Partida Rol por web

Historia negra

Moonlight club

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16/05/2011, 20:59
Emiliana Di Salvo

Suspiro y aparto la mirada de la suya para observar mis manos.

-Lo sucedido ayer con el alcalde fue la gota que derramó la copa- mi ceño se frunce, sin duda el recuerdo de aquel momento me disgustaba y mucho.

-Y aparte de eso, un... amigo, me aconsejó en que podía encaminar mi vida, ganar dinero de otra forma y...- hago una pausa, suspirando nuevamente -... creo que tiene razón. He obtenido una muy buena cantidad de dinero en todo éste tiempo de trabajo- ahora la miraba a sus ojos -Estoy cansada de ésta vida, de sentirme vacía y superficial, deseo terminar con ésto, aún tengo tiempo de enderezar mi camino-.

No iba a mencionar a Robert en la conversación, no iba a involucrar a la persona que quería y que había abierto mis ojos. Por él deseaba salir de la oscuridad; él era esa luz que me había salvado y no dejaría escapar la oportunidad de tener una vida digna al lado de un estupendo hombre.

Ahora permanecía en silencio, contemplado a Madame Florentine, pero mis pensamientos estaba en el hombre que me esperaba.

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17/05/2011, 14:43
Madame Florentine

Florentine levantó las cejas cuando frunciste el ceño recordando lo de ayer, pero acabó relajando el rostro.

- Una buena cantidad de dinero… - repitió en voz baja tus palabras – Vamos en que en vez de trabajar para mí estabas trabajando para ti… - te miró de reojo mientras daba otra calada.

- Bueno – Abrió el cajón de su mesa y sacó un papel, era tu contrato, te mira haciendo una mueca de circunstancias – A ver… como te dije desde el primer momento no te iba a obligar a nada, así que…

Suspiró y ante tu mirada cogió el contrato y lo rompió en pedazos, luego te sonrió con sinceridad a la vez que negaba con la cabeza – Espero que “él” merezca la pena, bonita no me engañas, reconozco esa mirada…

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19/05/2011, 00:34
Emiliana Di Salvo

Suspiro aliviada al ver que rompía el contrato. Al fin, todo había finalizado.

Asiento mi cabeza, como agradecimiento y sin pensarlo, me pongo en pie, sujetando el bolso en las manos y no dejaba de sonreír. Camino hacia la puerta, de forma insintiva, deseaba abrazarlo y decirle que todo había salido bien.

Me detengo en la entrada de la habitación y miro una vez más a Madame Florentine -En la vida el dinero no lo es todo, tenía un concepto diferente de vida y en un día he cambiado de opinión- le dedico una amplia sonrisa -El amor hace maravillas, Madame Florentine, más que el dinero...- le guiño y bajo las gafas que tenía sobre la cabeza.

-Gracias, por todo y mucha suerte en su negocio, que a pesar de mi cambio repentino de opinión, valoro su trabajo, nuestro trabajo. Hasta una próxima- y con un gesto de mano, finalizo el encuentro y salgo de la habitación.

Tenía deseos de correr, de besarlo y abrazarlo. Sabía que estaría feliz, sería sólo suya y de nadie más y juntos comenzaríamos a construir nuestro futuro.

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19/05/2011, 17:30
Robert Burns

Florentine negaba con la cabeza al verte sonreír así – Que tengas suerte, bonita… El amor… va, lo que te diga no lo vas a tener en consideración así que lárgate de una vez y trata de ser feliz

Bajaste las escaleras casi corriendo, se podría inventar un nuevo termino “nerviosamente feliz” saliste de aquel club por última vez para mirar en dirección a donde estaba el coche.

Robert había bajado del coche y caminada nervioso de un lugar a otro como si esperara a que su mujer diera a luz, en cuando te escuchó levantó la mirada, un poco atemorizado, pero tu mirada no engañaba, sonrió de forma tímida y se acercó a ti esperando confirmación, era un buen momento para echarse en sus brazos.

Notas de juego

Creo que el siguiente puede ser tu último post, tras él te pondré el epílogo, espero que te haya gustado la partida, por supuesto te pondré un positivo que no hará justicia suficiente con lo bien que lo has hecho. Aplausos ^^

P.D: ¿Puedo poner en el off que jugadora eras?

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20/05/2011, 00:04
Emiliana Di Salvo

Me detengo en la puerta de acceso del club en busca de Robert y allí estaba, nervioso, expectante. Nuestras miradas se cruzan y ambos sonreímos.

No hacían falta palabras de confirmación, sabía que con mi radiante sonrisa y mis ojos brillantes, Robert había confirmado que todo había salido bien.

Comienzo a caminar hacia él, con paso algo apresurado y en ese instante, imágenes del pasado comenzaron a reproducirse en mi cabeza, desde los inicios de mi carrera como "mujer de negocios". No todos los momentos fueron malos, conocí a personas interesantes, adineradas, inteligentes y conocí gran parte del mundo, pero, desde que comencé con ésta profesión, mi vida comenzó a ser vacía, superficial y la avaricia, la lujuria y el placer, era lo que me rodeaba día a día ¿Y el amor? No creía en él, podía complacerme con otros caprichos y tener el hombre que quisiera cualquier noche y encima ganaba dinero, pero todo cambió hasta que lo conocí a él.

Todo ocurrió tan rápido y en cuestión de segundos, Robert hizo que cambiara de opinión y todo gracias al amor; amor a primera vista, ¿Quién imaginaría que Emiliana Di Salvo creería en él? Debía estar loca, estaba loca, pero por él...

Al fin mis manos rozaron las suyas, pero sólo por unos segundos, pues, mis brazos buscaron con urgencia los suyos, refugiarme en ellos, sentirme protegida, sentirme amada.

Un suspiro escapa de mi boca al sentir el roce de su mejilla en la mía, de sus brazos rodeando mi cintura. Estaba en casa, en mi refugio y no pensaba escapar nunca de él.

Me aparto un poco para contemplarlo, recorrer con mis ojos cada detalle de su rostro y aquella sonrísa suya, aún estaba dibujada, al igual que la mía.

-Aquí comienza mi nueva vida y todo se debe a tí...- rozo sus mejillas con el dorso de mis manos, lentamente -Gracias, por abrir mis ojos, por sacarme de la oscuridad- le sonrío y acerco un poco mis labios a los suyos -Prometo fidelidad, lealtad y amor incondicional hasta el fin de mis días... - le susurro y rozo ligeramente mis labios con los suyos -Te amo, amor mío; tuya, sólo tuya...- y dicho ésto, acorto la poquísima distancia que separaba nuestros labios, para depositar un suave y delicado beso, lleno de amor.

Notas de juego

Waaa, no lo puedo creer, me tomaste de sorpresaaa!! increible que haya terminado... Muchos aplausos para un increible director!! y por supuesto, puedes revelar mi identidad ;)

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20/05/2011, 16:10
Robert Burns

Su sonrisa… sólo podía significar una cosa ¿no? Realmente estaba preparado para intervenir, hubiera hablado con su jefa quien fuera, habría dado a cambio de romper ese contrato hasta mi más preciada empresa.

Pero al final no hizo falta, quizás mejor así, no por el dinero sino porque Emiliana se sintiera mejor, útil, que se valía por si misma, así que no le diría hasta donde estuve dispuesto a llegar.

Cuando me rozó con sus manos la agarré, la levanté del suelo besándola sin parar una y otra vez, sus cálidos besos, su mirada siempre agradecida, su ternura infinita, todo me eclipsaba.

- Y tu me los has abierto a mí, yo te prometo lo mismo, soy tuyo y sólo tuyo pero ahora… - Sonreí - ¿Qué tal unas vacaciones en el caribe? – la Abracé de nuevo y la rodé sin importarme lo más mínimo si me muraban o no.

Amaba a esta mujer.

Notas de juego

jajjaa No digas más que me sonrojas xD Me encantó su post ^^

Me pasé a primera persona a propósito :P

Ahora a continuación pondré una especie de... resumen

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20/05/2011, 16:41
Director

Epílogo

Emiliana, contratada por el “Moonlight Club” al inicio de la partida, conoció de pasada a Arlen una de las chicas que llevaba tiempo trabajando, su primer encargo fue atender al Alcalde John Preston, saliendo de compras tuvo un incidente con Roberts Burns el dueño de unos grandes almacenes pensó que le iba a robar y Emiliana lo encañonó con una pistola, esté se fue y se encargó de darle un susto a la señorita Emiliana, la historia dio un vuelco pues ambos se enamoraron aunque hubo una discusión y se fueron.

Cuando Emiliana volvió con el Alcalde este la trató mal, hubo un momento de tensión y Emiliana abandonó a su cliente, finalmente llamó a Robert y la historia de amor se hizo realidad.

Un día por la calle vió como detenían a Stephen Maybrick, un asesino profesional, pero que la única vez que lo estaban deteniendo resultó ser por asesinado en defensa propia cuando un ruso trataba de matarlo por encargo, ya que había asesinado a la hija del alcalde el mismísimo Alcalde Señor Preston.

El susodicho asesino se escapó de la comisaría y fue a refugiarse en casa de su proveedor de armas, que casualmente vive en el mismo edificio que Emiliana, se lo encontró de nuevo por la calle y el asesino trató de disimular lo mejor que pudo.

Emiliana fue llamada por Florentine, la noche anterior se presentaron los Rusos en el club para investigar la desaparición de uno de los suyos que resulta había muerto de un infarto en la cama cuando estaba con Arlen, el cuerpo se lo llevó en segurata del club y lo tiró al río.

Uno de los rusos no se dejó cachear y comenzó un tiroteo, murió el segurata y el ruso poco después por heridas graves.

Otro de los rusos estaba en la habitación con Arlen, en principio para sonsacarle información del ruso desaparecido, pese a estar encañonada Arlen se negó a decir nada, llegó Florentine a la habitación de Arlen pensando que su vida corría peligro, se puso histérica y le contó al ruso que había ocurrido con su compañero desaparecido.

El ruso se llevó a Arlen para que le llevara hasta el cuerpo, encontraron el cuerpo y se fueron a ver al jefe de los rusos, iban a torturarla por diversión, pero consiguió convencer al jefe que podía ser muy útil consiguiendo información, el jefe ruso le perdonó la vida si conseguía “camelarse” al alcalde para que hiciera la vista gorda en algunos temas.

Notas de juego

El final de la historia de Emiliana ya sabes como es. Faltan los polis y los italianos, pero con estos ya no coincidiste, el lío es increíble xD Espero que te haya gustado la historia, felicidades ^^

Si tienes cualquier pregunta de la historia puedes preguntarme por el of, mp, etc…

Gracias por todo ^^