Partida Rol por web

Intente seguir a esa misteriosa figura y sus dos estupidos esbirros sin ser detectado. Tenía la pistola lista para disparar si las cosas se ponían feas, pero solo quería averiguar a dónde llevaban la cabeza. Por un momento senti lastima por Kavi, pero era prioritario no perder el rastro

Alfa nota una presencia cerca.

Tras un rato, Alfa gira hacia un callejón desierto.

Cuando se adentró por un desierto callejón dude un instante en seguirlo, pero no podia detenerme. Avance con cautela, casi seguro de que me esperaba una trampa...

Tras ver lo que ocurre trepo de nuevo al tejado, y me dispongo a seguir a los enmascarados. 

Los sigues por unas cuantas calles y ves que uno de los hombres de la sala también parece seguirlos. Uno de los encapuchados llevan a la chica en volandas.

Ves también que los enmascarados giran a la izquierda en un callejón y que el otro hombre titubea en si entrar tras ellos o no. Parece una trampa.

Entonces una voz habló en mi cabeza y me convenció de que dejase mi estupida persecución. La cabeza tendría que esperar. Con un odioso sentimiento de fracaso y de humillación volvi a recoger a ese Kavi. quiza todavía puedese llevarlo al hospital y sacar algo en claro de toda esa desagradable noche.

Les sigo por los tejados, confiando en que su atención está principalmente en el suelo.

El hombre dudoso decide no entrar al callejón y va hacia la salida del puerto.

Al poco tiempo Los tres encapuchados retoman su marcha. Van del puerto a cruzar la isla, en dirección a la zona rica. Ya no hay tejados en los que subirse. 

Bajo de los tejados y me quito el pañuelo de la cara, y lo uso para taparme el pelo, parezco más un mozo de cuadra que la hija de un burgués, así que comienzo a caminar tras ellos como si fuera un poco perdido o incluso borracho, tratando de no llamar su atención.

Al parecer el perseguidor toma otro camino y desiste en su esfuerzo.

Mejor.

Los tres y la chica siguen avanzando hacia la mansión. A la altura de la isla, en la zona del parque notan la presencia de un joven. Probablemente borracho probablemente desorientado.

Los encapuchados pasan de largo y siguen hacia adelante, hacia la zona bien. Allí te puedes volver a subir a los tejados.

Sin embargo, cuando llegan a las grandes mansiones te vuelves a encontrar con el mismo problema.

Les sigo con cuidado, aparentando ser el mismo mozo que vuelve a casa, si noto que sospechan me apoyo en alguna de las casas como si estuviera mareado por el alcohol, o incluso fijo vomitar. 

Una vez entrado en la zona de mansiones, vuelves a notar una presencia. Ves al mismo mozo de antes, intentando mantenerse en pie.

Dos de los encapuchados llevan un paquete grande a una mansión de la zona. El otro encapuchado se queda en la acera.

El mozo mira alrededor, como desorientado. Se da una palmada en la frente y se va en dirección contraria, tambaleándose.