Una semana despues
Nave Imperial Shartish, orbita baja de Escitilia.
El despacho del Inquisidor Vloss es tal y como lo recordabais, media docena de servocraneos se mueven de un lado a otro traslandando placas de datos y tubos, moviendolos de unas estanterias a otras y clasificandolas. Una enorme mesa de madera antigua en el centro de la estancia unicamente adornada con el poderoso emblema del Aguila Imperial. La mirada de vuestro superior, es una mirada cansada del que ha visto demasiado y parece atravesaros como si viese mas alla de vuestro mera presencia fisica. Realmente la sensacion que os da es de que os mira pero es como si no os viera.
La punta de cada uno de los dedos de su brazo derecho parecen terminaciones metalicas, como si hubiesen colocado un guante de carne sobre una mano de metal. Y el pulgar no para de repiquetar en el resto de dedos en diferentes patrones, que hace que la estancia se llene con un molesto y repetitivo "Click, click, click" metalico de fondo.
Esta vez no hay sillas que os acojan, a pesar de que vuestros cuerpos aun no se han recuperado de las heridas y el cansancio acumulado y no os vendrian nada mal.
-¿Que pueden decirme de esta misión? Se que cada uno redactara su propio informe pero quiero escucharlo salir de sus labios... Me interesa sobre todo lo que tengan que decir sobre Aristarchus, Raven y ese... Objeto que encontraron.
Bueno, queda decir que Raven no esta entre vosotros aun le estan haciendo "pruebas", pero lo pongo en la escena para que lo lea.
Esto se acaba muchachos :)
Susan habia recuperado la mayor parte de sus heridas fisicas pero mentalmente estaba en otro plano, pensando y recopilando una informacion la cual habia visto y sufrido para traerla ante Vloss.
Estaba en el mundo de la inquisicion el cual ella no pertenecia legitimamente ya que sus verdaderas leyes eran sus titulos de princesa en un mundo extinto.
Cuando la Adeptus Ministorum acepto que su linaje fuera la encargada de ejecutar y sentenciar tanto herejes como aberraciones de la disformidad a cambio de ser una agente libre de cargos para ejercer su propia justicia, nadie lo puso en duda.
Tambien tuvo que aceptar el hecho de que sus titulos nobiliarios y monarquicos fueran consagrados al Adeptus Ministorum como parte de su deber al imperio para demostrar su valia como ejecutora de la ley imperial.
Recordaba todo lo vivido mientras ojeaba Escintilia desde la ventana del camarote de Vloss fumandose una varilla lentamente mientras este preguntaba que habia pasado alli abajo. Para Susan la respuesta era muy obvia, herejias y ceremonias infernales camufladas entre mantos imperiales los cuales fueron embaucados por la siempre divertida obra del caos especializada en infundir a voluntad la semilla del mal en los corazones y mentes de los hombres.
"Debilidades, miedos y mentiras a conocer una verdad la cual todos temen pero que prefieren ignorar por el bien de todos."
Eso pensaba ahora, ya que cuando empezo como agente al servicio de la inquisicion todo eran valores respetados, conocimientos restringidos para evitar que el enemigo supiera mas de lo que ellos conocian del enemigo.
Nuevamente era otra mentira simple y llanamente, una demagogia del imperialismo puesto que el enemigo sabia perfectamente que con ese desconocimiento es donde mas se aprovechaba de los hombres. Podian mercer la cuna de la ingenuidad y crear un falso patron de la nada basadas en leyendas de dudoso valor historico para recrear la antitesis de lo que el pueblo esperaba con entusiasmo.
Simple y llana Herejia basada en la ingenuidad de los hombres que creen en falsos milagros...
Fumaba mientras ojeaba todo lo que habia sido su primer viaje al mundo de la inquisicion, aqui veia que las mentiras eran el pan nuestro del mal y que las viejos ritos que eran necesarios, simplemente eran olvidados pero no ignorados ante los verdaderos creyentes de la fe en ellos.
Como el hermano Lamark, por poner un ejemplo...
Finalmente cuando Vloss pidio explicaciones simplemente decidio contemplar el ventanal de tan magnificas vistas esperando que su grupo sin el heretico Raven dieran sus respectivas explicaciones.
Perfectamente sabia que podria omitir darle explicaciones puesto que Vloss no ejercia ni control ni autoridad sobre ella salvo para darle otra mision la cual no podria rechazar debido al pacto de nobleza que ella tenia con la inquisicion. Por lo demas para Susan, Vloss no era mas que otro peldaño de baja posicion el cual sabia que no podria domar ni exigirle nada por este pacto en cuestion.
Vloss tenia claro que Susan no era una agente acolita cualquiera, sino la princesa oscura superviviente de un mundo extinto donde el alto poder imperial decidio hacer un exterminatus sobre su mundo por orden propia de la familia de los Gothik que gobernaba el planeta con mano de hierro, siendo la unica del linaje monarquica sucesora al trono de dicho planeta ahora ya calcinado y olvidado por muchos pero no por la inquisicion.
No obstante Vloss no podia tratarla como al resto de acolitos sino como una ejecutora de la mano directa de Adeptus Arbites personificada, eran simplemente una aprendiz de la ley imperial universal del Ordo Hereticus.
Susan sabia que Vloss no dudaria de sus palabras ni de los actos que ella pudiera hacer, pero tenia claro que aun siendo de la realeza,Vloss tenia la ultima palabra en sus decisiones, cosa que a Susan no le gustaba en exceso pero comprendia que era una orden de las altas esferas la cual no podia rehusar, al menos no voluntariamente...
Penso que si tenia que enfrentarse a lo desconocido nuevamente iba a tener que romper ciertas reglas de "ignorancia bendita" para poder conocer mejor a los futuros enemigos que como el padre cuervo le podrian deparar, si queria tener mas posibilidades de exito con sus misiones.
Susan concluía su varilla de Lho lentamente consumiendose junto con sus pensamientos en un acto de relajacion total teniendo claro que lo que habian recuperado del vidente les daria otra mision tan pronto como Vloss tomara cartas en el asunto.
Y nunca mejor dicho...
Ya tienes mi epilogo, respondere tan pronto finalice el resto de soltarte el sermon nuevamente.
Saboreatelo o prepara aspirinas XDD...
Arelix volvía a caminar por los largos pasillos al encuentro de Vloss. El Inquisidor seguía en su despacho tras la mesa de madera mientras sus dedos organizaban, aparentemente documentos y demás.
Aunque todo le resultaba familiar algo había cambiado y no únicamente era el recibimiento y la falta de hospitalidad del superior, sino que la asesina había cambiado. Su pelo blanco se había vuelto gris por la mugre tras tantos enfrentamientos y tiempo pasado en aquel páramo desértico. A pesar de seguir en forma el estrés la había hecho adelgazar y tenia ojeras por el cansancio, suma de las horas sin dormir y de lo agotadora que había resultado la misión.
La asesina dio un paso al frente respetando el protocolo. Haciendo un saludo militar y esperado unos segundos a que le concedieran la oportunidad de hablar.
-Señor Vloss, no es mucho lo que pudimos sacar en claro, quizás alguno de mis compañeros, con mayor capacidad de intuición, haya desvelado el secreto… -La asesina pausó un momento, pensando en las mejores palabras y tomar aire un momento antes de seguir con su monologo.
-Desde que llegamos la deformidad era patente en todo momento y presenciamos cosas extrañas. En aquel desierto, una vez nos reunimos con Aristarchus, exploramos el desierto. Encontramos unas antiguar ruinas que al parecer pertenecían a los tiempos de San Druxus, antepasado de nuestro difunto superior Aristarchus… Sospecho, por lo que descubrimos mas a delante al encontrar Lucius una de las cartas de tarot tras nuestro enfrentamiento con aquella “cosas“, que el vidente estaba siendo manipulado desde un buen principio y quien lo hacia conocía este vinculo entre Aristarchus y su antepasado. -Añade, dando un pequeño salto en el tiempo en su explicación para mayor aclaración. -Para cuando regresamos de la orden de arrestar a la Canta Muertes por ser acusada de sospechosa resultó ser que era una distracción y que estaba teniendo lugar un ritual. El Abad Skae fue el sacrificio, aquel demonio necesitaba al parecer un recipiente… -Dice sin estar demasiado segura …y el vidente le imbuía de fuerzas con sus plegarias mientras otras cartas de tarot, con tecnología xenos, giraban a su alrededor. -La asesina esta próxima a llegar al final, a grandes rasgos había contado lo que le había parecido lo mas importante.
-Como ya dije el entorno estaba muy tocado por la deformidad y muchos animales habían mutado y los restos mortales del la gense te alzaban otra vez… Todos compartian la peculiaridad de que carecian de ojos. En cuanto a Raven se dejó “influenciar” por esta fuerza corrupta y en repetidas ocasiones cedió a la locura y nos atacó. Es cuanto se Inquisidor.
Los dedos mecánicos de Inquisidor lo fascinaron por un momento. Tan delicados, tan perfectos... de manufactura superior, evidentemente. El tecnosacerdote liberó la atención hacia la cara del Inquisidor, mientras reproducía nuevamente para sí los fragmentos de la explicación de Arelix a los cuales no había dedicado la prioridad de sus procesadores principales. Sus ojos parpadearon mientras procesaba la información, para luego inclinar la cabeza y tomar su lugar en la exposición.
# Señor, oscuros han sido los hechos en Desesperanza, y su pobre Categral. Como ha dicho la señorita, vuestro siervo Aristarchus compartía un vínculo con la Disformidad demasiado fuerte, y terminó cediendo ante la corrupción. Desconozco si la relevancia del lugar donde se erigió la Catedral, o la influencia del propio psíquico, fueron los motivos para las numerosas señales de la Disformidad que plagaron los campos... pero sí sabemos que el Abad Skae, títere macabro, era protegido por una numerosa cantidad de estas:
Coloca frente a sí, tendiéndola a su superior, la carta del Tarot con los circuitos expuestos. # Si alguien hablaba a través de este Tarot, no era el Emperador. Seguramente querrán analizarla mentes más perceptivas que la mía; solo puedo decir lo obvio: su origen no es el sagrado Imperio del Hombre.
Los vocotransmisores de Quintos se apagaron con un gruñido que fue desciendo de volumen hasta ser inaudible. Esperó a las preguntas de Vloss, aunque tenía la certeza de que solo podría contestar pocas...
-No se si seran conscientes -Continua, cuando estaba claro que fuera lo que fuera no erais conscientes pues acababais de llegar y nadie os habia informado aun de nada.- pero la destrucción de este ser de la disformidad, si es que lo destrulleron. Ocasiono el desvanecimiento de gran cantidad de psiquicos a lo largo de todo el sector. Era un ser de tremendo poder, pueden estar orgullosos de seguir con vida, al igual que yo me siento orgulloso de que ahora mismo esten ante mi.
Lo que se podria interpretar como una sonrisa se dibujo en los labios del inquisidor por un segundo, despues tomo la carta que le tendia el tecnosacerdote con la mano derecha, para examinarla mas de cerca.
-Efectivamente sus deducciones son correctas, esta tecnologia no es del Imperio... Mis hombres lo analizaran. Aristarchus era un buen hombre, me apena que se dejara influir hasta ese punto.. ¿Dijo quien le habia regalado el tarot? ¿O insinuo alguna pista que pudiera resultar util? Cualquier información puede ser importante.
-Señor, pues no me acuerdo, yo no he sabido nunca de esas cosas, quizas Lucius podria decirnos algo, pero desde luego si que ha sido un viaje movido, y si la desaparicion momentanea o permanete de ese enjendro ha servido para tranquilizar la zona bien venido sea, creo que nos merecemos un descanso y unas buenas y cargadas bebidas señor.
jejejejeje bebida para todos!!! :)
Susan apago la varilla de Lho en el ventanal que daba al espacio y espeto.
"Propongo que interrogue en la psique de Raven, ya que ha sido una marioneta al servicio del padre cuervo, quizas el pueda darnos alguna respuesta sobre las cartas ya que compartio la misma psique que su posesivo dueño."
Se giro hacia Vloss y continuo.
"Sin duda eso es solo el comienzo de una posible invasion demoniaca y estan utilizando esa clase de artefacto para abrir portales de la disformidad mediante rituales humanos. Primero engañan a sus victima haciendoles creer que es posible construir un vinculo mayor de fe para luego usarlos como carnaza..."
Se gira al ventanal nuevamente cuando recuerda por un instante al hermano Lamark antes de morir y concluye.
"Como ha sido claro el caso de Desesperanza..."
Vloss parece mas interesado en el aparato que en las explicaciones que le continuais dando. Aunque finalmente su mirada vuelve a fijarse en vosotros, especialmente en Susan.
-¿Una invasión demoniaca? Con la información que habeis traido tanto podria ser un suceso aislado como el principio de una masacre, creo que el demonio eligío a Aristarchus por se pariente directo de San Druxus, en una especie de venganza que solo el comprendia... Dejemos que el ordo apropiado se encargue de decidir esto, lo mio son los xenos. Y esta carta puede ser algo importante. Yo mismo me encargare de Raven, a ver si aun es digno de una muerte rapida.
En completo silencio, con esa ultima frase aun en el aire, deja la carta de tarot sobre la mesa, y rebusca en uno de sus cajones, sus dedos metalicos siguen repiqueteando sin parar un instante. Por fin saca una tarjeta y la lanza hacia Devi de nuevo dibujando en su rostro un amago de sonrisa.
-Bebed cuanto gusteis, yo pago, que no se diga que Vloss no cuida de los suyos. Pero haceros mirar esas heridas... Mis contactos en el mechanicus daran buena cuenta de esta aberración tecnologica. Podeis partir. El Emperador protege.