Sigues solo hasta el piso de arriba, que por falta de escaleras que sigan subiendo, parece el más alto.
Esta vez no hay puerta que separe el rellano del pasillo, y éste te recuerda a una sección de un edificio de oficinas. ES discreto y sencillo, con pocas puertas, todas opacas al menos desde fuera.
Al final de ese pasillo hay una ventana. El exterior no es visible desde tu posición, pues hay una cortina tipo estor bajada.
Necesitaba ver el exterior, no había duda, corrí al estor y lo alcé sin más, esperaba ver alguna referencia que me orientase sobre en qué ciudad o país estábamos.
Lo único que se ve a través del cristal, es esto.
Joder esto es una especie de pantalla...
Dije para mí mismo mientras buscaba algún tipo de trampilla en el techo, debía haber algún acceso al tejado, algun acceso de mantenimiento o algo así...
Podría parecer una pantalla, en un principio, pero el ruido blanco abarca todo lo visible, como si ese fuese el color del cielo en aquel lugar, y no hubiera nada más que ese edificio, al menos en lo que alcanza la vista.
Nada en el techo, ningún acceso o trampilla?
El acceso al tejado debía estar en alguno de los cuartos, quizá el de mantenimiento, así que me detuve a escuchar y algo sonaba en una de las habitaciones.
Patee la puerta sin pensarlo, el tiempo de las sutilezas había acabado.
Das una fuerte patada contra la puerta, pero ésta no se abre. Sin embargo, las voces del interior callan. Está claro que te han escuchado.
Oh mierda, Pensé en voz alta mientras se activaban algunos resortes de autoconservacion y apoyaba mi espalda en la pared junto a la puerta.
Esperé, tal vez algo saldría a investigar.
Sorry no recordaba que me tocaba.
La puerta se abre de repente, se ve salir de ella a la altura del pecho de una persona una mano armada con algo muy parecido a una pistola, y disparar.
El movimiento es rápido e instintivo y da en la pared de enfrente. Inmediatamente después, de la sala se ve salir a la enfermera, que es quien empuña el arma, y mira rápidamente hacia los lados, hasta que te ve.
Tienes tiempo de hacer una acción en los segundos que ella tarda en hacer todo eso.
Tres de las criaturas y tú llegáis al piso de arriba.
Esta vez no hay puerta que separe el rellano del pasillo, y éste te recuerda a una sección de un edificio de oficinas. Es discreto y sencillo, con pocas puertas, todas opacas al menos desde fuera.
Al final de ese pasillo hay una ventana que alguien parece haber abierto. A través de ella, se observa esta imagen:
Cuando Charles llega al piso de arriba, ve a Alex apoyado en la pared junto a una de las puertas abiertas, mientras una mujer rubia está apuntándole con una pistola
Tenéis tiempo de una acción cada uno (que asumimos serán al mismo tiempo) antes de que la mujer reaccione.
Te has quedado quieto, quizás por la impresión, y a la enfermera le da tiempo a darse la vuelta y apuntarte con la pistola, pero antes de que diga o haga nada más, ves a Charles llegar junto con tres extrañas criaturas con este aspecto:
Aunque está claro que es algún tipo de anfibio, también caminan por tierra, y en su postura con todas sus patas apoyadas en el suelo llegan por las rodillas a Charles.
Charles llegó finalmente, encontrándose con toda aquella escena. Desde donde estaba no podía ver si su compañero tenía alguna herida, pero la postura y la mujer con el arma, así como el disparo, sugerían que así era. Había que desarmar a aquella mujer antes de que siguiera disparando o algo similar, aunque aún tenía una distancia antes de intentarlo. Se acercó a ella, con las manos algo en alto, preparado para abalanzarse si no entraba en razón y tenía la ocasión.
-No sé que está pasando, pero te recomiendo soltar la pistola...
Joder Charles, eres bienvenido tío Dije obviando los acompañantes, que podrían ser perfectamente fruto de mi imaginación. Señorita, por favor no queremos hacer daño a nadie, solo salir de aquí.
Liberado de la especie de embrujo que te había quitado la memoria, te es fácil imaginar a aquella mujer con dos grandes alas blancas saliendo de su espalda.
Al ver a la mujer, las criaturas encorvan sus espaldas como si de felinos se trataran, y abren sus bocas como si fuesen a bufar, pero no emiten ningún sonido a pesar de que el gesto es claramente amenazador.
Sí que se oye algo que no es nada vocalizado por las criaturas aunque procede de ellas. Sus cuerpos vibran haciendo que sus escamas choquen entre sí, y el resultante es un sonido parecido al que haría una serpiente de cascabel.
La mujer, al ver al grupo que ha llegado, apenas se fija en Charles, y con pavor por observar a las criaturas baja la pistola y retrocede hacia la pared del fondo, donde está la ventana.
Ella no emite ningún sonido, más allá de sus pies apoyándose en el suelo.
Charles de repente quedó en shock al caer, o creer caer, en algo. Miró de hito en hito a la mujer, sin saber muy bien si tenía razón en lo que creía imaginar, recordar o quien sabe qué demonios.
-¿Lífira? ¿Qué diablos haces aquí y por qué has disparado a Kehrlann?-preguntó incrédulo, cayendo después en la actitud de las criaturas. Allí podía haber problemas, problemas serios. Puede que, finalmente, no estuviera tan errado como parecía. Que hubieran hecho mal al liberar a aquellos seres.
¿Lífira? , no me digas que conoces a esta tipa... Respondí perplejo, y volví a fijarme en las criaturas, que sin duda eran las del la piscina del piso de abajo.Tío, que pasa con el resto, están subiendo ¿o que?
A la chica parece darle tanta impresión que Charles diga su nombre, que hasta deja caer la pistola. Las criaturas, entonces, cierran la boca y echan el cuello hacia atrás, como si fuesen a lanzar un ataque. Entonces, la chica, que aún lleva bata de enfermera, se agacha y tapa los oídos con pánico.
Parece un gesto fuera de lugar pues no se escucha ningún sonido. Incluso el vibrar de las escamas de las criaturas cede al salir de la puerta abierta junto a la que estaba Alex una figura extraña.
Se parece a las criaturas, pero se diría que era algo más grande. Lleva una especie de coraza, y camina totalmente erguido. Da la espalda a la enfermera quedando en el pasillo entre ella y vosotros.
Las criaturas dan un paso atrás.