¿Señor Seehan? - dijeron en un tono muy serio los dos policías. - Acompáñenos a comisaría, tenemos unas preguntas que hacerle. - tras decir esas palabras esposaron a David y lo metieron en el coche patrulla.
Tras llegar a la comisaría, observó como en la puerta había un montón de mujeres cabreadas con pancartas y dando gritos, además de la tele, que estaba grabando la llegada de este. Una vez dentro, metieron a David en una sala de espera en la cual estaba Banes, parecía bastante tranquilo. Por otra parte dentro del despacho contiguo había un policía tomando nota al señor mayor dueño de la empresa de traducciones.
Bienvenido, David. - decía mientras le invitaba a sentarte a su lado. - Parece que se ha liado bastante y por la cara de confusión que traes... Parece que no has visto las noticias. - sacó su móvil del bolsillo, puso un vídeo y se lo enseño a David.
En el vídeo se podía ver a una chica, Sally, llorando en un plató de salsa rosa.
En ese libro... Ponían cosas horribles, cosas de que hacer a las mujeres, de como atarlas, como torturarlas ¡incluso de como matarlas! - tragó un poco los mocos. - Tuve mucho miedo cuando lo vi. Ese chico, David, lo he dejado por otro chico, había bebido y parecía obsesionado con aquél libro, lo leía de cabo a rabo. ¡Tenía miedo de que me hiciera algo por resentimiento! - tras eso rompió a llorar.
El plano cambió a la presentadora. - Ya lo ven, no solo este tal David es un potencial violador o asesino, si no que la empresa que lo contrató quería tener ese libro en su poder para su distribución. ¡No podemos permitir que dicha obra acabe en las calles!
Y por eso estamos aquí. - concluyó Banes.
Tras ver el vídeo y escuchar a Banes, las declaraciones de Sally sobre nuestra relación me parecieron casi lo de menos. A nadie le gusta que le acusen de violador o asesino en potencia, más cuando salen grabaciones e información sobre su casa en las noticias pero al mismo tiempo... Diablos, lo que se me escapaba es cómo ella podía haber visto algo de eso.
- Pero ¿Cómo diablos es posible? ¿Cómo puede haber visto ella esas cosas en el libro cuando ni tú ni yo hemos podido pasar de leer el título? ¿Alguna mujer de la oficina había sido expuesta al libro?- Me costaba creer que el libro pudiese contener algún tipo de componente que respondiese de manera diferente ante hombres y mujeres, pero tras todo lo que había psado en las últimas 24 horas no se podía descartar ninguna hipótesis, por loca que fuese. - Aparte de eso, supongo que cuando la policía vea el libro, verá el mismo galimatías que nosotros, a no ser que algo haya ocasionado un cambio en el mismo. Me gustaría ver cómo lo aclara Sally si la gente sigue viendo el volumen incomprensible...-
Y no es que me considerase un experto en libros de arte o literatura extremos, pero había más volúmenes editados por el mundo con un contenido similar al que comentaba mi ex, y con gran difusión, como Los Cantos de Maldoror o The Love of the Brut, me extrañaba que me pudiesen detener por la existencia de otro libro de contenido más que polémico.
Me senté mientras esperaba a ver si Banes tenía alguna respuesta para todo esto.
Banes mostró cierta intriga. - No, la verdad es que nunca he enseñado el libro a ninguna mujer, ni siquiera a mi esposa. Quizá alguna mujer de la empresa podría verlo... Aunque ahora es un poco tarde. - rió. - La policía seguramente no entienda nada del libro, así que todo queda en tu palabra contra la de la pelirroja... Y ella ya se ha ganado a los medios. - suspiró. - No vas a acabar en la cárcel, después de todo no hay pruebas de que fueras a hacer nada, pero el director estaba acojonado de que los medios le hundan la empresa... Así que ve olvidándote del libro.
Pero pronto el director salió del despacho donde estaba os miró con cierta vergüenza y se fue sin decir nada. Sin embargo el policía llamó a los dos.
Una vez en el despacho contiguo, el policía empezó a hablar con los dos. - Hemos interrogado ya al director de la empresa, pero contadme vuestra versión de los hechos. ¿Qué conocéis del libro? ¿Por qué os contrató? ¿Qué relación teníais con la chica? - parecía bastante serio y molesto, parece que quería ir al grano.
Banes parecía muy tranquilo. - Del libro solo conozco la portada, pues no he podido descifrar nada del interior. Fui contratado para traducirlo, para nada más. A la chica no la conozco de nada.
- Soy traductor freelance, fui contratado ayer para traducir el libro con ayuda de Banes, pero no pude ponerme a trabajar en él todavía, no entiendo ni una palabra y sus imágenes son galimatías para mi, al menos hasta ahora. Simplemente me tomé una copa para celebrar mi nuevo empleo mientras trataba de echar un primer vistazo al volumen cuando Sally entró en mi estudio y pareció enloquecer, pero no me dijo qué había visto en el libro. Se fue de mi casa diciéndome que no volviera a llamarla y hasta verla en las noticias no sabía a qué se debía su miedo. Yo si conozco a la muchacha, fuimos íntimos hace un tiempo pero ahora mismo solo somos amigos. Le aseguro que no pretendía hacerle ningún tipo de daño, para bien o para mal no soy tan 'pasional', aparte de que no me parece que tenga demasiado sentido el que consiga un trabajo en el que me den a traducir un libro con el que pueda pretender vengarme de una ex novia. Y hablando de cosas sin sentido ¿Han mirado el libro y han comprendido algo? Ya le he dicho que yo no, y lo único que se me ocurre es que Sally haya podido comprenderlo por algún tipo de efecto basado en la percepción femenina, hay estudios científicos sobre la materia. O eso o no entiendo cómo ha podido comprender nada del libro.
El policía anotó poco a poco todo lo que decían. - Bien. Señor Seehan, si bien no hay evidencias de violencia ni pruebas de que fuera a hacer nada, si que hemos encontrado drogas en su domicilio. Han sido enviadas a análisis para determinar que tipo de sustancias son, pero solo con eso, la señorita Parker ya tiene las de ganar. - se notaba que el policía estaba molesto. David sudaba, pues suponía que esas eran las drogas de la propia Sally, las que debía haber llevado encima todo el tiempo y las dejó solo para incriminar a David. - También hemos encontrado una botella de alcohol, bastante vacía... Bastante más vacía que solo una copa. Pero eso no es motivo para encarcelar a nadie.
Se rascó la nariz, miró a David. - Sinceramente, no creo que fuera a hacer nada, pero la tenencia de sustancias ilegales y el alcohol lo deja en mal lugar. Respecto al libro, efectivamente no pudimos entender nada, sin embargo el director de la empresa ya ha dicho que no quiere que le hagan un piquete entre todas las chicas que hay ahí fuera e iba a hacer que nos encarguemos de destruirlo, además de despediros a los dos. Si bien el libro no le incrimina, señor Seehan, no podemos arriesgarnos a que sea un libro que clame a la violencia contra la mujer o contra cualquier otra etnia, cosa que si que sería ilegal.
Cerró el archivo que estaba escribiendo. - Ya que es su primer crimen, el de tenencia de sustancias y no hay evidencias de que sea peligroso, simplemente tendrá que hace unos meses de trabajos comunitarios. Usted, Banes, es libre, aunque seguramente pierda el trabajo también. Lamento no poder hacer nada más. - con esas palabras os invitó a abandonar el despacho.
Al salir de allí, Banes se dirigió a David. - No te preocupes, podría haber acabado peor, simplemente... Inténtalo de nuevo. - y con esas extrañas palabras se despidió.
Al salir de allí, el director estaba esperando a David, junto con un montón de cámaras. El director no dejó decir nada a David e hizo un discurso en nombre de los tres, disculpándose y explicando que desconocían el contenido del libro, pero ahora no iban a dejar que saliera a la luz y lo iban a destruir. Las chicas que allí habían aplaudieron, al grito de "Por fin hacen algo bien".
David a los pocos días tuvo un juicio contra Sally, la cual parecía no querer entrar en razón y seguía traumatizada por lo que leyó. Sin embargo, por falta de pruebas y por solo tener drogas en casa, David fue condenado a seis meses de trabajo comunitario.
Tras cumplir condena, David continuó con su vida, como si aquello no hubiera ocurrido, olvidándose de la relación tóxica que tenía con Sally. Lo que no pudo olvidar fue aquél libro, que desencadenó toda aquella locura...
Y con esto y un bizcocho, este es tu final.