PRÓLOGO
BAILE DE MÁSCARAS
6 de septiembre de 1999 d.C. – Atenas. Akademia
Si por algo se distinguen los helenos, es por un estilo de vida es informal y despreocupado. No hacen falta muchos pretextos para una fiesta con montones de comida y alcohol. El baile es una pasión griega, y los Vástagos la siguen con entusiasmo, encontrando en el país un lugar perfecto por sus hermosas playas y agradable clima. La cultura ateniense refleja un claro ejemplo de deleite a través de este arte. Cuando hay un evento de baile, la sociedad entera griega es capaz de reunirse y disfrutar pasionalmente.
El lugar de culto donde más eventos se realizan es en la Nueva Akademia, cuyo nombre hace referencia a la Antigua Academia de Platón.
Esta organización fue fundada el 18 de marzo de 1926 y su estatuto, ratificado y con enmiendas posteriores, todavía está vigente y rige los asuntos de la Academia. Según este documento, la Academia está dividida en tres Órdenes: Ciencias Naturales, Letras y Arte, y Ciencias Morales y Políticas.
El edificio principal de la Academia es una construcción neoclásica ubicada entre las calles Panepistimiou y Akadimias en el centro de Atenas. El edificio fue diseñado como parte de una "trilogía" arquitectónica en 1859 por el arquitecto danés Theophil Hansen, junto con la Universidad y la Biblioteca Nacional. Los fondos fueron proporcionados por el magnate Simon Sinas específicamente para este propósito y la primera piedra fue colocada el 2 de agosto de 1859. La construcción avanzó rápidamente después de 1861 bajo la supervisión de Ernst Ziller, pero los tumultos internos durante los últimos años de reinado del rey Otto, los cuales trajeron como resultado su derrocamiento en 1862, dificultaron la construcción hasta 1864. Los trabajos se reanudaron en 1868, pero el edificio no fue completado hasta 1885, con un costo total de casi tres millones de dracmas de oro, el cual fue cubierto principalmente por Sinas y, tras su muerte, por su esposa Ifigeneia. Las esculturas fueron proporcionadas por el griego Leonidas Drosis, mientras que los murales y cuadros por el austriaco Christian Griepenkerl.
El 20 de marzo de 1887, el edificio de la "Academia Sinaica", llamada así en honor a su benefactor, fue entregado por Ziller al Primer Ministro griego Charilaos Trikoupis. En ausencia de una Academia Nacional, el edificio fue usado para albergar al Museo Numismático en 1890, y en 1914 al Museo Bizantino y al Archivo Nacional. Finalmente, el 24 de marzo de 1926, el edificio fue transferido a la recién establecida Academia de Atenas.
Y ahora, todo este compendio de edificios, constituye el Elíseo de la ciudad. Es un centro social donde se gana y pierde prestigio en la secta de la Camarilla. El Campus está bien protegido por ghouls. Especialmente los kyklos de Apolo y Mnemosyne suelen dejarse ver por aquí, en los distintos eventos nocturnos. Todo esto, claro, ajeno a los mortales. Así era un sitio perfecto para cazar y alimentarse, y para descubrir nuevos talentos. Además de la política de los vástagos, que se daba en las salas privadas.
Los lunes por la noche es el ciclo feminista. Poesía, baile, retórica, todo relacionado con la mujer. El día de la Luna. Suelen acudir mujeres importantes de Grecia que, sin saberlo, suelen atraer la mirada de muchísimos vástagos.
El turno de aquella noche era de Helena Schizas, una ensayista y mitóloga feminista que trabajaba para el gobierno griego. Su discurso se centró en un estudio sociocultural y antropológico, y en cómo en el siglo XX, las feministas revisaron las apariciones de Medusa en la literatura y la cultura modernas, incluyendo su uso como logotipo de la marca de ropa Versace. Explicó como Mary Valentis y Anne Devane señalan que cuando preguntaban a las mujeres cómo les parecía que era la ira femenina, siempre era Medusa, el monstruo mitológico con serpientes en la cabeza, lo que les venía a la mente, aunque ninguna de las mujeres que entrevistaron podía recordar los detalles del mito.
Helena de Creta prosiguió su discurso exponiendo cómo se ha interpretado en numerosas ocasiones, que Medusa era en realidad la Representación del Poder y Sabiduría femenina. Las serpientes, animales condenados por religiones y culturas, eran antiguamente veneradas. La serpiente antiguamente era la representación de la iluminación, de la sabiduría, del conocimiento, conocimiento que hoy se condenó asimilando este animal al demonio.
Medusa, al ser decapitada por el "héroe" Perseo, quien fue ayudado por Atenea, narra la historia de una de las primeras "traiciones al género". Poseidón había violado a Medusa, lo que puso celosa a la "virginal" Atenea. Es por esto que Atenea ayuda a Perseo a conseguir su cabeza.
Acto seguido en su discurso, sobre la representación artística de la Gorgona, sostiene que se ha dicho que el Gorgoneion se usa como protección, ya que medusa era tan poderosa que aun muerta sus poderes surtían efecto. Pero se ha tomado este acto como una metáfora del poder del hombre sobre la mujer. Medusa, símbolo de la Sabiduría y poder femenino, fué derrotada y decapitada por un héroe, alegoría que instala el sistema del patriarcado. Y su cabeza decapitada, exhibida en el escudo de Atenea, se replica en numerosas obras de arte y arquitectura a modo de recordarnos el triunfo y reinado del hombre sobre la mujer, de su sometimiento.
Al acabar, el público estalla en un estruendo de aplausos.
Despierto con las últimas horas del atardecer. Como siempre en el todavía chamuscado sótano de Saleema que, en la medida de mis posibilidades, habilité para alguien como yo: La luz no es un problema, nunca lo fue ya que la vivienda está enterrada en el suelo; el fuego si podría ser un inconveniente pero por ello habilité una habitación antipánico capaz de resistir las llamas más virulentas; es allí donde cada día me encierro a descansar y recobrar fuerzas.
Pongo algo de música mientras trato de acicalarme debidamente: Paso algo de agua por mi fría piel, me aseo y visto como se esperaría de alguien de mi edad aparente... vagar por las calles de Noche y siendo un Niño suele acarrearme más de un inconveniente que logro ahuyentar de forma más o menos diligente o convenciendo a los preocupados benefactores que mi presencia en un horario tan inverosímil no debía preocuparlos...
Hoy toca Ciclo feminista en el Eliseo; no soy especialmente exquisito en lo que a mis recipientes refieres pero debo admitir que esas veladas son prolijas en víctimas de gran interés y con las que uno puede pasar un rato interesante más allá de la simple necesidad por alimentarse.
Tomo el ciclomotor que tengo en las cercanías de mi refugio: Demasiado hecho polvo como para que nadie repare en él o tenga ganas de robarlo; uno entre los miles de vehículos similares que zumban por toda la ciudad.
Me pongo el casco, debo ser de los únicos motoristas en la ciudad que lo usa pero entre mi altura y mi rostro, no llevarlo incrementaría exponencialmente las posibilidades de despertar el interés de la policía así que, mal que me pese, me lo pongo por montera.
Circulo ágilmente entre el tráfico de Atenas; para un observador avispado resultaría extraño ver a alguien de mi altura conduciendo una motocicleta. Afortunadamente para mis intereses la gente suele estar demasiado ocupada haciendo sus cosas y solo distingue un ciclomotor zumbando a su lado... para aquellos que se fijan más, para cuando han asimilado que quizás el conductor era anormalmente bajo, habitualmente suelo estar ya a mucha distancia, demasiada como para que persistan en su sorpresa y los interrogantes que ésta les provoca.
Estaciono en las cercanías del Eliseo y accedo fácilmente al ser reconocido por los ghouls que lo custodian.
Desde un rincón en el que no llamo la atención, escucho el soliloquio que ofrece la invitada, Helena Schizas, una mitóloga feminista que trabaja para el gobierno griego... atiendo a lo que cuenta acerca del mito de Medusa, lo que lo rodea y sus profundas implicaciones a lo largo de la historia... a pesar que en vida no tuve ocasión de aprender demasiado acerca de la mitología clásica, en mi nueva condición voy teniendo constancia de la importancia de ese mundo no solo en la sociedad en general sino a nuestro mundo cainita en particular.
Lo que cuenta me parece interesante, mucho, y quiero saber más acerca del tema así que trato de seguir a Helena a la finalización del acto para tratar de poder hablar con ella en privado en algún momento... me fijo, sin embargo, en que no haya nadie más interesado en ella.
Escuche atentamente a a quella mujer, que facilidad con las palabras, que buen discurso, estaba absorta , perdida analizando y delentandome con cada palabra que salia de la boca de aquella mujer, pensando en el maldito patrircado , bueno no tanto pero si me llegaron sus palabras , tan profundo en mi corazon , tenia que acercarme a ella , tenia que cruzar palabras con tan brillante mujer , con aquella que habia hecho que mi corazon saltara , me acomode perfectamete mi vesido , tenia que estar presentable para conversar con ella , aunque trabajemos en ambitos distintos aun asi quiero conocerla , tome mi copa y camine segura hasta donde estaba ....
Mientras da un trago de agua, la mitóloga es abordada por bastantes curiosos, tras el discurso. Los de seguridad los retienen unos momentos para que Helena sea capaz de atender las diferentes preguntas. Todos los ojos están puestos en ella, tras su gran tesis.
No deja de sonreír en ningún momento.
En cuanto puede, se reúne con otras tres mujeres que se han sentado en primera fila. Helena las abraza y ellas le felicitan.
- ¡RAMERA! ¡ZORRA, ZORRA! ¡PUTA GUARRA!
Desde el fondo de la Sala Magna, varios jóvenes cabezas rapadas que esgrimen banderas de Grecia, insultan a la mujer hasta que interviene seguridad.
Además de montar mucho follón en un momento, es reconocible Miklos Tsergas, un Troiloi abiertamente Anarquista contra Pisístrato y nutrido entre adeptos de Amanecer Dorado, a juzgar por su logo cuasisvástiko. Qué hacía allí, es un misterio. Como maniobra política en la Estirpe, un numerito así no valía de mucho... pero a la larga minaría las reuniones, reduciendo el rebaño de las kyklos de Apolo y Mnemosyne.
El espectáculo había sido bastante lamentable. Ambos primogénitos Minoikoi, dejando a un lado sus diferencias, le echaron sendas miradas de odio y el anarquista se escondió entre su rebaño y salieron de la sala. Antes de darse cuenta, Helena y las otras tres mujeres, habían adoptado una pose orgullosa y desafiante. Por un breve momento, pareció que saltarían, pero al final no lo hicieron y fueron abordadas otra vez.
En cuanto puede, se reúne con otras tres mujeres que se han sentado en primera fila. Helena las abraza y ellas le felicitan.
Observo, desde la penumbra y con evidente interés, el aspecto de esas mujeres... me percato, asímismo, que parece ser que no soy el único Vástago interesado en Helena... Competencia! Maldigo.
¡RAMERA! ¡ZORRA, ZORRA! ¡PUTA GUARRA!
Amanecer Dorado, desde el fondo de la Sala truena, ruge desafiando el poder establecido y causando un tumulto en el Eliseo que resulta inconcedible! No me pasa por alto que entre los agitadores se encuentra el neonato Miklos Tsergas, neonato Brujah, cómo se atreve a semejante ingerencia??? Es ampliamente conocida su posición díscola y rebelde en lo que al poder de Pisístrato refiere... pero nunca hasta ese punto! Tampoco me pasa desapercibida la altiva reacción de la ponente y sus tres acompañantes, reaccionando ante lo que supone un asalto, una afrenta, incluso un insulto en toda regla...
Me temo que Miklos no actúe en solitario sino que quizás sea otro poder oculto el que lo esté manipulando cual marioneta para que sea él la cabeza visible que promueva esa agitación que erosione el buen nombre de nuestro Eliseo. Opto, por lo tanto, por tratar de seguir disimuladamente sus movimientos hasta donde me sea posible... tal vez averigüe algo que sea interesante para la Primogenitura...
Tirada oculta
Motivo: Seguir a Milkos (DES+Sigilo)
Dificultad: 6
Tirada (4 dados): 7, 8, 7, 9
Éxitos: 4
Las mujeres que se reúnen con Helena tienen el siguiente aspecto, y parecen feministas también.
Mikel se escabulle rápidamente, oculto entre las sombras. Pero tampoco hace falta que vaya muy lejos. Miklós Tsergas espera fuera del campus con sus amigos skinheads, cantando canciones nacionalsocialistas griegas en la puerta.
Muchas de las agresiones de miembros de Amanecer Dorado se dan después de concentraciones, manifestaciones o actividades del partido. El partido acostumbra a organizar marchas racistas en las principales ciudades del país. En muchas de estas marchas, los miembros del partido desfilan en columnas, enarbolando banderas griegas y nazis, mientras otros sostienen en alto antorchas, como en una procesión. Marchan por las calles más céntricas de las ciudades del país cantando canciones patrióticas o bien entonando los típicos cánticos de «Έξω οι ξένοι, η Ελλάδα στους Έλληνες» (Éxo i xéni, i Eláda stus Élines, «Fuera los extranjeros, Grecia para los griegos» o «Η Ελλάδα ανήκει στους Έλληνες» (I Eláda aníki stus Élines, «Grecia pertenece a los griegos»).
Al parecer, también capta varios fragmentos de conversación de un tal Pandelis Kazakos, diciendo que un día no aguantará más y empezará a reventar a cualquier inmigrante que vea por la calle. También culpan al feminismo de destrozar a la familia actual como modelo de sociedad utópica "si no fueran tan guarras y se la chuparan a todos los niños nacerían felices".
Oculto en las sombras, permanezco atento, tanto a los posibles movimientos o encuentros que tenga Miklos Tsergas como a lo que sea que siga diciendo el tal Pandelis Kazakos acerca de lo que ocurre.
Tengo Auspex 1 (Sentidos aguzados), tal vez sea mucho suponer pero desde la distancia a la que me encuentro debiera ser capaz de discernir las conversaciones que tengan lugar.
De no haber nada más de interés regresaría al Eliseo para captar algo más del ambiente tras la escaramuza de Amanecer Dorado; entiendo que es algo que no debe haber sentado nada bien pero deseo enterarme de hasta qué punto está el ambiente caldeado.
Tu mente se enfoca y comienzas a recibir información con más claridad. Hablan de un tal Periandros. Al parecer ser, al término de una concentración de Amanecer Dorado en la plaza Karaïskakis de Atenas el 16 de junio de 1998, miembros del partido atacaron a un grupo de jóvenes del SEK, un partido griego de izquierdas, que pasaban por las inmediaciones. El ataque resultó ser brutal, y uno de los izquierdistas, Dimitris Kousouris, resultó gravemente herido y casi murió. Según algunos testigos oculares, los atacantes, al acabar su "trabajo", se refugiaron en las oficinas centrales de Amanecer Dorado, situadas en la calle Solomou. Interrogado por la policía, uno de los izquierdistas declaró que uno de sus atacantes era Antonios Androutsopoulos (también conocido como Periandros). Androutsopoulos tenía una fisionomía muy particular: es un hombre fuerte, de 1,90 de altura, gran aficionado a los deportes de aventura (practica habitualmente paracaídismo y escalada). Pero Androutsopoulos era también un miembro destacado de Amanecer Dorado, ya que era el líder del Frente de Juventudes del partido, era miembro del Consejo Político del partido y colaboraba con multitud de artículos en las publicaciones de la organización. Androutsopoulos es también el autor de una novela ambientada en Asia Menor (Το μυστικό του κοχυλιού, To mistikó tu kojiliú, «El misterio de la concha»), que es un auténtico delirio ultranacionalista.
Sin embargo, antes de ser detenido, Androutsopoulos logró escapar del país. Los registros en su apartamento y otras informaciones de la policía sugirieron que se encontraría escondido bajo el cobijo de aliados de ultra-derecha en Chipre, Serbia o Alemania, aunque otras informaciones le situaban en Venezuela, donde Androutsopoulos había pasado su infancia.
Después los miembros del Amanecer Dorado hablan de Helena y de su vida como ensayista, criticando su posición 'izquierdista' y mostrando considerable desprecio hacia la mujer. Al parecer había pertenecido al SEK y fue una de las testigos de este caso.
Gastas 1 punto de sangre por los sentidos aguzados.
Interesante... cavilo aún agazapado en las sombras. Por hoy he oído bastante, concluyo abandonando mi escondite para regresar al Eliseo y buscar ya sea a Helena Schizas o a una de sus amigas feministas y, sospecho, compañeras del SEK...
En condiciones normales la rivalidad política existente entre las distintas facciones de humanos debieran traerme sin cuidado pero en este caso, desafortunadamente, dichas disputas han excedido el plano mortal alcanzando el terreno, hasta ahora vedado, del Eliseo... es por este motivo que estoy decidido a averiguar más acerca de lo que está pasando entre el SEK y Amanecer Dorado.
Punto de Sangre gastado (aunque es la primera ocasión en que debo restar puntos por los sentidos aguzados creo que la información ha merecido el gasto!).
Sobre el necesario feedbak que reclamabas: La Partida justo acaba de empezar pero esto promete, es de las que me obliga a tomar apuntes de nombres y fechas, algo que me encanta!!! ánimo con ella!!! ;)
Por cierto, no me dijiste a cuánto dinero tengo derecho con Recursos 1... a veces conviene llevar algo para lo que pueda surgir!!!
Me había preparado para la ocasión con un traje elegante y discreto de la marca Versace, algo que no acostumbraba a abundar en mi fondo de armario, pero que mi estado de ánimo y aquella ocasión requerían.
Todavía me sentía avergonzada por lo ocurrido en París hacía escasos días. Era incapaz de refrenar los pensamientos recurrentes mientras oía la voz de la prometedora Helena Shizas de fondo, sin escuchar realmente su discurso.
Ahora era sire, tenía una chiquilla e imaginaba lo que pronto dirían todas las malas lenguas de todo Atenas: "le conceden la libertad y lo primero que hace es abrazar a la primera criatura con quien se encuentra" "Obviamente no estaba preparada para ser liberada." Mi impulsividad repercutiría en mi fama, la de mi sire y probablemente todo el clan se vería perjudicado por ello.
Había estado dándole vueltas a aquello todas las noches desde que ocurrió, comiéndome la cabeza una y otra vez, criticándome por lo ocurrido, sintiendome insegura; algo que no encajaba para nada con mi forma de ser.
Mi intención era aprovechar la ocasión del evento, para pedir una audiencia con los primogénitos Minoikoi y explicarles cómo se habían sucedido los hechos y negociar las condiciones de tener a una cainita más en la ciudad. Aquello no sería agradable. Y tampoco lo sería presentar a mi chiquilla al príncipe.
"Pfff... todo esto es justo lo contrario de lo que esperaba cuando me dieron la libertad. En realidad, solo son obligaciones: una tras otra."
Sorpresa.
De repente los cabezas rapadas hacen su aparición y el auditorio se revoluciona. Insultos, gritos y miradas que petrifican sellan el incidente.
"Vaya, nunca hubiera pensado que una charla tan aburrida sobre la mitología clásica levantara tales controversias. Esta claro que este tipo de conflictos aumentan el interés y dan un poco de vida a los implicados ¿Habrá sido una estrategia cuidadosamente escenificada para darle más bombo a Helena? No me extrañaría."
Como fuera, aquel episodio me había hecho olvidar mi problema por unos segundos. Quizás también habría servido para suavizar lo que estaba a punto de contarles a las primogénitas. Si tenían otros conflictos abiertos quizás fueran más indulgentes conmigo.
"Bien. Ha llegado el momento"
Me levanto y poso la chaqueta sobre mis hombros para encaminarme hacia donde se encuentran las protagonistas del evento.
- Excelente presentación Helena, permiteme felicitarte y agradecer que hayas compartido el resultado de tus estudios con nosotras esta noche.- esbozando una cálida sonrisa poso una mano sobre su brazo con delicadeza - Los recelos levantados solo subrayan la importancia de tu tarea para nuestra sociedad.
Hago referencia a lo ocurrido señalando mi apoyo, y luego me giro hacia la primogénita Minoikoi más cercana, retomando la expresión de seriedad anterior.
- Hay un asunto importante que me gustaría tratar con vuestras eminencias con la mayor brevedad ¿Sería posible hablarlo en privado cuando hayáis acabado con el resto de compromisos? Es urgente.
He asumido que regresé de París hace unos días, y he mantenido en secreto la existencia de mi chiquilla. Ahora mi idea es explicarles lo ocurrido a la primogénita y decidir cómo proceder.
Si para la narración que tienes prevista conviene asumir otra serie de eventos, como que la chiquilla ya haya sido presentada, que el abrazo ocurriera hace años, etc. propón lo que prefieras y yo ya actúo en consecuencia.
Sin mucho más que escuchar, el infante no-muerto regresa al Elíseo.
Allí los vástagos parecen haber vuelto a la normalidad. Helena está hablando con una vampira (¿o es un vampiro?) recién llegada a la ciudad, después de un tiempo fuera, bien vestida con ropa de Versace.
Helena parece escribir algo en un papel y dárselo, al igual que a más gente. De pronto el cainita, tras sonreír a la ensayista, aborda a uno de los primogénitos Toreador y ambos salen afuera.
- Vaya vaya, a quién tenemos aquí.
Mikel se dio rápidamente la vuelta. Era Andreas Dexicos, el otro Minoikoi.
Helena, acostumbrada a los elogios, escribe en una tarjeta una dirección. Sus tres amigas/compañeras parecen evaluar a todos los presentes en la sala.
- Vamos a irnos a este lugar, a celebrar que esos machistas se hayan puesto tan nerviosos. Cuando el río suena, agua lleva. Sentíos libres de venir con nosotras.
El bar no estaba demasiado lejos. Era un sitio universitario, donde solían poner música Rock. El sitio se llamaba 'Myia y Tuya', y además tenía una terraza donde se solían reunir los colectivos feministas, (además de los círculos pitagóricos, según lenguas no desmentidas).
El primogénito Minoikoi aceptó hablar con Evangeline. Le tomó de la mano, como si de otro de sus amantes se tratase y salieron fuera, donde nadie pudiera verlos.
- Querida Evangeline... Qué placer volver a verte en la ciudad. Dime qué puedo hacer por ti.
El vástago tenía unos modales exquisitos y un carisma impresionante, incluso para los estándares clásicos griegos. Una proporción áurea.
- He de admitir que me ha sorprendido verte después de tu viaje por Europa, cariño.
Regreso al Eliseo todavía reflexionando acerca de las evidentes disputas existentes entre el SEK y Amanecer Dorado... Hasta qué punto influirán en nuestro Mundo Nocturno??? O, es más, No será que somos nosotros mismos, los Cainitas, quienes urdimos tales discrepancias entre los mortales??? Esta segunda opción me cuadra más... aunque por qué y para qué es algo que se me escapa y tal vez debiera averiguar.
Por lo pronto tengo a un izquierdista que resultó gravemente herido, Dimitris Kousouris y un destacado componente de Amanecer Dorado, ese Periandros, huido como consecuencia de haberle sido atribuida la brutal paliza a Kousouris... a partir de ahí, Helena Schizas, testigo de lo acaecido, es acosada por Tsergas, Kazakos y el resto de skinheads... Una trama interesante de la que debiera sacar el entresijo por lo que pueda resultar...
Ya dentro del Eliseo, detecto a Helena repartiendo notas manuscritas a varias personas y a una Vástago de andrógino porte; al parecer recién llegada a la ciudad...
Vaya vaya, a quién tenemos aquí.
Sin siquiera darme tiempo a reaccionar, el encontronazo con Andreas Dexicos se me atraganta como la ya olvidada sensación de un cacho de carne cruzando mi cuello... Vassilis, Makarios, y el resto de componentes de mi facción me habían advertido y prevenido acerca de él así que, siempre que me ha sido posible, he evitado toparme con Andreas... Sea como sea, y a pesar de todo, debo considerarme incluso afortunado de habérmelo cruzado en el Eliseo donde no creo que se le ocurra ya sea agredirme físicamente o usar sus poderes para ser pasto de sus intrigas contra Makarios.
Señor Dexicos... - inclino la cabeza cortesmente, justo antes de tenderle mi pequeña mano para estrechar la suya, guardando las apariencias en todo momento - ...un placer, como siempre - sigo con el agasajo -. No le vi en el coloquio. Estuvo bien, lástima de la desagradable conclusión, no le parece? - indico con un gesto de la cabeza la puerta por la que han desalojado a los miembros de Amanecer Dorado en clara alusión a sus insultos a la conferenciante.
Estar a su lado resultaba casi erótico. Había sentido aquello otras veces al reunirme con Makario, pero una nunca se termina de acostumbrar a ello, y ahora que tenía algo importante que confesar, esa sensación de nerviosismo no ayudaba a mi causa.
Sigo tremendamente seria, es la única forma de enfrentar lo que voy a decir cuando finalmente me armo de valor para hablar.
- He tenido que regresar antes de tiempo.
Digo deseando que mi rictus esté transmitiendo la importancia y gravedad de lo que iba a explicar a continuación.
- Ocurrió un incidente del que estoy dispuesta a tomar completa responsabilidad.
Me encontraba en París, cerca del teatro Chatelet. Estaba hambriento debido al largo viaje des de Viena y decidí salir a cazar para evitar presentarme ante el príncipe con el estómago vacío.
La línea de mis mandíbulas se marca en mi rostro, apretando con rabia.
- Perdí el control.
Me cuesta más de lo que esperaba pronunciar esas palabras.
- Era una joven artista que actuaba en el lugar, no pude parar a tiempo y le arranqué la vida. Si fue una buena o mala decisión el tiempo lo dirá, pero lo que ocurrió es que reparé mi error dándole una nueva oportunidad.
Mis ojos se fijan en los de mi interlocutor tratando de identificar las emociones que pasaban por su cabeza. ¿Estaría escandalizado por mi comportamiento? ¿Enfadado quizás? ...seguramente.
- La abracé, Makario.
Con estas últimas palabras mi cuerpo se llena de un extraño alivio y mi rostro de tristeza.
-Estupidos machistas.....- Digo acercandome a ella - supongo que es algo con lo que tiene que lidiar a diario ...ohhh , lo siento, no me he presentado ... me llamo laurentine Mailiaros, es un placer conocerla, - Saludo a helena y extiendo la mano tambien para saludar a sus compañantes - un gusto señoritas
Si ahi iba yo de nuevo, si fuese lesbiana hubiese querido tirarmelas , pero no, ese no es mi rubro , comienzo a preguntarme ¿que dirian mis padres si me vieran? su hija la bien portada conversando con una intelectual y mezclandose con la crema y nata de la sociedad ateniense, si , muy comico seria eso , me pregunto si ¿alguna de ella me reconoceria? , muy dudoso sin duda , seguramente no les agradaria si supieran mi verdadero trabajo , el cual hago por supuesto, con seriedad.
Pienso en la historia que acaba de relatar , en cierta forma algun dia fui como la gorgona , con un padre asi cualquiera lo seria, lamentablemente para el siempre he sido un alma libre , supongo que por so me odia tanto, por que nunca fui la hija modosita que el esperaba que fuera, que me casara con tipo igual de mezquino que el y trajera al mundo a quien sabe cuantos malditos mocosos , a ser como mi abnegada madre , no, yo no estaba hecha para eso , mis hermanas lo aceptaron y ese era su problema, no el mio .
espero haya quedado bien el post en breve te termino la historia
El vástago miró fijamente a Evangeline.
- Creo que me vas a tener que explicar eso.
Su semblante era bastante serio. A su alrededor parecía no haber nadie. Su mirada podía echar chispas.
Bajo la mirada de forma sumisa.
Makario estaba claramente enfadado, y lo entendía perfectamente. Yo, una joven inexperta a los ojos de mi familia inmortal, había cometido una transgresión que desequilibraba por completo la balanza de poderes de toda la ciudad.
- Te contaré todos los detalles que haga falta. Asumo mi culpa por lo ocurrido y las consecuencias de mis actos.
Digo en un tono neutro, casi militar.
- Se trata de una chica joven, de nombre Marguerite. Cuanto se de ella es que fue una actriz en vida, y que sus padres ya trabajaban en el mundo del espectáculo cuando nació. Desconozco si es a causa del abrazo o ya poseía ese rasgo natural, pero sus ojos tienen una profundidad vertiginosa, mágica.
Describirla hace que mi voz retome parte de emoción, pero muy pronto recuerdo frente a quien me encuentro y retomo la estricta seriedad.
- La he traído de vuelta conmigo y en estos momentos se encuentra reclusa en mi refugio.
La mujer, entre gritos y amenazas, abandonó la sala, seguramente a algún tipo de fiesta después de todo el barullo montado. Seguida de Andreas Dexicos, el cual no hacía sino hablar con un niño vampiro socarronamente. Todo parece un poco confuso cuando Helena abandona la sala y los de seguridad os invitan a marcharos también, bastante amablemente. Alguien había llamado a la policía.
Estaba claro que todas las conversaciones tendrían que acabar en otro lugar.