Hansen parece volver a estar ausente en sus propias meditaciones.
¡Obtuve esta cicatriz en mi cara en una lucha a muerte!
Espero que ya hayas aprendido a no tocarte la nariz.
¡No pienso aguantar tu insolencia aquí sentado!
Ya te están fastidiando otra vez las almorranas, ¿eh?
La computadora arroja los resultados, hoy la tripulación está particularmente indecisa, pues entre los candidatos a ser enviados al pasado, está el capitán Spock y el Teniente Hansen. Tampoco hay consenso acerca de quien debería ser traído con ayuda de la máquina. ¿El capitán Kirk ó el teniente Kyle?.
La situación cae con silenciosa contundencia sobre el puente de mando y una vez más, según las reglas de la Federación, debe ser el capitán quien tome una decisión. El capitán Spock guarda silencio mientras medita y analiza con su lógica fría, y toma la decisión importante, será un intercambio de vidas, vida por vida, alguien tendrá que morir para traer a alguien del pasado.
Hansen observa con cara de bobo lo que ocurre y ve que Spock se esta relamiendo los dientes con la lengua en una cara de absoluta lujuria lo cual no puede ser nada bueno.
Se finit!
Cuando suena la musiquilla de la máquina y va a arrojar los resultados me levanto de mi asiento y voy a escuchar el veredicto. Con sendos empates debería ser como siempre el capitán quien deshaciera el entuerto.
El caso del sacrificado estaba claro, Spock no votaría contra sí mismo, pero sobre a quien resucitar era mas complicado, el capitán Kirk o Kyle eran las opciones, deberíamos esperar a ver el veredicto.
Me acerco a Hansen a despedirme de él.- Mucho gusto en conocerte...-Le dije sabiendo de antemano lo que iba a suceder.
"Vaya, realmente que perra les ha cogido a todos con votar a Spock...". Me quedo pensativa. Al ver que finalmente iba a ser sacrificado, por primera vez, uno que yo misma había votado, me siento sin embargo algo insegura, como no lo habia estado en mucho tiempo. Habría acertado mi intuición o me habré engañado a mi misma, como el resto habia hecho hasta ahora?
-Lo siento, Hansen, sin rencores personales...- me despido de éste.
El Doctor veía como sus compañeros se despedían de Hansen. Él estuvo apunto de hacer lo mismo, y sentía su muerte, pero ya han sido dos las veces que los Romulanos se habían comportado como humanos, y no se dio cuenta hasta su muerte, así que mantuvo las distancias, solo por si acaso.
Aún así, pese a sus dudas, McCoy lo miró con tristeza, no le gustaba que tuviera morir nadie, y si resultaba que era inocente, significaría que se habían equivocado, aunque él no haya votado a Hansen.
-Malditos romulanos..... Hansen, ojalá seas tú el último de ellos.- dice Spock casi en un murmullo mientras sacude lentamente la cabeza en un gesto de pesadumbre.
Hansen observo a Spock sentado en su privilegiada posición en el sillón del comandante y por una vez fue consciente de que tramaban algo con él que sin duda alguna sería malo, muy malo para su posición dentro de la serie así que tuvo el coraje de saltarse las reglas para decir algo aunque no estuviera en su guión.
- Yo soy cola, tú pegamento.
Doble empate, se define por penales… pateados por el Vulcano. El partido de linchamiento es fácil de dirimir: Spock no cometerá la estupidez de patear en contra. A esta altura no sé que espera la Furia Roja para convocarlo para el partido de hoy contra los teutones. Es un goleador nato, con una cintura increíble para gambetearle a la muerte, algo inédito. El partido de la resurrección es otra cosa. La pregunta es: ¿el capitán? Metió un golazo con Spinelli, pero la pateó en contra con Kyle. ¿Y Kyle? Mmm… Difícil saberlo. Estuvo muy poco tiempo en la cancha, es un jugador que trabaja la pelota y, según comentan algunos, esconde la iluminada intuición de conocerle el paño al rival. ¿Será cierto? No lo sé. Lo único que tengo claro es que si seguimos pateando contra los que se mueven en el juego y la gambetean como pueden, el partido terminará con un par de postes de madera clavados en la cancha. Como una película muda, pero una pésima película muda.
Mientras terminaban de maquillarme, pensé: En este mundial desquiciado y perverso, donde tenemos que patear penales con los ojos vendados y después de dar mil vueltas, ya no sabemos dónde está la portería de los malos y dónde la de los buenos. Pateamos a ciegas. Y no nos está yendo tan bien: aún nos queda un romulano y un vampiro de sal en la cancha… que juegan su juego con los ojos bien abiertos, haciéndonos gambetas, caños y llenando la portería de muertos: Alden, Chekov, Martine, DePaul, Chapel, Hadley, Piper, Farrell… Claro que algunas de esas muertes fueron producto del error de uno de los nuestros cuyo estilo de juego era algo... peculiar. Valga un eufemismo de psicópata. Por no hablar de los que nuestros votos han enviado al Otro Lado. En fin, sólo en la retorcida mente de la Tortuga puede haber surgido un juego tan perverso.
Como reza el refrán: el fútbol es un deporte que inventaron los ingleses; se juega once contra once… Hasta que llega la Tortuga, cambia las reglas a su antojo y con esta parodia factura más euros que el Real Madrid, el Manchester o el Barcelona juntos.
¡Por la Suprema Tortuga! El mundial se me coló en el vocabulario. Es hora de ponerme en acción…
***
Palmer pone su mejor cara de asquito. Algo huele mal, muy mal. Y espera la decisión del Vulcano respecto a quien será resucitado. Quien muere es obvio. En fin…
- ¿Ya se decidió quien será regresado por medio del Generador de Vórtices Espacio Temporales?
La firmeza de Spock es clara, el Teniente Hansen tendrá que ser enviado a través del Generador de Vórtices Espacio Temporales. El sujeto, callado, da unos pasos y dice sus últimas palabras antes de que la máquina sea reconfigurada para la fecha y hora exacta de la muerte de... James T. Kirk. El capitán sería regresado a la vida para que estuviese al frente de la terrible amenaza de los Romulanos.
Los anillos de la máquina empiezan a girar emitiendo un zumbido, y una luz azulada, pronto el espacio vacío empieza a generar una burbuja que deja ver el camarote del capitán y él recostado en su cama, dormido. La máquina se estabiliza y el pobre de Hansen es llevado hasta el borde, toma aire y se lanza hacia el vórtice generado, descargas eléctricas se liberan por toda la habitación, y un sonido de disrrupción se presenta, las luces parpadean bruscamente y...
El capitán James T. Kirk es arrojado al suelo frente a la máquina, tosiendo, pero vivo! no parece entender que sucede o que ha pasado, pero tiene vida, para alegría de su tripulación, mientras que Hansen ocupa su lugar del otro lado del vórtice... luego la máquina empieza a detenerse y las luces se apagan para encenderse lentamente. El uso de la máquina ha sido todo un éxito, han logrado traer de regreso a Kirk, y Hansen... su cadáver descansa ahora, demostrando que tampoco era un Romulano. Un día agridulce para el Enterprise.
Pronto otra noticia llega de enfermería, Ben Finney acaba de fallecer. Al parecer, la paliza que le propinaron el día anterior algunos tripulantes, agravó una condición de salud alienígena, haciendo que sufriera un infarto cerebral. El pobre ha quedado tieso, aunque probablemente andie lo extrañe.
Pero las amenazas en el interior, aún descansan, esperando pacientemente... acabando con todos.
Hansen es linchado, y no era Romulano.
Ben Finney muere por double jeopardy, es decir no votar dos episodios consecutivos.
James T. Kirk regresa a la vida, gracias a la máquina.
Todos tienen derecho a un último mensaje, mañana pasamos de episodio.
El turno nocturno comienza.