Partida Rol por web

Subasta Navideña

La Mansión Rocks

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28/11/2015, 02:51
Narrador

Notas de juego

¡Bienvenido a la partida! Desde ya vamos a ir empezando la partida, efectivamente, no vamos a esperar más. Según vayan llegando fichas irán llegando los personajes, así que de momento empezamos.

Tu post puedes dividirlo en dos si así lo deseas. Uno solo para mí en el que explicas cómo has llegado hasta aquí, cómo has conseguido la invitación y lo que has hecho durante el día. (La subasta es a medio día, sobre las 12).

Y un segundo post, para todos, sobre el medio de transporte en el que llegas y cómo llegas hasta el jardín de la mansión. Allí, el resto de personajes irán llegando, e iras conociéndoles pudiendo empezar a interrelacionaros desde el principio. Además, no deberías leer nada de lo que haya antes en esta escena, pues tú aún no habías llegado y no deberías saber nada de lo que se haya dicho o se haya hecho. 

En la invitación te decía claramente que esperaseis en el jardín y que pronto alguien pasaría a recibiros.

Además, apunta en tu equipo el dinero que lleva concretamente tu personaje.

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28/11/2015, 03:01
Narrador

Notas de juego

¡Bienvenido a la partida! Desde ya vamos a ir empezando la partida, efectivamente, no vamos a esperar más. Según vayan llegando fichas irán llegando los personajes, así que de momento empezamos.

Tu post puedes dividirlo en dos si así lo deseas. Uno solo para mí en el que explicas cómo has llegado hasta aquí, cómo has conseguido la invitación y lo que has hecho durante el día. (La subasta es a medio día, sobre las 12).

Y un segundo post, para todos, sobre el medio de transporte en el que llegas y cómo llegas hasta el jardín de la mansión. Allí, el resto de personajes irán llegando, e iras conociéndoles pudiendo empezar a interrelacionaros desde el principio. Además, no deberías leer nada de lo que haya antes en esta escena, pues tú aún no habías llegado y no deberías saber nada de lo que se haya dicho o se haya hecho. 

En la invitación te decía claramente que esperaseis en el jardín y que pronto alguien pasaría a recibiros.

Además, apunta en tu equipo el dinero que lleva concretamente tu personaje.

(Quizá haya demasiada info en la pestaña de Descripción de tu personaje, recuerda que esta es la pestaña pública).

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29/11/2015, 03:20
Narrador

Notas de juego

¡Bienvenido a la partida! Desde ya vamos a ir empezando la partida, efectivamente, no vamos a esperar más. Según vayan llegando fichas irán llegando los personajes, así que de momento empezamos.

Tu post puedes dividirlo en dos si así lo deseas. Uno solo para mí en el que explicas cómo has llegado hasta aquí, cómo has conseguido la invitación y lo que has hecho durante el día. (La subasta es a medio día, sobre las 12).

Y un segundo post, para todos, sobre el medio de transporte en el que llegas y cómo llegas hasta el jardín de la mansión. Allí, el resto de personajes irán llegando, e iras conociéndoles pudiendo empezar a interrelacionaros desde el principio. Además, no deberías leer nada de lo que haya antes en esta escena, pues tú aún no habías llegado y no deberías saber nada de lo que se haya dicho o se haya hecho. 

En la invitación te decía claramente que esperaseis en el jardín y que pronto alguien pasaría a recibiros.

Además, apunta en tu equipo el dinero que lleva concretamente tu personaje.

(Quizá haya demasiada info en la pestaña de Descripción de tu personaje, recuerda que esta es la pestaña pública).

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29/11/2015, 03:40
01 Muerto - Judith Gomez Fuertes

Llegaba justo detrás de un tipo con gustos bastante agradables, pero veía asombrada que entregaba sus llaves a alguien.

- Yo no dejaría mi Aston Martín en manos de un desconocido, menos mal que Richard es de fiar - no había visto llegar a nadie, pero la proximidad de sus entradas al lugar le había llevado a ver al tipo entregar sus llaves. Casi sin ganas de moverse, se acercó a ese personaje (Jesús Cortes), para comentar una curiosidad.

- ¿de verdad vas a dejar tu coche en manos de un desconocido? En mi invitación no ponía nada de que hubieran aparcacoches - se giró para mirar su aston Martín rapide 2012 y prosiguió - si te descuidas te puede desaparecer, más te valía haber gastado 4 euros más en un chofer de confianza.

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29/11/2015, 11:43
Guido Ferretti
Sólo para el director

Guido se reunió con Carlo la noche antes de la subasta, hablaron y Carlo le dijo que no podría acompañarlo, que ese día tenía la visita de un crítico de cocina y le era imposible.

-Pero eso sera mañana Ferro, esta noche estoy libre. Tras decir eso Carlo desapareció por la puerta de la cocina, Guido ya sabía que tardaría en volver a salir, justo lo que tardara en terminar la cena para los dos, como todas las veces que se acercaba algún acontecimiento, y el día siguiente no era uno, sino dos.

Carlo era el que en realidad debería ir a la subasta, el consiguió el contacto y la invitación de un tipo extraño que estaba viajando con su amante por la toscana y justamente, después de una discusión con esta en el restaurante, Carlo acabo con 400 euros menos en la caja y una invitación para una subasta privada en Madrid a la que al final no podía acudir.

El cocinero volvió a la mesa con unos platos típicos y la conversación de la subasta giró ante ellos, la sesión duraría un par de horas y se despidieron justo cuando la botella de Limoncello quedó vacía de su liquido amarillento y la conversación sobre los objetos de esa subasta se quedo sin mas jugo.

Guido se notaba un poco mareado, aunque eso no le molestó a la hora de llegar a su casa y preparar la maleta para dentro de unas horas, su vuelo salía pronto del aeropuerto de Florencia. A las 6 de la mañana cogió el vuelo con destino a Madrid, y tras unos minutos recogiendo el equipaje y, lo mas difícil, buscando un taxi, puso rumbo a su piso en el barrio de Vallecas.

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29/11/2015, 11:57
Guido Ferretti

Examinó la invitación una vez más, estaba seguro de que los números de la parte de atrás eran unas coordenadas, miro en su GPS y efectivamente, eran las coordenadas de un polígono a las afueras de Madrid. Bajo al garaje y vio aparcado su Fiat 500 Abarth, era una maravilla para desplazarse por Madrid y aun mejor para aparcar. 

Se dirigió al punto de encuentro, tardo poco menos de 15 minutos en llegar, allí había dos tipos grandes que le indicaron que bajara del vehículo y lo cachearon de arriba a abajo, debía ser lo que hacían a los que eran nuevos en esta subasta. Tras mirarse entre ellos y darse el Ok, se dirigieron a Guido.

-Todo correcto, siganos por favor

El camino de vuelta fue un poco mas lento, su coche, una limusina, no era tan ágil entre el tráfico. Llegamos a la mansión y pasamos por delante de la puerta, había bastante gente esperando en el jardín, dimos un pequeño rodeo y entramos por la puerta de atrás, allí me hicieron señas de donde debía aparcar.

Bajó del coche con su traje italiano y sus gafas de sol y se dirigió hacia lo que parecía ser el jardín, ese debía ser el punto de reunión porque había mucha gente importante por allí. Se dirigió hacia un sitio tranquilo y observaba a todo el mundo tras las gafas, había llegado un poco mas tarde de la hora estimada, por lo que tratar de empezar una conversación con alguien ahora se hacía harto difícil. Así que debía examinar con quien podía hablar sobre la subasta sin parecer molesto. De momento nadie le despertaba esa sensación, así que decidió esperar sentado en un banco tomando unos canapes, que al momento de morder escupió disimuladamente.

-Carlo os mataría por esto, ni sabor ni textura.

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29/11/2015, 14:10
Angelo Scola
Sólo para el director

La suerte de ser parte de los altos estamentos de la Iglesia en un país tan católico como Italia, es que ponen un avión a tu disposición cuando vas a hacer visitas "de estado". Era cierto, Angelo iba a tener un pequeño encuentro con Carlos Osoro, su homólogo en Madrid. Pero aquello sería temprano, así que tendría tiempo de "ir de compras" antes de volver a Milán.

Y así fue, aquella mañana se levantó temprano, tomó un ligero desayuno en un céntrico hotel de la capital española, y le llevaron hasta la sede de la Archidiócesis. No más de media hora con Monseñor Carlos, y ya tuvo tiempo de darse una vuelta por Madrid.

Había concertado aquel encuentro para ese día porque le habían invitado a la prestigiosa subasta que hacía cada años sus amigos los Rocks. Había algún que otro objeto interesante, así que no podía dejar pasar esa oportunidad. De nuevo le trasladaron en el coche blindado hasta la mansión, en la que se encontró con los más variopintos personajes.

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29/11/2015, 14:28
Angelo Scola

Un coche negro, blindado y de cristales oscuros se paró en la puerta de la Mansión Rocks. De él se bajaron dos hombres fuertes y enchaquetados. Se notaba que eran seguridad privada, y abrieron la puerta trasera para que saliese de ella Angelo Scola. El cardenal Scola era una hombre más grande que gordo, pero tampoco imponente. No tenía una cara amable, pero sí era alguien que sonreía constantemente en las situaciones cómodas.

Tenía aún la vestimenta típica de alguien de su clase, ya que venía de la entrevista con Carlos Osoro, pero pronto se deshizo del solideo para mayor comodidad. Pegó un rápido vistazo a sus compañeros, decidió acercarse para entablar conversación con alguno de ellos.

- Buongiorno, figli di Dio! ¿Qué tal todo? Soy Angelo Scola, Arzobispo de Milán - se fijó en el chico árabe, y se acercó a él. Siempre tuvo una buena reacción a los acercamientos de cultura. Le saludó con un pequeño gesto con la cabeza - Sabah al-khyr, hermano.

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29/11/2015, 16:16
Emilia Gallardo de la Hoz

Emilia se fijaba en cada persona que llegaba al jardín de la Mansión Rocks. ¡Cuánta gente joven! Sonreía, pues sabía que encajaba perfectamente entre ellos. Es cierto que tenía algunos años más que ellos, pero estaba segura de que su espíritu era tan lozano y vital como el de cualquier treintañero. Además, de vez en cuando echaba una mirada ensoñadora al chico árabe.

Nunca se habría atrevido a hablar espontáneamente con cualquiera de esos desconocidos de no ser por la llegada de Angelo Scola. ¿Lo conocía? ¡Por supuesto que sí! No necesitaba que el hombre se presentarta. Cardenal italiano, nombrado Arzobispo de Milán hacía unos pocos años. ¡Un sueño verlo ahí! Y nunca habría perdido la oportunidad de intercambiar aunque fuera unas pocas frases con él. No es que ella fuera una meapilas que iba a misa cada día, pero sí que se dejaba ver por la parroquia algún que otro domingo, acompañada de Nati. Al fin y al cabo, ella era de la vieja escuela y se sabía los nombres de todos los papas que habían pasado por el Vaticano en los últimos cien años. Así como de los cargos más importantes en la actualidad. Y ver aparecer en esa fiesta -¡Fiesta a la que ella también acudía!- a una figura como Angelo Scola, tan imponente con sus ropas, fue casi demasiada emoción para ella.

Se acercó con ojos reverenciadores, bastante nerviosa al ver que Su Excelencia estaba entablando conversación con el joven árabe. Cuando se encontró a unos pocos metros de él, se inclinó con respeto-. Reverendísimo Cardenal Scola, qué honor encontrarle por aquí –Sonreía agitada, sin poder contener su excitación-. Soy Emilia Gallardo, una humilde católica. A sus pies.

No tenía ni idea de si era o no protocolario que ella se acercara así sin más a alguien tan importante de la Iglesia. Pero, en ese momento, no le importaba demasiado.

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29/11/2015, 17:11
02 Muerto - Jesus Cortes Heredia

-Si sabe lo que le conviene cuando acabe la subasta el coche estara en la puerta-dijo tranquilamente a la chica que se le habia acercado.Siguiendo su mirada vio que compartian gusto,al menos en los coches.

-Bonito coche,por cierto mi nombre es Jesus-le dijo mientras la observaba,era una chica morena bastante guapa,llevaba una bolsa de deportes y alguien la acompañaba.

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29/11/2015, 23:37
01 Muerto - Judith Gomez Fuertes

- gracias - decía pensando que su coche blanco había sido una buena opción - Judih Gomez, un placer,... espero que no nos hagan estar aquí anclados demasiado, el camino hasta aquí ha sido muy largo.

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30/11/2015, 00:20
02 Muerto - Jesus Cortes Heredia

-Creo que esa es la idea,asi nos ponen ansiosos y se aseguran mayores pujas-dijo mientras ojeaba su reloj.

-¿Damos un paseo por aqui?Asi estiramos un poco las piernas-le dijo mientras señalaba el jardin de la gran mansion.

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30/11/2015, 01:15
01 Muerto - Judith Gomez Fuertes

- en fin, ¿por que no? Llevo bastantes horas sentada - mirando a su chofer, bastante distante, estira el cuello haciéndolo crujir un poco, para acto seguido lanzar la bolsa deportiva con relativa precisión, cayendo esta a un par de metros del chico, que siempre atento la recogió en un instante. No era pereza de ir a entregársela, solo que no le apetecía cargar una bolsa sin necesidad de ello.

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30/11/2015, 10:59
María Carel Rodríguez

"Bufff", María apretó los dientes y abrió el bolso. "Qué mala pata con la vieja, jolines. Ha tenido que ir a buscar al fraile justo ahora".  

Tenía migraña y llegaba gente que parecía desenvuelta, relajados. Ella no. Quizás el reloj del taxi estaba a deshora o no tenía que esperar allí, podría haber otro jardín. ¿Por qué se había movido esa mujer? De todos los presentes, era la que parecía más inofensiva. Se parecía a la dueña de la frutería del mercado, que era muy maja, pero como si la hubieran emperifollado para una gala. Qué prisa en ir a buscar al cura… Parecía del Vaticano. Muy extraño todo.

Inspirando profundamente, María se movió. La inspección del bolso le daba otro empujón, porque no llevaba tabaco. Decidió acercarse al hombre de gafas de sol que estaba sentado en un banco. Parecía el más alejado del gentío, no hablaba con nadie, y el punto de las gafas era importante, así no podía juzgar si tenía cara de antipático o no. Eso sí, tenía pinta de fumar. 

"Tú, normal", se decía mientras avanzaba. "Como si nada, tú tan normal".

-Hola, ¡hola! -dijo al llegar a su lado. -¿Qué tal? Digo... Oiga, siento molestarle, pero es que no estoy segura de a dónde ir, decían que esperáramos en el jardín, pero claro, bueno, el jardín... Yo no sé si esto es el jardín. O sea, sí, pero como ha venido tanta gente, a saber. Estoy un poco perdida. ¿Usted sabe si nos tenemos que quedar aquí? 

 

 

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30/11/2015, 12:24
Salvador Cabezón Delgado
Sólo para el director

Era una mañana fría de Diciembre, Salvador se levantó de la cama sin saber lo que le iba a acontecer ese día. Se duchó, se vistió y se arregló para ir al trabajo, normalmente no desayunaba, sino que tomaba algo en la cafetería del trabajo. ¿para qué gastar lo de casa si el café del trabajo podía deducirlo a hacienda?.

Bajó en el ascensor hasta el garaje, allí subió a su Audi A6, un coche imponente pero que ya tenía unos años, el coche estaba un poco sucio y se observaban bastantes rayazos y algún golpe en la chapa. Salvador no era buen conductor y tampoco amigo de dar partes al seguro, ademas no quería pagar la parte correspondiente a la franquicia. No le importaba demasiado aquel coche, pues si todo iba como él había planeado, pronto podría comprarse uno infinitamente mejor.

Salió a la calle y condujo hasta la funeraria, llegó un poco tarde, algo que en él era algo bastante habitual, ¿por qué tenía que llegar pronto si él era el jefe? - pensaba.

Al llegar se encontró que ya había bastante gente, algo raro a aquellas horas, 

- Vaya, debe haber fallecido alguien conocido. Se dijo a si mismo.

Al llegar a su despacho miró el nombre de muerto, le sonaba de algo, pero no lo conocía. Salvador se quedó con la duda y se dirigió a la sala. Vió que el féretro aún no estaba expuesto por lo que el cadaver estaría en la sala de preparaciones. Entró en la sala de preparación y no había nadie, sin embargo efectivamente allí estaba el fallecido, encima de una mesa metálica, ya estaba maquillado y vestido, listo para exponerlo a sus familiares y conocidos. Salvador se fijó en su cara y no supo reconocerlo, sin embargo algo le llamó la atención. En el bolsillo de su traje el fallecido tenía una especie de papel o sobre que sobresalía un poco, Salvador miró a su alrededor para ver que no hubiera nadie y cogió el sobre, lo metió en su bolsillo y salió de la sala. Una vez de nuevo en su despacho, Salvador abrió el sobre y encontró una elaborada invitación para una Subasta en la mansión Rocks.

¿La mansión Rocks? .- Salvador le daba vueltas en la cabeza a esos nombres. Decidido a saber de que se trataba encendió la pantalla de su ordenador, desbloqueó su sesión y comenzó a cerrar las ventanas de páginas pornográficas que tenía abiertas, abrió un navegador y buscó "Subasta Mansión Rocks" lo que descubrió le pareció fascinante. Aquella gente vendía cosas rarísimas y algunas con unos poderes increíbles. Siguió un buen rato mirando y al cabo de unos minutos estaba completamente convencido, se fijó en la invitación, miró el nombre del fallecido. ¿Por qué no? pensó para él mismo. La invitación no tiene nombre, y mi dinero es igual de bueno que el de cualquier fiambre, Se dijo. Una sonrisa maquiavélica se dibujó en su cara, observó la invitación y vió que la subasta comenzaba al medio día, así que no se lo pensó más, no tenía mucho tiempo.

Salvador cogió la invitación y salió de su despacho, por el camino le dijo a uno de sus empleados que tenía que hacer una gestión, subió al coche y volvió rápidamente a su casa para cambiarse de ropa y ponerse algo más adecuado para una fiesta de la aristocrácia.

En casa buscó en su escondite tras la despensa la lata de galletas en la que guardaba los billetes grandes y cogió de la misma un fajo de 50 billetes de 500 Euros, era mucho dinero pero seguro que conseguía algo con mucho más valor. También cogió su chequera por si fuera necesario. Buscó la ropa más llamativa y elegante que tenía y bajó de nuevo al garaje, ya iba un poco tarde, sin embargo no le importó demasiado, subió al Audi y condujo bastante rápido por las calles de Madrid, tanto que a punto estuvo de ocasionar un par de accidentes.

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30/11/2015, 12:32
Salvador Cabezón Delgado

El tráfico en Madrid a aquellas horas era bastante caótico, pero ya estaba llegando. El sitio era relativamente fácil de encontrar, sin embargo el tiempo se le echaba un poco encima, así que decidió pisar un poco más el acelerador. Pasó varios semáforos en ambar y un par de ellos diréctamente en rojo.

Al girar una esquina por fin pudo ver la entrada a la mansión, en ella había ya algunos coches parados y gente bajando de los mismos. Dirigió su coche hacia donde estaban parados los otros coches y trató de estacionar el vehículo pero Salvador no era precisamente habilidoso con el volante por lo que dando marcha atrás golpeo bastante fuerte a una de las Limusinas que estaba estacionada hundiéndole media puerta.

!BUM!

Salvador, se dió cuenta del golpe y volvió a salir hacia delante... CagonDios! Joder... a ver si nadie lo ha visto.... salío con el coche y lo aparcó un poco más lejos, con suerte nadie asociaría su coche con el golpe....

 

Salvador bajó del coche haciéndose el despistado, sin embargo observó que en el jardín había varias personas que estaban mirando. Forzó una sonrisa en la cara y se dirigió hacia el grupo, como si nada hubiera ocurrido.

- Buenas tardes! dijo. Con suerte el coche no es de ninguno de estos.... pensó.

 

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30/11/2015, 12:54
Daniel Reverter
Sólo para el director

El día anterior a la fiesta, Daniel quedó con un conocido de Julio, su compañero de piso, al que su amigo había definido como un "conseguidor". Daniel había hablado en numerosas ocasiones de las fiestas con subastas en casa de los Rocks, y un día le dijo que podía ayudarle a conseguir una invitación para la fiesta. Martínez (ese era el genérico nombre por el que conocía al tipo) podía conseguirte lo que quisieras, siempre por un precio razonable.

Daniel y el tal Martínez estuvieron tomando un par de cervezas durante las cuales, tras un par de comentarios discretos, intercambiaron sendos sobres, uno con la cantidad acordada por sus servicios y el otro con la invitación. En menos de cinco minutos aquel hombre se fue tras una lacónica despedida, dejando su cerveza a medias. Daniel apuró la suya y volvió a casa, esperando no haber sido estafado como un pardillo.

Esa noche apenas durmió unas horas, por los nervios ante su gran oportunidad en mucho tiempo de cumplir sus sueños. Tras comprobar que la camisa estaba perfectamente planchada, preparó la chaqueta y los vaqueros sobre la cama. Antes de salir en dirección a la mansión, estuvo una media hora buscando en internet todas las imágenes posibles sobre diferentes modelos de relojes de cuco, para estar seguro de no dejar escapar su objetivo.

Antes de salir, se despidió de Julio y le recordó que se llevaba prestado el coche. Éste se acercó a la puerta y le dio un apretón de manos, mientras ponía su otra mano sobre el hombro de Daniel.

-Suerte tío, espero que consigas lo que buscas.- Daniel había sido muy escueto sobre el tema, y apenas le había dado información sobre sus intereses. Su compañero le respondió con una sonrisa y un asentimiento de cabeza, antes de girarse a coger el ascensor.

Ya en la calle, se puso al volante del megane blanco de su amigo. "No será un último modelo de Lamborghini, pero al menos Julio lo cuida como si fuera su hijo y está impoluto". Mientras conducía camino de la casa de los Rocks, sintió un escalofrío al pensar en todos los ricachones snobs y repelentes que probablemente se encontraría allí.  

Notas de juego

Espero que todo vaya correcto en tu post, ahora me pondré con el post de mi llegada a la fiesta para el resto de mis compañeros.

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30/11/2015, 13:01
Daniel Reverter

Tras seguir sin mayor dificultad las indicaciones del GPS, Daniel llegó con su renault megane blanco a la entrada de la mansión de los Rocks, pasó por delante de los aparcacoches y se fue directamente hacía al final de la zona de aparcamiento. Allí le llamó la atención un coche con una importante abolladura en la parte trasera.

"Me parece que algún aparcacoches se va a llevar una buena bronca hoy". Apretó ligeramente los puños mientras imaginaba la escena, y automáticamente se obligó a pensar en otra cosa. "Ah sí, la fiesta. La invitación decía que me presentara en el jardín y que allí sería recibido. Vamos allá."

Al mostrar su invitación y cruzar la puerta de entrada, le indicaron amablemente como llegar al jardín. Por el camino, se detuvo ante un espejo para observar que iba correctamente dentro de la sencillez de su atuendo. La camisa blanca metida por dentro de los vaqueros oscuros, pero sin arrugar. Y la chaqueta azul marino cerrada solo por el botón superior. 

Una vez allí, observó que ya había un montón de personas de todo tipo esperando: Dos jóvenes hablando sobre sus imponentes cochazos y como tratarlos; un llamativo grupo compuesto por un cardenal, una señora mayor y una especie de jeque arabe; otra mujer que parecía algo azorada junto a un señor con barba; otros dos que aparentemente preferían disfrutar de la espera en solitario y un señor bigotudo que debía haber llegado un instante antes que él, pues oyó su saludo cuando estaba franqueando la entrada al jardín. Observando el panorama, agradeció no haberse puesto corbata. La gran mayoría de aquella gente le estaba provocando una sensación de incomodidad y cierto desasosiego, hubiera sido terrible sentir además la presión de una corbata alrededor de su cuello.

-Bu... buenos días a todos.- Dijo con un volumen probablemente demasiado bajo para que todos pudieran escucharle. Notaba que la frente se le perlaba con gotas de sudor.

Tal vez porque reconoció cierta similitud de sensaciones en la mujer azorada (¿incomoda, tal vez?), o por la amabilidad que transmitían las facciones del hombre de barba, decidió acercarse a esta pareja. Parecía que ella acababa de dirigirle unas palabras al hombre, así que, por miedo a interrumpir y parecer maleducado, dijo escuetamente:
-Hola, ¿que tal? ¿Llevan mucho esperando?

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30/11/2015, 16:27
Angelo Scola

El Cardenal Scola recibió con una sonrisa el saludo de Doña Emilia, e inclinó levemente la cabeza. Cuando la señora ya estuvo a su lado, agarró una de su mano derecha con ambas manos, e inclinándose un poco besó las manos de Emilia. Se recompuso y volvió a mirar a los ojos de aquella mujer:

- Soy yo, siervo de Cristo, quien está a sus pies, señora. ¿Puedo ayudarla en algo?

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30/11/2015, 18:32
02 Muerto - Jesus Cortes Heredia

-Judith,¿le apetece jugar un poco?-pregunto,y sin esperar respuesta y viendo su cara de extrañeza prosiguio-¿Quien crees que sera el mayor competidor en la subasta de todos ellos?-dijo levantando un poco la cabeza como señalando a los presentes.