Partida Rol por web

Observo cuantos son y cuál es su intención, si son pocos y no parecen más que atentos a lo que venga separo el escudo y la lanza de mi cerpo estirando los brazos en señal de no querer atacar, si por lo contrario son pocos y con intenciones hostiles y símbolos del mal, me escudo tras mis protecciones y embrazo la lanza listo para el combate:

Yibril da unos pasos cautelosos acercándose ligeramente para observar lo que ocurre y al reconocer el símbolo de Helmo en sus armaduras, el guerrero se pone en posición pacífica. A lo que el soldado con pinta de clérigo dice:

En nombre de Helmo, ¡no avancéis más e identificaros!

Aparecen 2 soldados más. En total son 4 soldados armados con espadones y el hombre que brilla (paladín) armado con escudo y martillo de batalla. Uno de los soldados, el que lleva a Astaroth a cuestas se, pone en cobertura 1/4 en uno de los túneles que llevan a la derecha. 

Miro al hombre y sonrío aliviado:

- Buenas, somos aventureros de bien que caímos en estas cavernas cuando acompañábamos a unos que se hacían pasar por miembros de vuestra orden, eran unas criaturas cambiaformas creo, eso ellos lo saben mejor que yo- señalando a mis compañeros mientras hablo de los githzerai del inicio de la misión- hemos destruído seres aberrantes de otros planos cuya sangre era de ácido y un brujo que lanzaba rayos de fuego y que cuando murió explotó en una gran bola de fuego que casi acaba con nosotros. ¿Podéis llevarnos a la superficie? Necesitamos descanso y salir de estas cavernas.

Bargoth escucho las palabras de Yibril con una sobrisa en el rostro.

-Y yo he perdido una pierna.

Oís una voz familiar detrás de ellos que se acerca por el pasillo de la derecha. Tranquilo enano todo se resolverá...  Luego sentís el humo de su puro antes siquiera de mostrarse ante vosotros. 

Por fin lo hace y se os acerca. Donde estáis. Y aunque os parezca mentira... por primera vez os sonríe:

Os pido disculpas primero de todo, por haberos usado como escoria orca. Conocíamos de la infiltración de Githzerais y Githyankis en nuestras filas. Controlando la nobleza, buscaban desesperadamente a gente que quisiera entrar en este lugar, sin saber porqué. Vuestro grupo está compuesto por gente capaz de luchar contra los posibles peligros de aquí, excepto al prisionero que pusimos en vuestras filas... 

Con una señal suya acercaron a Astaroth hasta el grupo y el comandante de la orden de Helmo acercó su colgante a la frente del tiflin. Cuando lo hizo una runa apareció brillando en su frente. 

Una runa de seguimiento. Desde fuera controlamos dónde estabais en cada momento gracias a esta basura, que no sabe siquiera que lo lleva. La runa desaparece cuando Shwain aleja el colgante. Encontramos un pozo en el desierto que parecía llegar hasta este punto y por ello bajamos. 

Ahora, gracias a vosotros, sabemos porqué los Githzerai querían entrar aquí y porqué otras civilizaciones exploraron estas min... cavernas.

Le quitan los guanteletes a Astaroth y le ponen los grilletes... 

¿Queréis preguntar algo antes de que despertemos al prisionero?

-Si. Que tenia que ver Astaroth con los Githyankis? Y quien dejo la nota en la posada la noche antes de empezar el viaje?

Es mía. Dijo el paladín acercándose al lugar. Era un aviso para preveniros de la posible traición de vuestros compañeros, en referencia a los Gitzerai ocultos en cuerpos humanos. 

Respecto a Astaroth, es sólo un prisionero que tenemos localizado con esa runa y lo usamos para poder espiar vuestra localización... ¿o acaso alguno de vosotros desearía prestarse para ser sellado con una runa?

¿Algo más? Dijo mirándolos a todos. 

La colera estalló en los ojos de Méredith, pero su autocontrol evitó que brotara por los poros de su piel. Guardó silencio mientras miraba con lástima al tiflin.

Miro a todos los heraldo sde Helmo y sonrío:

- ¿Hemos conseguido el objetivo entonces?¿Hay más de esas criaturas, a ambas me refiero?¿Y...Meredith y su cría?

Arnold miró por un segundo al Paladín de Helmo, con el ceño fruncido.. No tenemos ni idea de qué hablas... sólo conocemos la presencia de los Gitzerai y de una expedición gnoma de hace 100 años. Nada más. 

Miro a los paladines y luego al grupo, frunzo un poco el ceño y digo:

- Pues tras un descanso y algo de atención a nuestras heridas les haremos un informe completo sobre lo que había allí abajo. Es algo que deben de tener en cuenta si quieren bajar.

Astaroth se despierta y observa que está en una caverna muy grande, con una docena de petates en el suelo para dormir. Una pequeña cocina improvisada en el medio, con una sopa caliente en el fuego del centro del campamento. El humo se aleja por el techo, por un agujero que conseguís distinguir gracias a que por él entra una potente luz. Luz natural. "el cielo por fin". Es una caverna en la que no habíais llegado nunca y quizá sin las indicaciones precisas hubierais tardado semanas en encontrarla, debido a los vaivenes necesarios para llegar hasta aquí. 

El tiflin no está muy contento pese a las acomodaciones que siente y pese a que sus heridas hayan sido curadas... vuelve a tener los grilletes de los que tanto le costó liberarse y ante él, soltando el humo de su puro está Arnold, mirándolo con una sonrisa en la cara y rodeado de diez hombres armados hasta los dientes.

Despierta bicho del infierno... te hemos salvado la vida... 

El paladín de Helmo* ha curado las heridas de todo el grupo, excepto la pierna amputada del enano: Lo siento maese arquitecto, se disculpa el viejo paladín. Pero requerirás que un clérigo de Helmo o algún experto en la naturaleza te otorgue cierta regeneración para recuperar la pierna perdida. Pese a ello no te preocupes, cuando lleguemos a Amn se te facilitará tal ayuda. 

Arnold os miró y dijo: Pasaremos el día aquí, descansando y saldremos a la superficie de noche. Pues sin caballos tendremos que caminar unos 80 kilómetros hasta donde nos esperan nuestras monturas. En un pequeño pueblo. 

Ahora contadnos vuestra mierda. ¿Qué demonios ha pasado desde que os dejamos solos?

Méredith mira a Yibril a los ojos cuando habla sobre su "cría"...

-Siempre pensé que si tratabas de matarme lo harías con tus propias manos, no arrojándome a unos perros... Mi hijo ya está muerto, no tienes que revolver su tumba ni enterrarme junto a él.-

Abro los ojos y enseguida los cierro debido a la luz, hacia tanto tiempo que no la veia...de pronto veo en que condición  en la que me encuentro y a la persona que tengo enfrente...

--- Oh, Arnold... no sabes lo que me "alegra" verte...- digo sonriendo de manera picara y luego levanto las manos mostrando las esposas- Veo que no has perdido el tiempo... espero que esten a buen recaudo....

miro al grupo a ver en que estado estan y luego de nuevo a Arnold.

---¿ Acaso no te lo han cotado ellos?

El comandante de la guardia Amniana se quedó mirando a Astaroth... y dio una profunda bocanada a su puro. No diablillo... cuéntame tu versión y añade a tu cuento qué es lo que hace ese gnomo entre vosotros.. huele a infierno igual que tú. 

Méredith se adelanta -Ese gnomo parece ser que es un mercader arruinado que llegó en busca de oro... lo encontramos medio muerto... parece que unas cuevas no son lugar para un burgués de cuidad... sin embargo ha prestado una gran ayuda a nuestra expedición, supongo que transporte y comida caliente sería un buen pago por los servicios que nos ha prestado- mira al tiflin -también hay cosas que hablar sobre tu prisionero... pero dejemos que sea su lengua la que escupa primero, si es que tiene algo más que añadir-

--- No soy un  prisionero soy mas bien...una persona que no quieren que cometa locura alguna...- digo mirando a Arnold- Bueno, es una historia muy larga, la verdad aunque  el "pequeño diablillo", como le llamo yo, me entran ganas de tirarle por el agujero mas profundo de la tierra... odio admitir de que ha sido algo util en algunos aspectos, aunque es supamente irritante, yo le cortaria la lengua- añado con una sonrisa.

El viejo paladín se acerca al lugar donde está Arnold Shwain y dice: Comandante, si precisa de mi hechizo de Discernir Mentiras hágamelo saber... apesta a sandeces a pesar de su puro. 

Una risotada es la respuesta del fornido hombre:

Jajajaja, gracias Capitán, pero como usted bien dice sus gilipolleces cantan más que un Bardo de batalla en una taberna. Dejemos que hablen y luego nos quedamos con lo que nos guste... es entretenido. 

-No digas estupideces, mujer. Estos son seguidores de Helm, no los insultes con tus mentiras. Kobalos es el ultimo superviviente de una expedicion anterior a la nuestra. Lo encontramos alli y, pese a su naturaleza, nos ha ayudado y ha colaborado al exito de la mision.

Asi como de Astaroth no tengo nada bueno que decir, por Kobalos si dare la cara. Sus conocimientos sobre el funcionamiento de las... Instalaciones de la caverna fueron clave.

--- ¿ AH no, querido enano?- digo con cierto sarcasmos ante su comentario- te recuerdo que fui YO quien lo sacó de la caja rara aquella. Si no fuera por mi este bicho no hubiese salido nunca y por tanto no hubieramos tenidos los conocimientos necesarios ¿ O me diras que si no hubiese estado yo lo hubieras conseguido? ¡ por favor, si lo unico que haceis es romper cosas! Lo hubierais matado antes de sacarlo de alli.