Medio de broma para sí mismo, Allen probó la palabra "Chuy" en el candado.
Arto. Introduzco el código que sacamos entre los dos.
Para aquel detective que de la nada una puerta se abriera en la pared, o mejor dicho que aquella pared tan confiable no fuera más que una puerta camuflada, era algo que tomó por sorpresa. De hecho a parte de dar un saltito, soltó un gritito de sorpresa al verla.
-¡Aaaaaaah!. -Dijo escapándosele- ¡¿Pero qué?!. ¿Acaso ya no se pueden confiar en las paredes hoy en día?... Veamos qué hay en el otro lado...