Partida Rol por web

Notas que el brazo del anciano se alejaba de ti y te aferras, instintivamente, con mas fuerza. De pronto, todo se volvio negro y empiezas a sentir una presion procedente de todas direcciones, quitandote el aliento, como si unas bandas de hierro te ciñeran el pecho; tus globos oculares empujaban hacia el interior; los timpanos se hundian mas y mas en la cabeza y, entonces...

Abres los ojos, agotada, y respiras una nueva bocanada de aire, aunque... no era el mismo aire que respirabas en Terhel, con aquel sabor a mar, no, ahora te encontrabas en un lugar totalmente diferente: no habia mar, ni casas ni nada, estabas en un lugar bastante aburrido y solitario, un desierto. Hasta donde tus ojos alcanzan, solo puedes ver arena... aunque, por suerte, el anciano que te ha traido sigue a tu lado, y con una sonrisa, te sujeta la mano de nuevo y vuelve a "saltar"

Tras revivir de nuevo esa experiencia tan extraña, al llegar a tu siguiente destino, te desplomas sin fuerzas, cayendo en un banco que se habia materializado detras de ti... o mas bien, tu te materializaste casualmente delante del banco. Tras unos segundo para recuperar el aliento, abres los ojos y descubres, maravillada, un mundo de fantasia a tu alrededor

El anciano se sienta a tu lado y te sonrie, aunque se le nota que tambien esta bastante agotado, viajar entre mundos no parece ser algo facil y menos con un pasajero

-Bueno... no estamos en Gaia, no...-dice mientras observa su alrededor-Pero al menos se le parece un poco, ¿no crees?-resopla un poco, parece que ha corrido una maraton-Ya que estamos aqui, ¿quieres curiosear un poco? A fin de cuentas, el tiempo no es un problema, puesto que queremos llegar a un momento especifico de otra historia, ¿verdad?

La experiencia no había sido agradable, no era algo que ocurriera todos los días, aun fatigada abrí los ojos.

Era un mundo completamente nuevo. Empiezo a reír como una niña -¡Era cierto!- Me levanto del banco y miro a mi alrededor. Todo lo que veo se me antoja fantástico y, ¿es aquello un dragón? “Definitivamente no estamos en gaia, el ambiente se nota distinto, la luz es mucho mas cálida, ¡La luz! ¡Aquí es de día!”

Me doy la vuelta para mirar a Baba haciendo que mi túnica se levante un poco mostrando una pequeña cola de pelo cobrizo por el pequeño roto inferior - ¿De verdad podemos dar una vuelta?- pregunto ilusionada mientras se distingue cierto movimiento ondulatorio de la parte inferior de mi túnica, me doy cuenta de que no tengo la actitud más correcta pero, no pasa nada por disfrutar alguna vez ¿no?

Antes de que Baba responda ya me he dado la vuelta y estoy observando con inquieto interés todo lo que me rodea, estamos en una pequeña elevación, en una ciudad, grande, pero con un encanto más propio de un cuento que de la realidad. “¿Estaré soñando?” pienso al ver todo el colorido que me rodea, al instante me doy cuenta “No estoy soñando ¡Es que estoy en un cuento de verdad!”

Todo me fascina, miro la ciudad, “¿Quiénes serán sus habitantes?” cierta de mi ilusión se disipa como quien sopla un diente de león. –¿Puede haber peligro?- Formulo la pregunta mientras giro de nuevo y miro a Baba, mis orejas se han erizado un poco  y mi cara ya no tiene el gesto feliz que había tenido hacia pocos segundos.

-Hija, peligro va a haber siempre, eso es como una ley universal-te dice el anciano, que parece que va a quedarse en el banco un rato-Pero eso no significa que vayas a encontrarlo tras cada esquina-se apresura a añadir

-Mira este mundo, tiene mucho color y eso significan tiempos de paz. Es muy probable que aqui haya cosas que no comprendas, pero si prestas atencion y muestras buena voluntad, te responderan de la misma manera-mientras hablaba, un pequeño animalillo salio de entre unas hierbas. Baba ofrece su mano y, tras olisquearla, sube por el brazo y se queda en su hombro-¿Ves? En un mundo que visite lo llaman Karma: "haces cosas buenas, te pasan cosas buenas, haces cosas malas, te pasan cosas malas". Es una buena filosofia de vida, a mi me gusta seguirla-aun cansado, te muestra una sonrisa sincera. Luego agarra al animal y lo deposita suavemente en el suelo, desde donde sale corriendo a esconderse de nuevo.

-Anda, ve a pasear un rato, seguro que hasta consigues hacer una o dos amigas por aqui-te anima-Cuando te aburras, podemos seguir intentanto llegar a tu mundo al momento que querias

 “Karma” Es una bonita forma de pensar, asiento y sin más que decir me pongo a correr suavemente calle abajo- ¡Vuelvo pronto! Intentare no alejarme mucho.- Elevo un poco la voz para que me escuche.

La ciudad, era mas un pueblo que se extendía mucho, las casas eran pequeñas y cada una más pintoresca que la anterior.

Mientras caminaba me fije en mi túnica de nuevo, el roto era cada vez mas grande.  “Debería arreglarla… ¿o quizá pueda comprar por aquí alguna nueva? ¿Como será en este mundo el comercio? ¿Tendrán monedas? ¿Que idioma hablaran?” Múltiples preguntas recorrían mi mente mientras me encaminaba cada vez mas lejos del lugar donde había aparecido.

Ante mi última pregunta me quede pensando, “Idioma, no creo que usen aquí una lengua común a la de donde vengo…”

Me senté en un banco cercano saque la hoja suelta que había en mi cartera y con trazos rápidos y seguros empecé un ofuda. Un minuto mas tarde ya estaba listo. Era curioso, la hoja que en un principio estaba destinada a borrar mis recuerdos ahora iba a ayudarme a conseguir nuevas experiencias, irónico.

Guarde mis cosas, pero deje el hechizo que acababa de hacer en uno de mis bolsillos para poder lanzarlo rápido si necesitaba comunicarme con alguien.

Sigo calle abajo, estoy ensimismada mirando a todo lo que me rodeaba, había llegado a una zona en la que las casas que me rodeaban estaban rodeados por altos arbustos de cerca de dos metros, aquello era como un laberinto. Llegue a una intersección pensando si me podría perder cuando recibí un golpe no muy fuerte, pero lo suficiente como para lanzarme al suelo. “¡Au! ¿Que había sido eso?” Gire la cabeza hacia donde había recibido el golpe y encontré un niño de unos 10 años frotándose la frente. “¿Humano?” mi primer pensamiento rondo por mi cabeza, pero no, no era humano tenía bastantes parecidos pero las orejas puntiagudas que se distinguían debajo de su pelo negro me decían lo contrario

El chico murmuro algo que no entendí. “¿Una disculpa quizá?” Hablaba bastante rápido y ya se había levantado. De pronto callo, sus ojos lucían con curiosidad mientras miraba algo encima de mí. Se acerco, su mirada no iba detrás de mi si no a encima de mi cabeza, alargo una mano hacia a mi mientras decía algo y rozo mis orejitas, un ramalazo me recorrió el cuerpo.

El niño dijo algo con cara de asombrado, supongo que en este mundo no es normal el aspecto que llevo. Me aleje un poco hacia atrás para que el muchacho dejara de alcanzarme pero, aun sentada no fue la mejor idea que tuve, el roto de mi túnica se abrió aun mas y dejo salir otra parte de mi aspecto, una cola cobriza y esponjosa

El chico rio ante aquello y se agacho con intención de acariciarla pero antes de que lo hiciera le pare cogiéndole de los hombros y negué con la cabeza. El chico parecía desilusionado hasta que me decidí a hablar- ¿Hablas mi idioma?- su rostro paso a confusión, era obvio que no entendía lo que le decía , deje de sujetarle y toque levemente el hechizo que había realizado hacia poco tiempo.

El muchacho empezó a hablar de manera rápida, las primeras frases no llegue a entenderlas, ya que mi hechizo aun no había entrado en acción, pero capte las últimas. El chico quería saber de dónde venía.

-De muy lejos.- Sonreí a la vez que lo decía, no sería adecuado comentar que venía de otro mundo. Esta vez el chico si me entendió ya que puso una mueca de asombro.-Ahora si me entiendes  ¿No?

El chico asintió y una vez más empezó a hablar atropelladamente “¿Serian aquí todos así?”.Hizo unas cuantas preguntas pero a mitad de una frase parecía que había recordado algo, comento algo sobre un recado y el mercado.  Acto seguido salió corriendo calle abajo.

“Vaya, eso ha sido extraño. Bueno, al menos ahora sé que lengua hablan aquí” Comencé a andar hacia el lugar al que se había ido el chiquillo. Quería conocer más de aquel sitio y si había un mercado no había mejor ubicación para empezar.

Al minuto de que se fuera el niño, una voz suena en la direccion de donde venia

-Luuuuuuuux!!!-grita una muchacha de cabellos color oro. Viene corriendo apresuradamente en busca de alguien y, al acercarse por donde estas, tropieza con algo y cae sobre ti

-Ettoo...-te dice todavia sobre tu cuerpo-No habras visto un chico de unos 100 añitos, cabello negro, poco mas de un metro... de...   ¿Que tienes en la cabeza?-te pregunta mientras te agarra una oreja

Según toca mi oreja se me eriza la piel de nuevo “Pero que tienen con mis orejas…”

-Sí, ha pasado hacia allí- Hago un gesto con la cabeza calle abajo- Esto… ¿puedes quitarte de encima?-Le comento mientras mis orejitas aun atrapadas por sus manos intentan zafarse “Parece que la gente de aquí es amigable pero podían ser un poco mas comedida, espera, “¿ha dicho 100 años?”

Me revuelvo intentando salir de debajo por mi misma pero el intento es inútil, está completamente encima y si intento salir podría hacerle daño.

-¿Abajo...?-parece que se ha olvidado que estaba haciendo y mira debajo de dode estais, todavia sin bajarse-Aaah... ¡eres una Werebeast! ¿verdad? -acerca mucho su cara a la tuya-¿Que haces en Elven Gard, tan lejos de la Federacion Oriental? No es muy comun ¿te puedo hacer unas preguntas? Ah, por cierto, me llamo Nova, como puedes ver, soy una elfa -sonrie mientras mueve las orejas

Se levanta y se sienta de rodillas delante de ti

-¿Es cierto que podeis leer la menta? No me lo digas, mejor pienso en algo y me lo demuestras-sonrie mientras pone cara de concentracion

“¿Werebeast? parece que al final sí que hay gente con este aspecto.”  Sus rápidas frases y preguntas me han dejado confundida pero parece amigable.

Parece que espera que le lea la mente, cosa que esta fuera de mi alcance, podría intentar decirle algo haber si acierto pero opto por una verdad algo encubierta.

-No puedo leerte la mente, solo algunos de nosotros consiguen ese poder.-“Pero que estoy diciendo?” La miro algo azorada por la pequeña mentira que estoy contando y ella pone una cara de desilusión.

Me quedo sentada en el suelo mientras me atuso el pelo de la cabeza con la mano. No tengo muy claro que hacer ante aquella situación. Al fin me decido a hablar de nuevo- ¿Eres de por aquí?- Si tenía suerte quizá ella me podría guiar por la ciudad.-Estoy algo perdida, acabo de llegar y no sé si podrías indicarme algún lugar donde comprar suministros.-Digo lo primero que se me pasa por la cabeza, quizá podía crearme una oportunidad para ver los alrededores.

La elfa te mira algo desilusionada. Sin embargo, se recupera en seguida cuando le dices de acompañarla

-Sisisisisi, es un placer -te dice con una sonrisa de oreja a oreja-¿Acabas de llegar? Eso es genial, puedes disfrutar de ver Elven Grad por primera vez, es un sitio genial, muy pacificio ¡y tenemos casi de todo! Los maestros artesanos son capaces de crear casi cualquier cosa que logres imaginar (y describirles, claro, jajaja) ¿Que clase de suministros quieres? ¿Comida, alojamiento, transporte...?-entre todas esas cosas que dice en poco tiempo, se percata del roto de tu ropa-¡Aaaaah! Tienes una agujero!! Mmmm... no es moda, ¿verdad? ¿Quieres que te lo arregle?-antes de darte tiempo a contestar, acerca su dedo indice y, de él, sale un pequeño haz de luz que cubre el descosido. Cuando la luz desaparece, el agujero ya no estaba-Mejor asi, no crees?-dice sonriendo, es una chica muy alegre

Suspiro al escuchar como Nova acepta a guiarme por la ciudad, empezaba a pensar que quizá había sido demasiado atrevida. Mis ojos relucen al escuchar sobre los artesanos “¿Que objetos tendrán en este mundo?” estoy deseando conocer más sobre la cultura de la que estoy rodeada en este momento.

Observo en silencio como arregla el agujero de mi túnica, podía haberlo hecho yo antes, pero estaba demasiado extasiada por las cosas que me rodeaban como para pararme a arreglar mi aspecto.- Gracias- le dedico una sonrisa como agradecimiento mientras cojo con mi mano la túnica y veo su trabajo.

-Pues estaría bien un sitio donde comprar algo de comida- declaro mientras mis tripas emiten un leve y mudo gruñido ,en ese momento recuerdo el plato de legumbres de Baba “Si íbamos a ir al pasado, podía haberme terminado el plato…” – También me gustaría mirar  algún recuerdo para recordar Elven Gard, ya que pronto seguiré mi camino. – Según lo digo me doy cuenta de que no tengo dinero de aquel mundo, y dudo seriamente que las monedas de plata que llevo en mi mochila tengan aquí algún valor.

Antes de que pueda pensar seriamente sobre mis problemas y cómo voy a pagar Nova ya me ha agarrado de la muñeca  y tira de mi calle abajo. Comienza a explicarme cosas del lugar a la vez que me pregunta sobre mi supuesto origen sin darme tiempo a responder. “Qué raro, siempre había pensado que los elfos, al ser más longevos, hablaban mas calmadamente” Mis pensamientos quizá fueran lógicos, si aun me encontrara en gaia.

-Mmmm... comida, comida, comidaaa...-cruza los brazos y baja la cabeza, pensando, mientras repite en lo que esta pensando-Ah! El Verde!! Si, seguramente ese sea el mejor sitio para comer de la zona, ademas de que es relativamente barato-te sonrie mientras te agarra de la mano-Anda, vamos, que no queda muy lejos de aqui-sin darte tiempo a decir nada, te arrastra por las calles

Tras una pequeña carrera, llegais a un bonito local con el nombre "Los Verdes" escrito sobre la puerta. A primera vista parece un local  normal y corriente, pero, una vez dentro, un monton de chicas vestidas con bonitos trajes esta trabajando de meseras, algunas incluso con algunos detalles propios de otras razas, presumiblemente para atraer a cualquier clase de cliente

-Tienes que probar el parfait de aqui, esta riquisimo-te dice mientras va buscando una mesa libre

Al entrar a la posada de nombre “Los verdes” me quedo sorprendida. Aun estoy observando mi alrededor, viendo todo el colorido del lugar, con las orejas levantadas cuando veo como un par de meseras cuchichean mientras me miran. Agacho las orejitas hasta que quedan pegadas a mi pelo.

Estoy empezando a ponerme nerviosa cuando Nova, que se ha adelantado a buscar una mesa, me hace señas con la mano desde el otro lado del local.

Avanzo hacia la mesa de nova, aun preguntándome porque me estarían mirando. Cuando ya me he sentado en frente de Nova esta empieza una vez más a hablar haciéndome recomendaciones sobre que pedir. En una de de las pausas intento interrumpirla- Esto…-  quiero explicarle que no se si mi dinero tendrá algún valor allí, pero dejo la frase en el aire ya que una de las meseras que me había estado observando se acerca.

-Bienvenidas a "Los Verdes", mis queridas y bellas damiselas-dice la chica, actuando como un hombre, mientras ejecuta una reverencia. A juzgar por las escamas y la cola, es una Turak, pero como no estas en Gaia, puede que sea de otra raza-Mi nombre es Lit y sere vuestra acompañante esta tarde-os dice con una sonrisa y un guiño-Si me permite la recomendacion, hoy tenemos un famoso pastelero y su especialidad son los trabajos con fresas

En el mostrador, tras un cristal, se ven expuestos varios pasteles, la mayoria de fresa, todos con muy buena pinta

Lo malo, es el precio, pues no reconoces la moneda (Yen)

Por su lado, Nova tiene una mirada feliz viendo los pastelitos y le señala unos pocos a Lit, quien sonrie y los apunta en una libretita

Me remuevo con inseguridad en mi asiento y acabo pidiendo uno de los pasteles que ha encargado Nova. “Ya veremos cómo salgo de esta”

Realmente tienen una pinta muy apetitosa y, aunque tengo hambre, con los nervios de no saber con que pagare creo que no voy a disfrutarlo como debería hacerlo.

Mientras esperamos observo a todas las personas de el lugar, tanto meseras como clientes.

Al poco de pedir, la chica se retira y vuelve con un par de pasteles de fresa bastante apetitosos. Cuando los sirve en la mesa, os hace un guiño complice

-Os he elegido los mas grandotes, pero no se lo digais a nadie, si?-dice con una sonrisa.

El paste tenia forma de corazon y estaba muy bien decorado. En el interior, ademas, contenia algo de deliciosa mermelada de fresas.

Mientras Nova hace una cara de extrema felicidad al probar el primer pedazo, Lit te mira con dulzura, esperando ver tu reaccion.

-Deberias probarlo Lihl, esta delicioso~~-te dice la elfa

El aspecto de los pasteles a mi parecer es maravilloso, quedo totalmente sorprendida al abrir el pastel ante el liquido de su interior. Voy a llevarme el primer bocado al paladar cuando me doy cuenta de que tanto Nova como Lit están observándome esperando mi reacción. Me revuelvo en mi asiento y finalmente introduzco el pedazo en mi boca.

La explosión de sabor es inimaginable, de lo mejor que he probado en mi vida, por no decir lo mejor. “Y pensar que hace algunos meses me estaba alimentando de mendrugos de pan por falta de dinero…”.

Una vocecilla susurra en mi cabeza “Y sigues sin dinero…” pero la aparto de mi cabeza, el pastel esta demasiado bueno como para no disfrutarlo  y empiezo a devorarlo con extremo placer.-Esta buenísimo-Exclamo sin darme cuenta. Cuando me quiero dar cuenta el platillo esta vacio. Miro con cara de decepción donde antes se encontraba el pastelillo.

Vuelvo a centrar mi atención en Nova que esta comiendo su pastelillo y aprovecho para preguntarle –¿Me recomendarías algún sitio que visitar en Elven Gard? La ciudad parece preciosa, pero tengo algo de prisa en mi viaje. No me gustaría partir y dejarme un lugar bello sin visitar.- Extrañamente después de ese pastelillo me siento sin preocupaciones y formulo mi pregunta con una sonrisa en la cara.

-Mmmm..?-te mira mientras paladea un poco del segundo pastel que se estaba comiendo-Bueno... supongo que el lugar mas conocido es la Sala de Juegos, pero supongo que si tienes prisa, no podrias disfrutar de una buena competicion...-mira con decepcion-Entonces... antes dijiste que querias comprar algo bonito, asi que podriamos pasar por la calle de los Artesanos, la mayoria suelen dejar su mercancia en la puerta y se puede apreciar su belleza. ¿Que te parece?

-¿Sala de juegos?- Murmuro sin darme cuenta mientras mis ojos se encienden. “¿Que será una sala de juegos?” Me pregunto para mí misma. Estoy algo dubitativa, me gustaría visitar y absorber todo lo que pudiese de ese mundo, pero Baba estaba esperando y no sé cuanto esperaría.

Es cierto que daba igual cuando hiciéramos el siguiente libro, ya que, al fin al cabo queríamos llegar en un momento en concreto pero… Algo en mi me decía que no era buena idea pasar mucho tiempo por aquella ciudad o dejaría de querer volver a mi verdadero mundo.

Agito la cabeza intentando olvidar la mención de los juegos –Si, me gustaría ir a ver esa calle de los mercaderes de la que hablas.-En mi cabeza rondan algunos pensamientos sobre si tendrán  algo que pueda llevarle como recuerdo al grupo, algo barato. “Oh, el dinero” acabo de recordar que no tenía dinero y empiezo a ponerme nerviosa.

Finalmente saco unas cuantas monedas de plata y las pongo encima de la mesa, supongo que la mejor opción es hacerse la despistada, aunque muy en mi interior se que no va a funcionar. Me quedo sentada completamente en tensión siendo consciente del momento incomodo que se avecina.

Tras dejar las monedas, se hace un incomodo silencio. La chica dragon, como pensando que estas buscando algo mas y sacaste eso para buscar mejor, se queda mirando con una sonrisa en la cara, pero a medida que pasa el tiempo y ve que no haces nada, su rostro empieza a cambiar a una cara de preocupacion

-Eee... Ojou-sama... no sera...-habla muy despacio, como negandose a creer la evidencia-¿ustedes tienen dinero... verdad?

-Eee-Nova tambien se queda algo tiesa, pero cuando la otra chica habla, rapidamente mete la mano es su bolsillo y saca una extraña tarjeta-¡Ah! Perdone, es que me tocaba a mi pagar, ¿sabe?-le dice mientras se la entrega-Esto es solo un juego que estabamos jugando, no le preste atencion

Lit respira tranquila mientras agarra la tarjeta y se va al mostrador para pasarla por una extraña maquinita. En ese tiempo, Nova acerca mucho su cara a la tuya y, con el ceño algo fruncido, comienza su interrogatorio

-¿Que es lo que haces? ¿Acaso no tienes dinero? ¿Piensas que aqui todo es gratis o que?¿Y que son estas cosas?-dice mientras agarra una de las monedas. Sin embargo, en el momento en el que iba a sacudirla frente a tus ojos para seguir con su reprimenda, se queda como paralizada y la lleva rapidamente a sus ojos-Un momento... -clava ambos en la pequeña moneda y luego agarra todas las demas-Esto no sera...-mira, como viendo algo increiblemente inusual. Luego, lentamente, levanta la vista-¿Plata?-pregunta, dudando, como si tuviera en sus manos un recurso unico-Puede ser que esto sera plata? ¿De donde la has conseguido? -de repente, el tono de su piel palidece-Espera, ¿Ibas a pagar con Plata? Que clase de multimillonaria eres que deja...-cuentas las monedas-Doce piezas de plata para pagar un simple pastel? ¡Doce! Con ese precio, podria comprarme una bonita casita en primera linea de playa o un barco de lujo ¡Y tu lo gastas como si nada en un pastel!

Mas que sentarse, se desploma en su asiento. Resoplando, cruza sus brazos sobre la mesa y apoya su cabeza encima, mirando hacia la ventana

-Aaaa... yo tambien quisiera ser rica...-parece que va a llorar de envidia