Partida Rol por web

Me pongo a registrar las estanterías en busca de algo interesante. 

La mayoría de las cosas que Alyridian había guardado en ésta habitación se encuentran destrozadas por el paso del timepo, mientras que las que no han sufrido ésa se ha suerte parecen haber si digeridas por insectos y gusanos de los que tampoco queda muchos restos. Aún así, lográis encontrar algo entre todo ese montón de porquería.

Al empezar a desmontar los huesos del elfo, Bardum y Ulkus encuentran una pequeña bolsa con algo tintineante en su interior, cuando la abren ven que en su interior guardaba un pequeño anillo de acero y tres ónices.

Por el otro lado, Gerbo localiza una vieja mochila que ha permanecido indemne el paso de los años, detalle que no pasa inadvertido a Aust que anda cerca.

Kylon por su parte lo único que puede hacer es lograr levantarse y recuperar el aliento, aunque sus ojos se posan en los dos cofres de detrás de la cama para acto seguido terminar en otro un poco más apartado.

- Oye Gerbo vamos a ver que tiene esa mochila, puede ser que Alyridian la utilizase para guardar sus artefactos mágicos.

Vaya, mirad lo que había aquí- digo enseñandole la bolsita al resto del grupo. Uhmmm, quizá lo más sensato sea enterrar esto con los restos de su dueño.. Miro con curiosidad al gnomo despues de escuchar las palabras del elfo.

-Espera, Ulkus, primero juntemos todos los objetos que encontremos, para saber si alguno es mágico. Despues decidimos si enterramos algo.

Uhmmm.uhmmm- refunfuña mientras se ajusta de nuevo el cinturon aunque no es necesario hacerlo- está bien haz lo que creas que debas hacer.

- Hemos estado a punto de alcanzar algo peor que la muerte - interviene Kylon - Yo voto por quedárnoslos.

Lo cual era algo bastante ciero, teniendo en cuenta aquellos fantasmas y que estabais en las últimas, aunque siempre podríais hacer "lo correcto" y enterrar todo junto, pero tampoco sabíais si de verdad habían sido suyas todas esas cosas.

El tiempo parecía correr mas que siempre y Ulkus empezaba a impacientarse. Gruño otra vez más pasandose la mano por la chamuscada cara en busca de la barba que ya no estaba. Soltó de nuevo otro bufido, elfo si quieres intentar ver algo de estos objetos te sugiero que lo hagas ya, sino me llevare.todas esas cosas y las enterraremos con los cuerpos de.sus dueños puso todos los.obejtos juntos para que elfo hciera su brujería y sino ya lo tendría preparado para llevar.

De repente, el elfo se deja caer y se sienta exhausto. 

- Lo siento pero no puedo hacer nada hoy. Estoy tan agotado como mi magia. Si queréis esperar a mañana podré averiguar algo lanzando un conjuro detector de magia, pero hoy mis hechizos están agotado.

El rsotro de Aust refleja el cansancio que siente y en sus ojos hay unas marcadas ojeras. Sin venir a cuento, Garras salta al hombro derecho del nigromante sin que nadie lo haya visto llegar, y se sienta desafiante mirando a los enanos.

- Sin embargo, estoy de acuerdo con el humano. Yo no pienso entregar lo que he cogido, aunque la cimitarra no creo que sea "decoroso" llevarnosla, pero tampoco me opongo.. de hecho..

Aust se levanta y saca de su cuello el colgante con la foto de la mujer, que recogió antes. Se acerca al cadaver de Alyridian y le pone el colgante al cuello mientras dice algo en élfico en susurro

- Un viejo dicho de mi pueblo, lleva a la muerte lo que te ha hecho estar vivo. Creo que es mejor que tenga el colgante.

se supone que los cofre ya estan registrados y lo que dijiste que encontramos era todo los de la habitacion o aun quedan los cofre?

Me dirijo a los cofres, compruebo si es seguro abrirlos.

-Toda esta mazmorra con tranpas, supongo que lo unico que a priori parece valioso tambien tendra trampas, sera mejor que os aparteis.

despues de buscar trampas si no encuentro nada pruebo a abrir los cofre, no valla a ser que esten abiertos.

Mientras la discusión sobre que hacer los objetos hallados se pospone, Gerbo examina los cofres sin encontrar nada extraño en sus cerraduras salvo el detalle de que permanecen custodiando su interior a pesar de los años.

Ulkus empezaba ya impacientarse de sobremanera, haciendo aspavientos y maldiciendo entre dientes, veía como el gnomo intentaba mirar algo en las cerraduras, quizá alguna trampa o simplemente la forma de abrir esos cerrojos.

Ulkus recoje todos los objetos, y los coloca con cuidado en la mochila, -Ya que no sabemos que hacer con esto todavía, lo recogeré hasta que podamos ver que se oculta en ellos - miro al gnomo - Y maese Gerbo, si hace los honores - dice haciendo un gesto con la mano para que abra los cerrojos - sino lo intentaré yo, aunque normalmente las cosas del interior suelen sufrir las consecuencias.

Mira los restos del elfo, Y esto también nos lo llevaremos - con una de las sabanas envuelve los restos del elfo para transportarlos hasta darle la merecida sepultura junto a su hijo, pensando en el alma en pena del muchacho más que en la del demente elfo que construyó este sitio.

-veamos que nos encontramos en su interior, alejaos un poco y dejarme sitio, llevan mucho tiempo cerrado y puede que necesite espacio para moverme. Ademas queda la posibilidad de que halla mas trampas que me pasara por alto jajajajaja.

Al final Gerbo no tiene porque saltar para esquivar ningún tipo de trampa activada en el ultimo segundo, lo cual no es que fuera algo desagradable precisamente.

En uno de los cofres encuentra los restos de armadura elegantemente decorada y con varias runas inscritas en ella. Las diversas piezas parecen ser de una cota de bandas que si el elfo hubiera llevado bien podría haber alterado su destino.

El otro de los cofres contiene algunas prendas que quizás le hubieran pertenecido y de las que quizás aún podríais sacar algo por ellas, pues varias parecen bordadas en plata y se encuentran en un estado más que decente.

- La armadura seguro que es mágica y lo otro lo vendemos, al menos no hemos trabajado para nada

Miro al gnomo actuar con asombrosa sobre los cofres, descubriéndonos lo que hay en su interior.

- Entonces, cojamos todo y nos lo llevaremos a vender ... y esa armadura pues deberías intentar ver sus capacidades como con todos esos otros objetos de antes - digo mirandola intentando evaluarla - pero no olvidemos para que hemos venido aquí. Volvamos por nuestros pasos y dar sepultura a estos restos. En marcha! - digo despues de recoger todo para ir hasta el pequeño cuerpo que vimos de camino.

Termináis por decidir el llevaros todo lo hallado y enterrar el cuerpo del elfo, así que retornáis con vuestros huesos doloridos por el camino recorrido hasta regresar a la roca que tapaba la entrada.

En el exterior se había levando algo de brisa y el alba empezaba a mostrarse con sus colores anaranjados rompiendo el reinado de la luna. Decidistéis permitiros un pequeño y merecido descanso antes de continuar y así poder atender vuestras heridas, ya habría tiempo de enterrar los huesos y averiguar que habías encontrado en aquel lugar, pero éstos instantes os pertenecían y lo mejor que se podía hacer con ellos era simplemente disfrutar.

FIN.