La droga y tu deseo incontenible de sexo hablan por ti. ¿Qué hay de malo? No has hecho daño a nadie ni te lo has infligido a ti misma. ¿La maría te apacigua esa necesidad? Puede. Mientras que la coca te viste de una efímera energía desbordante.
Frisbee se ríe a carcajadas, sorprendida con tu ocurrencia, también ella va puesta hasta las cejas. -Me gusta la hostia esta chica- te dice robándote más húmedos besos. Prepara cuatro chinos y tú, no sabes cómo, ya tienes la polla de Brendan dentro de la boca. No es el tamaño de Will, pero te vale. Eres muy golosa después de tanto tiempo, parece que te va la vida en ello.
-Vale, tía, que no vas a dejar nada para tu trasero- jadea Bren. Cambias su sexo por el chino que te pasa su hermana. A cuatro patas, nuevas fumadas, tu cerebro estallando en un big bang de nebulosas de mil colores y tu cabeza enterrada en el coño abierto de una Angie despatarrada en el sofá. No sabes si comes coño o culo, todo está rico entre calada y calada. El chico se arrodilla detrás de ti y te penetra, tú sientes el dolor como lejano, ausente de tu cuerpo, pides más y entonces sí que notas el duro miembro de Bren hundiéndose muy en tu interior, intenso y rápido.
-Te va que te rompan el culo, eh, tía. Me molas, Alice, me molas...Ufff...Que buenooo...
Frisbee te roba besos, a ti y a Angie, lo mismo mama de tus tetas que de los enormes pezones de Angie. La tatuadora también está muy loca, canta y baila, fuma, te besa, te coma la boca. Tú metes intensas caladas, estás perdidísima, sacudida por el frenético vaivén de Bren.
Pero, hasta donde tu cerebro es consciente, lo estás pasando de puta madre.
Puedes dar rienda suelta a tu creatividad. Bueno, como siempre ;-)
Ahora una polla, ahora un coño, ahora un chino de coca...no importa, su boca siempre estaba ocupada, aunque fuera con otra boca, devorando lo que se le ponía por delante, gustando de esta sensación de dejarse llevar, de sentirse usada pero al mismo tiempo ser ella quien marcara los tiempos. Cuando tiene oportunidad, masturba a ambas chicas, y también la polla si es que se cansa del calor de su culo o de su coño. Todos los agujeros estaban siendo utilizados por todos en una delirante coreografía sexual que parecía no terminar nunca...la droga los mantenía activos y deseosos de más, al final esto reventaría por algún lado, puede que no pasará nada y que al final terminaran cayendo dormidos o puede que alguien acabara en el hospital.
Carpe...diem... Dice su cerebro que funcionaba con intermitencias, enloquecido y medio apagado, solo los neurotransmisores estaban en pleno funcionamiento...una puta locura.
Bua ni puta idea de cómo puede acabar esto, puede pasar cualquier cosa pero Alice no está en disposición de pararlo, ahí se lo folle a todos hasta que alguien la pare o pierda el conocimiento jajaja
Motivo: grado de intoxicación
Dificultad: 0
Habilidad: 0+3
Tirada: 5 7 8
Total: 7 +3 = 10 Éxito
Motivo: recuerdos
Dificultad: 0
Habilidad: 0 -3
Tirada: 1 7 10
Total: 7 -3 = 4 Éxito
Motivo: hora despertar
Tirada: 1d10
Resultado: 7(+6)=13 [7]
Se trata de tiradas para el turno
Cuando despiertas, desnuda en una gran cama, tienes un horrible sabor de boca, la notas pastosa, seca. El cerebro te pulsa con constantes agujas que se te clavan crueles tras los ojos. Descubres que Angie te abraza y cubre la espalda, y Brendan frente a ti, ambos dormidos completamente, tú en medio en plan sándwich. Lo primero que tu mano toca es el miembro del chico, por instinto empiezas a masturbarlo, él apenas se remueve, tú sigues a buen ritmo hasta que aquello crece y se acaba corriendo entre tus dedos, aunque él aparte de caérsele la babilla y un gemido en sueños, continua durmiendo. Satisfecha y sonriente te das la vuelta para besar a Angie, chupas sus pezones y, algo mareada, desciendes, besando su cuerpazo, lamiendo sus glúteos, vaya culazo, te dices, te lo follarías ahora mismo.
Pero cuando vas a comerle el coño te das cuenta de la luz que entra por las rendijas de las persianas. Tu cerebro entonces comprende que ya no estás en la fiesta, o en la orgía, lo que fuese aquello. No. Es de día. Te incorporas de repente, pierdes el equilibrio y acabas cayéndote al suelo. Un buen golpe, menos mal que sin consecuencias. Bueno, el efecto es que tienes que ir al baño corriendo, en realidad gateando, y allí, pues nada, echas las papas por arriba y por abajo y vuelta a empezar. Te sientes malísima.
Total, te quieres morir. Y después, morirte otra vez. Qué recuerdas. Follar, follar mucho. Y fumar. Y la coca. Y la polla de Bren y los coños de las dos chicas. Notas el cerebro disparado. ¿Y eso qué es, música? Viene de abajo. ¿Y cómo coño llegaste al piso de arriba? ¿Qué hora es? ¿No se suponía que la coca produce insomnio?
Que eso, que te quieres morir. Vale, sí. Pero todavía recuerdas el gustito de los orgasmos que has gozado. Ay, que te duele un poco el culo. Joder. Pero qué gustito. Ains. Para repetir. O no. O sí.
Tirada en el suelo del baño, Alice gimotea llevándose las manos a la cara, debe estar echa un Cristo, puede sentirlo. Dios que noche...¿Cómo había llegado a esto? Uff le dolía todo...le dolían hasta partes del cuerpo que ni sabía que tenía...
oh mierda Michelle! Mierda mierda mierda... Sale del baño con premura, buscando su ropa y con ella su teléfono, tenía que averiguar qué hora era...tenía que... Las ganas de vomitar vuelven pero ha encontrado el teléfono justo a tiempo. Empieza a preguntarse si no necesitará ir al hospital...
Contiene las arcadas...es fácil porque ya no tiene nada en el estómago... comprueba los mensajes...
Si no te encuentras a ti misma, vas a encontrar tu teléfono. El móvil que finalmente tienes entre tus manos no es el tuyo. Está bloqueado, pero ves la hora, ¡las 14.09! Buscas tu ropa, pero nada, mucho trapo pero nada tuyo. Te pones una camiseta gigante de Angie y, tras una nueva vomitada, bajas las escaleras como puedes.
Te cuesta un horror. Como si descendieras por la cara norte del Everest. ¿No sería mejor ducharse? En los últimos escalones te caes, medio rodando tres o cuatro. Te das un buen golpe en la rodilla y en la frente. Un poco sin sentido alguien te recoge y tira como puede y te sienta en el sofa. Tu visión borrosa descubre que es Frisbee. La tía va en bragas con las peras al aire.
-A ver...no es nada, una mierda de corte. Espera, honey -Se va a buscar algo, regresa, te cura con algodón y alcohol, un poco de yodo, una tirita- Joder, tía, como te va que te follen el puto culo. Dos veces te dio pero que bien Bren, lo has dejado roto. Jjajaja. Menos mal que has entretenido a su chica. -Ni te acuerdas -.
-Estás hecha una puta mierda. Te preparo un ponche, ¿puedes darte una ducha tú sola? Comes algo, y nos piramos a la ciudad. O te quedas aquí, no me parece que estés para nada. Comes y te acuestas. Yo tengo que ir al curro pero regreso esta noche. -Te da un beso de los suyos. -Llama al trabajo y di que estás mala o lo que sea, ¿de qué curras?
Frisbee sonríe -Y repetimos con la calma. A mí me gusta todo lo tuyo, tu culo, tus tetas, tu coño. Tu boca. Ha sido una pasada follar contigo.
-Yo...no...eh..vale gracias.- dice por la ayuda con la herida de la frente, aunque ni siquiera le duele aún. Aún.- Mi...-iba a decir su nombre pero se contiene- Mi jefa va a matarme...tendría que haber estado esta mañana...oh dios...me duele todo pero...-está bastante agobiada y avergonzada- No no puedo quedarme, guapa, tengo que ponerme al día, la única manera de no perder el curro es intentar... - no sabía ni qué...jamás había faltado al trabajo ni llegado tarde, siempre había estado donde y cuando Michelle lo había requerido. Oh dios mío... ¿Qué había hecho? En el peor de los casos Michelle estaría furiosa y en el mejor, preocupada tras tantas horas sin dar señales...
-Me-mejor me voy, lo siento nena...ha sido una noche genial, de las mejores...necesito encontrar mi móvil...mi ropa...no te preocupes llamaré un taxi...-dice, acelerada, trata de levantarse del sofá y enfoca su vista en el salón a duras penas, tratando de ubicarse y buscar la ropa, de momento sólo con los ojos, apenas podía tenerse en pie.
No te sostienes de pie, tú misma lo compruebas cuando el mundo gira y te derrumbas en el sofá. Tienes calor, y luego frío, y otra vez calor. Lo intentas de nuevo pero si no te ayuda Frisbee, te vas al suelo de cabeza. Te pasa el ponche y una tostada, no te sienta mal, aunque la visión no enfoca y las fuerzas te fallan.
-No estás para nada, honey -repite Frisbee- Nos pasamos un huevo, pero fue la puta hostia. Descansa, recupérate, el mundo no se para sin ti. -Te deja tumbadita en el sofá, te arropa con una manta. De pronto tienes el móvil en tus manos, acostada revisas mensajes, tranquilizas a Brenda, nada que te quedaste en casa de una amiga. Lo mismo a Will y Robby, alarmados. También se lo comentas a Rose.
Hay tres llamadas de Michelle a diferentes horarios, y un par de mensajes de voz. En el último te dice que contactes en cuanto escuches el mensaje. Es bastante profesional en su contenido, pero no se te escapa el tono de preocupación en la voz. Le das a llamar...
¿Y qué le vas a contar? ¿la verdad, una trola? No estás para acudir al trabajo hoy ni en broma, por lo menos hasta mañana...
Alice tiembla y no solo por el efecto de la resaca demoníaca que tiene encima. Duda, pero al final está decidida...tenía que contarle la verdad a Michelle. Ella al menos se merecía eso, y si luego no quería volver a verla, pues...
Alice le da al botón de llamar e intenta serenar su voz lo más que puede, aunque debe sonar ronca y floja casi agónica.
-Hola Michelle, siento no haberte avisado...la noche se complicó. Quede con la chica de los tatuajes y...la cosa se fue de las manos...consumimos...mucho.- hace una pausa, se lo piensa- muchísimo...estoy como enferma, no tengo fuerzas y casi no consigo enfocarnos vista. Pero no quiero que te preocupes, estoy con ella y me está cuidado...y el trabajo, pues... puedes mandarme lo que sea por e mail y hago lo que pueda...si aún no es tarde.-traga saliva porque tras éstas últimas palabras había una especie de ruego o súplica para que no la despidiera, pero no sabía si eso sería factible.
-¿Tú estás bien? Ahora solo importa tu salud. Ya hablaremos en otro momento. ¿No sería mejor que acudieras a un hospital?
No te ves para eso, le comentas que no es necesario. Al menos respiras un poquito más tranquila, Michelle parece mosqueada pero sobre todo preocupada. Normal. Ella nota tu angustia y ansiedad, que para algo lleva años en el mundo de los negocios.
-Cálmate, pequeña. No es tarde. Soy exigente y algo tirana, pero no intransigente. Creo en las segundas oportunidades. -pausa de unos segundos -¿De qué estás hablando, alcohol, drogas? -otra pausa- ¿Te has...te ha descontrolado? -pregunta acerca de tus inclinación al castigo, al dolor...- Si empeoras no dudes y te metes en un taxi para el hospital.
-No no creo que sea necesario ir al hospital...--está visiblemente más tranquila y respira hondo, continua hablando con los ojos cerrados para intentar centrar toda su atención en Michelle.
-Alcohol y... marihuana y...cocaína...- reconoce despacio, está bastante segura de que eso fue todo- y...no creo que sólo fue sexo...duro si...pero yo estoy bien y los demás parece que también...no recuerdo mucho pero debo dar un espectáculo...- sus palabras son algo amargas, no se siente nada bien con lo sucedido- hace un rato me he caído por una escalera y tengo un golpecito en la frente pero no es nada, te lo digo porque verás mi cara mañana y no quiero que te enfades.No es nada...- asegura una y otra vez. Hace una pausa, intenta contarle más cosas de la noche pero hay demasiadas lagunas- no le hice daño a nadie y creo que nadie me lo hizo a mi...bueno me duele todo el cuerpo y el culo, parece que lo pedí pero... no recuerdo demasiado...lo siento.- pide disculpas pero no sabe muy bien porqué o porqué de todo.
Al otro lado de la línea telefónica hay silencio tras escuchar tu confesión. Al cabo escuchas su voz, serena y pragmática.
-La juventud es así. Lo que no hagas ahora raro será que lo hagas con cincuenta. Bueno, a veces no es tan raro...-se ríe un poco. Lo que pueda pensar de todo lo que te has metido y hecho, se lo reserva. -Si mañana estás todavía con las secuelas del colocón, quédate donde estás, descansa. Te voy a enviar unos ficheros por correo. Déjalos para mañana, no quiero que metas la pata. Ah, acuérdate de la cita del viernes por la mañana. Si la mantienes, confírmamelo. Nos vemos el viernes, cualquier cosa avísame sin pensártelo.
No ha ido mal, te dices. Supones, que no tienes la caebza para pensar demasiado. -¿Ves? Solucionado. Eres una dramas. -bromea Frisbee. Se sienta en el borde del sofá- A ver, que sí nos pasamos, vale. Nosotros estamos acostumbrados, debí frenar, honey, pero joder, cuando estás ahí follando, bebiendo, montándotelo de puta madre con una tía molona, pues yo que se, te descontrolas ¿no? Y, joder, mierda, que yo me descontrolo mucho.
Su expresión se entristece un poco, sintiéndose culpable. -Lo siento, Alice. Va, duerme, que te cuidamos entre los tres. Pronto estarás nueva. -Te da un beso en la mejilla.
Alice suspira y, aunque se siente un poco menos mal por haber sido valiente y haberle contado toda la verdad a Michelle, para ella ha sido de pasar de estar con la mierda hasta el cuello a "solo" llevarla a la altura de las tetas. Ya no se ahogaría pero seguía oliendo a mierda. Antes de terminar la llamada, le confirma a Michelle la cita del viernes por la mañana y le asegura que tendrá sus tareas hechas en cuanto se recupere. No lo dice porque no quiere gafarlo, pero ella espera estar más que bien mañana por la mañana. Puede que antes...total, nadie se había muerto de una resaca...¿No?
Cuelga el teléfono y se queda acurrucada escuchando a Frisbee, fuerza una sonrisa para ella.
-Si supongo que soy un poco dramática...supongo que no se puede ser pasional para lo bueno y no para lo malo ¿No? --se atreve a bromear.
-No te preocupes, no es justo que te lleves toda la carga...no hice nada que no quisiera, nos descontrolados todos...solo que para mí era la primera vez y debí haber tenido más cuidado.- se piensa en si aclararle o no a Frisbee lo de sus pequeños problemas pero finalmente decide callarse con respecto a su tema con el dolor, no quiere preocuparla ni asustarla.
-Estaré bien, gracias por dejar que me quede... igualmente creo que esta noche debería volver a la pensión, así vosotros podréis volver a tener juega esta noche, que estaréis más enteros que yo...- se ríe, pero quiere dejar claro que no habría más sexo ni más drogas por hoy...no para ella al menos.
-Buah, mi hermano y Angie dormirán todo el puto día los muy vagos. Luego a follar seguro. Yo paso, que no me lo monto cada día con una tía distinta, joder, honey. -Se va vistiendo mientras te habla, se pone su chupa motera, coge el casco.
Antes de irse ves que se mete una raya de coca. la snifa, pilla su mochila, te da un beso- Ya te he dicho que me molas mucho, honey. Ahora solo quiero juergas contigo. -Y se despide esta vez con un beso de los suyos que aceptas medio adormilada.
Duermes todo el día, a intermitencias. Al anochecer, Brendan calienta la sopa que ha dejado preparada su hermana. Algunas tostadas y birras para ellos dos, agua natural para ti. Estás mejor, pero te olvidas de regresar a la pensión, tu cuerpo no te pertenece, tu cabeza es un saco de boxeo. La conversación es relajada, te comentan efectos de la coca, que tranqui, que no te vas a enganchar. Angie es bastante descarada y quizás tonta, la tía te va provocando con poses, con gestos y con carne, igual se cree que les vacilas.
Bren es más listo, te pasa unas pastillas, medicamentos para el dolor de cabeza, vitaminas, un diurético, y se lleva al piso de arriba a su chica antes de que esta quede como una gilipollas. Baja a por ti y te ayuda a subir las escaleras, te mete en la cama de Frisbee y te duermes otra vez.
Amanece, te despierta el ruido de la ducha. Luego aparece del baño una Frisbee desnuda secándose el pelo -Ey, qué pasa, tía. -Te encuentras mejor, con apetito y sed, la cabeza no te pesa, tu joven cuerpo ya ha salido del bache, casi.
Motivo: Recuperación
Dificultad: 0
Habilidad: 0+4
Tirada: 1 3 6
Total: 3 +4 = 7 Éxito
No estás para regresar al trabajo "presencial" o la pensión. Puedes decidir que sí, claro, tú misma, bueno, Alice misma XD
Despierta de nuevo, el día de ayer no estuvo tan mal, al final, descansar y estar de tranquis. Resulta que el hermano de Frisbee es un tio bastante majete y de buen corazón, gracias a las pastillas que le dio ahora se encontraba algo más repuesta...pero aún tenía como una mala resaca y sabía que no podía presentarse así ante Michelle. Pero tal vez hoy pudiera trabajar aunque fuera desde el móvil...
-Ey...hoy ya me siento mejor, pero, si no te importa, creo que aún necesito quedarme ¿tienes agua aquí? Me muero de sed...- pregunta atreviéndose a levantarse de la cama y tantea cómo va su flojera de piernas.- Voy a llamar a la jefa para decirle que no podré ir pero que trabajaré on line...¿no tendrás un ordenador que me puedas dejar, verdad?- le pregunta, sabiendo que quizás sea abusar, pero preferiría usar un pc para no dejarse la vista en el móvil.
Frisbee corre las cortinas, no son ni las ocho de la mañana, pero ya hace solecito. -Tengo el Mac en casa, aquí no, pero espera. -Se larga y regresa al poco con un portátil, el de su hermano. Luego comprueba tu tattoo -Perfecto, mola mucho, tía. -Te da una palmada en las nalgas y luego un besazo -Va a molar cuando te den por detrás, Carpe diem- Se parte la caja riéndose con su propia broma.
Te duchas, desayunas, te vas animando. Contactas con Michelle, está de acuerdo, tú estás mejor, se alegra. Claro que después su alegría te llega en forma de más archivos y una relación de locales para llamar e indicaciones para concertar citas. Te toca espabilar. Poco a poco.
Frisbee se pasa la mañana tomando el sol y nadando en el lago. Tiene energía la chica, o es la coca que se mete. Su hermano y Angie ni asoman de su dormitorio. Tú trabajas, a medio gas, pero con un ritmo constante. Comes con Frisbee, la tatuadora te cae bien, no es una gran conversadora, tiene las ideas claras, es directa, pasa de muchas cosas, pero sí, notas que es una amistad peligrosa. ¿Y..? Entre bocado y bocado os vais besando. La verdad es que está muy buena y sus besos tan salvajes te gustan. Conforme tu cuerpo se recupera, tus ganas de ella, regresan ligeramente.
A media tarde te ves con fuerzas para volver a la pensión. Frisbee se ofrece a llevarte, sin problema, sí o sí.
-¿Y si te quedas? Mañana a primera hora te llevo al trabajo. -te tienta, cuando cierras el pc. No espera respuesta y el nuevo beso te agita el corazón. -Cenamos... Tú y yo a solas...o con ellos, si te apetece. Nada de putas drogas. Me gustaría que te quedases, tía. Aprovechemos. Que me pones mucho, y si me dejas así luego me tengo que masturbar pensando en ti. Y prefiero tu lengua a mi dedo.
El trabajo la va haciendo espabilar pero se nota muy lenta por lo que no es tan productiva como quisiera y debe dedicar todo el día para las tareas acumuladas. Por suerte se va despejando conforme pasan las horas y solo se dedica a trabajar, beber agua y fumar... sólo tabaco, claro. Imposible pensar en otra cosa.
Finalmente cierra el portátil y casi se tumba sobre él, agotada pero satisfecha, con una sonrisa tonta dibujada en la cara ante las propuestas de Frisbee. Lo que le parecía increíble es que su propio cuerpo ya le estuviera pidiendo la revancha...y no sabía si podía decirle que no.
-Vale vale...soy muy fácil de convencer por una cara bonita...- acepta devolviéndole los besos, suaves pero juguetones.- pero con calma hoy vale? Y mañana nos vamos por la mañana, voy a poner el despertador y voy a pincharte en el culo hasta que te levantes de la cama ¿Si?- pone sus condiciones, divertida, cansa y al mismo tiempo, lujuriosa- Pero mejor solas, lo de la cena y lo de después...tu hermano es un encanto pero mi cuerpo no está para una segunda ronda con él y Angie es...bueno, para otro momento.- se disculpa, no queriendo sonar ofensiva ni incómoda.
Te dejas convencer, fácil. Sus manos enmarcan tus mejillas y te besa con devoción, un aperitivo para esta noche. De todas formas te acuestas un rato, hasta la cena. Frisbee no trabaja hoy al parecer, y cuando despiertas ha preparado una cena, más o menos, junto al lago. No es que te de demasiada conversación, está claro que es alguien de acción. Te propone dibujarte otro tattoo, cuando quieras, gratis, por supuesto.
La otra pareja cena dentro, y cuando subís a la habitación de tu nueva amiga, esta les saca un dedo a su hermano y Angie. -Que os den apollargados - Brendan responde con el gesto de cascársela, riendo. Y Angie tuerce la boca, molesta. Por el dedo, o porque se queda sin fiesta con vosotras.
Como la loba que es, le falta tiempo para tirarte en la cama y colarse entre tus piernas. A ti ya se te han olvidado dolores y malestares, que es lo que tiene la mente humana, cuando te encuentras bien te olvidas, no fue tan malo, un día para recuperarte, Michelle se ha portado, tú has sacado el trabajo, estás en forma, tienes ganas.
La vida es bella. Excitante. Carpe diem.
Y Frisbee te ofrece ese carpe diem con su boca y sus dedos dentro de ti. Te come el clítoris y te regala con una penetración de un dedo por detrás pensando que te mola más que por delante. Y es un dedo solo, pero entra y sale que te da un dolorcito rico y con su lengua un gusto delirante. Y visto y no visto te corres para ella más pronto que tarde. Después trepa hasta tu boca, besos y más besos hasta que se seinta sobre ti, pilla de la mesita su cajita y enciende un peta.
-Es solo maría. Esto no es droga. Toma, dale. Nada de coca, solo para pillar el punto mientras me follas. Porque me vas a follar mucho toda la puta noche, ¿no, honey?
¿Le das una calada, Alice? ¿O pasas? El efecto de la otra noche fue guapo antes de la coca, ¿qué vas a hacer?
Puedes finalizar la escena a tu gusto. Lo que hacéis o dejáis de hacer, si fumas o no. En base a eso, desarrolla el turno. Piensa que por la mañana ya te llevará a la pensión. Después viene la cita con los de BDSM. Entonces abriré nueva escena.
Pero una cosa, si crees que a Alice se le puede ir, dependiendo de como sea tu turno, entonces seguimos con la noche.
-No no...no seas diabla...- rechaza con una risita, mirando el porro con desconfianza- Déjalo estar, ya ha sido suficiente por un día...- Alice la besa aunque inhale algo de humo de segunda mano por el camino, no es lo mismo que fumarlo. Realemente quería disfrutar de su recién conquistada lucidez y quería unos polvos calmados y tranquilos, así que se esfuerza por "mantener el control" todo lo que puede y llevar un ritmo pausado y pasional, queriendo ver si la tatuadora es capaz también de mantener la calma pero sin perder intensidad.
Por lo demás, le da lo que quiere y lo que quiere ella también, una noche, si bien no tan larga como la anterior, Alice se esfuerza en demostrar que puede ser una amante de la hostia también sin necesidad de drogas, la devora y la folla con gusto y gana pero sin la pérdida salvaje de control de la noche anterior. Espera que "siendo ella misma" también le guste a Frisbee. Aunque tal vez la decepcione si a la tatuadora le gustaba por las barbaridades anteriores.
Alice se deja follar encantada, se remueve como una gata, deja que Frisbee lleve el ritmo, pero cuando se corre una vez, la insta a detenerse, pero sin hacerlo de manera incómoda, tan solo se gira para que se inviertan los papeles y luego es ella quien la folla, le hace el amor, despacio, cálidamente, le come el coño como quien degusta un exquisito plato, sus caricias son livianas como plumas, besa todos y cada uno de los tatuajes de su cuerpo...ésta Alice no recuerda a la de la noche anterior, es cuidadosa, amorosa, plácida...aunque también es sensual y lujuriosa pero de otra manera, más madura y calmada aunque muestra el mismo ardor.
Yo creo que así está bien Alice quiere follar con más calma, más como cuando lo hace con Michelle, sin locura salvaje, espero que a frisbee también le guste así, pero si consideras que este cambio produce cambios en la tatuadora, lo narramos sin problema
edit: creo que con este ultimo parrafo queda mas o emnso claro me dices algo