Partida Rol por web

Visiones celestiales

Capítulo 2. El oasis.

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13/03/2016, 12:11
Julia

Julia se había ensimismado ante las preguntas planteadas por sus compañeros y las respuestas de la mujer... había cosas que no cuadraban... realmente todo aquello iba a ser la mayor prueba a la que fueran sometidos, debían descubrir si había emntira en la mujer y actuar en consecuencia a lo que se esperaba de ellos.

- Que el Señor la bendiga, hermana- sonrió a la anfritiona- en verdad estamos cansados y le agradecemos profundamente su hospitalidad.

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13/03/2016, 12:22
Judith

Me sorprende que Julia acepte la invitación tan fácilmente: aún no sabemos si estamos ante amigos o ante enemigos, y si entramos nos encontraremos a su merced.
Pero puesto que lo ha hecho no doy muestras de desconfianza, más allá de una mirada precavida a mis hermanos.

Notas de juego

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13/03/2016, 18:11
Jaqueb

El hecho de que no haya dado una respuesta directa sobre el niño dejó un sabor agridulce en mi paladar. Por un lado la esperanza de que supiese algo relevante y por otro la incertidumbre de tener que esperar.

- Gracias por la invitación, esperamos estar a la altura como huéspedes - comenté para agradecer el detalle, sea trampa o no mejor hacer las cosas por las buenas.

Me límite a seguir a la mujer mientras intenté intercambiar una mirada con mis compañeras para transmitirles calma. Nosotros éramos tres y habíamos demostrado saber como sobrevivir ante las adversidades; ahora no iba a ser distinto.

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13/03/2016, 18:54
Mujer

Espero que este humilde lugar os aporte un duradero descanso -responde con amabilidad la mujer antes de guiaros hacia el interior del lugar.

Lo primero que veis nada más cruzar las puertas de la gran plaza es un pequeño patio exterior que debe servir de defensa para la fortaleza, dado su pequeño tamaño y los altos muros que lo rodean. En él descansa un soldado protegido por una armadura y con el rostro oculto tras un yelmo.

La mujer continua su camino abriendo unas nuevas arcadas que os llevan los pasillos de la fortaleza. Estos están iluminados por el tenue brillo de decenas de lámparas de pared, interrumpidas únicamente por la presencia de puertas cerradas. Recorréis los pasillos en mudo silencio, torciendo dos veces a la derecha y una más a la izquierda, hasta encontrar a otro de los guardias o, tal vez, el mismo, ya que viste con la misma indumentaria.

Llevalos a una de las estancias para invitados -ordena al guardia antes de volverse a vosotros - disculpadme, voy a preparar algo para comer. Mi hombre os llevará hasta vuestra habitación.

La bella e intrigante mujer vuelve sobre sus pasos sin esperar una respuesta y se pierde de vuestra vista al cruzar una esquina. El guardia, sin dirigiros la palabra, echa a andar y os conduce, una vez más cruzando varios pasillos y dando un par de giros, hasta la puerta de una estancia. Por lo que habéis visto todas las puertas del recinto son iguales, incluida aquella por la que habéis entrado. Sin duda, otra medida de seguridad. Sin más dilación os abre la puerta y os invita con un gesto de la mano a entrar.

La habitación es bastante amplia y está preparada para recibir a tres visitantes. En la alcoba hay tres camas cubiertas por finas mantas de seda, una mesita con tres sillas y un pequeño recibidor con una jarra de agua y tres vasos. La luz de la habitación nace únicamente de lámparas colgadas en la pared ya que no hay ventana alguna. La puerta se cierra a vuestra espalda, dejándoos solos en la habitación.

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13/03/2016, 19:09
Judith

Conforme avanzamos por aquel laberinto de puertas y pasillos repaso constantemente el recorrido, del derecho y del revés, por si tuviéramos que huir. Y al llegar por fin a nuestro aposento y ver lo que nos aguarda dentro deseo con todas mis fuerzas haberlo memorizado bien. -No me gusta -susurro-. ¿Tres lechos? Nos esperaban, estoy segura. ¿Qué ha querido decir con "un duradero descanso"? Esta alcoba más parece una prisión -me acerco a la puerta para comprobar que no la hayan cerrado por fuera.

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13/03/2016, 19:48
Jaqueb

Intento memorizar por el camino cuál sería la ruta de salida más rápida ante un imprevisto, sin embargo su sistema laberíntico consiguió su propósito en el momento que la ruta se volvió confusa debido a la similitud de los elementos del recorrido.

Una vez en sus nuevos aposentos escuchó a Judith la cual como es normal estaba preocupada.

- Entiendo tu preocupación y debido a eso yo creo que estamos alerta - me senté en la silla tranquilamente, a fin de cuentas estaba agotado.

- Pero tampoco podemos desconfiar de todo lo que nos encontramos... o incluso al revés puesto que he llegado a pensar si realmente el propósito del profeta es puro... - me serví agua con intención de saciar mi sed.

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13/03/2016, 20:06
Director

Judith comprueba que la puerta está abierta y, por lo que parece, no hay ningún guardia en el pasillo.

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13/03/2016, 20:51
Jaqueb

Comprobé sorprendido como una medida de seguridad tan básica como dejar la puerta cerrada no entraba dentro de los planes de nuestros anfitriones.

- ¿Qué tienes en mente hermana? - dije mientras me acercaba a ella. Tan solo había dos opciones; actuar bien y quedarnos ahí descansando o comenzar a infringir las normas.

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14/03/2016, 12:19
Niño

¡Despertad! ¡Corred! ¡Os están engañando!-os grita una voz aniñada desde el pasillo. Cuando os asomáis solo lográis ver la espalda de un crío, cubierta por una túnica blanca, antes de que la figura desaparezca por una de las esquinas.

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14/03/2016, 15:25
Julia

Julia no podía evitar compartir los temores de su compañera... todo aquello era muy estraño, pero si bien era cierto que tampoco podía precipitarse ni emitir rápidos juicios de valor... tal y como decía Jaqueb... si hubieran quediro encerrarlos ya lo habrían hecho... y lo cierto es que estaba empezando a dudar de las intenciones del profeta en especial cuando la mujer que los recibió les dijo sobre las propiedades de la joya... en esas estaba cuando escucharon la voz del niño.

- ¿Era ese el niño que viste Jaqueb?- le dijo al asomarse al pasillo- Espera...- dijo mientras echaba a correr detrás de él

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14/03/2016, 21:09
Jaqueb

¡El niño! Sabía que tarde o temprano aparecería. Desde nuestro despertar en la cueva ha estado allá donde debíamos dirigirnos ¿pero cómo podríamos saber si realmente era un mesías con cara angelical o una trampa encerrada en la inocencia de un niño?

- No podemos precipitarnos... él era ese niño pero no conozco sus intenciones- comenté mientras recordaba la sobrenaturalidad con la que desapareció el niño en las dunas la última vez.

- Quizás sea una trampa pero... ¿y si no lo es? - tras aquello tomé una decisión que debía confiar a mis hermanas.

- Creo que me quedaré, quiero comprobar las consecuencias de esa "trampa" de primera mano -

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15/03/2016, 15:15
Judith

Julia! -llamo inútilmente a mi compañera, que ya se aleja por el pasillo tras el rastro del niño. Miro a Jaqueb desde el umbral, maldigo para mis adentros y aferro la empuñadura de la cimitarra, aunque sin desenvainarla. -No dudes en usarla -le aconsejo señalando su propia espada antes de echar a correr detrás de Julia.

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15/03/2016, 17:24
Director

Tus hermanas se han marchado tras el famoso crío y te has quedado completamente solo en la estancia.

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15/03/2016, 17:26
Director

Las dos mujeres corréis tras el crío, tratando de darle alcance. El chico no deja de correr y cada vez que lo veis se encuentra un instante antes de un giro, desapareciendo de vuestra vista al segundo. Cruzáis un par de intersecciones, recorréis bastantes pasillos y dais múltiples giros hasta que, finalmente, perdéis la pista del muchacho.

Os encontráis en un largo pasillo que comunica por arriba con un pasillo perpendicular y por abajo continua, dando un giro hacia la derecha.

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15/03/2016, 21:17
Jaqueb

Nervioso, me dedico a dar vueltas por la habitación sin desenfundar mi arma. Lo último que buscaba era parecer una amenaza, debía seguir aparentando que era una persona fiel a mi anfitriona.

Entendía el gesto de ir detrás de aquel crío porque yo mismo lo había hecho con anterioridad, sin embargo la experiencia me había dotado ahora de paciencia que utilizaría para encontrar aún más respuestas.

Notas de juego

Me mantengo en la habitación.

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15/03/2016, 23:15
Guardia

Tras unos minutos de espera escuchas algunos pasos acercándose. La puerta de tu habitación se abre lentamente y por ella entran la pareja de guardias. Los guerreros no parecen sorprendidos por la ausencia de tus compañeras y no te hacen pregunta alguna. Sin detenerse, rodean la habitación hasta colocarse a tu espalda.

Sorprendentemente, cuando los guardias llegan a dicha posición, otra pareja entra y se coloca a una leve distancia de estos. Tras ello otra pareja comienza a entrar en la estancia y, por el sonido de las pisadas que se escucha en los pasillos, parece que tienes bastante compañía.

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16/03/2016, 11:56
Julia

Julia viendose perdida detiene su avance, había dos opciones... continuar hacia arriba o hacia abajo, había que reconocer que aquel sitio era enorme y que ese chico tenía respuestas... o al menos era eso lo que parecía.

- ¿Por donde?- dice para sí con la respiración entrecortada- ¿Nos dividimos?- sugirió a Judith

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16/03/2016, 12:01
Judith

-¡Claro, por qué no! ¡Ya hemos dejado solo a Jaqueb, vamos a quedarnos solas nosotras también! -respondo entre jadeos, claramente alterada. Había sido una locura salir corriendo detrás del niño por aquel laberinto; estaba claro que acabaríamos perdiéndolo... y perdiéndonos. Y todo por actuar de forma irreflexiva. -¿De verdad quieres que nos separemos? -vuelvo a hablar un poco más serena-. El crío no va a aparecer. Si le perdimos la pista en pleno desierto, donde no hay escondite posible, aquí no lo encontraremos ni en un millón de años. Elige una dirección y la seguiremos juntas.

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16/03/2016, 12:23
Guardia

Debido a vuestra discusión no habéis podido escuchar el ruido de pisadas firmes que proviene del pasillo perpendicular situado al norte de vuestra posición hasta tenerlos casi encima. 

Antes de que podáis hacer nada veis a la pareja de guardias recorriendo dicho camino, con la mirada puesta al frente y caminando de forma coordinada y precisa. No parecen percatarse de vuestra presencia ni haber escuchado vuestras voces ya que no giran la cabeza en ningún momento. Cuando han recorrido un cuarto del pasillo veis otra pareja de guardias que aparece detrás de ellos, caminando con el mismo ritmo automático, una habilidad sin duda adquirida tras años de entrenamiento. Antes de que podáis decidir que hacer veis que a los cuatro guardias se le suma otra pareja y, por el ruido, parece que aún quedan muchos soldados por aparecer.

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16/03/2016, 15:44
Julia

Julia que había empezado a tener un terrible sentimiento de culpa y pesar por haber salido a correr detrás del niño desoyendo la voz de la prudencia, como bien le recordó Judith... se quedó pálida al vislumbrar a los guardias, miró con los ojos como platos a su compañera y la instó a que se escondieran entre las sombras de aquel pasillo para quitarse de enmedio y tratar que los guardias no se percatasen de su presencia.

- El niño tenía razón...- susurró en el oído a Judith- Jaqueb...- cayó en la cuenta rápidamente, se había quedado en la habitación ¿irían en aquella dirección?