Partida Rol por web

volteo sorprendido ante el aumento de puja de Britt y de Maccoy, ultimamente se estaban disparando demasiado las pujas y no queria que fuera mal negocio para su compañera  socia, abro los ojos con algo de preocupacion...

miro asorado a los pujadores, era impresionante como se disparaban las pujas... pero sigo ofreciendo licor y tomando... preocupado por el poco excito que estoy teniendo en estas pujas...

La puja sube en los últimos momentos y en esta ocasión es el sector femenino el que se lo queda.

- ¡Adjudicado a Brittany por mil seiscientos! Puede pasar a comprobar sus pertenencias – Dan dio un par de palmadas y al vez que nadie más le sigue en el aplauso se le queda la sonrisa congelada en el rostro y luego saca un pañuelo para hacer como que se limpia el sudor.

La concursantre abre las cajas de cartón, en una hay copas y jarras, 50 pavos, en la otra hay botellas de vino, se podría estudiar más, pero al menos otros 50. El armario del fondo es un frigorífico para las botellas de un bar, parece funcionar, 400 pavos. Lo alto y estrecho de la pared es una maquina de jugar a dardos 600 pavos más. Quitas la lona que cubre la mesa y … ¡Sorpresa! Repetición de como quitas la lona de la mesa y... ¡Sorpresa! Resulta que es una mesa de billar en perfecto estado. Con sus tacos y demás.. 500 pavos. Puedes dejar el tema así o consultar con tu amigo experto en vino, lo que vendría a llamarse sumiller

 -¡Bien!

Dando una palmada y con una enorme sonrisa Brittany se acercó corriendo a comprobar sus nuevas pertenencias. No sólo había ganado el trastero, también había demostrado a esos gañanes derrochadores que las mujeres sabían jugar fuerte también.

Empezó a mirar las cosas sorprendiéndose de encontrar material en buen estado y de buena calidad, lo suficiente como para cubrir gastos. Aquel trastero parecía ser lo que quedaba de una de esas “cuevas de hombres” con su billar, sus dardos y sus bebidas. Precisamente eran esas bebidas las que más dudas le daban. Estaban en buen estado y si el dueño planeara consumirlas pronto no las habrían guardado en el trastero. Así que si las guardaba para una ocasión especial… Tenían que valer mucho, ¿no? ¡Arg, demasiada presión para sus siliconadas neuronas! Lo mejor sería consultarlo con un experto. Después de todo, para tasar muebles y joyas ya se bastaba ella solita.

-que hay? puedo pasar a chusmear señora?...- mira desde afuera miguel muy intrigado, se ve bueno aquel trastero, le gusto mucho la mesa de billar...

 -Claro cari. Y si ves algo que te interese y quieras comprar, mejor.

Porque las cosas de cueva para hombres había que vendérselas a un hombre, ¿no? Además, mientras Miguel miraba, ella iba guardando bien las botellas de vino para evitar que se rompieran durante el viaje al local de su amigo Fransuá, que sabía más de vinos que ella de coloretes.

-seguro, hermosa mesa de billar...-

-

...sale pronto para ver como están sus mascotas...

Brittany lleva la caja con las botellas de vino a tu amigo Tom, haces acopio de tu fuerza de voluntad para no hacer botellón por la calle y que lleguen todas sin abrir.

Llegas y le enseñas el género - ¿Y bien, qué me has traído? - Inspecciona las cajas y le cuentas un poco lo del trastero y que quieres que te valore el vino - Esto no es vino. Esto es sangría Don Pimentón. De las que se encuentran en el súper mercado. Veinte botellas a un euro cada una , veinte pavos. ¿Abrimos una y hacemos una fiestukis?

-Jajaja.. ¡con eso hasemo en china la salsa agridulse! Enhorabuena a tú -Huan Cho se inclina ante la compradora más reciente