Suspiro con resignación, "con menuda panda de alocados me he ido a juntar, espero que no me lleven a la muerte"
-muy bien, lo haremos a vuestra manera, vamos a buscar a esos orcos-
Una vez decidido el curso de acción verifico que llevo encima todo mi equipo -supongo que la resaca no os habra impedido coger vuestras cosas de la posada, seria una sorpresa desagradable descubrir que os habeis dejado la espada- digo sonriendo
Ataulfo repasó su vestimenta. Estaba enfundado en su cota de placas y con todo su equipo a cuestas, extrañamente había dedicado tiempo a equiparse antes de salir hacia el foco del fuego - mandoble, cota de placas, mochila..., sí, creo que lo tengo todo - dijo irónicamente - ¿podemos partir ya?
Una vez revisado que llevais encima todas vuestras posesiones el sol ya lleva un buen par de horas en el cielo y parece que tendreis un buen dia de verano, caluroso y despejado.
- Entonces vamos, antes de que el sol empiece a calentar en serio. Me temo que hoy caeran los pajaros .
Pasamos a la segunda escena, el secuestro de Alaric.