Partida Rol por web

- Y no es mi pretención ocultarlo. No voy a ejercer falsa modestia sobre mi persona, pero particularmente considero que esta misión es de superior importancia.

La mujer se mantuvo de pie durante toda la conversación, evitando con su postura activa que la misma se prolongara en demasía.

- Necesito vuestra respuesta antes de partir a la capital. Creo que ha saciado sus dudas sobre mi, mis intenciones y lo que estoy buscando.

Lamento decirle que no, no las habeís saciado, habeís venido a mi casa y habeís solicitado tropas, pero no voy a acceder sino me dice, su señoria, cuantas; me habeís ofrecido un puesto a su lado y no me habeís dicho para qué, y habeís hecho todo esto con el mayor de las discrecciones en mitad de la noche, lo que me hace recelar enormemente sobre el motivo de no usar los canales oficiales, como miembro del consejo no necesitais ese exceso de discrección. dice mientras camina en derredor de la mesa hasta encararse a la general.
Lamento decirle general, que no ha aclarado nada y también quiero indicarle que ya os dije que en tanto y cuando mis deberes para con el reino se puedan mantener intactos no veo ninguna razón para negaros la ayuda que necesiteís, pero no me habeís dicho nada, ni si esa ayuda me hara descuidar mis deberes o no, las cosas no son tan simples como si o no, las personas de nuestra posicion tienen responsabilidades que no les dejan ver el mundo tan claramente diferenciado esta ultima frase la pronuncia mas lentamente para darle enfasis Con mucho gusto y sintiendome honrado, como ya le he expresado a su señoría, la ayudaré, pero no firmo contratos sin leerlos. Y si pretendeís que haga un pacto con usted a ciegas sin saber cual será la repercusión, le recuerdo que las responsabilidades como caballero y señor de estas tierras me instan a tener defendidas estas tierras y acudir a el auxilio de la frontera si se me requiere allí para defender las fronteras, espero que comprendaís mi preocupacion por estos asuntos, tengo responsabilidades hacia el reino y la poblacion de los terrenos que regento.
Así que solventadas estas cuestiones tendra mi ayuda, sin recelos. Sé que no estaríais aquí sin una buena razón, pero no puedo dejar las cosas a mis intuiciones, y debo exigir garantias, o garantizarmelas yo mismo, por mis propis medios, pero sea como sea necesito saber los detalles; muchos dependen de mis decisiones Igor se queda de pie en frente de la general durante un par de segundos, manteniendole la mirada, sin duda era un hombre acostumbrado a gobernar, uno a quien no gustaban los rodeos, prefiriendo la acción directa. Las arrugas alrededor de sus ojos, pese a una ceja partida por una cicatriz, daban una sensación de tranquilidad, como si el mundo se fuera a detener y no hacer nada hasta que él tomara una decisión. No permitamos que la cene se enfrie, y si desea acompañar la cena de las respuestas que con toda la humildad del mundo le solicito, nos sentiremos muy complacidos añadió al pasar esos escasos segundos.

no se preocupe solo me haré un poco el dificil, ;) feliz año igualmente caballero, disfrute de la nochevieja.

Luego de varias horas de conversación, Aramantha por fin convence a Igor de acompañarle hasta la capital. El viaje es tranquilo y los siete guerreros no sufre percances.

La ciudad es hermosa. Desde lo lejos su visión es imponente. Altas torres y campanarios de iglesias todos como si retaran al cielo.

Al entrar a la ciudad, las calles se descubren mundanas. La suciedad corre por ellas como agua corriente. Mercaderes pregonan, mujeres caminan con cestas y vasijas a la cabeza. Las casas son de maderas y pajas y las más notables tiene una segunda planta. Hay varias tabernas por las pasan cerca.

Luego su camino se torna en una avenida central: Se ve que es el área donde viven los nobles. Al final del camino se alza majestoso el palacio. Sus paredes parecen de mármol o marfil y su lujo puede dejar boquiabierto al que lo ve por primera vez.