Partida Rol por web

Una voz lejana los despertó. A medida que abrían los ojos pudieron notar a un par de policías que los llamaban.

-¿Niños? ¿Me escuchan? Despierten, por favor. Díganme algo.

Al ver que comenzaban a recobrar el conocimiento, los agentes comenzaron a ayudarlos a levantarse. El sol bañaba el suelo, haciéndoles notar que la iglesia estaba en ruinas.

-Que bueno que están bien. Todo el mundo estaba preocupado por ustedes. El señor Gonzáles caminó toda la noche para buscar ayuda.

Entonces los llevaron al patrullero e iniciaron la marcha. A medida que cruzaban las calles notaron que en realidad todo el pueblo estaba en ruinas. La casa del alcalde, el hospital, la escuela, todo.

-¿Como se les ocurrió meterse aquí? -dijo el agente- este pueblo fue abandonado hace años. La gente comenzó a volverse loca, ¿saben?. Contaban historias de fantasmas y maniquíes que se movían solos. Todo se volvió un caos. Algunos murieron y otros simplemente se fueron dejando todas sus pertenencias atrás. Ya nadie viene aquí. Sólo se nos ocurrió pasar porque el autobus estaba cerca. Por cierto, lamento mucho lo que ocurrió con sus compañeros. Debe ser muy duro ser los únicos sobrevivientes al accidente del autobus. Si necesitan hablar de ello sólo díganos.

Apenas desperte lo primero que hice fue buscar a Maggie pero al levantarme vi que estabamos todo y al parecer era de dia y habia unos hombres que....

- Policia?

La recordaba muy bien. Eran parecidos a los que me habian encontrado cuando mis padres murieron y .... la sangre.....

- Nos atacaron!!! Era terribles monstruos que comian carne....

Comence a hablar de manera acelerada y sobre saltada..

- Y ... Y ... agarraon al niño y le arrancaron la piel....

- Y... y... entonces mi muñeca quedo bajo el escritorio...

Cada vez mas rapido o entrecortado.

- Y subimos y ... y ... y... entonces salimos por un hueco...

Movia las manos de un lado a otro como agarrando ideas del aire.

- Entonces Oscar agarro la muñeca de la niña loca!!!!

Ahora miraba al suelo como para asegurarme que nada saldria alli.

- Eran monstruos que salieron de la tierra y estaba mi mama y el papa de ....

Y asi continuo por un buen rato hasta que otro de mis compañeros hablo.

Desperté al escuchar la voz de los agentes de policía. Abrí mucho los ojos, sorprendido. Nos encontrábamos en la iglesia, pero ya no había ni rastro de Carlota ni de los muertos. ¿Habría sido una pesadilla? No, no, estaba convencido de que tenía que haber sido real. Todas esas muertes... Había sido real.

Brianna había comenzado a explicarle lo sucedido al policía. De haber sido una adulta, lo más seguro es que el hombre la hubiera tomado por loca. Era algo que solía pasarle a mi papá cuando se pinchaba agujas en el brazo, decía cosas que hacía que lo tomásemos por loco. Por suerte, al ser una niña, lo más probable es que el policía pensase que lo que decíamos solo eran "cosas de niños".

Además, seguro que el señor policía era un incompetente y no le daba mucha importancia, como los policías que aparecían en las películas que veía cuando vivía con mi familia.

-¿Qué ha pasado con nuestros compañeros? -pregunté, extrañado. Nadie había muerto en el autobús ni había habido accidente alguno-. Diego, Florencia, Fernando, Carlos David y Darrow... -Enumeré a los fallecidos, recordando apenado cómo el valiente Diego se había sacrificado para salvarme-. ¿Los han encontrado? Ellos vinieron con nosotros aquí, al pueblo... ¡Y había un maestro asesino! -recordé, nervioso, recordando al profesor Martín, que tanto nos había perseguido a través de la escuela-. Se llamaba Martín y estaba loco... ¡Dígannos que lo han detenido!

En más de una ocasión pensó que le atraparían. Eran muchos y sus brazos largos, pero Marcos estaba acostumbrado a esquivar golpes. Muchas veces se escapaba y siempre costaba volver a atraparlo. Lo cierto fue que lograron llegar hasta Carlota y la muñeca tuvo el efecto deseado. La niña pareció alegrarse inmensamente al tenerla otra vez con ella y hasta su rostro se pareció al de una niña normal. Luego todo se volvió negro para el chico.

Un policía le despertó, mirándole con ojos preocupados e intentando sonar calmado. Tuvo un déjà vu, pues fue muy parecido a lo que sintió cuando le encontraron. Solo que ahora tenía muchas más fuerzas que esa vez. Se mantuvo callado durante todo el trayecto, oyendo lo que decían y arrugando el ceño con rabia.

-Otra vez llegaron tarde- dijo a pesar de que se sentía bastante más seguro en esa patrulla-. Siempre llegan tarde- sintió un escalofrío cuando sus ojos fueron pasando por todos esos lugares horribles por los cuales habían ido recorriendo-. ¡Hey! Frene aquí- dijo al ver la escuela en donde el tenebroso maestro había destrozado la cabeza de Fernando. Había una forma de saber si lo vivido era real, solo tenía que encontrar la muñeca de Brianna que estaba en la primera habitación. De paso le devolvería su juguete…

          - Mueran malditos monstruos!    Dejen en pas a mi hermanita y mis amigos! -    Grito Simone asustada paro tratando de no demostrarlo demasiado mientras que trataba de quemar a todo lo que se le cruzara hasta que la oscuridad la envolvió y así gritando despertó cuando los policías los despertaron y evidentemente confundida tardo un momento en guardar silencio y recobrar la calma y sin limpiar se las lágrimas sonrió cuando pudo entender lo que pasaba e ignorando lo que le decían los oficiales abrazó a Maggie su hermanita por varios minutos, cuando terminó hizo lo mismo con Brianna, Oscar y Marcos finalmente .... tratando de calmar a cada uno de ellos antes de razonar siquiera una palabra, solo cuando lo logró besó a Briana y le dijo:

           - Muchas gracias por apoyar y acompañar a Maggie! -    Entonces le sonrió un poco mas tranquila, pero cuando escuchó las palabras de Oscar asintió y corroboró sus palabras diciendo a los oficiales una mentira mas lógica para que no los creyeran locos:

              - Después de salir del camión vimos a un hombre que mató a uno de los niños y decía ser un maestro Martín, por eso nos venimos a esconder aquí .. -    Cuando ya los habían subido al auto y Marcos reaccionó molesto por el retardo de los policías la niña explicó antes de tomar el hombro de Marco:

              -  Por allí fue donde vimos a ese hombre!   Por favor no vayas a bajarte  Marcos, debemos irnos simplemente de aquí! -   Dijo agotada emocionalmente Simone, pero tratando de que el chico no corriera por su cuenta 

El agente los miraba con incredulidad.

-No se preocupen -dijo el finalmente tratando de cambiar su expresión por otra más comprensiva- Han vivido una experiencia horrible. Esta bien inventar una historia alternativa para no enfrentar la verdad. Cualquiera lo haría en su lugar. Con el tiempo será más fácil, ya lo verán.

Cuando pasaron por la escuela, de la que ya solo quedaban un par de paredes en ruinas, detuvo la patrulla ante el pedido de Marcos y pensó en dejarlos bajar un momento, pero cuando mencionaron a un profesor asesino lo pensó mejor.

-De acuerdo, esperen aquí. Enseguida vuelvo.

El agente bajo de la patrulla y recorrió las ruinas. En un rincón se agacho y recogió algo que no lograron ver. Luego regresó.

-No se preocupen. Ese hombre malo ya se fue. Pero encontré esto -dijo mientras les mostraba la muñeca de Brianna- Es tuyo verdad -dijo al ver la expresión de la niña- Aquí tienes.

Entonces le entregó la muñeca y reanudó la marcha.

Aunque no le gustó mucho el no poder bajar por si mismo, el policía no ignoró sus pedidos, incluso se las arregló para encontrar la muñeca de Brianna. Casi se podría decir que era alguien competente. Aunque el estado de la escuela sorprendió al chico, pues ahora se la veía mucho mas destrozado, como si se hubiera derrumbado.

-No entiendo- murmuró derrumbándose en su asiento y con el ceño fruncido de frustración-. Mejor nos vamos.

​Al parecer, si creían en la version del policía, habían tenido un accidente, aunque no entendía como habían tenido todos el mismo sueño. Se sentía muy cansado, así que solo se dejó llevar por el movimiento del automóvil, preguntándose una y otra vez si aquello había sido real o si sus psicólogos tenían algo de razón.

Era realmente extraño. El policía había conseguido encontrar la muñeca de Brianna, lo que indicaba que no había podido ser un sueño. Todo había sido real, nuestros compañeros no habían muerto en un accidente y todo lo que habíamos vivido, desde los maniquíes a Carlota y los espíritus de nuestros padres, todo aquello había sido real. Además, ahora el pueblo se hallaba en ruinas, como si el hecho de que la maldición de Carlota hubiera terminado fuese el detonante para que todos los edificios se vinieran abajo.

-Una pena que al final no pudiéramos ir al acuario a ver delfines -dije, observando la ruinas del colegio, con desconcierto.

Fuera lo que fuera que había pasado, lo mejor era que lo mantuviésemos en secreto. Las muertes, los fantasmas, el terror... Nos tomarían por locos si se lo contásemos a alguien. Habíamos sobrevivido, eso era lo importante.

La actitud del policia era desconcertante pero ya sabia como eran los adultos. No habia nada que hacer.

Cuando me trajo mi muñeca me quede mas confundida aun. Sabia que los otros compañeros estaban muertos y ademas recordaba que mi muñeca habia quedado en una de las primeras habitacion donde murio....

Como habra llegado aqui?

No tenia importancia ya. Nadie nos iba a creer y ademas ya no era una niña, no mas. Se la regale a Maggie.

- Te cuidara como lo hizo conmigo.

Al final tambien me quede pensando en los delfines añorando lo que pudo ser y nunca seria.

Pero estabamos vivos.

         - Tienes razón Oscar, pero te aseguro que juntos iremos a ver a esos dichosos delfines! -    Respondió Simone un poco mas alegre al responder al chico viendo que Marco había decidido esperar junto a ellos y cuando regresó el oficial con la muñeca también llegó a la conclusión de que no habían tenido una pesadilla colectiva simplemente y sonrió a Brianna al reconocer el detalle con su hermanita, entonces abrazó a ambas mientras que le susurraba al oído: 

         - Si nos permites Brianna con gusto te consideramos de la familia .... a todos ustedes chicos y pueden contar con que yo siempre defenderé a nuestra familia! -      Dijo al final en voz alta antes de poner una mano entre ellos esperando que pusieran las suyas sobre la de ella para comenzar un pacto sagrado, sin importar que el oficial se burlara de esas cosas de niños que seguro nunca entendería realmente, no solo por ser adulto, sino porque no vivió lo que ellos

Maggie recibió encantada la muñeca de Brianna y todos continuaron con el viaje.

Luego de un rato el oficial tomó la radio y comenzó a transmitir.

-Atención a todas las unidades. Encontramos a los sobrevivientes en el pueblo. Repito encontramos a los sobrevivientes. Nos disponemos a salir del pueblo. ¿Cómo van con el autobus? Cambio.

Al poco tiempo una voz en la radio respondió:

“Enterado. Ya retiramos todos los cuerpos del autobus. Cambio.”

-Excelente. No quiero que los niños se encuentren denuevo con los cuerpos de sus compañeros. Ya fue bastante traumático la primera vez. Prosigan con la búsqueda del asesino desollador. ¡Quiero a ese malnacido tras las rejas cuanto antes! Cambio y fuera.

Y así fue como, según la historia oficial, los niños habían quedado inconscientes luego del choque y un loco, al que nunca atraparon les había arrancado la piel. Efectivamente, David, Darrow, Diego... todos los niños que habían visto morir realmente habían muerto. Pero los niños sabían la verdadera causa de sus muertes. Prefirieron guardar esa experiencia para sí mismos. Nadie les creería. Ese secreto compartido los unió fuertemente durante los años siguientes en el orfanato. Brianna aceptó encantada ser parte de la familia de Simone y Maggie. Maggie a su vez, estaba muy contenta de tener dos hermanas mayores. Marcos aprendió que era mucho más fuerte de lo que pensaba y no tenía nada que demostrar. Eso lo volvió un poco menos agresivo con los demás. Simone continuó protegiendo a Maggie y a su nueva hermana incluso durante su vida de adultas. Oscar nunca olvidó a Diego, el niño que dio su vida para salvarlo. En general, todos recordarían para siempre a Brumasbajas y la triste historia de la pequeña Carlota.