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SEÑORES DEL CRIMEN

Aquellos villanos que logran a controlar uno o más distritos, pueden llegar a considerarse señores del crimen. Para dar una mayor profundidad al poder que tales enemigos pueden llegar a obtener, he diseñado unas reglas sencillas para la ocasión. Cada señor del crimen dispondrá de tres rasgos con una puntuación que irá del 1 al 5.

RASGOS

Los rasgos marcan el poder del señor del crimen. Cuanto más altos sean los valores, mayor será el poder e influencia que podrá desatar sobre la ciudad. Pese a que los jugadores no sabrán en qué ha invertido esos puntos, ni lo que se puede adquirir con ellos, deberán de hacerse a la idea de que cuanto más altos sean los valores, mayor será el reto para hacerlo caer.

Desesperación: Este rasgo mide la capacidad del señor del crimen para reclutar soldados. Cuanto mayores sean las penalidades que los habitantes de la ciudad sufran, mayores serán las posibilidades de que se unan a él para tratar de escapar de una vida de miseria.

Crimen: Los negocios turbios proporcionan una gran cantidad de recursos. Los cuales invertirán para armar mejor a sus hombres, obtener equipamiento especial o montar bases de operaciones por toda la ciudad.

Corrupción: Lo más poderosos señores del crimen disponen de muchos medios para hacerse valer en la ciudad. Este rasgo indica hasta que punto está conectado con Jueces, miembros de la alcaldía, empresarios de éxito, policías y demás figuras importantes de la ciudad. Sirve para reclamar favores, evitar que la policía meta las narices en sus asuntos, obtener información privilegiada y un largo etc)

NEGOCIOS Y OPERACIONES ILEGALES

Cada vez que los héroes descubran uno de los negocios que proporciona poder a un señor del crimen y lo intervengan con éxito, reducirán en un punto uno o varios de sus rasgos. Así que la mejor forma de acabar con un señor del crimen, es destruyendo sus fuentes de ingresos y negocios.

MÁSCARA NEGRA

Pocas figuras infunden tanto respeto y temor como el señor del crimen conocido como Máscara Negra. Con una mente brillante y un gran don para la estrategia, ha logrado abrirse paso hasta el trono dorado de Gotham. Su palabra es la ley y ni tan siquiera la policía se atreve a cruzarse en su camino. Se codea con la alta sociedad de Gotham, los cuales ya sea por temor o por pura ambición, revolotean a su alrededor como polillas atraídas por la luz.

Su destreza para el combate, unido a sus conocimientos y habilidad para la tortura, lo transforman en una figura a la que tan solo los más osados (y necios) se atreven a desafiar. Es conocido por sus castigos ejemplares, pero sabe recompensar a aquellos que le son leales y útiles.

Dispone de un ejército de matones bajo su servicio, lo cual unido a sus conexiones con políticas, lo transforman en alguien prácticamente intocable. Es un secreto a voces lo que realmente es, pero nadie en su sano juicio se atreve a oponerse a sus caprichos.

Corren rumores de que tiene en nómina a varios de los criminales más peligrosos de la ciudad y que mantiene una fuerte enemistad con el Pingüíno.

EL PINGÜÍNO

Ante los ojos de los ciudadanos, se trata de un criminal reformado que ya ha cumplido su deuda con la sociedad. Considerado un empresario de éxito, su club es uno de los locales de moda de la ciudad, lo cual le otorga cierto prestigio. Se considera a sí mismo alguien refinado, sofisticado y con un gusto exquisito, por lo que no soporta a aquellos que no se comportan de la forma apropiada. 

Se sabe que en tiempos pasados planeaba y ejecutaba robos a bancos y joyerías. Aunque ha descubierto una forma más segura de ganar dinero, la venta de información. Poco es lo que los ojos y oídos del pingüino no son capaces de captar, pues invierte gran parte de su fortuna en mantener espías por toda la ciudad.

Por supuesto dispone de otras fuentes de ingresos, aunque la policía aún no ha descubierto cuales son. La venta de información es algo mas conocido, pero de nuevo, la policía no ha sido capaz de pillarlo con las manos en la masa. Así que pese a estar estrechamente vigilado día y noche, ha logrado dar esquinazo a la policía siempre. 

EL ESPANTAPÁJAROS

Obsesionado por la propia esencia del miedo, el doctor Jonathan Crane se ha transformado en una pesadilla viviente. Ataviado con su terrorífico traje y armado con una de las toxinas más peligrosas del mundo, es la viva representación del terror en estado puro.

Nadie sabe realmente qué es lo que hace en los Narrows, pero una cosa es segura, no quiere allí a la policía. Dotado de una mente brillante y armado con una paciencia ilimitada, evalúa cada paso con precisión milimétrica y es por ello que es tan temido. No es de extrañar que la policía esté asustada ante las intenciones del Espantapájaros, pues saben que nada bueno puede salir de su retorcida mente.

Han tratado en tres ocasiones retomar el control de los Narrows, pero en todas ellas lo único que han logrado ha sido que varios agentes acaben completamente desquiciados durante días. Pues todo parece indicar que la nueva fórmula del Espantapájaros, es aún más potente que la anterior.