Se detiene un momento antes de dirigirse al comunicador.
Me alegro muchísimo de que os podáis librar de mi presencia, Li Halan. Luisa se ocupará del tema del cobro, así no tendréis que volver a verme. Creo que no es necesario añadir que cuando necesitéis una nave, no contéis con la mía.
Pulsa el botón del comunicador y le dice al piloto:
Auriga: en cuanto el rayo tractor nos atrape, puedes recoger tus cosas. No voy a necesitar más de tus servicios.
Se gira para encararse con el resto del pasaje:
El rayo tractor nos depositará en uno de los hangares. Allí podréis desembarcar vuestras cosas. Uno de mis hombres os acompañará hasta el centro de la ciudad.
Despues de escuchear el mensaje de fukuma, siento una mezcla de asombro y cotrariedad.
- Habra decubierto mi pequeño juego de espias o cree que soy un mal piloto, sea cual sea la razón no me agrada el comentario.-
-Capitán, me gustaria tener unas palabras con usted en privado antes de abandonar su nave, si no le es inconveniene- dice por el comunicador.
Acto seguido empieza a reorganizar su macuto de viaje, con especial cuidado guarda sus herramientas y su posesión mas valiosa, la llave de salto. Termina colocandose el cinturon donde lleva la pistola comprobando que este en perfecto estado.
-Nunca se sabe quién te quiere hacer un par de agujeros en un puerto en los confines del espacio conocido-
Intento permanecer impasible ante sus palabras.
No lo se exactamente pero me temo que el acompañante velara por los intereses del capitán no de los nuestros.
Lastima que ni casa ya no disponga de una flota espacial. Pagaría de mi bolsillo para que fuera “reclutado voluntario” en un lugar idóneo.
Alberth tiene todas sus cosas a mano. No a desempaquetado nada y por lo que parece, no se va a quedar demasiado tiempo en el planeta.
Le hace una señal a Lobo, por si tiene algo que comentar. Tiene ganas de investigar y dejar a esta gente, tan diferente de él, atras.
Andrei entra en la cabina.
¿Qué quieres, Parches?
-Capitán quiero espresarle mi disgusto y decepción por la forma en la que ha dañado mi reputación y mis posibles relacciones comerciales con el pasaje de su nave.-
- A ver si con esta perorata le saco un extra o si tiene alguna queja deconsigo que la olvide- Continua sin darle tiempo de replica a Fukuma.
- Su gesto , del cual no entiendo el motivo, de despedirme irrevocablemente, antre potenciales empleadores y sin motivos previos sera pueso en conocimento de mis asociados y superiores.- Dice del tiron e intentando mantener una voz fria y desapasionada, de negocios.
Siento que me hayas malinterpretado. No tengo ningún problema contigo ni con tu trabajo. Simplemente, no voy a salir del sistema en unos meses y para pilotar la nave por aquí me basto yo.
Sonríe durante unos segundos.
Y con estos clientes, que yo te despida te dará más puntos que si ven que nos llevamos bien
El ex-soldado de los ojos extraños, le da un codazo nada disimulado a Alberth.
El áuriga se ha quedado sin trabajo. Seguro que le podemos convencer para pilotar esa maravilla tecnológica. Mi amigo Ingeniero comentó de contratar a un piloto experimentado.
Alberth asiente a Lobo. Su imaginación vuela al pensar en como será esta nave
- Buena idea. Esperemosle a la salida de la cabina para cuando hayamos atracado. Y por cierto, como hemos quedado con tu amigo el Ingeniero?
- Nunca cierres puertas a un trabajo de futuro a menos que el beneficio se mayor y en este caso...-
-Bueno ya veremos como se desarrolla la situación, pero que sepas que me guardo la posibilidad de hablar con mis superiores de lo que aqui ha ocurrido. En otro orden de cosas espero el pago como fue convenido y si en un futuro necesitas de mis servicios ... bah! seguro que sabes como encontrarme.-
Comienza a abandonar la sala.
Por supuesto, por tu sueldo no te preocupes. Como te he dicho, no tengo ningún problema contigo ni con tu trabajo.
Amaga una sonrisa y añade.
De todas formas, ten cuidado de a quién amenazas, esto no es Ligaheim, y quizás te lleves alguna sorpresa desagradable.
-Lo dicho, sabes donde encontrarme.- dice mientras sale de la habitación y con dos dedos realiza un gesto de saludo.