El esbirro se quedó en el más absoluto de los silencios como respuesta a la pregunta de su ama y como todos sabíais ya, eso era algo que a ella no la gustaba nada, pues si preguntaba, era para que se la respondiera sino, no se molestaría lo más mínimo en preguntar y mataría a todos los esbirros que la hubieras fallado.
Pata-Liebre tuvo que abrir la boca, pues comenzó a sentir como su lengua crecía y crecía hasta no entrarle en la boca, llegando hasta el suelo del salón del trono de vuestra señora y cuando paró de crecer cogió vida propia y dio una vuelta alrededor del cuello del esbirro hasta dejarlo sin gota de aire.
Los dos esbirros que aún quedaban con vida pudieron ser partícipes de su agonía, aunque eso podía mejor las cosas para los que ya no estaban demasiado bien y tenían la esperanza de salvarse. Con un par de sacudidas Pata- Liebre falleció quedando allí tendido, con las manos flácidas sobre su cuello pues hasta el último momento tuvo la esperanza de librarse.
La Señora Oscura satisfecha con lo que acababa de hacer miró a Elefanto y Eloisa, que eran los único que aún seguían medio vivos y sonrió maléficamente.
- Tú, o lo que queda de ti. - Señaló a Elefanto con la cabeza. - ¿ Qué hicisteis después de que el muerto os dejara allí tirados?
Pata-Liebre pierde la vida que le quedaba por no responder cuando le correspondía.
Turno para Elefanto quien tiene hasta mañana a estas horas para responder, usando una de sus excusas y sin poder pasar el marrón en su mensaje.
Elefanto se adelanta rodeando al reciente cadaver, ya mas acostumbrado a su nuevo aspecto pútrido, y asiente vigorosamente, con lo que su ojo amenaza desprenderse en cualquier momento
-si, si, cuando Pata-Liebre se marcho nosotros seguimos luchando incansablemente si, moriríamos todos cien veces antes de desobedecer una orden de nuestra Señora Oscura- sigue asintiendo vehementemente porque tal como están las cosas puede ser precisamente lo que ocurre
-sin su ayuda nos costo bastante vencer a los guardias de umbria, eran unos tipos duros. Pero Finalmente lo conseguimos y entramos en aquel lugar. Allí era una especie de fiesta de Jelogüin, si, si- mira a Eloisa como para que se lo confirme, pero tampoco espera ninguna ayuda de la otra superviviente -bueno, había mucha gente allí haciendo tonterías, pero recordando las ordenes de nuestra señora buscamos a esos umbrianos, si. Y no tardamos en encontrarlos, el grupo mas estrafalario y ruidoso, y también el mas bebido. Así que nos infiltramos entre ellos, si. Muy discretamente. Los acompañamos durante horas para atacar a traición y acabar con ellos pero...- el elefante zombie intenta tragar saliva, pero eso en su actual estado es bastante complicado y sale un sonido ahogado de su trompa
-pues... hablando con ellos descubrimos que no eran umbrianos, solo un grupo de tipos raros haciendo el fantoche-
uso la escusa [Mucho tio raro junto]
Turno para las interrupciones.
Interrumpí con educación y mucho, mucho miedo.
-Es verdad mi ama, entre esos tipos raros había una vieja que se hacía llamar la "Espantafantasmas" o "La vieja que espantaba Fantasmas" la verdad no recuerdo.
Me rasqué la cabeza y un par de piojos cayeron al suelo pero esa común cuando te bañas una vez por mes.
-Sí, y esa vieja fue la que nos dijo que esto era una fiesta privada, que acá no había ningún umbriano. Que nos fuéramos de allí cuanto antes...
Pensé más, recordando.
-Cuestión que nos tuvimos que ir porque no tenía sentido matarlos, no tenían idea ni quiénes eran ellos a decir verdad. Igual los torturamos un poco antes, para saber si decían la verdad, ¿sabe? Pero nada, nada, no eran los umbrianos que estábamos buscando mi señora.
[Excusa: La vieja que espantaba fantasmas]
Las palabras de Eloísa dejaron un poco asustada a vuestra Señora pues no estaba acostumbrada a que sus esbirros se apoyasen en vez de meterse puyas como acostumbraban a hacer y aunque pensó en deshacerse de una esbirro tan rara, pues incluso parecía querer ser honesta con sus compañeros, algo que nunca había presenciado, cambió de idea queriendo escuchar qué tenía que decir a eso Elefanto, quien seguro que no era tan buena " persona ".
- Vale, pues no era ningún umbriano, entendido. ¿ Encontrasteis a algún umbriano al que poder torturar un rato?
Ella al menos estaba convencida de que al menos a Umbría habíais conseguido llegar antes de cagarla totalmente, pero claro, igual se equivocaba y lo vuestro era peor que la incompetencia.
Turno para Elefanto quien tiene hasta mañana a estas horas para responder, usando la excusa que le han lanzado y pudiendo pasar el marrón siempre que tenga cartas para ello.
El elefante zombie asiente vigorosamente a las palabras de Eloisa, sin duda tiene menos cerebro que un ratón de campo, pero no va a discutir por eso
-si, si, eso paso fue esa vieja espantafantasmas la que nos explico que esos tipos raros no eran umbrianos, si, así fue-
Elefanto se cruza de brazo satisfecho, pero al ver aparecer el brillo asesino en los ojos de la Señora Oscura se apresura a continuar
-ehh, entonces no sabíamos como continuar y estuvimos un buen rato pensando que hacer, hasta que se nos ocurrió preguntar "¿sabe usted donde podemos encontrar a la Comunidad Umbria?" si, si, preguntamos educadamente, bueno y también bruscamente, incluso tuvimos que torturar a uno o dos tipos raros, pero al final nos dijeron que los Umbrianos, en vez de salir para que su Oscura Señoria pudiera matarlos adecuadamente, se habían ido a la mansión de veraneo de un tal Chemo, que era su lider según nos dijeron-
Vuelve a asentir satisfecho, pero esta vez es bastante rápido para continuar antes de volver a provocar a la Señora Oscura
-Tuvimos que preguntar un poco mas, pero finalmente nos dijeron donde estaba esa mansión y allí que fuimos. La mansión tenia buena pinta, pero en la entrada habían unos goblins de aspecto peligroso. Yo dije que podíamos machacarlos, pero a los demás no les pareció buena idea. Entonces Eloisa dijo que ella se ocupaba, fue a hablar con los Goblins y estuvo un buen rato con ellos, pero al final volvió y dijo que no podíamos entrar, que era una fiesta solo con invitación-
uso escusa [Mansión de Veraneo de Chemo]
Y uso carta de [pasar el marrón] para pasar el marrón a Eloisa claro
La choza de veraneo no estaba nada mal, al menos, a vuestra señora le agradó bastante vuestra descripción, pues si tenía que ir a alguna parte, cuanto más tétrica pareciera a ella le gustaría más, aunque en este caso, la casa fuera de un cuervo que seguramente ni se la merecería, aunque tener a tantos frikis enganchados tenía su punto a favor.
- ¿ Cómo que no podíais pasar? Llegas hasta la puerta, hablas con los porteros.. ¿ y nada? Espero que se te ocurriera como solucionar ese gravísimo error porque sino...
No acabó la frase, pero quedaba más que claro lo que quería decir y Eloísa seguro que lo había pillado aunque no fuera a la primera.
La mujer se quedó esperando la respuesta, pensando en hacerse con otra casa de veraneo... pero aún no se había decidido por ningún sitio en particular..
Turno para Eloísa quien tiene hasta mañana a estas horas para responder, teniendo que usar una de sus excusas.
Era nuevamente mi turno y el ama me había mirado como que mejor tuviera un buen motivo para volver de la mansión sin haber entrado, así que mejor que me explicase bien.
-Es verdad que dijeron que era una fiestra privada, mi señora. Eso es cierto, también es cierto que no se podía entrar sin invitación. Pero eso no quería decir que no se pudiera entrar, solo que necesitábamos la invitación. Entonces... cuando volví con furia al lado de Elefanto para decirle que no se podía entrar sin invitación, vi pasar volando a unas aves muy muy oscuras.
Hice el aleteo con mis manos, como un gesto para reforzar mi historia.
-Se llamaban los cuervos y eran gente importante, parece que tienen permisos especiales ellos en Umbría. Son algo así como jefes, ¿vio?
Me puse las manos en la cintura y me sonaron los huesos de la paliza anterior, pero igual seguí.
-Bueno, yo los llamé y aletearon hasta mí. Nos miraron a Elefanto y a mí con cara rara... no sé por qué porque ellos son más extraños, imáginese tener tanta pluma negra encima sin ser vedette.
Continué con el relato:
-Me dijeron que ellos nos podían conseguir la invitación, porque eran gente importante en Umbría pero que los teníamos que seguir para que nos la dieran ¿vio? Que ellos podían entrar siendo cuervos pero que no nosotros necesitábamos ese papelito tipo carnét. Que no había otra manera.
Resoplé.
-Así que nos dijeron eso y empezamos a seguirlos, a mí en un momento se me ocurrió que podríamos disfrazarnos de cuervos y nos dejarían entrar porque éstos nos vacilaban. Volaban y volaban y cada vez estábamos más lejos de la mansión. Cuestión queee.... en un ataque de ira, viendo que nos mentían sobre el carnet, maté unos cuantos y les robamos sus plumas.
Asentí a mi afirmación con fuerza.
-El tema era ahora emplumarnos y pasar por cuervos para poder entrar. El problema fue que aunque yo parecía una cuerva... Elefanto, con su tamaño... no nos alcanzaban las plumas...
Paso el marrón a Elefanto con esta excusa.
[Excusa: Los Cuervos]
Vuestra ama escuchó las palabras de Eloisa, pero por alguna razón dejó escapar un bostezo mientras ella lo hacía y después su rostro comenzó a mostrar un enfado más y más grande según ella iba sumando palabras.
Sí, era el preciso momento en el que a vuestra ama se le había agotado la paciencia, con tan mala suerte para la esbirro que estaba hablando, que sería ella quien pagara el pato, quizás sin culpa alguna, quizás con toda la del mundo.
- Basta! Basta ya! - Gritó de repente como si alguien la hubiera poseído pues su voz sonó como si se acabara de abrir el mismísimo infierno bajo vuestros pies.
Elefanto no podía ver nada de ningún infierno, pero Eloisa vio como bajo sus pies ahora de abría un río de lava incandescente que poco a poco iba subiendo como si se estuviera metiendo en unas arenas movedizas, sólo que se estaba quemando viva, sintiendo como poco a podo su cuerpo se iba derritiendo en aquel magma.
El otro esbirro se quedó tan asustado que no pudo ni moverse y eso, que por uno de sus ojos sólo veía el suelo, pues le había quedado colgando y con sus patazas lo de colocárselo en su debida cuenca iba a ser imposible.
En cuanto Eloisa terminó de desaparecer entre gritos, en el momento en el que la lava la llevó al cuello y su compañero sólo veía como se iba consumiendo poco a poco, la puerta del salón del trono se abrió.
- Lárgate! Sal de mi vista y no se te ocurra volver a aparecer hasta que te vuelva a llamar!! Ahhhh! Mierda de esbirros incompetentes... es que siempre me tienen que tocar los más inútiles del mundo, da igual dónde los busque... La próxima vez que me fallen les sacaré los ojos por el culo con su propia lengua!!
Elefanto no perdió el tiempo y antes de que su ama decidiera poner en práctica sus palabras salió como alma que lleva el diablo, respirando de nuevo tranquilo cuando la puerta del salón se cerró a sus espaldas. Había conseguido sobrevivir por el momento, aunque no sabía durante cuánto, claro.
Eloisa pierde una vida por pasar el marrón en su primer mensaje, pues en ese es en el que no se puede...
Elefanto queda finalista del grupo 1, aunque tendrá que esperar a que salgan los demás finalistas para jugar la final, en la que volverá a tener dos vidas.