Cloris
Ocupación: Suma Sacerdotisa del Templo de Afrodita
Cloris es una mujer de origen Ateniense, que lleva más de veinte años en Cítera. Aunque no fue ella quién llevó el culto de Afrodita a aquella pequeña isla, ha sido una de sus más fervientes adoradoras. Aunque es la más mayor de todas las sacerdotisas (pues ya cumplió más de 35 primaveras), sigue siendo una de las mujeres más hermosas y deseadas, no solo por su belleza, sino por su amplia experiencia y sabiduria. Es una mujer muy paciente, que sabe escuchar, y rara vez se la ha visto enojada. Mantiene siempre una expresión neutral, pero amable y a pesar de su seriedad, solo sonríe abiertamente en la intimidad.
El único amante conocido es su discípulo Orión, un joven que ofreció sus habilidades como guerrero al culto de Afrodita, y protege a todas las jóvenes novicias (y también a los demás sacerdotes) de cualquier ataque del exterior.
Orión
Ocupación: Guardián del templo de Afrodita
Este joven mancebo cuyos orígenes son desconocidos (pues llegó en un barco naufragado junto a su hermana Casiopea cuando eran dos bebés), entró a formar parte del hogar de la Dama Sibila, una dama que desde su juventud se dedicó a la crianza de jóvenes y doncellas que habían sido abandonados por los dioses. Este muchacho despertó el interés de la diosa Afrodita y así se lo hizo saber a Cloris, quién lo reclutó en el templo cuando cumplió la edad necesaria para participar en los ritos de iniciación. Así, además de guerrero, Orión se convirtió en sacerdote y todo apunta a que será el próximo líder del templo cuando Cloris se reuna con Hades.
No se le conocen amantes, puesto que Orión solo sirve a Cloris, pero es libre de ir con quién quiera.
Casiopea
Ocupación: Líder del templo de Poseidón
Aunque mayoritariamente el culto en Citerea se centra en Afrodita, existe un pequeño templo cerca del mar dedicado al dios Poseidón. Casiopea es hermana de Orión, pero nunca sintió la llamada de Afrodita, pues sabe que fue Poseidón quién los sacó del mar tras el naufragio de su barco y a él le debe la vida. Cuando Orión entró a formar parte de los adoradores de Afrodita, Casiopea se sintió sola y abandonada y se refugió en sí misma, encontrando en las orillas del mar una calma para su espíritu. Allí encontró a Poseidón y ahora está convencida de que es una ninfa de los mares .Todos tienen la sospecha de que Casiopea simplemente se dio un golpe al caer por el acantilado, y la consideran una loca, pero no pueden decirlo en voz alta debido a su parentesco con Orión.
Ahora, aunque pocos, está logrando levantar un pequeño culto en honor al dios del mar. Es la única persona en toda Citerea consciente de que si Poseidón quiere, podría destruirlo todo con solo alzar el nivel de las aguas.
No se le conoce amante alguno más que Poseidón, el que según cuentan todos, se le aparece a continuamente.
Friné
Ocupación: Hetaira
Friné fue encontrada cerca de la casa de la Dama Sibila, apenas dos días después de que Orión y Casiopea fueran encontrados. Sin embargo, ella nunca sintió la llamada de los dioses como los otros dos muchachos, a pesar de que se criaron los tres juntos y eran como hermanos. Mientras sus hermanos se marchaban, ella se quedó en casa de Sibila con las demás hermanas y hermanos, sintiéndose atraída por las enseñanzas de filósofos, artistas y demás iluminados que visitaban la casa (que no era otra cosa que un burdel), para convertirse en la mejor hetaira de toda Citerea. Un día, el druida Herodías pagó una cuantiosa suma de dinero para llevársela de allí y desde entonces, Friné vive en la casa que hay cerca del bosque con aquel misterioso personaje.
El único amante de Friné es Herodías, pero es totalmente libre de practicar sus artes con quién quiera. Si Orión es el hombre más deseado, Friné es la mujer por la que todos los mancebos suspiran.
Sibila
Ocupación: Dueña de "Los jardines de Afrodita"
Sibila fue una prostituta sagrada antes de llegar a Citerea. Servía en Atenas uno de los templos a Afrodita más grandes de todo el continente y allí ejercio como hetaira al servicio de la diosa hasta que decidió marcharse de allí. Arribó a Citerea hace más de veinte años y desde entonces, ha dedicado toda su vida a aplicar la experiencia conseguida en Atenas para criar muchachas y mancebos dignos de ser los mejores amantes. Es unos años mayor (más de 40), pero sigue conservando su belleza por lo que clientes y pretendientes tampoco le faltan.
Tiene amantes en todas partes, pero solo hay uno que ha podido estar con ella más de una vez, el herrero Laoconte.
Herodías
Ocupación: Druida
Es el único de toda Citerea con permiso para entrar en los bosques, pues ni siquiera a los druidas nómadas se les permite el acceso. Aunque su apariencia es la de un joven apuesto, no parece tener la edad que aparenta y muchos sospechan que ha hecho algún tipo de trato con los dioses. Pero Herodías es simplemente un aplicado chamán, un hechicero, un erudito, en resumen, la persona más sabia de toda Cítera y a la que todos buscan cuando hay que poner algún remedio.
Su amante más conocida es Friné, pero gusta de compartir lecho con cualquier mujer que lo desee.
Laoconte
Ocupación: Herrero
El mejor herrero de Citera, y casi podría decirse que de toda Grecia, con permiso de Hefestos, a quién lleva sirviendo desde su juventud. Su gran conocimiento de los metales y su pericia para la forja, han hecho de este viejo soldado todo un referente. Aunque ahora retirado de la milicia, es el encargado de entrenar a los jovenes soldados que protegerán las costas y los bosques de Citerea en caso de ataque, Ares no lo quiera.
Su única amante es Sibila, pero existe un nutrido grupo de mujeres que suelen rondarle, pues su experiencia, sus músculos y su fuera atraen mucho más incluso que el joven Orión, al que seguro vencería en un duelo con espadas.