Asentí, sin haber comprendido del todo qué decía aquel ser extraño.
- Gracias a ti. - Respondí, sin saber bien qué decir.
De repente se generó una especie de silencio incómodo. El arlequín te miraba, y eso te ponía nervioso.
- Oh ladrón de Bahía Perdida... necesito que me escoltes hasta la salida - sin quererlo había hecho un pareado.
- ¿Podrás completar tu misión y ayudar a éste pobre arlequín? -
- Por supuesto. - Le respondí. - Pero por donde yo he entrado hay una trampa difícil de sortear. Quizá debamos buscar otra salida, ¿no crees? - Dudaba de si aquel ser sería capaz de seguir mis pasos por entre las cuchillas mortales, así que dejé en el aire la pregunta, a ver cómo respondía.
El arlequín asintió
- Seguiré tus pasos allá donde vayas -
Ahora toca tomar la decisión de volver por tu camino o seguir explorando la cueva en busca de una salida alternativa.
Si siguiera escrupulosamente mis pasos, pasar por la trampa de las cuchillas no iba a ser opción. Si tenía agilidad e iniciativa propias para esquivarlas, entonces sí teníamos alguna posibilidad. Pero podía encontrarme que el arlequín muriera en las cuchillas y así no pudiera completar la misión.
- Seguiremos adelante. - Le dije con determinación. - Debe haber alguna otra salida. De lo contrario, siempre estamos a tiempo de volver por aquí.
Y con esa idea en mente, comencé a caminar, con una extraña sombra siguiéndome.
Avanzaste por la caverna seguido por el Arlequín. Por suerte no te topaste con ningún enemigo, al igual que tampoco ninguna trampa se cruzó bajo tus pies.
Tras estar un rato explorando llegaste a una cámara que te llamo la atención por tener un trono de piedra pegado a la pared. No estabas seguro del todo pero parecía que había algo escrito sobre el.
Me acerqué al trono de piedra, con la cautela y la prevención propias de estar en un lugar que puede estar lleno de trampas inverosímiles.
Leí la inscripción.
"Aquí yace la Corona de Poder, junto al trono de su legítimo dueño"
Llamé la atención del arlequín y le leí la inscripción del trono.
- ¿Qué sabes tú de esto? - Él dice haber sido guardián de la Corona, así que supongo que sabrá explicarme la historia de este trono y el porqué de la inscripción. Supuse que aquí estaría la Corona justo antes de que aquél que la consiguió lo encadenase tal como me lo he encontrado, pero prefería escucharlo de su boca, antes que dar nada por supuesto.
El arlequín se acercó al trono y pasó su delgada mano sobre el.
- Aquí yacía la Corona de Poder en los orígenes, donde un Rey pudo gobernar a todos los pueblos con sabiduría - parecía melancólico.
- La avaricia y la sed de poder corrompieron la voluntad de la Corona, ahora está en manos de alguien que prefiere abusar de su poder que para devolver a su lugar de reposo -
- ¿Y tú? - preguntó mirándote.
- ¿Qué harías con la Corona de Poder? -
Sonreí al arlequín. - Sinceramente, no lo sé. - Pensativo, me dejé caer sobre el trono, sentándome en él para concentrarme en mis cavilaciones. - De momento, para mí es sólo un reto, aparentemente inalcanzable, y no me he planteado qué haría de conseguirla. La vida te cambia a cada paso y sólo cuando la tenga entre mis manos sabré qué haré con ella. - Sentí bajo mi cuerpo la confortabilidad de aquel trono de piedra, diseñado para un verdadero rey.
Quería probar de sentarme. Si no pasa nada, me pongo en pié y continúo caminando.
El arlequín se quedó mirándote, parecía que estaba analizando tu respuesta. Mientras seguía el silencio, te sentaste en el trono. No ocurrió absolutamente nada, de hecho parecía un trono de piedra la mar de corriente.
Cuando continuaste caminando el arlequín te siguió como alma en pena...
Haz una tirada de advertir/buscar
Continué el camino, tras descansar los pies unos instantes en el trono de piedra.
Tirada oculta
Motivo: P + Adv. / Buscar
Dificultad: 0
Habilidad: 9
Tirada: 1 3 5
Total: 3 +9 = 12 Éxito
Seguiste avanzando hasta que el HUD te avisó de otra amenaza. La siguiente cámara que había más adelante tenía también el suelo marcado en rojo. ¿Otra trampa? eso parecía. Pero no tenías ni idea de qué tipo.
Por suerte existía un camino alternativo para explorar la cueva, ¿qué harías en una situación así? Al menos el arlequín parecía esperar pacientemente.
Tal como hiciera la otra vez, busqué una piedra suficientemente grande y la arrojé dentro de la zona marcada con peligro, esperando a ver qué sucedía.
Tirada de pericia s'il vous plaît :^P
Motivo: D + Pericia
Dificultad: 0
Habilidad: 11
Tirada: 2 8 9
Total: 8 +11 = 19 Éxito
Hecho! :D
Al tirar la piedra y contactar contra el suelo, esta quedó totalmente desintegrada. Abriste los ojos de par en par porque en comparación con la trampa de las cuchillas, esa era muchísimo más mortífera.
La buena noticia era que la franja roja del suelo había desaparecido por completo ¿estaría totalmente desactivada?
Ando intentando sacar hueco para responder >_>
No me creí que la trampa estuviera totalmente desactivada. Parecía más que tardaba un tiempo en volver a activarse. Así que, mientras esperé a que se volviera a mostrar la zona roja, busqué otra piedra para volver a lanzar cuando eso sucediese y, así poder atravesar sin peligro.
También traté de dilucidad la longitud de la zona de peligro, para ver si sería capaz de recorrerla en el tiempo necesario.
Así, con la piedra en la mano, acompañado del extraño arlequín, esperé.
Siento haber tardado tanto, supongo que con tu anuncio de semi-out, me relajé con tu partida. Sorry. U__U
Esperaste un tiempo prudencial y lanzaste otra piedra.
Fue gratificante para ti comprobar cómo no volvió a aparecer otra marca roja ¿entonces eso aseguraba que ya habías solventado el problema?¿o era una trampa dentro de otra trampa?
- ¿Va todo bien, oh salvador de Bahía Perdida? -
No tienes de qué preocuparte, eres tú quien marca el ritmo, yo solo me adapto :D