Partida Rol por web

Suspiro, habia descansado un par de horas y me sentia mejor, sin embargo eso solo era fisicamente. Los gritos de los niños aun seguian vivos en mi mente atormentandome por mi decision -¿Debi ayudarlos mas?, ¿Pude haberlos salvado?- esas eran las preguntas que rondaban por mi mente. Sin embargo esas preguntas no iban hacer nada mas que distraerme, por lo que los enterre en lo profundo de mi mente. Ya algo recuperado me dispongo a salir de la cabaña; cuando de repente oigo ruidos provenientes del exterior. Con cautela me acerco a una ventana y observo quienes o que estaban cerca. Por el camino se acercaba, veloz, un regimiento del Ejército Real de Su Majestad. Me alegro, al fin algo bueno, salgo raudamente de la cabaña y trato de llamar la atencion de los soldados

El oficial ordena a sus hombres que se detengan, no te han reconocido pero no distinguen en ti una amenaza para ellos. A escasos metros de ti te pregunta quién eres y que vas buscando.

Le dices quién eres y cómo el monasterio del Kai ha sido destruido, y sientes como su rostro cambia de color. Tu información le entristece profundamente, pero son hombres curtidos y saben como reponerse. Te ofrece un caballo y te ruega que le acompañes a ver al Príncipe Pelathar, el hijo del  Rey, que se encuentra cerca de allí. 

1. Acepta ir con ellos.
2. Declina su oferta y sigue tu camino.

El grupo de caballeors de detiene a verme, parece que no me reconocen pro loqye le digo quien soy y lo que ha pasado con el monasterio del Kai. La noticia de la suerte de mi hogar los entristece profundamente, sin embargo se repone con rapidez. Generosos me ofrecen un caballo y me piden que los acompañe a ver al principe que se encontraba cerca. Siento que es mi deber informar lo sucedido en el monasterio a la familia real por lo que subo al caballo y aceptó u oferta de viajar con ellos.

Decidido montas en el caballo que te ofrecen y les sigues a la par que el capitán de los caballeros, galopando a buen ritmo mientras le cuentas lo ocurrido. Sabes por él que tu camino no es el único que se ha visto amenazado, y que ellos mismos ya han perdido buenos hombres en aquella guerra que acaba de comenzar. Cada vez más convencido de que tu información es de vital importancia pero sin saber que podrás cambiar, decides escuchar atento a los soldados y permanecer, por ahora, en silencio.

Justo entonces dobláis un recodo del camino dónde los árboles se abren, y ante tus ojos una feroz batalla tiene lugar sobre un puente de piedra. El choque metálico de las armas y los alaridos de hombres y bestias resuenan a través del bosque. En medio del combate ves al Príncipe Pelathar, el hijo del Rey. Lucha contra un gigantesco gourgaz gris que blande un hacha negra sobre su escamosa cabeza. De repente el Príncipe cae herido por una flecha negra que le atraviesa el costado. Los jinetes que te acompañan espolean a sus monturas raudos hacia la batalla y entablan combate. En la confusión de la acometida ves, desde algo más lejos, un camino que podrías atravesar con tu caballo hasta el hijo del Rey.

1. Carga y defiende al Príncipe caído.
2. Da media vuelta y huye al bosque.

De repente, se entablo una intensa batalla. El resonar de metales de escyha desde lejos, el príncipe y sus guardias combaten contra unas bestias. De pronto una flexha atraviesa el campo de batalla e impacta sobre el príncipe derribándolo del caballo. No podía dejar que otra muerte mas sucediera delante de mk, no después de lo qur había pasado con esos niños ñ. Espoleó al cabbalo y cargo raudo a proteger a los príncipe caído

Atraviesas al galope la distancia que os separa, y en el último momento, justo a tiempo, saltas del caballo y ruedas para ponerte frente al Príncipe. El gourgaz se gira mientras te pones en pie y de un golpe destroza a tu montura, que sale volando fuera del puente llevándose a varios combatientes junto al animal. Después, se enfrenta a ti. La criatura que tienes enfrente de ti es un reptil de sangre fría que habita en las profundidades de las traidoras marismas de Maakenmire. Su alimento preferido es la carne humana, y te has interpuesto entre él y su presa. Se dispone a atacarte, no habrá tregua, y debes librar contra él una lucha a muerte.

Gourgaz: Destreza en el Combate 20 ; Resistencia 30.

Tú: Destreza en el Combate 19 ; Resistencia 23.

Puntuación en el Combate: -1

EL combate fue arduo, sin embargo no fui capaz de mantener el ritmo. Un golpe del hacha traspasa mi defensa hiriendome en le pecho. -No puedo continuar- pense, no queria morir, pero parecia que ya era hora de reunirme con mis compañeros caidos. Veo que el monstruo vuelve a la carga para darme el golpe final y por unos instantes veo el monasterio antes de ser destruido en los momentos donde todavia habia paz. -Lo siento- digo en voz baja, antes de que todo desapareciera.