Aquello no era bueno, no había nadie todo estaba en silencio y sin guardias, cosa que sería imposible en las circunstancias que estábamos, teniendo al día siguiente a su Ilustrísima en aquel sitio.
Sera mejor que volvamos dentro, aquí estamos expuestos si es que pasa algo, mejor estar en un lugar cerrado. Estratégicamente era un peligro mantenerse así. Enviad a los pajes a avisar, mientras esperamos “Total son prescindibles”
Asentí a las palabras de Emily, mejor estar dentro que no fuera. No tenía muy claro lo que hacer, si avisábamos a la guardia podían pillar a los demás, pero de no hacerlo podíamos estar todos en peligro.-Esperemos un poco antes de mandar a por ayuda, no quiero comprometer a nuestros compañeros- Acto seguido saqué la espada y me dirigí al interior de la catedral
Veo al guardia tendido en el suelo. -¿Os fijásteis en sus ojos? Eran como los de una criatura del infierno...- dije en voz baja.
Escuché con atención a Marcus. Entonces nos preguntó sobre el interrogatorio de presos.
-Espera, ¿esto no es una prisión? El albañil dijo que aquí esperaban los presos hasta que el verdugo los aguardara en el cadalso. Íbamos a interrogarlos por si alguno tenía o conocía a alguien con intención de atentar contra su Eminencia...
Seguí a Alphonse, pensaba que podría manejar a la guardia no es que fueran unas mentes muy despiertas, pero era mejor evitar riesgos.
Bien busquemos un lugar seguro en el interior. Mandemos a los chicos a las plantas superiores por si alguien se mueve por ellas. Dije mirando a los chicos. Pero no hagáis nada ratoncitos, solo venid si veis algo. Comente.
Era mejor tener ojos en todas partes, mientras esperábamos a ver que sucedía. Dado que estaba claro que pasaba alguna cosa.
Asentí a Emily y me puse a buscar un lugar seguro. No sabía en que podía acabar todo esto.