- Dichosos los ojos.
Inidico cuando por fín entra el elfo en la posada, aunque acto seguido me levanto dispuesto a partir sin darle tiempo siquiera a que pueda sentarse o hacer cualquier otra acción que continue retrasándonos.
La pobre Nera se había decepcionado de no ver a su estimado Magnus en la posada, pero al verle se acercó y le ronroneó en la pierna a la altura de la caña de la bota.
GRRRRGRRRRRR...
Ya era hora de que volvieses ¿no te parece? digo poniendo los ojos en blanco un poco más y soy capaz de dormirme de pie y mientras digo esto me voy acercando a la puerta. Teniendo en cuenta que el lugar a donde nos dirijimos está suficientemente lejos como para tardar más de un día, calculo que cumpliremos la petición de Sammuel de no entrar de noche.
Con la mochila preparada y cargada en los hombros, apoyo una pierna en la puerta para ayudarme a abrirla y esperar en el exterior a mis compañeros
-Asi me gusta, que todos me esperen a mi. Sonrei ante tal egocentrico pensamiento mientras me acercaba a mis amigos para comunicar las nuevas.
- Nuestras monturas nos esperan impacientes en el establo, espero no haberos hecho esperar demasiado. Reconozco que me gusta hacerme de rogar, aunque normalmente eso solo se lo hago a las damas... Con un guiño complice termine la exposicion de los hechos y me dispuse a guiarles hasta nuestros nuevos corceles. Di la espalda y abri las puertas como cortesia para que pasaran todos al exterior. Tenia prisa por salir.
- Espero que os acordeis de como se monta...
Seguimos hablando de monturas, no? Dijo el mago fingiendo que dudaba y con una mirada pícara al responder a su pregunta.
Excelente Magnus, veamos qué nos has traído. Ejem. De repente se percató de que estaba presente Aelin y no era decoroso seguir bromeando.
Uno de los mandatos de Kord, es estar siempre dispuestos a montar, e ir a la batalla...
El clérigo dejó esas palabras en el aire para que cualquiera las interpretara a su placer, y salió a observar las monturas. La verdad es que no tenia ni la mas remota idea de montar a caballo, por eso tenia una mula y el solia ir andando, peeeero, eso era otra cuestión.
Mientras estaba esperando a que saliesen todos entrecerré los ojos un poco como si fuera una mirada de odio hacia Magnus aunque realmente estaba riendome Pues a mi no me hagas esperar más, la próxima vez te quedas en tierra dije mientras evitaba reirme.
Por favor, montar ni que fueramos tontos, eso lo sabe hacer hasta mi tatarabuelo con los ojos cerrados iba diciendo en voz alta aunque realmente sólo me lo decía a mi mientras gesticulaba y movia los ojos para todos lados
Os vais de la posada, ya es mediodia, seguiis a Magnus hasta los establos donde tiene preparado los caballos.