Partida Rol por web

Ella queda más  que gratamente sorprendida del accionar de Mr Meme pero deben seguir con la fachada. Es mejor que la pelirroja desconozca que ha entregado el botín.

-Eres una mujer tan hermosa por fuera como perversa por dentro . Serás rápida pero no dejaré de perseguir lo que es mío.

Para que realmente fuese convincente se lanzó hacia adelante con el fin de agarrar a la pelirroja. Sabía que ella huiría o esperaba aquello. De todas formas así se haría patente que "todavía la intrusa tenía las entradas" que ya había perdido.

Ni se escapara de sus manos, Ella se iría ya a la ceremonia junto al vampiro de brillante casco.

-La carta la debemos haber recibido unos pocos, pero los que saben de la Vânâtoarea y no la han recibido, querrán hacerse con ella a toda costa. Imagino que las pruebas que aquí se dan a cabo y el intrigante premio deben de ser de un gran interés para ellos. - Diana contesta a la pregunta de William, pues ella también se hace la misma pregunta. -​​​

-​​​​​​Sabemos que es es evento que se hace cada 200 años, no todos la conocemos, pero los que la conozcan saben más que nosotros.- no le daba muy buena espina que hubieran tantos interesados en robar la entrada, algo demasiado interesante ocultaba todo aquello, y no por ello menos peligroso o malvado.

Observó el lugar, era curioso y enigmático, crecía el interés de Diana a medida que pasaba el rato.

Esperó al Maestro, impaciente pero aparentemente tranquila.

En esta ocasión Johan se mantuvo en silencio siguiendo al grupo, al menos hasta que las preguntas comenzaron a intercambiarse entre los asistentes.

—Tengo mis dudas de que esto sea tan secreto como creemos, lo que sí tengo claro es que los más ignorantes al respecto somos nosotros.

También aguardó al Maestro de Ceremonias, intrigado por cuándo iba a comenzar realmente aquella 'competición', si es que así era.

El maestro de ceremonias os escuchaba en silencio y no intervino hasta que todos dejasteis de hablar, con un hilo de voz pausado tomó la palabra.

- La Vânâtoarea es casi tan antigua como la sociedad vampírica, hay pocos vampiros que recuerden la última vez que se celebró pero los rumores siempre recorren las altas esferas. Algunos clanes buscan honor, otros recompensas y otros simplemente participan por fidelidad al príncipe.  Cada vampiro poseerá sus motivos pero solo os deben importar aquellos que crucen las puertas -  El anciano hace una pausa y se da la vuelta dándoos la espalda y prosigue con l explicación. -Hay más vampiros participantes, uno de cada clan aunque el resto de individuos  que deberán realizar otras tareas, de momento no deben importaros. 

El anciano en ese instante chasquea los dedos y las sábanas blancas caen al suelo mostrando unas jaulas verticales, en su interior veis hombres, mujeres y niños. Todos en silencio, algunos llorando, otros furiosos pero sin duda podéis oler el miedo en todos y cada uno de ellos. Son muy conscientes de que seguramente vayan a morir allí.

- Esta es vuestra primera prueba, las únicas normas son que no podéis salir del recinto y el limite de tiempo es hasta el amanecer - Sin daros más explicaciones el anciano desaparece en el interior de la sacra con un ritmo pausado.

Y así, sin más instrucciones nos dejaron a merced de los elementos. Sin saber que hacer o que decir, solo podía intentar encontrar algo más de información. Tal vez los mortales tuvieran características que no se podían apreciar a primera vista. Los miro con detenimiento antes de ver sus auras.

De una forma tranquila, voy hacia alguno de los humanos que estén tranquilos. 

Por el camino me voy fijando en donde puede haber una puerta, ventanas, si hay alguien detrás de ellas, di un pequeño rodeo y miré las tumbas, algún escrito que me dijera quien había ahí realmente. 

Una vez en el lugar, activé la capacidad de ver lo invisible, quizá algún espíritu supiera que es lo que querían que hiciéramos. 

Después, al acercarme a la celda, pregunté de forma tranquila, cuando os han cogido, y, que os han dicho exactamente.