La partida parte de la premisa de qué pasaría si un psiquiatra llegase por las Brumas a la Barovia del año 499, y montase un Sanitarium (los psiquiátricos de Ravenloft). No hay bibliografía al respecto sobre que en Barovia hubiese habido sanitarium, ni lo contrario. En Ravenloft las regiones tienen un "nivel tecnológico", con lo cual se suele dejar los psiquiátricos para regiones en las que encajen más.
La elección del año (499) tiene que ver con ubicar la partida con los hechos históricos de su continuación.
El único personaje "histórico" de la ambientación que aparecerá en la partida será un joven Doctor Daclaud Heinfronth, que en el futuro se convertirá en el Doctor Dominiani, un vampiro que chupa el líquido encefalorraquídeo de sus pacientes para alimentarse. El doctor Heinfronth no se convertirá en vampiro hasta décadas después, con lo que en la partida aún es humano.
La idea es que Heinfornth escape con los jugadores. En el peor de los casos, podría morir, y nunca llegaría a ser Lord de su propio dominio.
Sobre el arma mágica... la polémica de siempre.
La verdad es que no hay ninguna polémica. En el Manual del DM, en la entrada de la descripción de Descripción de Habilidades de Armas Mágicas, te dice bien claro que para que un arma tenga una habilidad especial debe tener al menos un bono de mejora de +1.
(En el DMG en inglés es en la página 223)
Hola a los VIPs ausentes que no contestarán, por cierto. :)
El tema es que el +1 al ataque de las armas de gran calidad también es un bono de mejora (por eso no apila con el del +1 mágico), así que lo que indica la guía del dm se presta a interpretaciones interesadas.
Es cierto que en "plain RAW" podemos agarrarnos a un clavo ardiendo.
Pero este punto de vista puede arrojar algo de luz sobre esa tiniebla, de querer blandirla frente a la oscuridad que provoca a veces el RAW en D&D 3.5 :)
Perdón, Vader. Se me había pasado poner VIPs en la escena del desván.
Esta noche me pongo al día. :)
¡Menuda aventura la de Isabella! No le pueden pasar más cosas, jajaja.
Puff, vaya epopeya. Al fin reunidos pero, ¿a salvo? Nada más lejos de Dinamarca, jaja.
La verdad es que esta partida parece más de corte Hackmaster que D&D 3.5, jejeje.