Miro con curiosidad a O'Connell mientras contesta al rabino. ¿De dónde coño ha sacado esa información? De los informes no, desde luego.
—Yo todavía no tengo una opinión clara sobre lo que es exactamente esta tablilla. Lo que sí sé es que las representaciones de monstruos repletos de tentaculos que aparecen en ella son verdaderamente inquietantes. Y usted, rabino, ¿qué opina?
-Por mi parte me atrevería a asegurar que, amén de su antiguedad, evidentemente hace referencia a algún tipo de cultura relacionada con el mar.... o con pescadores. Esa profusión de tentáculos y peces y ondas es el menso lo que me sugiere.- digo saliendo de los pensamientos en los que me había sumido mientras miraba la extraña tablilla.
Siento el retraso.
El rabino Eleazar os mira con aguedeza y su mirada os resulta inteligente y astuta.
- Tiene usted razón señor O'Connell, pero se equivoca en una cosa: la antigüedad de la tablilla es extremadamente importante. - contesta, sereno pero con firmeza.
Antes de continuar, el anciano rabino se detiene ante la observación del profesor Arturo y vuelve a examinar con curiosidad e inquietud los relieves jeroglíficos de la vieja y desgastada tablilla.
- Es usted muy observador profesor. Sin embargo, y respondiendo al señor Simmons acerca de mi opinión al respecto, intuyo que la secta que creó esta tablilla tenía fuertes vínculos con el mar, y es por ello que viene representada de tal manera.
El rabino vuelve su mirada de nuevo a la tablilla y le da media vuelta para que quede de cara a vosotros, antes de continuar con su apreciación.
- Fíjense. - dice señalando con su huesudo dedo la parte superior de la tabla - Esos tentáculos y demás representaciones marinas es una manera de expresar los cielos nocturnos. Cometas, galaxias, cúmulos estelares... - el anciano lleva el dedo hacia la figura de rostro tentacular - Esta debe ser la entidad a la que rendían culto, y se halla idolatrado por otros seres, seguramente otros dioses de menor categoría. Pero lo más inquietante es esto. - dice señalando la parte más baja de la tablilla - No podría asegurarlo, pero parece una especie de portal resguardado por un extraño objeto resplandeciente.
El anciano habla con fluidez y muestra cierta excitación mientras desvela lo que, para él, parece representar aquel dibujo.
- Podría tratarse de una localización, codificada bajo nuestra visión del cielo nocturno, y este lugar debe esconder un legendario objeto, muy importante para la gente de esta civilización. Sin embargo, necesitaría estudiar la tablilla para obtener más información. - la expresión de su mirada revela intención de querer llevársela para un estudio más profundo.
La explicación del rabino Eleazar parece bastante lógica. Ahora, gracias a él, la tablilla tiene un poco más de sentido. Estoy seguro que con un estudio más riguroso y tranquilo el rabino podría ser capaz de aportar más datos.
—Podría postergar su viaje unos días, rabino. Así tendría algo de tiempo para llevar un estudio más profundo de la reliquia. Sin duda sería interesante para todos.
La explicación del rabino me resulta más interesante de lo que habría esperado. Sin duda el hombre es una eminencia, como me confirma la devoción con que le escucha el profesor Arturo. Su interpretación de la tablilla le da un nuevo sentido y me saca de mi error. Pensaba que tenía un interés meramente académico, pero en realidad...
-Un mapa... lo que dice usted es que la tablilla es un mapa.
Sea lo que sea el misterioso "objeto legendario", la secta lo busca. Puede ser una pista muy importante.
-Gracias por sacarme de mi error, rabino Eleazar. Ahora comprendo la importancia de todo esto. Sin duda, coincido con mi compañero: sería muy interesante conocer las conclusiones de un estudio profundo por su parte.
-Un mapa......pero....un mapa ¿Hacia dónde?- pregunto en un murmullo pensando en voz alta más para mi mismo que al resto.
El rabino observa suspicazmente la tablilla tras la pregunta del profesor Arturo y con aire meditativo responde con voz senil:
- Eso es lo que me gustaría averiguar.
Tras un intenso debate, el rabino y su fiel y silencioso guardaespaldas se marchan de Arcana Agency.
- Prometo mantenerles informados, caballeros. Ha sido un verdadero placer.
Madre mia hace un mes que no escribo nada. Siento la pérdida de tiempo, es la primera vez desde que me registré que ando perdido de la web, pero el tema del movimiento me tiene muy centrado y además sigo trabajando, estudiando y demás.
Lo que voy a hacer es acelerar el guión e ir pasando acontecimientos. Que no os extrañe si de pronto estáis en otro lugar... u otro tiempo.
1 abrazo.
No me ha quedado clara una cosa: ¿se ha llevado la tablilla?
Sí, se la lleva a Jerusalén :D
Me despido con respeto del Rabino y sus acompañantes en la puerta de la agencia. Creo en sus palabras, y con algo de suerte, antes de que nos demos cuenta tendremos un informe sobre su estudio de la tablilla. Lo cierto es que necesitamos urgentemente esa información, pues ahora mismo no tenemos una mierda de nada.
En cuanto los visitantes desaparecen vuelvo a tomar mi asiento y sin contemplaciones me dirijo a O'Connell.
—Es curioso lo que comentaste hace unos minutos —digo mirando a mi pitillo que se consume en el cenicero—. ¿Qué se supone que sabes de ese objeto?
Tras marcharse el rabino, Simmons no pierde el tiempo y, sin andarse con rodeos, dispara una pregunta directa. Me tomo mi tiempo para responder. Me siento en un sillón enfrente del suyo, saco un puro, le corto la punta, cojo una cerilla, enciendo el puro... Tras una larga calada, expulso el humo y por fin hablo.
-Sé lo que dicen los informes... y que probablemente lo esculpió un loco con indigestión de marisco. Más allá de eso, sólo sé lo que ha dicho el rabino. Poca cosa, la verdad.
Vuelvo a dar una calada a mi puro, saboreándolo.
Miro a unos y a otros, penasndo en las últimas palabras del rabino acerca de que la tablilla es un mapa... y aunque me hayan dicho que es algo estelar no puedo quitarme de la cabeza que tiene que tener mucho que ver con el mar, o en el peor de los casos con alguna zona portuaria. Aunque tamaña profusión de tentáculos me provocaba mas inqiuetud que curiosidad.
De todas maneras permanecí callado en mi sitio, mientras iba llenando lentamente la cazoleta de mi pipa.