¡¡¡BBBBRRRRRRRMMMMM!!!!
Los dos vehículos "pusieron pies en polvorosa", un derraparon súbitamente para dar la vuelta al camino y marcharse a todo trapo por donde habían venido, aquel camino. Pero... Un momento... ¿"Explosión y posterior incendio" había manifestado aquel sujeto por la radio? ¿Qué explosión? ¿Qué incendio? En esos momentos mientras se alejaba uno de los todoterrenos una cerilla salió de una de las ventanillas, yendo a parar al coche impregnado de líquido:
Una tremenda explosión, breve pero intensa, hizo retumbar el vehículo de los psicópatas provocando una alarde de llamas y humo negruzco. En poco tiempo, y ante vuestra atenta mirada, el coche quedó reducido a su estructura mientras ardía. Ceniza, pintura y un olor a quemado inundó la escena.
Fue entonces cuando aceleraron del todo, y cuando aún no habíais acabado de perder de vista aquellos dos vehículos a toda velocidad por el camino polvoriento, otro gemido estruendoso os arrebató la calma que parecía haber quedado:
Vísteis, sobre la copa de los árboles, cómo algo ardía mucho más llameante que el coche. Era... ¡Era la casa del guarda forestal! Parecía como si hubieran colocado una bomba y la hubieran hecho estallar... Debido a los materiales de aquella vivienda, el fuego se elevaba casi a una decena de metros de altura y podía verse a mucha distancia a la redonda... Ahí quedaba la explosión.
Y vosotros... bueno, ahí continuábais, todavía casi con las manos en alto. Aún estábais asimilando lo vivido, incomprensiblemente... vivos.
En esos momentos Troy no era consciente de lo que estaba ocurriendo.Su mente volaba por otros lares evitando así el tener que soportar la insoportable espera anterior a la muerte.Primero se esperaba la fría sensación del peso de la ley en sus muñecas en forma de esposas, pero al notar que pasaban los segundos y estos no ocurría llegó a la más simple conclusión, simplemente los matarían y los harían desaparecer.Así pues acto seguido esperaba escuchar el ruido de las pistolas siendo disparadas, pero no llegaba nada a sus oidos.
Fue en ese momento se digno a elevar su mirada desde el suelo desinteresádamente y observó todo aquel percal.Algo ocurría con esos tres psicópatas, quizás serían experimentos del gobierno o poseían algo en su interior único y que el gobierno buscaba pues claramente esos tipos no podían pertenecer a cualquier otra organización.Por supuesto no debía haber prueba alguna de ellos, y lo quemaron todo incluida parecía ser la casa del guarda bosques el cual parecía tener relación con esos tres.
Se levanta costósamente, se sentía cansado tras un largo y duro día lleno de persecuciones, carreras y mucha violencia, sin embargo no se les daba tregua alguna y ahora se encontraban ante otro problema, seguramente igual de peligroso que los demás y sin duda sería la muerte más dolorosa o entre las más de todas, morir calcinado entre aquellas llamas.No había otra opción que correr pero viendo a sus acompañantes lo tendrían difícil para salir de esta.
Sin pensárselo dos veces se arranca una larga tira de su sudadera e improvisa usándola como benda para tapar presionando severamente la herida de Samantha sin esperar alguna pregunta ni respuesta pues no quedaba tiempo.Viendo su estado, debería cargar con ella, era el más indicado pues Phil no parecía estar tampoco para muchos trotes teniendo en cuenta también su edad.
-Corramos....- no pudo decir nada más ante tal circunstancia.Sin duda el terreno no se les presentaba favorable, pero no había otra opción, huir o morir en aquel asqueroso y tenebroso bosque.Se preocupa por que Samantha se suba a su espalda cargando con ella debidamente antes de salir por patas de aquel horrible lugar.
Como en un sueño Samantha escuchó las voces y los ruidos a su alrededor intentando saber qué estaba pasando allí. Si aquellos hombres no los iban a matar, entonces... ¿por qué nadie la ayudaba? Con gran esfuerzo abrió los ojos lo justo para entrever las llamas que se alzaban cada vez más altas y un olor a quemado golpeó su nariz. Intentó incorporarse a la vez que una fuerte explosión estremecía el bosque y a ella también.
Sintió como alguien la sujetaba y vio a Troy vendándole la herida.
- Gracias... -susurró apenas con fuerzas. Y con gran dificultad se subió a la espalda del hombre para salir de allí corriendo, antes de que ellos también ardieran junto con el coche, la cabaña y los árboles de su alrededor.
Cerró los ojos apretándolos con fuerza en parte para evitar el humo y en parte para olvidarse del dolor que iba en aumento. No tenía muy claro hacia dónde se estaban dirigiendo... pero cualquier lugar estaría mejor que aquella barbacoa.
- No te canses inútilmente Troy... cuando nos alejemos un poco creo que podré seguir caminando... si tengo un apoyo.
Phil seguía hablando sin parar, como siempre, intentaba ayudar a todo el mundo a comprender lo que había pasado allí. Les contó todo desde el principio, incluyendo como había encontrado la pistola en el coche estrellado e incluso los detalles de los asesinatos que se habia visto obligado a cometer. Dio detalles de donde encontrar todos los cuerpos que habían dejado a su paso, incluido el de su guía. Pobre.
Cuando aquellos tipos se largaron, Phil apenas podía creerlo. Los habían dejado allá tirados, heridos y moralmente deshechos. cuando vio que Troy tomaba la iniciativa, Phil se encogió de hombres y caminó pesadamente hacia su moto. La incorporó del suelo, donde había ido a parar tras la explosión, y se subió a ella.
-Mejor que Samantha venga conmigo, tu estás herido.
Cambio el post porque no me habia enterado del desenlace de la situacion.
Sin pensarlo dos veces se precipita a toda prisa hacia la moto y deja que Samantha se suba a ella facilitándole este proceso.
Tenía razón, hace apenas una hora estaba hecho polvo en la casa del guarda bosques, y reconocía que había hecho un esfuerzo sobrehumano para hacer lo que había hecho con tanta diversión, pues parecía que la locura y el subidón de adrenalina le inyectaron momentáneamente energía pura.Ahora se sentía gotado pero era un tipo duro de matar y no se rendiría tan fácilmente.
Ahora le tocaba a él, corre rápidamente hacia la moto de Samantha y la coloca debidamente para acto seguido subirse en ella, arrancarla y salir de allí echando leches.
Troy se subió rápidamente en la moto de Samantha y Phil incorporó a ésta a la suya, sujetando que no cayera mientras tenía delante de él el manillar. El coche de aquellos tipos que les había perseguido estaba ya carbonizado, pero la humeante hoguera muy cerca allí seguía viva y visible desde algunas millas alrededor. Las ruedas de las moticicletas derraparon brevemente y comenzásteis a avanzar. Poco a poco notábais en vuestro rostro el calor que la cabaña flameante despedía, pues estaba al lado del camino, y continuaba consumiéndose. Avanzásteis pasando por al lado de la cabaña, comprobando que la explosión y el fuego se había extendido a la camioneta del guarda forestal y la moto del malogrado Steve, ya ennegrecidas y calcinadas...
En esos momentos, mientras seguíais avanzando y acelerando cada vez un poco más (dejando un poco atrás la cabaña forestal), oísteis claramente varias sirenas y varios ruidos de motores que se aproximaban, hasta que al fín vísteis que teníais compañía: un par de unidades de emergencia civil aparecían y se postraban a uno y otro lado del camino, aparcando incluso en la cunetas. Estaban dejando espacio para una unidad de bomberos que apareció, seguida de un camión cisterna mucho más grande a modo de apoyo (aunque este último no podía hacer tanta maniobra y quedó esperando al comienzo del desvío).
En esos momentos de las ambulancias de emergencias salieron algunos paramédicos y os miraron, haciéndoos señas. Sin duda alguna estos si que contaban con identificación del condado y detuvísteis vuestra "carrera".
¿Hay algún herido? -fue lo primero que preguntó una médico.
Enseguida os bajásteis de la moto, les mostrásteis a Samantha ataviada con un improvisado torniquete y varios médicos la transportaron enseguida en una camilla portátil al interior de una de las unidades. Allí le pusieron un gotero y comenzaron a examinarla. A Phil y a Troy les preguntaban otros insistentemente si tenían alguna lesión o si se habían golpeado, les pedían un recuento de dedos y les examinaban los ojos y oídos con linternas... luego les pidieron que les acompañasen a la otra unidad.
Mientras os atendían, la unidad móvil del camión de bomberos apagó rápidamente el fuego, sin necesitar asistencia ni más agua de la gran cisterna que esperaba preparada. El fuego tampoco se había extendido demasiado y no tardaron en apagarlo.
Tras un largo rato se hizo de noche.
Os llevaremos al centro médico de Sayre, no os preocupéis -dijo un médico mientras comprobaba las compuertas de las furgonetas y se retiraban los camiones de bomberos-, queremos examinar mejor la herida de la mujer. Es de arma blanca, ¿verdad? Tendremos que dar aviso a la comisaría local, allí harán todo el papeleo. Ahora descansen.
Y les invitó a tumbarse en la camilla. Los motores arracaron.
Escena cerrada. En breves cuelgo el epílogo.