Partida Rol por web

INTRO. Los Jugadores son un grupo de comerciantes (o contrabandistas, lo que se tercie), que se encuentra en una estación portuaria de Gryyyl, entre los planetas Kashyyyk y Trandosha (sistema Kashyyyk). Han detenido su carguero para arreglar su hiperpropulsor, averiado en su último viaje. Sin embargo, no tienen dinero para repararlo, pues no han logrado cobrar el cargamento de mineral de Ikrausita-r40 que transportan hacia Dantooine. Además, el cargamento es tan valioso que atravesar el espacio sin el motor de hiperpropulsión arreglado es servir su cargamento en bandeja a otros piratas. Por ello necesitan pasta y cualquier oportunidad que se presente podría ser un buen negocio, de momento, para llevar a cabo las reparaciones.

1. La contratación: Antes o después, el grupo es contactado por Girad Tosk, un trandoshano que les pide que le lleven a Sharpalis, octava luna del planeta Kuhurrik, el último de ese mismo sistema. Tosk va acompañado de Yalla Ril, una mujer twi'lek (ambos van armados), y el pasaje son ellos dos más un droide que no está, en esos momentos, allí con ellos (pues es de suma importancia). Deben entregar un mensaje a un conocido. En el momento del embarque, Tosk se presentará con R2-F9, un astromecánico.

2. Viaje hacia Sharpalis: un carguero les perseguirá y los atacará en pleno vuelo, tratando de derribarles a toda costa. Se trata de una lucha espacial. Tras este punto, Tosk podrá confesar que los atacantes son miembros del Clan del Aullido, un clan de cazadores trandoshanos al cual antes él pertenecía (por eso cree que quieren destruirle), cuyo campo de caza es la luna Sharpalis. Tosk hubo de huir del Clan al mostrar piedad ante una víctima de cacería al que no tuvo el valor de matar (que en realidad no sabe que es un joven sensible a Fuerza).

3. La marcha por Sharpalis: Sharpalis es una luna fría y rocosa, un cubo de hielo con montañas de piedra negra y algún que otro volcán activo. Según Tosk, el joven estaba recluido hacía un mes planetario en las enormes cadenas montañosas de Julkaril. Los peligros de ir allí serán criaturas nativas (tipo hielo), y los propios Trandoshanos cazadores. Una vez encuentren al muchacho, Yalla traicionará al grupo y dará la alerta a una guarnición de Moff Gideon, quien busca desesperadamente el poder Jedi de cuantos sensibles a la fuerza haya. El combate final puede darse contra Stormtroopers o con cazas espaciales (según se vaya dando). Si la cosa se tuerce, aparecerán sobre la superficie del planeta (o donde estén) naves de la Nueva República llegadas desde el hiperespacio tras activar la baliza y auxiliarán a los PJ.

Explicaciones. El mensaje a entregar es... inexistente, pues en realidad el propio droide R2-F9 (droide de la Nueva República) contiene en su interior una baliza republicana para hacerla llegar al joven sensible a la Fuerza atrapado (y perdido) en Sharpalis (un muchacho de unos doce años llamado Tanbir Ridaur). De esta manera, una vez lo encuentren la baliza se activará, y la Nueva República podrán dar con él y rescatarle.

Por su parte, Yalla es una mercenaria contratada por la Nueva República encargada de proteger al droide hasta llegar al destino (la Nueva República contrata a sus propios mercenarios, pero no se fía al 100% de ellos como para entregarles mercancías o artefactos de importancia, por lo que ni tan siquiera sabe que el droide lleva una baliza). Lo único que ella sabe es que los créditos estipulados por la Nueva República como pago se activarán a su favor cuando el droide llegue a su destino, es decir, el muchacho perdido. Yalla logró averiguar sobre la existencia de Tosk tras su huida del Clan del Aullido, y le ha pagado para que haga de guía hasta el muchacho. Claro que, el Imperio, al saber de este negocio, le ha ofrecido una cantidad mayor (de ahí la traición de la twi'lek).