Bastante rato más tarde, tras la reunión con el rey, Akil se acerca hasta Jaserys y Anakin, siguiendo las indicaciones que los sirvientes le van proporcionando. Con paso tranquilo y voz calma, se dirige a ellos.
- Caballeros, - mirando a ambos alternativamente - si no recuerdo mal ustedes se encargarían de la búsqueda del desaparecido Conde. Quizás pueda serles de utilidad la escasa información que pude conjurar. Hallase sobre un córcel, viajando a toda velocidad, por el camino del sur, por lo que pude reconocer de la breve impresión y de mis recuerdos del viaje hasta aquí. Lamento no serles de mayor útilidad.
- Entonces, creo que debemos, sencillamente, dirigirnos a la mayor prisa posible, y a caballo, por el camino del sur. O enviar a alguien...