Partida Rol por web

-¡Oye tú! Gritó de pronto Marugán. ¡Pero habrase visto la desfachatez de esta gente! ¡Haz el favor de dejar ese poster tranquilo, y de atender a vuestro jefe como Toriyama manda!

Chus acababa de pillar a Curt in fraganti despegando uno de los posters de la pared y lo agarraba de una oreja para llevarlo delante del ordenador. En este punto, los otros miembros de los Akira Corps. se pusieron tensos y se levantaron del sofá para ayudar en lo que fuera menester a su jefe.

-¡Y Max! ¡Deja de tocarme las pelotas y levanta el culo del sofá! ¡Ven a atender a Konstantin o lo siguiente que conducirás será el triciclo de mi sobrina!

Patxi miraba la escenita que se acababa de montar con cara de confusión, mientras se rascaba la nalga izquierda.

Hay que ver la poca formalidas que tienen aquí, oyes. Pensó. Esta gente debería saber lo que es estar bajo el mando de Jose Luis Korta para aprender a errespetar a los nagusis, kagüen zotz que poco errespeto le tienen al Marijuai este.

Curt se agarró la oreja dolorido.

Cagoenlaleche, esto duele. Y encima para hacer feliz a la chiquilla que luego pasa tres kilos de mí. Si es que hay que ser gilipollas...

Con cara de dolor y mala leche se acomodó con los demás, esperando las órdenes del gran Konstantin. Para hacer menos tensos los escasos micro segundos de espera se metió en la boca un caramelo medio derretido.

¿Pasarme a mí? ¡Nanimono! Yo estoy perfectamente, como si me hubiese comido una judía mágica respondo alegremente levantando bien en alto la mano derecha con cara de feliciana al botafumeiro que hace de líder de la resistencia barnacitiense.

¡Por fin vamos a salir de esta ciudad! Empezaba a aburrirme sin una serie decente que poder ver. Así que ya sabemos donde está otra de las cartas. ¿Dokodesu ka?

Cuando por fín Chus puso algo de orden en la sala, y todos atendían a Konstantin, este volvió a hablar, procediendo a empezar con las explicaciones por las que los habían llamado.

-Muy bien, así me gusta, que os porteis bien en clase. Si no dais mucho más la tabarra a lo mejor os dejo salir 5 minutos antes al recreo. Dijo con sorna. Ahora escuchad. Konstantin tomó aire tras una nueva calada a su cigarrito y empezó con lo que les tenía que decir. En junio de 1999, y mientras una grave epidemia de vampirismo afectaba a la villa de Sitges, Sarbelio, Loyola, y Luismi, tres estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Información de BNC, recibieron una de las jugosas becas papales que Alejo concede aleatoriamente entre los estudiantes para lavar su imagen pública. Como el castigo por no aprovechar una de estas becas es de 20 años de cárcel, a los tres estudiantes no les quedó más remedio que llevar a cabo su proyecto: reconstruir el viaje maldito que el Profesor Puig realizó en 1929 a una misteriosa cordillera montañosa en el interior de la Antártida, en busca de ciertas imposibles construcciones de origen blasfemo*, y por qué no decirlo, impío*. En Octubre de ese mismo año, tras un viaje en barco desde el puerto de Cádiz, los tres estudiantes partieron del hotel de veraneo Erebus, en la costa antártica, para internarse en el desierto helado. Konstantin hizo una pausa dramática, tras la cual añadió: Jamás volvieron.

El cigarro volvió a los labios, y el hombre tras la cámara se asguró de que la niebla de humo de nicotina no perdía carácter en la habitación en la que se encontraba antes de proseguir.

-Dos años después se encontraron las cintas de video de la expedición, pero resultaron ser un par de pelis porno que llevaban encima para entrar en calor en las frías noches antárticas, así que se sigue sin tener ni puta idea de lo que les pasó. Y todo esto nos importaría un poco mierda, si no fuese porque uno de los tres susodichos pringaos, el tal Sarbelio, era primo de Krad “El Zurdo” y heredero directo de otra de las cartas de su Powerpack, la mítica Anal Storm. Por tanto ha llegado el momento de que dicha expedición sea retomada.

Alma miraba asombrada la escenita aunque sin quitar ojo de encima al apuesto jefe de la Resistencia.
Se echó a reír al darse cuenta de que el heroico Curt trataba de arrancar de cuajo uno de los póster que tanto había querido Lorena, aunque ya se le había pasado el capricho, y por ello recibió una buena reprimenda. Pobrecillo... Mira que se me da mal hacer de Celestina pero voy a tener que hacer algo con estos dos... pensó divertida la maña hasta que escuchó de nuevo la voz de Konstantin.

Al escuchar algo sobre unas construcciones blasfemas la zaragothana notó un escalofrío recorriéndole de pies a cabeza y viceversa (varias veces). La escena se volvió a repetir cuando el jefe finalizó diciendo que ellos debían ir allí...

Por la Virgencica del Pilar, del calor al frío, esto parece un espás de esos que usan los milindris de Pedralbes. Y mira que una está acostumbrada al zierzo de Zaragotham pero la Antártida es demasie... pensaba la chiquilla apretándose fuerte contra el pecho su escasa ropa y pensando en que, desgraciadamente, tendría que ir más tapada de lo que había ido nunca. No la iba a reconocer ni su madre si se cruzasen.

- Pe... peeee... peeeeeero... ¿No ha pensado que si ellos no volvieron tal vez nosotros tampoco? ¡Ay, por la Pilarica! ¡Qué enrrevesao era el jodío Krad con sus cartitas! - dijo la maña cogiendo fuerza según hablaba tras unos temblores descomunales en la voz mientras besaba la estampita de la Vírgen.

Tengo que ir pensando en dejar un testamento con mis juegos... mi madre no tiene ni idea y seguro que se los vende a cualquiera ¡o hasta los regala a los niños del barrio! Eso no, por favor...

Max lanzó el mando de la consola encima del sofá de mala gana al ver que los Akira Corps se ponían tensos. Bah, no me habeiz duraó ni dos telediarios...

Se acercó al grupo al ver que Konstantín preguntaba por el. No era la primera vez que veía al líder de la resistencia, es más el fue el que lo mandó a los madriles con lo cual tampoco le tenía mucho aprecio. Simplemente le hizo un gesto con la cabeza y se quedó un poco mas atrás que el resto pero visible a los ojos del fumador empedernido.

No es que le hiciera mucho caso a lo que Konstantín estaba contando, pero inevitablemente su voz resonaba fuerte por los altavoces del pc y no pudo evitar la tétrica historia. Maldito zeaz, primero me envías a xamuscarme aquí y ahora nos quieres enviar a que nos congelemos, será malaje!

Eztoy de acuerdo con mi compañera y comienzo a pensá que os queréis librar de nusotros y que esto de las cartas e un cuento xino!intentaba ocultar que en realidad estaba un poco acojonado ya que no le molaban nada esos royos parachungos y las desapariciones repentinas...

-Hombre majo, si no te crees que las cartas son objetos místicos muy poderosos, pregúntales a esas dos chavalas de buen ver por que me hicieron mandarles peluquines a la dirección de Zevilla en la que se hospedaron antes de ir allí, a Madrid, convenciéndome de que los peluquines eran gastos de misión. Menos mal que al menos el presupuesto nos llega para eso.

Konstatin no parecía contento ante tanta queja, pero mantuvo la calma, no como Chus.

-No te alteres Alma, que lo habeis hecho muy bien hasta ahora, y en los corrillos de la resistencia las apuestas ya empiezan a estar a vuestro favor. Deberíais haberlas visto cómo andaban cuando comenzó todo este sarao, así que confiamos en vosotros. Pero a lo que vamos. Chus, pásales lo que te he mandado imprimir antes.

En este punto, Konstatin esperó a que Marugan les hubiera dado a todos lo que pedía, y nuestros valientes narizones, pronto tuvieron entre las manos lo que parecía el Índice del Profesor Puig Project.

-Ese es el índice general del proyecto que los tres estudiantes presentaron al Ministerio Papal de Educación y Propaganda. En realidad, nuestros servicios de espionaje, contraespionaje, y recontraespionaje lograron hacerse con una copia completa del projecto, pero el índice fue lo único que se salvó tras un desgraciado accidente fortuito en el que el documento fue recortado por error para hacer monigotes, se incendió, y finálmente fue a parar al interior de una trilladora de heno. Nadie se explica cómo pudo pasar.

Curt miró el papel que le habían dado.

Vale que nos manden a Malaga, eso molaba; pase que nos manden a Zevilla, que se comía bien; incluso pase que nos manden a Madrid, que a pesar de tanto calor es zona libre...

-...¡Pero esto ya es el despiporre! Nos van a joder de frío mientras buscamos unas ruinas de mierda que van a dar un cague de agárrate y no te menees. ¡Vaya mierda de plan!

Curt empezó a temblar espasmódicamente. Ante sus gritos y pensamientos, y aprovechándose de su miedo, el Émpata fiero quería salir de su escondite para ver si eso era el mundo de Magik.

-¡Tú a tu sitio, bicho verde, que ahora no te toca salir!

-¡A callar ya! Dijo Konstantin visiblemente molesto por tanta queja. ¡Cuando os alistasteis en la resistencia ya sabíais lo que había: Mucho esfuerzo por salvar nuestra afición y nuestras libertades! ¡Recuerdo que algunos de vosotros incluso estabais descontentos por que no se os tenía en cuenta para las misiones serias! ¡Pues ala, ahora teneis una misión sería con la que demostrar lo machos que sois!

Konstantin se calló un momento y miró a las dos mujeres.

-Bueno y lo hembras que sois, también, también...

Evidentemente, dado quien era su pareja, no estaba en posición de menospreciar la valía de las mujeres... ni su mal genio.

-Además, deberiais estar contentos. Se os ve muy acalorados, jejeje. Un nuevo cambio de aires no os vendrá mal.

El hombre dió una nueva calada.

-Bueno, vuestra primera parada para descubrir dónde está el tal Sarbelio, y por consiguiente la Anal Storm, es el hotel del Monte Erebus, donde se alojaron los tres universitarios antes de internarse en el frío hielo. El Monte Erebus se trata de un volcán muy cuco que todavía está activo. Esto le dio una magnífica idea a la Delegación Turística de Sakabao Technologies, que decidió aprovechar el natural calorcillo del volcán para montar un hotel en lo alto, ahorrándose así una pasta larga en calefacción, al tiempo que les sacaban un millonada a los turistas montando visitas al interior del volcán. El sitio en sí es un megahotelazo de superlujo, al alcance únicamente de la gente más pastarrufosa, y suponemos que los estudiantes aprovecharían para estar allí lo máximo posible y hartarse de comer caviar, beber alcóhol del caro y tirarse pedos en los yacuzzis, que ya sabemos lo juerguistas que son los universitarios, de modo que es de suponer que allí encontrareis información útil sobre el paradero de los estudiantes.

-Perfecto. ¿Y quien paga los gastos del hotel?¿La Resistencia o nosotros?- preguntó Curt visiblemente enojado. No agrada eso de que a uno le corten un soliloquio con el bicho verde que todos llevamos dentro.

Alma agradeció sonriente la aclaración hecha por el jefe acerca de ella y su compi a la vez que se cagaba en todo por los cambios de temperatura a los que se iban a ver expuestos.

Me voy a coger un gripazo que no se me va a ir en todo lo que queda de año, piensa la maña divagando un momento al escuchar lo de la Antártida y lo del hotel en pleno volcán. Lo que yo decía, un espás de los que están de moda en Pedralbes pero a lo grande grandísimo. Y eso sirve según dicen para adelgazar, ¿no? ¡Coño, pos igual no nos viene entonces tan mal el viajecito! piensa comenzando a entusiasmarse un poquito aunque sin que los demás lo noten.

Al regresar de estar sumida en sus propios pensamientos se percató de que se había perdido completamente en la conversación a partir de lo del hotel volcánico ese, así que, como acostumbra a hacer en las barras de los bares para pedir otra ronda, alzó la manita para que la viera Konstantin y preguntó:
- ¿Y dónde está ese Hotel del Volcán? Creo que no me he enterado de ese detalle... - dijo la maña bajando después la mano tras zarandearla a un lado y a otro.

Estaba yo atendiendo las palabras de Konstantin asintiendo con la cabeza cuando de repente, así sin más, por algo que ha dicho me pego un susto de muerte. ¡BIKKURI! grito con los brazos en alto, cara de susto y los ojos fuera de sus orbitas. Luego empiezo a correr en círculos por toda la habitación con los brazos en alto y dando voces ¡KOWAIIO! ¡KOWAIIO! ¡KOWAIIO!

Y de repente, asin por que si se me pasa el pronto y vuelvo a quedarme tranquilita en el mismo sitio en el que empecé a echar voces. ¿La Antártida dices? ¿Me puedo quedar con el Adán si lo encontramos? ¡Prometo no provocar un segundo impacto, lo juro por el sombrero de Mugiwara no Luffy!

Un escalofrío, no sé muy bien si de terror, odio, o de qué; recorre mi cuerpo ante las palabras "blasfemo" e "impío". ¿Será por culpa de enfrentarme a los memonios de antes, o será por lo que nos espera en ese lugar?. Mejor no pensar en ello... Al menos, de momento...

Bueno, entonces, si no lo he entendido mal... ¿Vamos a un hotel de superlujo en un volcán? ¿Qué pasa, que es por si no hemos pasado calor aquí... No?. -Pregunto de forma casi retórica a Konstantin- Bueno, pues entonces, creo que con esto claro, poco más podemos hacer aquí. Cuando nos digas como ir, nos piramos...

Max echó un vistazo a la hoja que Chus le había pasado, se pega su rato observándola para acabar haciéndola una bola y tirándola. Y esto pa que cojones es? En eso que Konstantin se mosquea y les echa la bronca, para variar y su compañera da vueltas sin parar hablando en un idioma extraño para el Zevillano. Ezto parece una casa de locos!

Sin mediar palabra y por primera vez sin tocarle las narices a Chus se queda expectante ante la posibilidad de estar alojados en un hotel de superlujo que te cagas y beber whisky del caro. Si, conociendo a este par, seguro que nos han montao un iglú de esos en el quinto pino y sin calefacción pa’ joder y ellos viviendo a pleno lujo sin dar palo al agua!!

Ante el comentario del padre no puede evitar soltar una carcajada sarcástica. Ezo, ezo como vamo a llegá a ese cacho hielo?

-Nonononono, Curt, no lo has entendido bien. Respondió Konstantin con una sonrisa, parecía que el comentario del policía le había hecho gracia. Teneis que ir allí a enteraros de qué fue de la expedición de los tres estudiantes y encontrarlos. No a alojaros. Los fondos de la resistencia apenas nos llegan para nada. Bueno, si os llega el dinero y tal, pues vosotros mismos... dió otra calada. Aunque ya os digo, que el principal problema que tendreis será que os dejen entrar, pero supongo que con que aparenteis tener pasta será suficiente.

-El Hotel Erebus está cerca del volcán del mismo nombre, Alma, y dile a tu amiga que tranquila, que nos fiamos de su palabra. Aunque de momento ya hemos avisado a nuestros abogados por lo que pueda pasar, que vosotros sois capaces de hacer el segundo y hasta el decimoquinto impacto si se os deja. Así que arreando, Chus ya lo tiene todo preparado, salís esta misma noche rumbo al Hotel Erebus sin más tardar, id a mear cuanto antes, que no habrá paradas por el camino y se os echa el tiempo encima.

El rubiales aspiró, y expiró el humo de su cigarrillo, y se medio ocultó entre la niebla de nicotina antes de que la imagen desapareciera de la pantalla cuando finalizó la videoconferencia.

-Ya lo habeis oido. Arreando que salís en diez minutos. Les dijo Chus pasándoles unos abrigos baratos de esquimal, cuando llegó a Patxi lo miró de arriba a abajo y le dijo. Ni te imaginas lo que nos ha costado encontrar uno de tu talla, si es que a vosotros los vascos os hacen con moldes XXL.

Cuando terminó con los abrigos, les dió a cada uno un termo de café con leche y les invitó a seguirlo.

El impío viaje al blasfemo continente daba comienzo.