Llegais a Rizenbull. Aquello estaba como siempre. Todo el mundo alegre y feliz, ajeno a todo lo malo que ocurria en la ciudad. Al llegar, Edward y Alphonse empezaron a tener una extraña sensación de abandono.
Pues... ya estamos aquí... que... extraño todo esto. ¿Dónde vamos a que se recupere la teniente? Sacudo la cabeza mientras hablo para ordenar mis ideas, al mismo tiempo que miro la ciudad...
Bueno... podriamos dejarla en casa de la abuela Pinako... si esque a ella no le importa...-decia Alphonse, aún con los Slicer a la espalda.
Camino con las manos en los bolsillos, mirando a mi alrededor, asi que este es el pueblo de los hermanos Elric, pienso con nostalgia, hay algo en el semblante de Eduard que me deja pensativo, ¿Que habra pasado?, pregunto, al darme cuenta lo poco que se de su pasado.
Al menos mientras intentamos contactar con Central sera lo mejor, dejarla como alguien conocido...vayamos hacia alli pues