Al entrar en la mente de Takamu, ves que se exalta y del susto casi se cae del árbol donde estaba subida, pegando un fuerte respingo.
Aaaargh... - Grita. - ¡Dios, Iri! ¡Cuántas veces te he dicho que no irrumpas en mi mente así porque sí! ¡Estás invadiendo mi intimidad! Además, no... No ves que estoy trabajando... Sí, sí, trabajo mucho... ¡Y tú me interrumpes! - Dijo, aunque al decirlo lo oías perfectamente en su pensamiento, mientras hacía como que examinaba las hojas del árbol. Una muestra muy clara, de intentar salir airosa del hecho de que estaba trabajando.
Ehmmmm... Pero, ¿Por qué? ¿Pasa algo?
- Por eso pedí perdón por la intrusión. Necesito un poco de tiempo... acaba de surgir una reunión con la Triada. Después, si eso, te cuento. - digo mentalmente mientras llamo a la puerta de la clínica en cuanto estoy delante.
Vas a la clínica. La parte de la clínica a la que te diriges es más bien a un mostrador medicinal que Shicu tenía montado en la parte lateral del pequeño edificio de la clínica.
Allí, había un pequeño escaparate en la parte baja del mostrados que daba directamente a la calle, y por dentro también podían verse algunos medicamentos. Era una farmacia que miraba directamente a la calle, y en ella estaba la ayudante de Shicu, Rania, la cual aquel día parecía ocuparse de nuevo de llevar la pequeña farmacia.
Al verte, sonríe afablemente al ver que te detienes frente al puesto.
¡Hola Iriel! ¿Qué tal?
- Hola Rania, bien. Gracias. Tengo que darle unos extractos al Dr. Shicu, ¿está por aquí? - y empiezo a sacar las bolsitas del cinturón.
Oh... Ahora mismo está ocupado... - Te dice señalando una puerta del interior, que seguramente conecta la clínica con la farmacia. - Pero deja, yo se las daré. - Se ofrece con simpatía mientras extiende sus delgados brazos hacia ti para que le entregaras las bolsitas.
Conocías a Rania, y sabes que es una chica de fiar, además, tiene un caracter simpático con todas las personas de la villa. Es una chica que se hace de querer.
Asiento levemente - De acuerdo, dáselos. Son unos extractos para hacer unas sintetizaciones. Supongo que después vendré a recogerlas, de no poder, vendría Takamu. Gracias. Hasta luego. - dejo las bolsas sobre el mostrador para que las pueda coger Rania.
Después me voy rápidamente en dirección a la sala de reuniones de la Triada de la Visión, vigilando a mi alrededor con mis ojos, como de costumbre, mientras voy conectando mentalmente con Covel y Elcadia - Necesito veros en la sala de reuniones,voy de camino. He visto algo. -