Partida Rol por web

Los organizadores trataron de averiguar si se había quedado alguien dormido - ¿Alguien dolmil? - Preguntó Laura, pero al darse cuenta de que se le había pegado el acento del dicho se propinó una auto cachetada ella misma.

- Bueno chicos, que no decaiga, ya estamos en la recta final... no hay que bajar  los brazos no se sabe que puede deparar el siguiente guardamueble. Ley de vida... - Tras posar para una estúpida foto más en un pasillo lleno de trasteros se encaminaron a la siguiente puerta. Donde el operario en vez de cortar el candado cogió un soplete y cortó la puerta alrededor del candado, Era un método no muy ortodoxo, pero igual de efectivo.

Pues dormida lo que se dice dormida no es que estuviera. Antes todo lo contrario, con esa cara roja, los labios apretados y los ojos que parecía que iban a salírsele de las órbitas. En cuestión de dos trasteros el chino se había forrado. ¡No era justo! Ah, pero aún había tiempo de recuperar. Y el primer paso era acercarse a otear el siguiente trastero.

En completo silencio para evitar que la gente pensara que estaba interesada lo más mínimo, Brittany se acercó a mirar qué había allí dentro.

Un nuevo trastero, y una nueva oportunidad de compra.. y ventas. 

Después de poner a sus sobrinas a ordenar sus ganancias, tras cambiarlo a yenes

^{Sobrinas en plena acción construyendo torres de dinero para enviarlo a Beijing}

Se asomó al trastero, a ver cómo podía hacerse con él tan fácilmente como el anterior.

Joder. En su intento de chiste, Laura había dado en el clavo. Me había quedado roque, dormido como una marmota, como un tronco, como un lirón...
Como un maldito idiota que le acaba de regalar el trastero al chinotauro.

Ahora sí que me había cabreado de veras. Me haría con este trastero aunque tuviera que empeñar el John Deere.

- ¡Abrid paso! - Dije ahogando un bostezo y frotándome los ojos por encima de las gafas; lo que estuvo a punto de producir la rotura y caída de las mismas en ese orden.

Los pujadores por una vez se aproximan de forma más ordenada. Pero muestran rostros más serios y de concentración. Este podría ser un trastero crucial debido principalmente a que solo quedan dos. Pero la pregunta es... ¿Conseguirán valorar el interior para poder actuar en consecuencia?

Ahora es Dan, la alegría de la fiesta el que ayuda al operario a abrir la puerta – Bien chicos quién da cincuenta?

Parece tratarse de otro almacén que huele "raro" ¡Y también con sacos! Qué deja vu ¿No? Aunque este no huele tan mal como el anterior, si un poco. A parte de los sacos hay como unos artilugios de metal, mejor dicho, muchos artilugios de metal ¿Pero de que se trata?

Esto tiene pinta de ser material de primera para la granja de mis padres.
Y si no lo es, tampoco se iban a dar cuenta.

Aunque no me gusta cómo mea la perrita, ha llegado el momento de jugarse el todo por el todo para poder llevarme el trastero como sea.

- ¡Doscientos machacantes!

-¡Hey, Falmel! ¡Tú despeltal pol fin! ¡Pelo esto aún no estal desidido, nada! ¡Yo oflesco... quinientoh! -dijo Huan Cho. Ahí, apostando por el chiringuito.

 -Vosotros dos iros a tomar algo juntos, que yo me ocupo del trastero. ¡Seiscientos para mí, caris!

Y un jamón en pepitoria se iban a llevar este guardamuebles barato. Si no se lo llevaba ella, ya se encargaría de inflarles un poco el precio.

Jay primo, qué caro me va a salir el regalo para los papas.
No obstante, como dice el refrán, "el que algo quiere, mucho le cuesta".

- ¡Setecientos pavos aquí!

Otra subasta que se dirime en unas pocas pujas. ¿Le estarán pillando el tranquillo a esto? En esta ocasión es un “no oriental” el que consigue quedársela. El señor Farmer, curioso apellido y casualidad, comprueba sus ganancias.

En el trastero encuentra… Sacos para pienso, no es que valgan mucho, pero se les podrá sacar 50 pavos. Hay unas jaulas, para animales, tal vez para gallinas, conejos o pájaros. Están usadas, pero quizá se puedan vender de segunda mano. Hay cuatro, a cincuenta pavos cada una: doscientos. Al fondo hay algo cubierto por una lona - ¡Oh my God!

- ¡Oh my God! - Se trata de un trasto enorme y pesado ¡Un arado! lo puedes poner a la venta por 1500 o consultar al amigo listorro de turno ¡Tu decides!

Otro refrán cumplido... "Si no desespero, llega mi trastero"... ¿O no era así?

En todo caso, ya tenía un guardamuebles en mi poder, ¡y menudos objetos había en él! Era todo lo que mis padres podían desear (aparte de una mansión en Florida para jubilarse).
El arado era magnífico, una buena pieza y podría ser incluso artesanal, así que decidí llamar a mi padre para que lo evaluara y de paso se lo llevara todo a la granja en su camioneta.

-Jaja.. ¡bien pala el tuyo tlactol! Menos mal que yo dejal a tú la puja, jeje. Tú pala sel felís quieles tlactol.. con arado, jaja. El plóximo tlastelo.. velemos.

El senior de los Farmer se presenta tras la llamada de su hijo. Que velocidad en llegar ¿Verdad? Es la magia de la televisión.

- ¡Esto no es un arado, meloncio! Se trata de un MOTOCULTOR PASQUALI MOD. SB28 POWERSAFE Con engranajes y tornillo sin fin en baño de aceite ¿¡Cómo no te habías dado cuenta?! Eres la oveja negra de la familia – Dice mientras se sujeta a su bastón

- ¡Vale, lo que tú digas! - Le comenta el concursante sin idea de lo que le está contando - ¡¿Pero y la pasta?! ¿Cuánto vale?

- Bueno, está tasado en... en.. umm.... - ¡Vamos que me da un colapso! - Dos mil quinientos pavos

Asiento con cara de bobo mientras Pá me atiza una colleja que casi me hace saltar las gafas.

- Pero páaapa, si ya lo sabía, era para que vieras los tesoros que consigo en esto de las subastas...

En fin, parece que nunca me va a perdonar las decisiones que he tomado respecto a mi vida laboral. Espero que el regalo de los sacos y las jaulas lo aplaquen un poco. Y, según como se porte, ya veremos si le regalo el arado-motocultor o no, jejeje.