Partida Rol por web

Astrid se había quedado inmóvil durante unos segundos para analizar la situación, dejando que sus compañeras se adelantaran con la matanza.

De pronto la rubia saltó la verja como lo haría una valkiria lanzándose a la batalla. Cayó con las piernas flexionadas para amortiguar la caída, quedando estas bastante abiertas con la única protección de una de sus manos apoyada en el suelo, aunque más que cubrir algo solo conseguía mostrar una imagen más sensual de la chica, pues su zona más íntima se podía apreciar con cierta atención en la fina tela del tanga.

Rápidamente se levantó y apuntó contra los cadáveres que se paseaban tambaleantes hacía sus compañeras.

Disparó dos veces, con sus voluminosos pechos botando por el retroceso del arma. La primera para reventarle la cabeza al ser que segundos antes estaba a punto de atacar a Mei mientras aniquilaba a otro y la segunda para repetir la acción del anterior, sólo que este se acercaba a pasos lentos a Natalie.

Cuando quiso darse cuenta se estaba mordiendo el labio inferior con fuerza a la vez que cerraba las piernas y las apretaba por la oleada de extrañas sensaciones que había sentido al ver como los zombis caían desplomados al suelo gracias a los disparos. ¿Que era eso? ¿Placer?  No estaba segura. De normal su vocecita interior ya le estaría reprochando su reacción al matar, o mejor dicho, rematar, pero le daba igual. Eso le ponía y mucho. Cosa que dejó clara con un suave gemido agudo a la vez que recargaba el arma.

Después de que el resto de sus amigas excepto Astrid saltaran con ella las rejas Mei trata de continuar dando sablazos sin perder cierta formación con las demás para no descubrir demasiado su espalda de los zombies que se acercan a ellas sedientos de su sangre mientras que les dice a sus amigas:

" Continuemos matando zombies mientras que conservamos nuestra posición para cubrirnos mutuamente los traseros queridas, Jamie no te cohibas y forma parte de la fiesta, porque hay chambelanes para esta quinceañera, jajaja!! "

Después de rebanarle Mei la cabaza a otro de los zombies que se le acercaron, dicha cabeza rodo sobre de ella y su hocico trato de morderle sobre el escote, ensuciandola de sangre y abriendolo un poco mas para exhibir un tanto mas sus exhuberantes pechos