¿Hay alguna tirada que se pueda hacer para saber donde está el botón de apagado de la armadura?
No, no lo hay. Tiene que querer desactivarlo el portador.
- ¡Sueltalo! ¡Sueltalo ahora mismo, Cutter!
De improviso, Cutter solto a Ardo. Este cayó al suelo como una muñeca de trapo, jadeando. Levantando la mirada.
La teniente Breanne tenía el cañón de su rifle gauss apoyado contra la sien de Cutter.
- Cutter, ¿Quieres salvar a tus hermanos? ¿Te has parado a pensar que podrían ser algunos de los civiles que están buscando una salida de este lugar? ¿Te has parado a pensar que quizás la única manera de salvarlos podría ser asegurarse de que los Zerg no llegan a la ciudad antes que los transportes?
Cutter pestañeó furiosamente. Su voz era baja y tranquila cuando replicó:
- No, señora. No... no lo había pensado.
- Entonces deja de intentar pensar - gritó Breanne. Su voz era aguda y penetrante. - Yo pensaré por ti. ¡No te pagan por pensar!
Apartó el arma de su cabeza y le indicó con el cañón que se retirara.
- He pasado toda mi vida luchando en las guerras de otros, por los ideales de otros y las causas de otros. ¡Melnikov tiene razón! Cada una de nuestras vidas podría salvar centenares, puede que miles. ¡Ellos nunca lo sabrán, nunca nos lo agradecerán, pero ya que tengo que morir, pregiero que sea por algo que merezca la pena!
Se volvió hacia la caja y con movimientos rápidos y firmes abrió los sellos. Ahora, la máquina estaba al descubierto.
La Teniente se volvió hacia los rostros estupefactos que llenaban la sala.
- Tenemos, según mis cálculos aproximados, una hora antes de que lleguen los primeros Zerg. Siguiero que le demos un buen uso a ese tiempo.
¿Alguien pretende saltar sobre Breanne? ¿Asentis sin más? Os doy la última oportunidad, he decidido acelerar un poco el debate xDDD
¿Los vehículos que estaban afuera que eran y que cantidad de cada uno?
- ¿Y por qué deberíamos sacrificarnos para que otros vivan? - digo acercándome a la caja y por ende a la Teniente. No tengo ninguna intención de morir para nada.
- Y si lo hago me llevaré a unos cuandos estúpidos y cobardes Hijos de Korhal por delante. - añado. No pienso consentir que se salgan con la suya y queden como los héroes que pretenden quedar.
- La gente sabrá la Verdad del Ataque de los Zerg y esos malditos bastardos pagarán con su vida. - prosigo. Me encargaré personalmente de ello o moriré en el intento.
Dicho esto me encamino al hueco del Ascensor.
- Jans. - digo al Mecánico. ¿Hay ahí abajo alguna nave lo suficientemente rápida como para que los Zerg no la alcancen y poder escapar de sus fauces? - le pregunto.
Ardo sonrió con resignación. Ya estaba hecho. Y tenían que preparar la defensa, sin embargo, ese tanque sin cerebro seguía en sus trece. Pero eso ya era cosa de la teniente, él tenía que aprovechar el tiempo.
- Muy bien compañeros, los que se queden, tenemos que organizarnos.
- Amy, Melanie, vendría bien tener esas torretas a tope cuando lleguen los zergs, cuando llegaron los mutaliscos, no dieron señales.
- Bernelli y Fu, vendría bien que cogieseis un par de motos y llenaseis el perímetro de minas, yo iré con vosotros.
- Jans, durante el entrenamiento nos enseñan que estas armas están hechas para dañar, pero no para matar, para que así en vez de un soldado, sean él y el que le saque fuera del combate los que dejen de disparar. Nos vendría bien que te encargases de que eso funcione a matar. Queremos acabar con los zergs, no herirlos.
- Littlefield, tú podrías quedarte aquí con el resto a llenar esos búnkers de munición, granadas y todas las armas que podamos conseguir.
- Vamos, chicos, podemos hacerlo.
- Solo hay vehículos blindados. Por no haber, no tenemos ni buitres. Me temo, soldado, que debería de escuchar a sus compañeros. Por mucho que intente coger un vehículo, no podría escapar. La maquina atraerá a todos los Zerg en un radio enorme, ¿quién dijo que casi 10.000 clicks?
Jans torció el gesto.
- Si usted establece contacto con los Hijos de Korhal, lo más probable es que le ignoren. Lo único que les interesa es la caja, o hacerse algunas fotos recogiendo civiles abandonados. Y, seamos sinceros. Si la caja se queda aqui, y no tiene probabilidad de huir... ¿A dónde va a ir? Lo mejor sería que se hiciera a la idea. Igual que lo estamos haciendo todos, y que aporte a la defensa en vez de discutir. Si al menos conseguimos que saquen a más gente, podremos hacer algo por la humanidad. Ahora, si me disculpan, voy a trabajar en algunos bunkers.
Por último rió un poco. Estaba mirando a Breanne que miraba ojiplática a Ardo.
- Y... Melnikov, estimo oportuno comentarle, que no es usted quién ddebería dar las órdenes a este pelotón. - rió de nuevo.
- ¿Así que me estás diciendo que SI ó SI tengo que dar mi vida para que esos bastardos de los Hijos de Korhal se pongan una medalla? - digo visiblemente malhumorado.
- Me niego a pensar que no tenemos opción alguna de supervivencia.
Me importa un coño lo que digan los demás, la Teniente dió sus veredicto y eso es todo lo que necesito saber. - Órdenes señora. - Con la decisión firme de seguir con esto hasta lo último y ya que no se tiene otra opción, que mejor hacerlo que con justo, matando basura Zerg y mejor todavía si algún apestoso Protoss se cruza y lo barremos de paso.
La Teniente sacó pecho y se puso a dar órdenes. Podía ser su última defensa, pero se llevarían a tantos malditos Zerg como fuera posible.
Melanie, Melnikov y Littlefield se centrarían en la fábrica. Tendrían que crear mucha munición, pero munición para matar, no para aturdir. Entretanto, M´Butu ayudaría a mover maquinaria pesada y a colocar barricadas, ya que él era mucho más fuerte, después se uniría en la fábrica.
Os voy a poner escena nueva (¡La última!) a lo largo de la noche, sed pacientes :P