con la guía de Mystra conseguir deshacer esos efectos. ¿Vosotros también habéis venido atraídos por estas noticias? Y por cierto, ¿podríamos conocer vuestros nombres?
Parecía que a ellos también les había atraído los sucesos que ocurrían en Purixta y tomó como una señal de Mystra que ambos grupos se hubieran encontrado.
Motivo: Arcana
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+5)=20 [15]
Motivo: Tasar objeto (Prueba inteligencia
Tirada: 1d20
Resultado: 6(+3)=9 [6]
* En caso positivo de que estén dispuestos dejo una tirada de arcana por si conoce el tipo de objeto al observarlo más de cerca, tasaría la perla con una tirada de inteligencia que poco va a tasar con esa tirada y después realizaría el ritual para conocer todas sus propiedades si la perla fuera valiosa (+100 mo), si no lo fuera el ritual no tendría efecto.
La prueba de inteligencia la hago sin bono de competencia porque no es una habilidad como tal.
La muchacha se dio una palmada en la cabeza y respondió a la erudita.
–Oh, disculpad mi descortesía. Mi nombre es Shemalla, pero podéis llamarme Shem. Y aquí los señores Noma y Laaaver –dijo alzando la mano para señalar a los otros viajeros.
–Yo no conocía esa dolencia de la que habláis, pero es posible que sea la razón por la que haya sido enviada aquí. Debo localizar al señor enano para tener más detalles de mi misión.