La guerrera elfa completó la tarea con rápidez, eficientemente ayudada por el reservado y poco hablador Anaxagoras. Escogió algunas prendas de ropa de los caidos y se las quitó con rápidez. Con gran economia de palabras dedicó unas palabras a las almas de los caidos, encomendadolas a la Dama de las Tumbas y se acercó de nuevo a Yargos.
"Le recomiendo que se cambie o cojerá una pulmonia. Tome." Tira le entregó las ropas que había separado. "Y, como va a tener que venir con nosotros..." La joven elfa recorrió con la vista los rostros de sus camaradas, estudiandolos en busca de alguna queja, antes de completar la frase."...espero que sepa defenderse usted solo." La guerrera se hizo a un lado para permitir a Yargos ver el pequeño arsenal que había recuperado y que le estaba esperando. "Escoja el arma con la que se sienta más agusto, Yargos... Va a ser una noche ajetreada." Tira le dedicó una sonrisa desprovista de todo humor antes de volver a tomar la palabra. "A menos que alguien tenga idea de donde encontrar el cuartel general de estos tipos, tenemos un problema."
Motivo: Saber Local
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 14(+6)=20 (Exito)
- Saber Local: 20.
Anaxágoras recuerda que hay una banda llamada los Sabuesos de la Guerra, quienes se rumorea sirven a un joven señor del crimen llamado Nessian. Se distinguen por un tatuaje que la gente describe de forma muy similar al que lucen los difuntos, y tienen fama de ser extremadamente violentos, incluso cuando no hace falta.
Dónde tienen su guarida es un secreto muy bien guardado (es decir, más allá de las capacidades de Anaxágoras).
No veo otra solución para averiguar dónde guardan el libro esos mal nacidos que recurrir a métodos de grueso calibre, dice Yargos.
Hay que recurrir al Gran maestre Antorcha.
Eso son palabras mayores. Antorcha es uno de los señores del crimen más poderosos de Absalom, y no de los de mejor talante. Ya era rarito antes de su 'accidente', pero después de él su carácter ha empeorado. Llevarle la contraria (no digamos enojarle) resulta sumamente nocivo par ala salud.
- "Me parece una locura tratar con maese Antorcha, pero si no hay más remedio supongo que tendremos que hacerlo..." -
y ese quien es? no me digas que saca la informacion necesaria a traves del fuego.
seria demasiado simple...
- "Es un peligroso señor del crímen de Absalom. Uno de los más poderosos y más intratables. Los que le llevan la contraria o le enojan desaparecen." -
-Justo nuestro tipo de persona- Espeta Tira, rezumando sarcasmo en cada silaba- Será muy aleccionador tener una charla con él.
La joven elfa envaina la espada con gesto cansado. Sostiene la mirada de Anaxagoras, evaluando por sus reacciones el peligro que supone realmente Maese Antorcha. "¿Tanto?" Tira escupe al suelo en un gesto muy poco femenino.
- Muy bien... Pues, a menos que alguien tenga una idea mejor, será mejor que nos pongamos en marcha cuanto antes.
La guerrera acomodó su escudo a la espalda y se ajustó los correajes de su impedimenta, preparandose para echar a correr de un momento a otro.
Yo sé dónde encontrarle, dice el erudito.
Pero cuando está a punto de empezar a hablar se interrumpe y pone cara de susto. Os dais la vuelta y veis lo mismo que él: unas luces destellantes en una de las partes más elevadas de la ciudad.
¡Mierda, eso es un código!, dice con un hilo de voz. ¡Joder, y es el de envenenar los graneros! ¡Hay que impedirlo! ¡Vamos, no hay tiempo que perder!
vamos!, pero explicate mejor quien como y porque!
Empezo a correr sin saber la direccion que teniamos que tomar, solo queria respuestas lo antes posible, si fuera posible antes de llegar al destino.
Sigo al grupo, aunque me siento tan confuso como el resto y eso seguro que se tiene que reflejar en mi cara.
Mientras trota a la cabeza de vuestro grupo calles arriba, Yargos dice: Una de las fases del intento de invasion, que corría a cargo de la quinta columna, era envenenar las reservas de trigo de la ciudad, que están en un granero de la parte alta. Eso debilitaría las defensas.
Shatumal está aturdido con tanta cháchara, pero asiente con la cabeza esperando que todo eso lleve a algo.
Cierro escena, pasamos a la siguiente.